Partida Rol por web

Aquí podréis postear por privado vuestro "tiempo out". Como os dije, tenéis libertad para hacer lo que queráis que no tenga relación con las tramas. Podéis reconciliaros (o pelearos) con la familia, viajar de aquí para allá pagándoos las cosas con trabajos ocasionales (lavaplatos, carga y descarga, cosechas, etc)... Lo que no podéis es meter en vuestras historias a los pnjs "de nivel"; los amigos de vuestras vidas anteriores sí, pero ni Willow, ni Nigel, ni nada de eso :P.

Os habéis pirado echando chispas un 2 de noviembre. Pensad en un mes largo para que se calmen las aguas. Ya añadiré yo lo que convenga y lo necesario para re-engancharos.

PD: El Acción de Gracias americano (4º jueves de Noviembre) del 2004 cae en 25/noviembre. Para quién quiera aprovecharlo.

Michael va a pasarse el tiempo en varios lugares. Quiero buscar un hueco en el desierto y hacerme lo que te dije, una choza de sudación. Al mismo tiempo quiero ir ocupandome  de la cueva/manantial (con la mascara halcón no debería ser dificil viajar rápidamente entre los lugares) Quiero dejar la moto en un parking de un pueblo perdido, trabajar alli cuando necesite unos dólares, y el 25 de nov ire a acción de gracias con mi familia.

La choza de sudación (junto con herboristería y ejercicios ) la quiero usar para inducirme visiones (y charletas con Animista) y en ellas aumentar mi iluminación (asi quiero aprender espiritu, y cultura de los magos y a invocar muertos)

En ese tiempo quiero (en cuanto aprenda espíritu) despertar el espíritu del cráneo humano que tengo o incluso invocar a su fantasma para presentarle mis respetos.

Querria saber si los objetos "despiertos" en tu mundo hacen algo especial.

Michael sale de casa con 2 mochilas, una  queda a su espalda y la otra la ata mediante pulpos al deposito de su moto.
 
Sale de la ciudad y se regocija dando un largo paseo en moto, disfrutando de la sensacion de ser libre. Poco a poco, sin pensarlo, sus pasos-ruedas le llevan al desierto, la Death Valley Road y las inmediaciones de Pahrump (nevada). Alli encuentra una edificacion abandonada (tal vez parte de un antiguo rancho de ganado) con la resonancia espiritual que le agrada; entre Kingston Peak, Pahrump y el Valle de la Muerte.
 
La moto queda a buen recaudo, dentro de la edificacion. Una casa llena de arena, sin puertas ni ventanas, de las que quedan, los trozos que se mantienen aun en pie, el equivalente a dos estancias y media. Pese a los trozos que faltan del techo siempre es preferible ese refugio al frio nocturno del Mojave.
 
Michael pasa los dias vagando por la zona, buscando plantas, hierbas, cobijo y sustento, en un estado semisalvaje que le permite liberar la mente de ocupaciones mundanas. Conversando con espiritus y animales cuando los encuentra pero sin buscar especialmente su compañia.
 
Cuando alcanza el estado mental adecuado prepara junto a la ruina-casa unas lonas una especie de tipi, que pinta y decora con todo tipo de simbolos de sabiduria, de introspeccion , de busqueda... aparte de decorar con huesos, plumas, piedrecillas y hojas el improvisado tipi y los alrededores. En el centro del estrecho tipi en un circulo de piedras arde un brasero donde van quemandose hierbas sicotropicas, desprendiendo una temperatura infernal.
 
Michael desnudo, con el cuerpo pintado y manchado, y drogado baila en la tienda esperando que el calor, la deshidratacion, las drogas y los espiritus le envien una vision.
 

La madre de Rachel agradeció que la llamara pero casi se pone a llorar cuando le preguntó si podía ir a pasar uno días en casa y celebrar el acción de gracias con ella y su hermano. No puso ningún reparo al decirle que llegaría en un par de días, no quería darle muchos detalles y pensó que coger el tren de la costa le saldría barato y le daría tiempo para planificar qué decir....35 horas, vaya si tendría tiempo.

El viaje fue tedioso con turista sacando foto a cada piedra o cada ola y una pareja de recién casados que no se cansaban de hacerse arrumacos y carantoñas. Normalmente a Rachel no le afectaba pero como ni si quiera había podido despedirse de Istaryem se sentía irritable con esas muestras de afecto. La hermética era otro punto en el que pensar ¿en qué punto estaban? ¿iban hacia algún sitio? La propia Rachel no había querido pensar en futuro pero también era cierto que solo había compartido casa con Jenny, hablando de amantes claro está, y las últimas dos semanas casi ni se habína visto pmás que para cenar, y dormir. Rachel había dejado su trabajo para poder ayudarla a ella y Ziva con la defensa de la casa y la investigación pero ahora era ella la que tenía que salir corriendo.

Para cambiar de tema se puso a pensar en su madre, varios años sin verla y ahora pasar semanas o quizás un mes juntas.....¿resultaría? Tenía que controlarse, no solo porque realmente quería retomar la relación sino porque egoístamente si se peleaban de nuevo ¿a dónde iría? ¿Con Jenny? El par de veces que había hablado con su madre desde que se disculpó y le pidió perdón parecía que la cosa había cambiado y ella misma se sentía más madura con lo que le estaba pasando...joder, iba a salvar el mundo...aunque no pudiera decírselo a nadie ¿y si le seguían? ¿y si le encontraban? ....pensó durante unos minutos que había sido mala idea y que estaba poniendo a su familia en peligro pero al final lo descartó, había cambiado de taxi un par de veces y sacado el billete directamente en ventanilla para que nadie supiera a dónde iba...no se lo había avisado ni a Istaryem...¿le habrá importado....

Se quedó dormida

Tenía semanas por delante,y aunque parte de mí ansiaba buscar un momento normal sabía que era lo que menos podía permitirme. Tenía que pensar además en Moonchild así que con esos ahorritos que tenía gracias a Istyarem y su sueldo por estar atendiendo la casaconún me decidí asobrevivir y perfeccionarme.

No tardé mucho en pasar por Wal-MArt para conseguir una tienda individual, y otros utensilios de supervivencia. Tenía en mente un destino claro: Sierra Nevada. Allí entre rocas y secuoyas mi familiar sería libre de volar, tanto como el tiempo que tendría para obligarme a sobrevivir así. Si tenía que desarrollar mi arte no era un académico al uso. Aprendería el fuego y el rayo buscándolo en su fuente.

Esperaba pasar así al menos un par de semanas en soledad. Con bastantes alimentos de supervivencia y arreglándomelas por mi mísmo. Ciertamente me hice trampas y sabía que si me sentía muy desesperado siempre podía tratar de volver a la civilización a por provisiones, pero mi intención era habituarme a la naturaleza, y dominar mi voluntad en esos parajes inhóspito; pero tampoco era tan osado como para irme a sonora a las primeras de cambio.

Aparqué la moto en la zona de aparcamientos de un camping con la esperanza que la verla ahí no le echasen cuenta. Trás ello me interné en los bosques de coníferas de Sierra Nevada. Un cuchillo,algo de yesca y algunas cosas enlatadas. Agua y poco más. Un superviviente nato.

Durante esos primeros días las cosas fueron bastante tranquilas y sencillas, una excusrión en la que trataba de comprender el viento y de dominar el fuego para defenderme y calentarme. Sin herramientas apenas, a propósito tenía que valerme por mñi mismo para crear herramientas simples para construir las más complejas. No iba a hacer un motor,pero tampoco lo quería hacer. Durante esas primeras jornadas conversaba frecuentemente con Moonchild y le preguntaba acerca de las cosas, aunque también aceptaba los periodos de horas en las que él disfrutaba de su libertad.

Más adelante vendrían las nochesmás extrañas, con un pequeño aguacero, calado y a refugio en pequeñas oquedades que rezaba porque sólo fueran hogar murciélagos asustadizos. Mi ánimo era más huraño y no conseguía sobreponerme del todo al clima. Éste desobedecía mis órdenes haciéndome un hombre más patético aunque encontré un sentido. Los elementos contrarios asíque cuando dejé de darme cabezazos contra la lluvia sin conseguir que se despejarame dediqué a cuidar demifuego en la cueva. Si decían que todo poseía un ánima representativo y que los elementos podíanpresentarse como criaturas vivas, las traté como tal. No eran meras manifestaciones,sino criaturas y la voluntad de los dioses.

Casi abrazaba al pequeño elemental que creía ver sonriéndome en las noches mientras dormitaba inquieto.Casi creía que malicioso tambiñén esperaba que me durmiera y acercarse a mí para abrigarme o consumirse. Seguramente la intemperie y mis obsesiones me tenían algo febril, pero nome sentíapara nada enfermo. Creía esuchar susurros que me revelaban nombres y palabras que significaban mucho. Pero eso era sobre todo las noches. En los días emulaba a Bear Grillys.

Una noche acariciandomi tatuaje creados y alimetando al fuego con el aroma de una ardilla despellejada miré súbitamwnte a Moonchild con una revelación. Debemos volver. Mañana iremos a otros bosques pues hay un espíritu que necesita riatuales. Creía recordar el momento en que tenía que realizar mi ritual mensual, y no pensaba dejarlo pasar ésta vez.

El robo echó a perder la exposición. No puedo evitar sentirme culpable por ello, pero todo sea por el bien mayor. Ziva me dijo que no debía estar localizable en este tiempo, así que apalabré con los 'proveedores' de Alhisha que me enviaran una tarjeta postal con una clave a un apartado de correos de una zona de clase media de la ciudad. Con el encargado de aquel lugar acordé además que enviaría un sobre - vacío con el matasellos de la empresa estampado en el interior - a otro apartado de correos, uno en la zona de clase más alta de Los Ángeles, cuando llegara cualquier cosa para mi apartado allí. Un poco lioso de explicar, sí, pero es lo que pasa cuando intentas emular a Ziva y ponerte paranoica.

Al pobre Clay tuve que dejarlo en el guardamuebles dónde tengo los libros de la biblioteca. Le soborné con una caja enorme de novelas rosas cuyas portadas lograron sonrojarme al ir a comprarlas, pero tengo mis dudas de que eso le dure mucho tiempo, visto a la velocidad a la que lee. Espero que no la líe, pero no es como si pudiera llevarlo conmigo a dónde quiera que sea que vaya ¿no?

Llevaba ya una de semana hospedándome en un hostalucho barato - parece que son los que menos se oponen a que lleves un gato a la habitación - y yendo al apartado de correos 'lujoso' de forma irregular (en serio, se pegan muchas cosas de Ziva), hoy por la mañana, pasado por la tarde, al siguiente al mediodía... Y en una de las ocasiones me crucé con ella. Julia, en evidente y avanzado estado de gestación. Parece que las hormonas la tienen que tener muy alterada, porque en cuanto le dije que tenía una plaga de termitas en la casa - lo único que se me ocurrió para estar fuera de mi casa por tiempo indeterminado - me ofreció a pasar el tiempo que precisara en su casa y sin aceptar un no por respuesta. No sé cómo acabará esto, pero al menos puedo confirmar cómo le van las cosas...

Durante un tiempo no llegué a ver al padre de mi sobrino - o sobrina. Siempre está viajando, al parecer. Mi hermana no me explicó bien a qué se dedica - creo que mucha culpa tiene que ni ella misma se enterase bien en primer lugar - pero de lo que sea el tipo está forrado. Una mansión que casi parece un palacio en la zona más cara de Los Ángeles, con lo mejor de lo mejor consuelan a la más pintada. Me acuerdo mucho de Nigel aquí, la casa siempre está impecable y nunca pillas al servicio en plena faena, siempre está todo terminado y perfecto.

Es curioso, Julia nunca menciona al padre de mi sobrino por su nombre. Todo son apelativos cariñosos - bastante empalagosos, además - pero nunca nada concreto. No hay fotos suyas en la casa. Es todo tan extraño...

Y por fin conocí al señor millonetis (¿qué? si no tengo un nombre que darle, no voy a decir "el cariñito de mi hermana"... Me niego). Fue una visita rápida, apenas se quedaría esa noche y saldría la mañana siguiente, pero por fin lo conocí. Estará en los cincuenta, pero se conserva muy bien. Las sienes plateadas le dan un aire distinguido y o bien el carísimo traje le favorece horrores o es uno de esos hombres de negocios que no descuidan su cuerpo. Su acento francés no hacía sino aumentar su distinción, y sus exquisitos modales eran la guinda del pastel. Podía entender qué había visto mi hermana en él, pero ¿y al revés?

Por supuesto, resulté una completa sorpresa para Jean-Luc (me enteré de su nombre, pero no de su apellido...), quien obviamente no esperaba a nadie más en la casa. En cuanto mi hermana le explicó quién era yo - algo que no es evidente a primera vista, dado nuestra absoluta desemejanza física - noté algo en su rostro, como cuando Ziva deja a veces entrever algo que no quiere... Sea lo que fuere se recompuso de momento y mostró su total comprensión. Cenamos juntos y me contó que pasó un tiempo en nuestra isla, y que siempre que conoce a alguien de allí le trae recuerdos. Quizá fuera eso lo que creí ver.

Al finalizar la noche, Julia se retiró pronto a la cama. La gestación se le está haciendo un poco cuesta arriba ya y necesitaba descansar. Jean-Luc se quedó acompañándome, tomando unas copas y hablándome de la isla. Por lo que contaba, debió conocer la zona por la que vivía nuestra familia. Ya me iba a la cama cuando me dijo que quería ofrecerme un obsequio, algo que consiguió en uno de sus múltiples viajes y que, de algún modo, él sentía que sería perfecto para mí. Me pidió que le acompañara a la bodega, y allí, de un mueble de coleccionista que haría babear a cualquier anticuario, sacó un guardapelo de oro de exterior liso colgando de una cadena a juego. Quise decirle que era demasiado, pero su expresión dejaba claro que no era hombre que aceptara un no por respuesta... Y tampoco quería llevarme mal con el padre de mi sobrino ¿no? A propuesta suya me lo puse y abrí el colgante. Y entonces sucedió.

Habían pasado un par de días desde que llegara a su casa y la situación había sido bastante soportable. Noah estaba en la Universidad pero aseguró que vendría de vacaciones para acción de gracias y pasar tiempo los tres juntos, y su madre trabajaba en el centro por lo que se llevaba comida y volvía a eso de las 19:00....así que tenía la casa para ella sola. No era lo que iba buscando pero era lo que tenía así que decidió aprovechar ese tiempo leyendo el libro de la Keegan y saliendo a correr por la mañanas para no dejar parado entrenamiento al que se sometía con Ziva, incluso realizaba uno de los ritos solares cada mañana para no olvidarlos. Luego cocinaba, cosa que casi hace caerse de espaldas a su madre, tuvo que engañarla diciendo que su compañera de piso era una cocinillas y que se empeñó en enseñarle.

Había pensado en llamar a Istaryem para ver cómo estaba la situación pero le daba miedo ponerla en peligro, le seguía jodiendo tener que bailar al son de la situación sin poder hacer nada por evitarlo. Parecía que el cambio de aires le estaba aplacando el estrés de estos meses y esperaba que el aburrimiento no le provocará más estrés a largo plazo.

Si se encontró con algo inesperado, su cuarto estaba prácticamente como lo dejó el día que se marchó...eso decía mucho de su madre...más de lo que ella se hubiera imaginado. Habían empezado con conversaciones vanales ¿qué hacía Rachel? ¿dónde vivía? ¿en qué trabajaba? ¿qué había hecho estos años? Tras algunas respuestas vacías decidió que había venido no solo para ocultarse si no para recuperar a su familia y comenzó a contar su vida estos años. Evitó cualquier referencia a la magia, academia, nombres de compañeros, ... fue lo único en lo que mintió,ella seguía trabajando en la tienda de discos y compartiendo piso con Jenny.

Salida de chicas, esa fue la proposición de Rachel el siguiente sábado. Tras casi dos semanas gorroneando era lo menos que podía hacer, además se notaba que su madre no iba más allá de unas cuántas amigas de toda la vida. Le hizo arreglarse y buscó un restaurante de comida extranjera que no se le fuera de madre, su madre siempre había querido probar comidas de otros países. La idea le vino por un folleto sobre un pakistaní por el centro que acaban de abrir hacía poco y resultó que con el código de la propaganda le hacían un veinte por ciento de descuento.

La velada fue tranquila, su madre estaba radiante no solo porque se hubiera arreglado si no porque necesitaba salir y despejarse...era una viuda que no llegaba a los cincuenta y con dos hijos independizados ¿estaría saliendo con alguien? Pero la propia Rachel también lo necesitaba, hablaron de todo y de nada, del tiempo y de las rebajas, de su prima Susan y que el marido la había dejado por otra más joven, de su hermano y de cómo eran cuando su padre estaba vivo.

A continuación fueron a un pub de gente mayor...bueno de la edad de su madre, ella no quería pero Rachel se encabezonó y casi tuvo que arrastrarla. Música ochentera pero tranquila, cogieron una mesa y pidieron (su madre un bloody mary y ella un bourbon) y siguieron hablando, bueno comenzaron a cotillear de la gente del pub: parejas mayores bailando, divorciadas buscando marcha, cincuentones en plan buitre (incluso uno intentó ligar con ella cuando su madre fue al baño), ...

Al final taxi y para casa, Rachel aprendió a ver a su madre con otros ojos, la necesidad de la familia y de aprender de ella como mujer mayor que ella ¿sería eso debido a Evelyn? Aunque no lo reconocería en voz alta, le gustaba.

Al abrir el guardapelo activé la trampa. Sentí como si me arrancaran un trozo de mi alma y juraría que por un instante oí a la Esfinge aullar de dolor. Perdí el aliento y caí de culo. No entendía nada de lo que estaba pasando. ¿Qué hacía el millonetis con un objeto mágico?¿Quién era ese tipo?¿Y qué tenían sus rasgos que me resultaban vagamente familiares?

Cuando logré levantarme no quería creer lo que veía. Jean-Luc, el novio millonario de Julia, el padre de mi sobrino, levantaba las manos como un púgil, pero en vez de guantes de boxeo llevaba guantes negros con una decoración roja que yo ya conocía: la marca de Tanit. Un fogonazo púrpura y quedé completamente desprotegida, paralizada.

El que fuera mi secuestrador, causante de mi personalidad múltiple - y de la de Rachel -, y responsable de la ¿desaparición?¿no muerte? de al menos dos magos, me agradeció haberle guardado tan bien algo mientras me quitaba el guardapelo. Mientras un fragmento de tu alma está en este mundo - me dijo con ese acento francés - nunca mueres del todo ¿sabes?

No tenía sentido. ¿Me había extraído un fragmento de su alma que estaba dentro de la mía?¿Cómo puede ser eso?

Mis dudas debieron transparentarse en mi rostro, porque fue él quién me dio la respuesta. Cher, ¿en serio no lo imaginas? Visité tu isla hará unos... ¿treinta años? - dijo por toda explicación mientras se calzaba la máscara dorada sin rasgos que yo había llegado a temer y odiar a la vez. Esta vez la tenía tan cerca que podía verme reflejada en ella. Y entonces me di cuenta. Los rasgos que en él me parecían vagamente familiares lo eran porque eran mis propios rasgos. El corte de los ojos, la forma de la nariz, el óvalo de la cara... Siempre supe que había heredado más de mi padre que de mi madre, de ahí la gran diferencia física con Julia, que mi padre no era oriundo de la isla, pero... ¿Él?

El shock de la revelación sólo lo pudo romper el recordar que Julia llevaba en su seno el hijo de... ¿mi padre?

Mais oui, petite. - respondió él a mi silencio como si hubiera formulado mis pensamientos en voz alta - Necesitaba otro... salvavidas para cuando tú no estés. Porque, por supuesto, sabes cuál es tu destino... -dejó en el aire.

Claro que lo sabía. El cántico. La bola de energía. Ser absorbida. Darle así el poder de usar mi anillo y el guantelete. ¡Maldición!

Pero... - prosiguió, su voz alterada por la máscara - no nos precipitemos. Ahora que he recuperado este fragmento de mi Avatar puedo acelerar un poco todo esto.

¿Avatar?¿Ese fragmento que me ha arrancado era un fragmento de un Avatar?¿El tipo éste es un Mago? Preguntas, preguntas, y ni una respuesta. ¡Maldición!

Mientras yo me debatía en los confines de mi mente, él aprovechó para amordazarme y maniatarme, tras lo cual empezó con sus preparativos.

Michael llega al atardecer antes de la luna llena y tiene un aspecto un tanto extraño. Parece mas delgado, mas fibroso, sucio. Varios cortes y manchas rojizas en su piel, especialmente bronceada. Varios agujeros nuevos, aun frescos, en su oreja en los que hay unas plumas, y una especie de trenzas de hilos de colores.
 
Al llegar saca, con un cuenco de madera grande, agua del lago y con ella se limpia con una especie de de manopla de pelo de bufalo, mientras se quita todo con lo que decoraba su cuerpo. Tras ello y con una leve incision con el cuchillo de obsidiana, pinta varios signos con su sangre en los puntos de salida y puesta del sol.
Luego prepara  unas brasas y comienza a quemar sus hierbas y en las brasas quema las plumillas y los hilos y varias cosas mas.
 
Mientras tanto ya ha anochecido y la luna empieza a asomar en el horizonte.

Leon llegaba al bosque con esa estampa de quien hace un tiempo que no come decentemente caliente, recalentado o tostado más bien. Si no fuera porlos evidentes signos de su exposicióna los elementos se podría decir que había estado un semestre en la universidad con compañerosde piso únicamente masculinos.

Junto a él venía Moonchild, que pese a todo no parecía dispuesto a ponerse en la cabeza un pañuelo, ni siquiera era probable que Leon se lo hubiera pedido, o lo hubiera hehco más allá de un sueño.

Veo que te has acoraddo tu tambien del chiminaje a los espíritus...claro que es lo propio.

El reencuentro era algo inesperado, pero no por ello menos deseado; aunque Leon, para variar, habría preferido a las chicas para un retiro salvaje.

Mientras Michael sepreparaba para sus cantos, Leon hacía lo propio, simplemente esperaba sentado en loto a que las cosas ocurrieran. Aunque algo en su expresión denotaba que estaba repasando listas de la compra.Al punto recogió tres piedras similares,calcáreas y con el cuchillo de su cinturón talló las runas Hagalaz,Tiwaz, y Erwaz en ellas. Las hizo rodar en su manos mientras soltaba una retahila vagamente similara algún supuesto idioma norteño; todo palabras duras y movimientos fuertes de mandíbula. Pero concentrado y respetuoso, cómo si realmente quisiera honrar algo o a alguien con verdaderas palabras.

AL finalizar su salmodía lanzó una a una las piedras al agua.

Michael asiente, ve a Leon y sonrie un momento.

Me alegra verte por aqui. Podemos comenzar cuando quieras- Dice mientras empieza a marcarse la cara y el cuerpo con las cenizas.

Vayamos a ello. Será cuestión de armonizarse en condiciones ¿no crees?

Habíamos tenido nuestro instante solitario, pero ahora teníamos ocasión de colaborar. Iba a ser interesante, pues de todos los demás Michael era el que me parecía que poseía unos conocimientos menos formales, aunque fueran igual de interesante.

Michael extiende su percepción del mundo de los espiritus a León mientars asiente a su comentario, salpicandole la cara y el cuerpo con el agua de su cantimplora. Después de ello empieza a bailar, ocupando tan solo la mitad del espacio que les separa

Leon decidió que en buena parte Michael debía guiar esa forma de entender y hacer las cosas, pero a su vez fue imprimiendo a su baile poderío y energía. Movimientos bruscos y autoritarios que denotarán más respeto que sumisión.

Los golpes de pecho y gritos broncos le eran naturales y por momento acariciaba la idea de derramar sangre además del sudor del baile y ni corto ni perezoso se deshizo de su camisa y cortócon el cuchillolapiel junto al tatuaje de su corazón para hacer caer las gotas de sangre al suelo y al agua con gruñidos.

Michael continúa su danza intentando acompasar los golpes de León con fuertes pisotones en el suelo y al cabo saca su cuchillo de piedrq y se realiza un cortecerca del corazón y en el antebrazo, dejando que la sangre caiga al suelo.

Al culminar el rito de gratitud, León lanza su orbe - el cual parece una luz pulsante blanca a los ojos espirituales - al lago y Luna derrama su bendición. Estáis a punto de salir del agua cuando un imponente destello os ciega momentáneamente.