Partida Rol por web

Las Tierras de los Valles

27. El Camino de Regreso.

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21/02/2011, 23:20
Espada Capitana Ser Lodin de Ilmáter

A Ser Lodin no le debió gustar la expresión de Rengar porque él mismo adoptó un gesto adusto.

--¿Nos disculpáis un momento, mi Leonar? --preguntó Ser Lodin.

Yaril·la asintió impacientemente, como si le sorprendiese que se lo preguntaran si quiera.

--Un placer conoceros --dijo al resto del grupo a modo de despedida--. Espero que podamos conversar más tarde.

Dicho lo cual, acompañó a Rengar hacia su tienda.

Notas de juego

Desmarcad al orquete de vuestros mensajes.

Orquete, cuando quieras.

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22/02/2011, 10:42
Rengar

En la tienda, Rengar sujetaba con fuerza el yelmo. No sabía cómo empezar.

-M-Maestro... En la... en el ataque a Medina, Kestrel y yo salvamos el pueblo. Todo fue muy rápido. Entré en mi casa para ayudar a mi madre, porque había dos o tres tipos armados en ella, pero cuando salí no vi a Kestrel por ningún lado. Y luego la gente me dijo... me dijo que ella había dado su vida para salvarlos. Kestrel está muerta, Lodin. P-pero antes de morir... Dijo... Que te amaba, que te contara lo que había pasado, y que te amaba.

Rengar apretó el gesto, mientras, torpemente, dejaba el yelmo en el suelo y buscaba en su mochila el saco de las cenizas.

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23/02/2011, 17:45
Yaril·la Bennessen, Leonar

 
Yaril·la suspiró al verles marchar hacia la tienda y miró al resto. Sin haberse percatado ella siquiera, tenia las manos tras la espalda, bajo la capa. Intuia malas noticias y estaba impaciente por saber qué mala noticia le traían a su compañero, que era bien cercano.

Bien.... Habia una cosa que quería preguntar... Comenzó a decir, sin mirar a ninguno directamente Ayer pasamos junto a un pueblo en ruinas... Medina ¿Sabéis algo de eso? ¿Quién atacó, o porqué? Con suerte, podemos ayudar en algo...

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24/02/2011, 00:07
Galatea

 

Galatea miró como los dos paladines se iban, era evidente para cualquiera con un mínimo de agudeza mental que aquello no iba a desembocar en noticias agradables para ninguno.

En ese momento Yaril·la habló y la elfa giró la cabeza.

No—Fue la escueta respuesta. Aunque enseguida pensó que era mejor añadir un matiz o parecería demasiado fría pese a que su voz continuaba dando la misma sensación que daría escuchar el viento entre las hojas—bueno no "quiénes".

Suspiró y peinó con una mano el mechón de plata hacia atrás, llevándolo tras una de las picudas orejas. El estar en medio de un campamento lleno de soldados la asfixiaba, a la elfa le gustaba el aire libre.

Por lo que nos dijo Rengar, un grupo de Capas Grises... o mejor dicho, alguien que se estaba haciendo pasar por Capas Grises, atacó Medina de modo y manera que pareciese una incursión de los Elfos Salvajes. Más tarde... encontramos una partida de éstos que aseguraba que "Los Capas Grises" habían asesinado a varios de los suyos.

Se cruzó de brazos y cambió el peso del cuerpo de pierna.

—En cuanto al "¿por qué?" es obvio que para provocar una trifulca, pero no sabemos más—negó con la cabeza ante lo preocupante de la idea pese a que su rostro se mostraba igual de imperturbable que siempre—alguien está tratando a toda costa de romper el Pacto de los Valles...

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24/02/2011, 09:57
Espada Capitana Ser Lodin de Ilmáter

Ser Lodin retrocedió un paso como si le hubieran asestado un mazazo. El dolor se apoderó del caballero con sobrecogedora rapidez. No sollozó. No por dureza de carácter, sino porque ni siquiera podía coger aire por culpa del nudo que se le había formado en la garganta. Su necesidad de llorar era una presión tremenda que literalmente le estrangulaba. Se quedó de pie junto a Rengar, boquiabierto y sin resuello. Cuando consiguió finalmente introducir aire en los pulmones sólo pudo hipar. Las lágrimas empezaron a correr por sus mejillas mientras contemplaba a Rengar rebuscar en su mochila.

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24/02/2011, 12:22
Rengar

Rengar encontró el saco de cenizas y lo quitó de su envoltura extra (su otra muda), para tendérselo a Lodin.

-Sus cenizas. No es gran cosa el saco, lo sé. No tenía nada más. Y... prefería dejar que tú eligieras qué hacer con ellas.

Apartó la vista cuando el hombre las tomó en su mano. Se le partía el corazón viendo a Lodin tan dolido... y no precisamente por empatía. En cierto modo se sentía culpable por haberla amado a su vez, cuando no le correspondía hacerlo. No quería ser tan egoista. No era su amada, ella nunca le había correspondido. Eso lo sabía bien. Debía guardarse para sí sus sentimientos y no importunar a Lodin con ellos.

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24/02/2011, 11:52
Khaila

Khaila había escuchado las presentaciones, aunque prefirió mantenerse en silencio. Saludó con un leve gesto de cabeza, y se mantuvo unos pasos por detrás, dejando que fueran Rengar y Galatea quienes hablaran y explicaran la situación. Observó como el semiorco se alejaba junto al que había sido su maestro.

La guerrera mantenía el ceño fruncido. Miró un momento de soslayo a la elfa, cuando ésta explicó sus sospechas y aclaró a Yaril.la lo que creían que había ocurrido en Medina. Nuevamente centró su atención en la Leonar de aquel destacamento.

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26/02/2011, 13:39
Volo

Volo se había quedado pasmado durante la conversación. Al fin carraspeó.

--¿Yaril·la? ¿Yaril·la Bennessen? ¿La misma Yaril·la Bennessen que dio el golpe de gracia al Rey Perdido en la frustrada rebelión de Arabel hace unos meses? --el viajero se giró hacia el resto del grupo y agregó-- ¡Es una leyenda en Cormyr!

Pero Volo sabía perfectamente que las leyendas no permanecían ociosas. Y menos las leyendas con armadura de combate acampada con soldados profesionales.

--Pero si se me permite preguntar... ¿qué hacéis tan lejos de Cormyr? No creo que el ataque a un pueblo recóndito de Los Valles sea el motivo por el que una Leonar recorra tantas millas.

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26/02/2011, 13:44
Espada Capitana Ser Lodin de Ilmáter

Lodin tomó la bolsa con sus manos temblorosas y las acercó a su corazón. Las mejillas le brillaban por las lágrimas derramadas. El rostro del anciano estaba transido por el dolor, y parecía muchísimo más viejo.

--G-gracias, muchacho --le dijo poniéndole una mano en el hombro--. Ahora desearía un momento de soledad. Discúlpame.

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27/02/2011, 15:47
Rengar

Rengar asintió con formalidad y salió de la tienda de Lodin. Le pesaban los pies por el pesar, pero necesitaba alejarse de allí todo lo posible.

Se dejó caer algo lejos del campamento de los Dragones, sin querer acercarse aún al de sus compañeros. Profundamente disgustado se frotó la cara con las manos enguantadas. El frío del metal le devolvió en parte al mundo real, recordándole que seguía vivo. Seguían vivos. Por más que se hubiese tenido que separar de Kestrel (al menos, de sus restos), por más que el dolor de su pérdida le hubiese vuelto a atravesar, y más aún al ver el rostro dolido de Lodin, seguía vivo. Había sido la voluntad de Ilmáter, ¿y qué vida lo es sin sufrimiento?

Debía soportar su carga estoicamente. El dolor formaba parte de la vida. Esas eran las enseñanzas de Ilmáter. Podía curar heridas y ayudar a los enfermos, pero, al fin y al cabo, la tristeza no podía superarse de otra forma que no fuese siguiendo adelante. La propia Kestrel habría estado de acuerdo con esto. Lodin lo estaría cuando lo comprendiera. Rengar estaba seguro. No había llegado a esa conclusión por sí mismo, sino que ellos dos lo habían educado. Y cuando todo terminara podría regresar al lado de su maestra y amiga sabiendo que había honrado su memoria cumpliendo con sus promesas, ayudando a los inocentes y acabando con la amenaza sharina.

Puso la mano en el pecho y miró hacia el cielo. Allá donde estuviese Kestrel, a la vera del Ilmáter, habría de oir lo que estaba prometiendo.

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28/02/2011, 00:13
Desconocida

--Sabes que esto no tiene por qué acabar así --murmuró una voz cercana, que reverberaba de una manera extraña que parecía venir de todas direcciones y de ninguna--. Sólo tienes que pedírmelo.

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28/02/2011, 11:19
Yaril·la Bennessen, Leonar

 
Ack...

Yaril·la carraspeó. No esperaba que la fueran a reocnocer tan lejos de casa.

Pues... sí, sí. Soy yo, pero hehe... tanto como leyenda... Tuvo que hacer un esfuerzo para mantener las manos quietas y no rascarse el cogote o algún otro gesto que denotase nerviosismo.

Carraspeó a la pregunta de Volo. Vamos la ciudad del Valle de la Rastra, a hablar con los burgueses para solicitar su ayuda militar contra los zhent. Sembia también 'se apunta', van a pagar caro haberselas buscado con Cormyr.

Y ahora sí apretó un poco el puño. Hablaba muy en serio

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28/02/2011, 11:38
Rengar

-No quiero nada tuyo, Loviatar -respondió el semiorco con rabia contenida-. Soy un paladín. No quiero nada de dioses malignos.

Recordaba lo que ella le había dado: el dolor. Recorriéndole el cuerpo como mil latigazos al mismo tiempo. Eso era lo que le había ofrecido y lo que podía darle.

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28/02/2011, 13:24
Espada Capitana Ser Lodin de Ilmáter

Ser Lodin surgió del campamento breves momentos después. Estaba pálido y demacrado, y llevaba en su mano la bolsa con cenizas que con tanta devoción había protegido Rengar. Parecía que se hubieran caído veinte años encima en un momento. El semiorco no había vuelto con él.

--¿Yaril·la? --inquirió el paladín de Ilmáter, tuteando por primera vez a la Leonar--. Tengo que hablar contigo. Si nos disculpáis un momento...

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28/02/2011, 13:31
Desconocida

--¡Qué ciego estás! --se mofó la voz--. El mundo no es como tú quieres verlo. Tu idolatrado tutor le pedirá a esa sacerdotisa de Tempus que resucite a Kestrel. Decisión que sólo traerá desgracias. ¿Cuántas vidas más estás dispuesto a sacrificar, Rengar de Ilmáter?

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28/02/2011, 13:43
Rengar

Rengar entornó los ojos.

-No. No me lo creo. Lodin nunca haría eso -respondió el semiorco-. Está dolido. Puede que lo piense. Incluso yo lo pensé... Pero sabe lo que es correcto en su corazón.

Y aún así sintió algo de envidia. Tal vez si él la hacía resucitar fuese un acto egoista, pero, ¿qué pensaría la misma Kestrel si su amado Lodin la traía de vuelta? ¿No querría hacerlo para casarse al fin, ser felices y hacer el amor cada día? Frunció el ceño. No, no... Lodin sabía que había que dejar estar las cosas. Él se lo había dicho. Hay dolores que no deben evitarse.

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28/02/2011, 14:48
Yaril·la Bennessen, Leonar

 
Yari asintió a Lodin, y apenas hizo un gesto a mitad de camino entre despedida y "aguarden" al resto, sin tener ella muy claro qué queria decir con aquello. El caso es que al ver a Lodin de aquella manera la hizo prácticamente ignorar al resto, y le acompañó sin hacerle esperar un momento.

¿Qué pasa Lodin?

Se la oyó preguntar mientras se acercaba a él

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28/02/2011, 15:37
Espada Capitana Ser Lodin de Ilmáter

Lodin no contestó, sino que señaló la tienda de la Leonar. Los aventureros vieron a los dos dragones púrpura internarse allí sin volver a dirigirse palabra.

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28/02/2011, 15:39
Desconocida

--¿Eso crees? Ve a comprobarlo tú mismo.

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28/02/2011, 16:34
Rengar

Quiso negarse y confiar en su instinto, pero se levantó e hizo lo que la voz le sugería. Con el yelmo bajo el brazo volvió al campamento en busca de Lodin.