Partida Rol por web

LEGIÓN

Capítulo 1: Nueva Civilización

Cargando editor
12/09/2010, 18:11
Karim Cerna

Karim se queda quieto durante más de un minuto. El tipo aquel pega mucho mas con el trasto que tienen delante que con cualquier otra cosa que pudiera haber salido, véase una niña pequeña.

Cuando lo tiene más cerca se da cuenta de que aquel tipo le saca al menos una cabeza de alto. Sí señor, es toda una montaña, y parece que sus maneras van acorde con el resto de la presentación. Sin embargo, no parece un caníbal, ni un loco, al menos no más que ellos mismos. Parece un tipo sincero.

Así que mientras Selene ayuda a Clarisse a traer a Epsi se acerca más al tipo.

Gracias otra vez. Sera mejor que nos pongamos en marcha, en cuestión de horas han venido demasiados bichos gigantes como para querer quedarme.

Pasa al interior del trasto con el resto de sus compañeros que uno a uno van dejando atrás las áridas tierras baldías para pasar al inigualable confort de un trasto de combate y pasajeros. Toda una delicia.

Ya dentro, entiende que la mayor prioridad es ayudar a Epsi, no queda tiempo que perder.

Muy bien, mi hermana Clarisse es médico, o solía serlo, o yo que sé. El caso es que la vida de nuestra compañera esta en sus manos, y en vuestro equipo, por favor todo lo que podáis facilitarle, os lo agradeceremos todos.

Se apoyo en un lado, intentando no estorbar al paso y sin prestar atención a otra cosa que no fuera el estado de su compañera. Sabía que poco podía hacer en esas circunstancias, y la impotencia empezaba a ganar yardas a la razón.

 

Cargando editor
13/09/2010, 18:26
Clarisse Abbot

Clarisse caminó junto a Martin, ayudando a llevar a Epsilon hasta que Selene se prestó a ello.

-Gracias chica, yo casi no puedo con ella, pero para tí parece ser como llevar una muñeca de trapo... Le dijo antes de añadir. Ten cuidado, no la zarandees mucho.

Cuando llegó cerca del blindado y miró hacia arriba, a la escotilla por la que asomaba el hombre que se acababa de presentar como Zyor, se llevó las manos a la frente, sobre los ojos para "hacer visera" y enfocarle bien a pesar del sol que le daba de frente.

¿Conoce el laboratorio? Pensó tras escucharlo hablar, detalle que parecía habérseles escapado a sus compañeros.

-Como ha dicho Karim, se de medicina, y estaría encantada de ayudar con esos medicamentos que dices que teneis. Comento antes de preguntar por lo que le había llamado la atención. ¿Sabes a que lugar se refiere? Preguntó señalando con un gesto de cabeza a Karim, y con curiosidad y algo de recelo por la mención del lugar, aunque sin demostrarlo, cuando Karim sólo había dicho que se trataba de un complejo, sin llegar a especificar su uso.

Cargando editor
13/09/2010, 19:35
Zyor

-Bueno, bueno, ten cuidado con tus palabras la próxima vez chaval, si llega a ser un grupo de caníbales no habríais durado ni cinco minutos...- da un par de palmadas en el hombro de Martin y después añade- Aunque demonios, si sois capaces a sobrevivir a no-sé-cuántos escorpiones quizá sí lo conseguiríais. Tenéis que explicarme cuál es vuestro secreto- os mira inquisitivamente y después presta atención a lo último que le dice Martin, aunque acaba por echarse a reír.

-No te preocupes chaval, si de verdad lo sientes ella lo notará. Dale un poco de tiempo- después camina en dirección al vehículo y asiente a las palabras de Selene y Karim con mayor seriedad, comprendiendo la importancia y urgencia por tratar a Epsilon.

-Mucho me temo que no tengo nada para curar eso- admite sin tapujos cuando llega junto a Clarisse, que se ha declarado la "médico oficial" del grupo -Puedo darte algunas cosas para frenar la infección pero poco más. Aunque algunos la superan, ya sabéis... un 5% de posibilidades- se encoge de hombros como si fuera evidente, un dato que todo el mundo conoce, después espera a que entréis por la puerta abierta.

-Ahora voy a conducir este cacharro lejos de aquí, es posible que haya un nido de Bichos cerca como ha mencionado vuestro colega. Atended a vuestra amiga e intentad relajaros, enseguida charlaremos largo y tendido- da un par de golpes en la gruesa chapa reforzada y la puerta vuelva a cerrarse, dejandoos a vosotros dentro y a Zyor fuera.

Notas de juego

*Falta otro post

Cargando editor
13/09/2010, 19:45
Director

Cuando la compuerta se cierra tras vosotros os fijáis un poco más en dónde estáis.
Se trata de un compartimento bastante amplio lleno de armarios, taquillas y cajones por las paredes,a demás de alguna que otra trampilla en el suelo. Algunos presentan cerraduras o incluso candados pero la mayoría parecen permanecer abiertos.

Tanto las paredes como el suelo y el techo están compuestos por metal de diferente densidad o forma, por lo que cada paso que dais se escucha a la perfección.
Junto a las paredes se extienden unos cajones que parecen formar parte de ella y que a su vez forman unos extensos bancos con algún que otro sucio y desgastado cojín.

Colgadas en la pared encontráis algunas chaquetas raídas, de tamaño inmenso y también muy pequeñas, y justo debajo un montón de bidones que parecen contener agua potable atados y anclados al suelo.

La temperatura dentro es bastante más agradable que en el exterior por lo cuál sólo con ese factor ya os sentís algo mejor, pero Clarisse no puede olvidarse de su "misión" y pronto encuentra un pequeño armario con la típica cruz roja en cuyo interior encuentra muchas gasas, desinfectante y vendas pero pocas medicinas efectivas.
De hecho no conoce ninguna de ellas pero por suerte es capaz de distinguir sus componentes químicos. La mayoría son demasiado flojas para los síntomas de Epsilon, apenas servirían para un catarro o un dolor de cabeza, así que al final sólo da con un par cuyos efectos antinflamatorios y antihistamínicos pueden resultar útiles. Cómo ya mencionó Zyor es poco probable que eso consiga curar la infección que padece Epsilon.

Tras esto todos notáis como el vehículo se pone en marcha y empezáis a avanzar aunque las ventanas son tan pequeñas y altas (tenéis que subiros a los bancos para poder ver a través de ellas) que apenas sabéis a dónde os dirigís.

Notas de juego

*A la vez que posteáis haced una tirada de Percepción+Advertencia dif media

Cargando editor
13/09/2010, 23:02
Karim Cerna

Karim se apoya con una mano en la pared de aquel cacharro. Esta claro que Zyor lo ha puesto de nuevo en marcha. Aun no entiende como se mueve, y mucho menos como se pilota, así como tampoco sabe muchas cosas más.

Esperaba ver a la pequeña dentro, y dudaba de que pudiera haber ido a otro lugar. Así que tentó a la suerte mientras la buscaba con los ojos por cualquier rincón.

Hola, ¿Hiedra?, soy Karim y estos son mis hermanos. Sentimos lo de antes. Pero ahora mismo viajamos aquí, y agradecería un par de respuestas.

¿Quienes sois, a donde vamos, como se llama este trasto donde nos movemos, que quería decir Zyor con lo del 5%, quizás incluso si conoces a más gente como nosotros?. Bueno se que te estoy cosiendo a preguntas, pero es que ahora mismo soy como un bebe recién nacido.

Karim se movía por la sala mientras esta traqueteaba sin parar. Aun tardaría un rato en acostumbrarse al movimiento tan selectivo que esta realizaba. Mientras iba preguntando iba enumerando cerrando los dedos de las dos manos, sin embargo se dio cuenta al callarse de que aun tenia dedos de una mano entera de cosas que quería preguntar. Pero imaginaba que si la niña estaba allí le costaría responder tantas preguntas de golpe.

Así que se calló y sonrió. Pues ahora mismo, a pesar de todo lo ocurrido y el estado de Epsi, seguían vivos, y se había dado cuenta de que en aquel mundo, cada día vivido era una victoria.

Un bebe negro fuerte y guapo, como decía mucho mi abuela, pero necesitamos aprender. ¿Hiedra?

Opto por callarse y sentarse, la niña saldría cuando esta quisiera, y si tenía un mínimo de curiosidad saldría de su escondrijo, aunque seguro que se mantendría a distancia de Martin y su boca rabiosa.

- Tiradas (1)

Tirada: 3d10
Motivo: Percepción+Advertencia
Resultados: 7, 6, 10

Notas de juego

Percepción+Advertencia = 12

Cargando editor
13/09/2010, 22:54
Clarisse Abbot

Clarisse, sumida en sus propios pensamientos, trataba a Epsilon con toda la profesionalidad que había aprendido en su vida artificial. Lo importante era que ahora estaban a salvo, pero ¿Por cuanto tiempo? Aquellas personas les habían salvado pero no podía dejar de oir a una mosca zumbar detrás de su oreja y no sólo por ellos, también por Epsilon.

Habían cosas que era incapaz de encajar y que necesitaba que alguien se las explicara.

-Chicos... dijo en un susurro, intentando que lo qu eiba a decir quedara entre ellos. ¿No os parece que todo esto es muy raro?

Alzó la vista desde el cuerpo de Epsilon hasta cruzar su mirada con la de Karim, el más cercano a ella en ese momento.

-Quiero decir que, aquí hay cosas que no consigo entender. Nos acaban de salvar de esos escorpiones gigantes, pero estoy escamada. Para empezar ese tal Zyor ha hablado como si ya conociera el lugar del que venimos y nos ha ayudado con total naturalidad, pero o se le ha pasado por alto, o ha evitado responder a mi pregunta intencionadamente. Volvió a bajar la vista. Y luego está Epsilon. ¿Qué le ha provocado esto? No recuerdo que ningún escorpión la picara con su cola, y si así hubiera sido estaría atravesada por ella, así que deduzco que la causa es la porquería esa que soltaron cuando nos defendimos y les hicisteis daño. Siendo así veo dos opciones, la primera es que esos escorpiones no son las criaturas que Phoena dijo que habían arrasado este planeta, y la segunda es que sí lo son y Epsilon no es como nosotros. ¿No dijo Phoena que somos inmunes a las esporas de los Vytrus, o como se llamen esos bichos, por que nos crearon para serlo? Si Epsilon se ha visto afectada por esto... pensaba que ella también era producto de esos laboratorios. ¿No es así Martin? Tú apareciste con ella mencionando nuestros tatuajes. Miró al hombre esperando que aclarara alguna de las interrogantes que le habían surgido a la rubia mujer.

- Tiradas (1)

Tirada: 3d10(+10)
Motivo: Percepción+Advertencia
Resultados: 8(+10)=18, 7(+10)=17, 10(+10)=20

Cargando editor
14/09/2010, 11:33
Selene Ashford

- Tranquila, apenas la muevo cuando tengo que cargar con ella. - respondo ante el consejo de Clarisse sobre no zarandear a Epsi una vez la tengo en mis brazos de nuevo.

Dicho esto me dirigí a la puerta de entrada a aquel trasto móvil siguiendo al resto de mis "hermanos" y cuidándome de no golpear a la malherida contra las paredes o el marco de la puerta de entrada.
Una vez dentro Zyor volvió a dirigirnos la palabra antes de marcharse, según él, a conducir.

Miré a mi alrededor curiosa el lugar en el que ahora nos encontrábamos, se estaba muy agusto por la temperatura del ambiente... Me quedé unos segundos observando en general todo hasta que Clarisse se acercó a mi con intención de examinar a Epsilon portando en sus manos una especie de botiquín que debía haber encontrado por allí. Yo me limité a quedarme junto a ella, por si podría serle de ayuda como improvisada enfermera.
Fue entonces cuando, mientras leía prospectos varios, la rubia nos habló en susurros mientras a mi espalda oía a Karim reclamar la atención o aparición de la niña, Hiedra.

- Yo creí entender que, a pesar de que sé que Phoena dijo que estábamos siendo creados para ello, todos los experimentos habían salido mal y no habían logrado hacerles realmente inmunes al veneno de esos Vytrus. Quizá sea asi, o quizá esa probabilidad de 5% que ha dicho Zyor nos ofrezca la única posibilidad de que Epsilon mejore. - respondo a nuestra médico en voz baja mientras yo también me limito a estudiar las feas heridas que tenemos delante.- De todos modos, esos escorpiones no eran vytrus, Zyor no los ha denominado como tales sino como escorpiones. Quizá sí que seamos inmunes al veneno de los Vytrus pero no al de esos escorpiones gigantes. ¿No crees que puede ser así, Clarisse?

- Tiradas (1)

Tirada: 3d10
Motivo: Perc + Advertir
Resultados: 6, 3, 10

Notas de juego

Total de la tirada = 14

Cargando editor
14/09/2010, 19:54
Clarisse Abbot

-No lo se. Respondió Clarisse. Ya no se qué pensar. Todos aspiramos lo que esas cosas expulsaron al aire desde sus caparazones, yo al menos tardaré en olvidar ese olor. Era como el hedor de mil tumbas abiertas. Cuando Phoena habló de los experimentos fallidos, pensé que se trataba de los cuerpos de aquellos que no habían conseguido salir adelante y vivir, no a su inmunidad contra esas esporas. De todas formas, tal y como lo describió Phoena, lo que esos escorpiones lanzaron al aire bien podrían ser esas esporas.

La mujer continuaba estudiando el estado de Epsilon, intentando hacer aquello para lo que valía lo mejor posible, y deseando que el conocimiento implantado en su cerebro incluyera el tratamiento de aquello que tenía frente a ella.

-Y me encantaría saber por qué Zyor conoce ese laboratorio... Primero Phoena, y ahora él. Phoena dijo que ha sido saqueado por la gente, así que su existencia no debe de ser ningún secreto, pero sigue pareciéndome muy raro que les parezcamos algo tan natural.

Cargando editor
16/09/2010, 17:22
Martin Lorentz

La palmada en el hombro no me reconforta demasiado, pero bueno, seguro que tiene razón y la chiquilla termina olvidándose del asunto. Sin más entro en la especie de camión, o lo que sea, y me acomodo como puedo en su interior. Lo primero que hago es dejar mis cosas tiradas en el suelo. La Uzi estaba hecha polvo y el cuchillo empezaba a clavárseme en la rabadilla así que lo dejé también junto al resto de cosas.

-¡Bah!...Karim déjalo. La niña está asustada y no me extraña. Ha sido culpa mía y lo siento, pero por ahora lo mejor será que la dejes tranquila. Tarde o temprano hablará con nosotros o lo que sea y entonces me disculparé. Con un poco de suerte  todo quedará en eso. Además tantas preguntas me darían dolor de cabeza hasta a mi...- era cierto eché la cabeza hacia atrás golpeándome sin demasiada fuerza contra la pared metálica en la que estaba apoyado mientras me revolvía el pelo de la cabeza. Estaba cansado y no era para menos, al fin y al cabo acabábamos de cargarnos a nosecuantos escorpiones. Entonces Clarisse empieza con sus sospechas que no son del todo descabelladas y vuelvo a prestar atención a la conversación.

- Ehm, bueno si, técnicamente salimos los dos de allí pero en realidad sólo tengo su palabra. Yo desperté en una especie de cubículo aislado y al rato apareció Epsi que me ayudo a salir de allí. Parecía que ya llevaba unos días rondando por el laboratorio y me dijo que también era de allí.- me encojo de hombros terminando mi versión. No tenía por qué dudar de la palabra de mi salvadora.- No se creo que le das demasiadas vueltas al asunto. La gente que viva por aqui seguro que conoce el laboratorio, o al menos sabe que está ahí y los escorpiones pues...sólo son eso, bichejos mutantes y enormes. Yo me imagino a los Vytrus más sofisticados. No se con una cara fea de colmillos extraños y garras en las manos y así fuertes y tal. Con pelo puntiagudo que sea más bien como cables y con rayos lásers y cosas así.- intento explicarme lo mejor posible haciendo todo tipo de muecas y gestos para parecer más feroz. Y también gruñidos extraños. Al rato me doy cuenta de que estoy haciendo el capullo.- Bueno qué más da...no le déis más vueltas. Seguro que todo tiene una explicación. Simplemente no bajemos la guardia y ya está...

- Tiradas (1)

Tirada: 3d10
Motivo: Percepción
Resultados: 9, 3, 2

Notas de juego

En total 16

Cargando editor
16/09/2010, 18:53
Director

El trayecto sigue con el traqueteo del enorme vehículo que os transporta. No se puede decir que sea muy cómodo o silencioso pero parece bastante seguro y a esas alturas probablemente sea lo que más os interesa.

Entre teorías y demás, Clarisse consigue hacer tragar a Epsilon la medicina e inyectarle la segunda al cabo de un rato, lástima no disponer de algo de suero para que le dé nutrientes básicos que seguro que le harían bien.
Al cabo de varios minutos al menos la fiebre de vuestra inconsciente compañera empieza a menguar pero poco más. Después de veinte minutos seguís en marcha sin que nadie interrumpa vuestros pensamientos en voz alta.

Cargando editor
16/09/2010, 18:56
Hiedra

Tras un silencio prolongado de unos cuantos segundos, ambos conseguís percibir algo tras una rejilla en la pared que queda justo a vuestra izquierda y en la que se haya una puerta perfectamente cerrada que quizá Selene podría echar abajo si le interesara.

Una observación más detallada os hace distinguir que quizá se trate de algún tipo de tubo de ventilación extenso y en su interior veis a Hiedra escuchándoos en completo silencio. Su vestido rojo destaca incluso en la oscuridad de ese reducido espacio.

Parece darse cuenta de que la habéis visto cuando da un pequeño respingo sobresaltada y tras señalaros los bidones de agua presumiblemente potable vuelve a marcharse.
La verdad es que empezáis a sentiros mareados y una de las causas podría ser la deshidratación, pero tampoco estaría mal llevarse algo a la boca...

Cargando editor
17/09/2010, 01:11
Karim Cerna

Karim había escuchado a Martin y había dejado de buscar a la pequeña, estaba seguro de que aquella maquina en movimiento tenia más compartimientos de los que se veían a simple vista. Así que supuso que la pequeña se había escurrido a alguno.

Se le paso por la cabeza, que de la misma forma, podía haber gente escuchando lo que hablaban y que estarían valorando lo que decían. Pero sabía que interpretar en cierta manera era igual que mentir, y prefería ser natural. Si con eso no conseguía la ayuda de sus extraños y motorizados vecinos, pues simplemente no se la merecía.

Después de darle vueltas al tema que venían hablando llego a una conclusión.

Tenéis razón, todos un poco de razón, pero la razón de por sí, no sirve de nada.

Vio que lo miraban como si fuera un extraño loco que hablaba en plan Yoda, así que siendo consciente de que hablaba de lo que pensaba, y no lo había explicado sería mejor volverlo a decir.

Bueno, que puede que estemos con el enemigo, es algo que no podemos descartar. Y más ahora, que llevamos cuanto, dos días en este agujero, y no conocemos absolutamente nada. Toda nuestra vida metidos en una probeta, y no se les ocurrió ponernos información importante sobre este lugar. Es absurdo, si. Pero es real.

El caso es que aunque desconfié, no podemos cerrarnos en banda. Lo digo porque si a cada persona o ser que nos tienda la mano, se la retiramos, lo único que conseguiremos es anclarnos los unos a los otros y vivir como ermitaños el tiempo que consigamos sobrevivir. Yo digo que hay que dar un voto de confianza a esta gente.

Sea por las buenas o por las malas, estoy convencido de que vamos a conseguir mas información de ellos que preguntarles a esos escorpiones gigantes.

Si no podemos hacer otra cosa que quedarnos aquí tranquilos. Creo que lo mejor que podemos hacer es descansar, porque no estoy seguro de cuando necesitaremos otra vez de todo nuestro potencial para salir de algún problema, hay que aprovechar el viaje. ¿no os parece?

Karim se había metido un rollo. Sus hermanas lo miraban de hito en hito con caras extrañas. No sabía si porque había dado en el clavo, o porque estaban esperando que dejara de hablar para seguir con sus pequeñas conspiraciones. Martin lo miraba sin embargo con una cara bastante divertida.

Estaba convencido de que todo el royo que el había soltado, le había calado hondo, pero aquel crabrón no se dejaría ir sin hacer algún comentario acido. Y francamente, estaba empezando a acostumbrarse a ellos, así que no le importaría que así fuera.

Como Clarisse no había solicitado la ayuda de nadie y parecía que no podía hacer nada mas por la buena de Epsi, el hombre de color dejo caer su cabeza también sobre una de las planchas y cerró los ojos. Había dado un consejo, y sería bueno predicar con el ejemplo.

Incluso aunque ahora mismo y a pesar del cansancio, la falta de sueño y comida, seguía sin tener muchas ganas de desconectar. Lo que podría originar que el cansancio le sobrellevara en el momento menos pensado. Temía, que esos poderes no fueran permanentes,  que pudieran fallar. Y pensando en eso se medio quedo dormido, con un sonoro ronquido.

Cargando editor
18/09/2010, 13:19
Clarisse Abbot

-De habernos cerrado en banda, no estariamos ahora aquí dentro. Le respondió Clarisse al hombre de raza negra. Pero dadas las circunstancias de nuestra situación, es mejor no pasar por alto nada, o podemos pasarlo mal. Es mejor no bajar la guardia y estar alerta de todos los detalles de este mundo, tal y como nos recomendó Phoena... seguramente lo de Zyor no sea nada, pero sigo sin encontrarle una explicación a lo de Epsilon y esos escorpiones, sólo suposiciones.

La mujer se sacudió las manos.

-Bueno, esto ya está, no puedo hacer más por ella. Dijo refiriéndose a Epsilon. Ahora es cuestión de esperar a ver cómo evoluciona. De pronto algo llamó su atención al levantar la vista a sus compañeros y miró en esa dirección, para luego girar la vista a otra. Vaya, parece que a la niña se le va quitando el miedo... Dijo mientras se levantaba y se acercaba a unos bidones en los que parecía haber agua potable. Estaba escondida allí y ha señalado esta agua antes de volver a desaparecer... Señaló una rejilla en la pared en la que se hayaba una puerta perfectamente cerrada y que quizá se tratara de algún tipo de tubo de ventilación, antes de agachar la cabeza y acercar la nariz al líquido elemento para olerlo.

Cargando editor
19/09/2010, 11:42
Martin Lorentz

Una vez sentado en mi sitio me dedico a escuchar las reflexiones en voz alta de Karim. La verdad es que su aspecto engaña. Tan grande, musculoso y aparentemente descerebrado...y sin embargo el tio le da al coco. Cuando se pone ha hablar parece un maldito filósofo, casi hasta me entra sueño al escucharlo. Pero tenía toda la razón del mundo, al menos a mis ojos, así que no iba a ser yo quien le cortara el rollo.

Pero entonces, durante el discurso, me fijo en uno de los conductos de aire, más bien en la rejilla de uno de esos tubos, y entonces veo un destello rojo. Al principio pienso que puede ser una lucecita o algo así pero al fijar mejor la vista descubro que es el rojo devestido de la niña pequeña, la tal Hiedra, a la que yo asusté.

-¡Ey! ¡Pequeñaja!- digo levantándome de repente y haciéndole gestos para que se tranquilice y no salga corriendo. Sin embargo antes de poder hacer nada la niña ya ha desaparecido.- ¡Eh, no!...mierda. ¿La habéis visto?.- pregunto girándome hacia mis compañeros que me miran extrañados, excepto Clarisse, que parece haberla visto también.- Si, yo también la he visto señalar a los bidones.- le respondo acercándome a ellos.

-No desconfies no creo que esa pequeñaja quiera matarnos, y si quisiera sería sólo a mi. Además tengo demasiada sed como para pensármelo.- le digo a Clarisse con una sonrisa al ver que olisquea los bidones de agua. Entonces con la mano como recipiente cojo un poco de agua y me la llevo a la boca sin pensarlo dos veces y empiezo a beber con ansia. Tenía la garganta más que reseca y si quisieran matarnos ya lo habrían hecho.- A joder qué bendición...Si queréis esperar a ver si no me muero adelante, pero os recomiendo que la probéis.- añado a modo de broma. No creo que el agua esté envenenada ni nad apor el estilo.

Cargando editor
19/09/2010, 14:57
Director

Clarrise destapa con cuidado uno de los bidones y se muestra precavida con ellos pero por suerte el líquido elemento que contiene parece tener las características que debería: incoloro y sin olor. Aún así y como "representante médica" del grupo no quiere arriesgarse y pretende probar una moderada cantidad.

Sus intenciones son pronto substituidas por las de Martin, que tras conseguir un hueco al lado de su compañera empieza a beber cada vez con mayor ansiedad, pues el agua resulta bastante fresca e incluso sabrosa, al menos si se compara con lo que tuvisteis que beber de las cantimploras.

Tras ese pequeño descubrimiento, notáis como el vehículo se detiene poco a poco hasta quedaros parados y al cabo de poco se producen algunos chasqueos y sonidos metálicos probablemente producidos por frenos e incluso por compuertas abriéndose. Seguramente dentro de poco tengáis visita, aunque resulta sorprendente que por ahora no hayáis visto a nadie más en ese extraño vehículo.

Cargando editor
19/09/2010, 14:52
Karim Cerna

Karim levanto una ceja, sin abrir los ojos. Y luego se dibujo en su cara una sonrisa que tardaría bastante en desaparecer.

Si a la niña no le daban la oportunidad de aparecer cuando ella decidiera, no conseguirían hablar con ella. Toda su disertación había ido más en consonancia con que la pequeña lo escuchara que con corregir ninguna conducta o idea de ninguno de sus compañeros.

Había podido percibir en el poco tiempo que llevaban juntos, que exceptuando matices, todos tenían una similar forma de pensar. Bueno Epsi se desmarcaba un poco, seguramente no hubiera subido a aquel trasto por propia voluntad.

Epsi, Epsilon. No tenía ni la más remota idea de en que parte del alfabeto griego quedaba esa letra. Si en el laboratorio los tenían en grupos de cuatro probetas, se imaginaba que ella estaría en una o dos habitaciones más allá de donde habían estado ellos.

Aunque no recordaba más habitaciones de experimentos. Claro que tampoco es que tuviera mucho tiempo para fisgonear, tuvieron que salir todos a escape tras sonar la alarma.

Martin por otro lado, no debía de estar ni en la misma planta. El Alfa y el Omega, esa frase la recordaba bien. Era como el principio y el final, aunque la solían usar para distinguir los opuestos. Puede que Martin recibiera otro tipo de tratamiento. Puede que todos ellos recibieran distintos tratamientos.

Así que simplemente podía ser que Epsi, de verdad fuera defectuosa. Aunque creía que su destino lo podían correr todos, mas tarde o más temprano. Aunque no sería él quien lo dijera en voz alta. No estaba la cosa para eso.

Según oía a su compinche, estaba bebiendo. El agua potable no debía de ser un bien escaso. A pesar de la climatología adversa, por el tiempo que tardaban los astros en recorrer el día, el planeta debía de ser grande. La humedad y las nubes le hacían sentirse como en casa, como en la tierra, así que debía de haber precipitaciones, o cosas así.

Si había agua, no debía de ser problema encontrarla, aunque cargarla y distribuirla no estaba seguro de si seria fácil o no.

Yo por el momento paso. Ya bebí bastante esta mañana.

Termino la frase y la garganta se le seco y cerró como si se tratara de una bolsa de tela. La verdad es que tenía sed como todos los demás. No quería beber porque se conocía, y sabía que se pondría como un gorrino a beber, como lo había hecho toda la vida. E intuía que beber mucho de golpe podía ser malo para el cuerpo.

Sin embargo, el principal motivo es que nadie había lanzado una oferta de bebamos juntos nuestra agua. Y no le gustaba ir a casa de nadie y hacer cosas por la cara.

Además, quedaba el tema de sus "poderes", cuanto podría resistir sin agua. Cuanto podría resistir sin comer. Cuán rápido podía curarse. Pues desde que habían entrado, se había olvidado del dolor del costado. Sentía la piel muy seca, y sentía un leve dolor, pero ya no estaba seguro de nada, sobre como estaría la herida.

Quizás debiera de dejar de hacerse el macho, y decirle a Clarisse que le echara un ojo. Pero que pasaba si ella se daba cuenta de que también estaba infectado de algo. Vete tú a saber qué.

Cargando editor
19/09/2010, 18:15
Zyor

Mientras algunos sacian su sed con mayor o menor grado de tranquilidad, la puerta lateral que quedaba a vuestra izquierda y que presumiblemente conecta con el siguiente "vagón" se abre para dejar paso a Zyor, detrás del cuál se asoma Hiedra con curiosidad.

-Por el momento estaremos seguros aquí, al menos un rato, así que aprovechemos para conocernos un poco y descansar, ¿de acuerdo?- os propone mirándoos uno por uno sin inmutarse por el hecho de que hayáis abierto un bidón y vaciado parte del contenido.

-Para empezar creo que deberíamos dejar a la enferma en una cama. Por aquí...- espera a que cojáis a Epsilon y os conduce por dónde ha venido.

Se trata de un estrechísimo pasillo por el que no pasarían ni dos personas juntas así que tenéis que formas una fila india. A ambos lados hay puertas, en total cuatro, y os abre una de ellas.
Son pequeños camarotes con una litera, una percha y un par de taquillas, poco más. Similares a los que podría haber en cualquier tren pero más toscos y sucios, como era de esperar.

Tras dejar a Epsilon más cómoda seguís caminando hasta el final del pequeño pasillo y llegáis a otra puerta que se abre al tirar de una manivela lateral.
Ahora el vagón es más amplio, como el primero. A vuestra izquierda hay varios armarios y cajones además de un frigorífico bastante pequeño y unos fogones. A vuestra derecha una mesa rodeada de bancos acolchados y remendados donde Zyor toma asiento junto a la pequeña, que parece poco dispuesta a abrir la boca aunque no os quita ojo de encima, como si fuerais algún personaje sacado de un cuento.

-¿Cómo conseguisteis mantener a ralla a esos Bichos? Parecía que ni os hacía falta nuestra ayuda pero no veo que tengáis demasiadas armas y mucho menos un bazooka...- dice esto último con tono desenfadado sin embargo parece realmente interesado en la respuesta.

Notas de juego

Creo que se me olvidó decir que había una puerta cerrada en el compartimento además de por la que entrasteis, sorry =P

Si no os aclaráis con la descripción puedo haceros un esquema cutre, que sé que os mola

Cargando editor
19/09/2010, 21:31
Karim Cerna

Karim se pasea por todo aquel trasto asintiendo de vez en cuando con la cabeza, pues está francamente satisfecho con el uso del mínimo espacio que hay. Parece que las cosas están medianamente bien pensadas.

Cuando empieza la cháchara solo puede añadir algo a la pregunta de Zyor.

Bueno, no son para tanto, se les pega un poco por aquí, otro poco por allá. Y sin consigues que no te papeen, pues fenómeno.

Dijo haciendo algunos gestos como si peleara con el aire, para acabar señalandose la herida del costado, queriendo expresar, que aunque habian luchado con aquellas cosas, no todo eran flores y besos volados.

En serio, se agradece la ayuda. Dudo que hubiéramos acabado todos tan bien a pesar de que habíamos liquidado ya a un par de ellos.

Por cierto, ¿son o no son Vitrus esas cosas?

Karim se había sentado, al otro lado del vagón/sala mirando a Zyor. No miraba a la pequeña, pero sabía que no tardaría mucho más en decir algo. Pues se la veía excitada con todo aquello de los nuevos y extraños visitantes.

Cargando editor
19/09/2010, 22:00
Martin Lorentz

Habímos seguido a Zyor y a la chiquilla por los angostos "pasillos" del vehículo. La verdad es que para mi gusto era demasiado agobiante. Seguro que en mi anterior vida ficticia trabajaba al aire libre. El caso es que llegamos al lugar de reuniones y como era lógico comienzan las preguntas aunque la niña se mantiene en completo silencio.

-Si, más o menos eso.- digo corroborando las palabras de Karim y haciéndo un gesto restándole importancia a nuestra hazaña.- La verdad es que yo estaba bastante ocupado con tres de esas cosas y no vi cómo se cargaba a los suyos Karim, pero por mi parte tenía una metralleta bastante antigua y hecha polvo pero que me sirvió bastante porque aún disparaba y tenía munición, así que me cargué casi a dos de esas cosas a tiros. Y bueno, Selene me ayudó con otra cargándosela con un pedrusco. A partir de ahí llegásteis vosotros y empezaron los fuegos artificiales.-estoy despreocupado. No tengo razones para desconfiar de ellos y tampoco es muy reveladora la información que acabo de darles.

-¿Y vosotros? ¿Tenéis algo que contarnos?- termino preguntando igualmente despreocupado pero con más seriedad. A lo mejor es pronto para bombardearlos a preguntas pero...qué narices no tenemos ni idea de dónde estamos.- Veréis es que hemos salido del laboratorio ese hace bastante poco. ¿Sabéis algo al respecto? Porque no tenemos ni puñetera idea de dónde estamos, porqué hay escorpiones gigantes, cuanto tiempo llevamos ahí metidos y un larguísimo etcétera. La verdad es que nos vendría bien que resolvierais algunas de nuestras dudas.- añado intentando no ser descortés pero con evidente frustración interna debido a nuestra ignorancia.

Cargando editor
20/09/2010, 12:35
Selene Ashford

A pesar de que tras escuchar las palabras de Karim y copiarle recostándome sobre una pared a tratar de descansar me encuentro a gusto, en cuanto escucho las palabras de Clarisse y Martin hablando de la presencia de la niña me sobresalto. Pero el susto me dura poco cuando veo que ambos están bebiendo agua limpia de un bidón y, ni corta ni perezosa, me sumo a ello muerta de sed. No puede ser peor que lo que bebimos de esas cantimploras... pienso antes de dar el primer trago. Y no, no lo es, sino todo lo contrario, el agua está fresca y calma mi seca garganta poniéndome de un buen humor increíble.

Sin embargo aún no he terminado de saciar mi sed cuando el cacharro se detiene y Zyor entra en donde nos encontramos para llevarnos a otro sitio, colocando primero a Epsilon en una cama sucia y roñosa pero de aspecto cómodo. Aunque me cuesta llevarla a través de un estechísimo pasillo con la ayuda del resto no supone gran problema transportar a la inconscente Epsi.

Una vez la dejamos "a salvo", continuamos siguiendo al hombretón de cabeza rapada hasta un compartimento con aspecto de cocina, desgastada, vieja y muy sucia, pero con aspecto de cocina al fin y al cabo. De cocina de caravana más bien.
Allí nos sentamos en una mesa redonda y me percato de que la pequeña niña vestida de rojo también está aunque no abre la boca, al menos de momento, y yo tampoco lo hago pues ante lo que Karim y Martin ya han dicho no me queda nada que añadir.