Partida Rol por web

Los Dhaeva de Transilvania.

TERRITORIO 23: Bucarest/ Ciudad de la Alegría.

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02/03/2010, 21:19
Durius de Slobozia.

Entro con paso apresurado a las cocinas. Lo que iba a ser una corta espera se ha convertido en algo demasiado dilatado. Sin embargo, allí sigue mi invitado, aunque apenas despierto, dadas las horas que son.

- Maserrak de Flambeau, deberéis disculpar mi tardanza. Asuntos de estado me han retenido - señalo, lo cual simplemente quiere decir que es la voluntad del Regente la que me ha retanido -. Espero que al menos os hayan ofrecido una buena cena y tened por seguro que podréis contar con mi compañía durante el tiempo que necesitéis sin innecesarias interrupciones - digo al tiempo que alcanzo la mesa y me siento en una silla vecina -. Comentasteis que si bien os hallabais en la ciudad, vuestro lugar de procedencia era Slobozia. Ha pasado mucho tiempo desde que abandoné dichas tierras buscando el reconocimiento de los derechos sucesorios de mi difunto tío Sidor y, en contra de mi voluntad, no he podido hallar un solo segundo para volver a ellas. Sin embargo, siempre han permanecido en mi corazón y en mi mente. Decidme, ¿qué noticias tenéis? Hablasteis de refugiados, si no me equivoqué al traducir el sentido de vuestras palabras. Y que vos estabais al frente de los mismos. ¿Cómo es esto posible? ¿Qué ha sido de Dagu o de sus hijos? ¿Por qué no son ellos quienes encabezan este grupo? Hablad, os lo ruego.

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02/03/2010, 22:04
Director

HERMANO CIFERINOS:

- Durante más de dos años has estado bajo el control total de un maestro manipulador, que supo obtener tu lealtad a muchos niveles: Disciplina de Dominación, Juramento de Sangre, Fe y carisma.

- Ahora se ha roto el vínculo más grande: el de la Sangre.

- Además, has recibido la sangre de otro vampyr: el Caballero Durius de Slobozia. Sin embargo, este nuevo señor no es tan carismático como el anterior.

 

 

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03/03/2010, 14:43
Maserrak de Flambeau.

Las primeras palabras del caballero me sacan de mi letargo. Cuando intento incorporarme, me doy cuenta de lo incómoda que era mi postura, pero pudo más el cansancio. Atisando un poco mis ropajes, intento parecer lo más digno para la ocasión.

- Mi señor, la comida ha sido muy bien recibida por mi pobre estómago y no encuentro queja alguna en el servicio. Disculpad que me haya dormido mientras os esperaba, pero a mi fatiga física se une cierto agotamiento mental que, una vez llenado el buche, se ha apoderado de mí.

Al escuchar las preguntas del caballero, mi rostro de júbilo se torna sorpresa, y luego pesadumbre. Con el tono de voz más bajo y mirando al suelo, prosigo.

- Cuando tuve conocimietno de vuestra llegada,  supe que debía veros inmediatamente, no me preguntéis cómo. ¡Son tantas las cosas que deseaba preguntaros que no se por cual comenzar! Esperaba que vos pudierais hablarme sobre la expedición que salió a vuestra búsqueda, más de un año después de vuestra partida, entre los que se encontraba mi amigo Gorax Suylas. Acompañaba a Fray Domenico de Sajonia, Bigun Tarigen y Dimitri, el hijo menor de Dagu el Anciano, que se quedó al frente de los asuntos de la aldea. Yo me encargué de dirigir la construcción de la empalizada que reforzaría la pequeña estructura defensiva que alzaron. Nuestros compañeros partieron con la esperanza de traer nuevas a Slobozia. Pero nunca regresaron.

- Y ahora os tengo ante mí y me preguntáis dónde están Dagu y sus hijos ... vuestras palabras atraviesan mi corazón y me inflingen un terrible dolor, pues significa que no sabeis nada sobre lo que os digo, nada de mi amigo Gorax.

Alicaído, me dejo caer sobre uno de los taburetes. Inspiro fuertemente, sobreponiendome a la desesperación, y miro de nuevo al caballero.

- Debéis saber que Dagu decidió quedarse en Slobozia, junto a un numeroso grupo de habitantes de la aldea. La inminente llegada de los magiares y la imposibilidad de hacerles frente con las escasas defensas disponibles, convertía en un suicidio sin sentido quedarse allí. Dagu argumentó que era demasiado viejo para el viaje y que aquella era su tierra ... triste, respeté su decisión y lamenté que nunca más volvieramos a disfrutar de su sabiduría y consejo. Con él, una parte de la población y sus hijos. El resto decidió seguirme en el viaje. Con todo lo valioso que puediera sernos útil, abandonamos Slobozia y emprendimos viaje hacia Bucarest, lugar que me pareció más seguro.

- Y aquí estamos desde entonces, mi señor. Junto a otros muchos refugiados como nosotros, sin saber que nos depara la providencia, casi agotados nuestros víveres y mucho más pobres que cuando salimos de la aldea, pero vivos y sin olvidar quienes somos. - estas últimas palabras las enfatizo con un tono de voz más elevado.

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03/03/2010, 19:30
Durius de Slobozia.

- ¿Me decís entonces que la población de Slobozia se ha dividido en dos y que una parte ha venido a Bucarest, en busca de protección ante la amenaza magyar, y que la otra permanece en Slobozia? ¿Y que Dagu y sus hijos e hijas permanecen en Slobozia en un vano intento de hacer frente a un posible ataque? Es tan... estúpido todo - digo apoyando mi cabeza en mis manos y cerrando los ojos -. Debería haber vuelto hace ya tiempo... pero el Voivoda no es hombre que acepte negativas - casi murmuro más para mí que para mi invitado -. En cuanto a vuestros amigos, no. No sé nada de ellos. Conocí a Bigun, a quien rescatamos de una muerte segura en un enfrentamiento entre mi tío Sidor y él con una criatura de la noche. No sé nada de él desde que abandoné Slobozia. Pero decidme, ¿sabéis qué fue de Pavetta y de su hijo Lindor? Eran la hija y nieto de Dagu, y la esposa e hijo de Lisander, un buen hombre que me acompañó a Bucarest en mi misión y que murió al provocar la ira del Voivoda. Nunca tuve el valor de comunicar tan funesta noticia por medio de una misiva, queriéndolo hacer en persona. Pero está visto que me equivoqué.

Me paso una mano por la cara. La noche está siendo larga, demasiado larga y hace tan solo unas horas que regresé a la ciudad.

- Os prometo hacer cuanto esté en mi mano por mejorar la situación de los refugiados de mis dominios. Tan solo decidme dónde se hallan y dónde podré encontraros en un futuro si debo ponerme en contacto con vos.

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04/03/2010, 15:08
Maserrak de Flambeau.

- Entiendo vuestra tristeza, mi señor. Vuestra tierra ha estado demasiado tiempo sin su señor y la preocupación y desesperación han florecido en el corazón de vuestros súbditos. La creciente amenaza magyar ha sido decisiva para empujarnos a la situación en la que nos encontramos ahora. Pavetta y su hijo están en Bucarest. Pavetta pensó que sería bueno para el futuro de su hijo no quedarse en Slobozia, puesto que él es el futuro.

Estoy seguro de que Pavetta se alegrará de veros, aunque le comuniquéis tan fúnebres noticias, al igual que el reto de refugiados de Slobozia; y, sobretodo, escucharos. Vuestra presencia resultará alentadora y vuestras palabras servirán para inspirarles en estos tiempos oscuros y llenos de desesperanza.

- Nos encontramos cerca de la calle principal de la ciudad, en una pequeña plaza ubicada unas callejuelas más al sur del mercado de animales.

Me pongo de pie para dar más firmeza a mis palabras.

- Aún no está todo perdido, mi señor. Vuestro pueblo os espera.

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04/03/2010, 17:08
Durius de Slobozia.

- Haré cuanto esté en mis manos por ayudar a mi pueblo - dijo tras escuchar a su invitado -. Solicitaré del Regente favores al respecto y yo mismo procuraré visitarles a la mayor brevedad posible, portando noticias. De ser posible, mañana mismo, aun cuando me aguarda una jornada posiblemente ardua. Y en breve, deberé abandonar nuevamente Bucarest, obedeciendo las órdenes del Regente, en una misión de cuyo éxito dependen en gran medida nuestras vidas y futuro. Temo que no puedo deciros más, sin comprometer mi misión.

Me pongo en pie, fatigado.

- Ha sido una larga jornada. He regresado hoy a la ciudad de un largo viaje que me ha llevado varios días con sus noches, he tenido que rendir informe a Uber Caprescu, buscar al Abad cuando han llegado notiias de su presencia en Bucarest, reunirme con ellos para atender asuntos de estado y rematar todo ello con tan funestas noticias como las que me habéis traído. Hay días en los que lo mejor sería no haberse levantado de la cama. Ahora, Maserrak de Flambeau deberéis disculparme, pero quisiera descansar. Tenéis mi palabra de ayudaros en cuanto esté en mi mano. Y no dudéis en acudir a palacio si necesitáis cualquier cosa. Y por lo que veo, vos también necesitáis descansar. Demasiadas emociones para tan solo unas horas.

Me vuelvo hacia uno de los guardias que circula por el pasillo adyacente a la cocina.

- Acompañad a mi invitado a la salida. Y que algún soldado de guardia le acompañe hasta su destino. Las calles de la ciudad son peligrosas de noche. Maserrak de Flambeau, que tengáis buena noche y descanséis - digo a modo de despedida.

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05/03/2010, 15:00
Maserrak de Flambeau.

Inclino la cabeza tras escuchar las palabras del caballero e inspiro profundamente. Me alegra saber que visitará a los refugiados y así se lo hago saber.

- Comparto vuestra opinión, mi señor. Es hora de dar descanso a nuestros huesos. Al alba, tras el sueño, nos despertaremos mucho mejor. Me alegra poder decir al resto que os he visto y he hablado con vos y les transmitiré vuestras palabras.

- Espero que vuestra misión tenga éxito, sobretodo si de ella dependen tantas cosas. Si puedo serviros de ayuda, de alguna forma, no dudéis en decirmelo.

Cuando un soldado de guardia viene a cumplir con las órdenes del caballero, le miro por última vez antes de marchar:

- Que descanséis, mi señor. Y que los hados os sean propicios.

Luego abandono el castillo escoltado por la guardia, algo más tranquilo aunque mucho más cansado.

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05/03/2010, 17:33
Durius de Slobozia.
Sólo para el director

Acabada la reunión con Maserrak, me quedo unos momentos más en la cocina, pensando. Pavetta y Lindor están aquí, en Bucarest. Es curioso, pero tengo sentimientos encontrados que deberé aclarar. Pero cuento con tiempo libre para ello antes de tomar ninguna decisión. Mañana, cuando Uber haya despertado, espero me conceda unos minutos. Debo hablar con él. Mientras tanto, toca recoger la basura.

Con paso rápido regreso a la sala en la que el Abad ha pasado a mejor vida y a reunirse con su creador. La mera idea me hace reír y mis carcajadas resuenan huecas en los pasillos que recorro. Finalmente, llego y abro las puertas. Las escasas pertenencias del difunto reposan en el suelo y sobre la silla en la que murió. Las recojo una a una, observándolas. Después, me las llevo a mi habitación.

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05/03/2010, 21:42
TEMPUS FUGIT

TRANSCURRE EL RESTO DE LA NOCHE.

MAÑANA SIGUIENTE.

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11/03/2010, 20:57
T23: BUCAREST.

- Se celebra un gran funeral por la muerte del Abad Lucius Sempronius.

- Se rumorea que era un hombre muy mayor y que las penalidades de la huida desde Braila finalmente pudieron con él.

- La ciudad entera está de luto.

- El Hermano Ciferinos es ascendido al rango de Padre Abad con gran ceremonial y pompa.

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11/03/2010, 20:59
TEMPUS FUGIT

TRANSCURREN VARIOS DIAS CON SUS NOCHES.

EL SOL SE HA PUESTO.

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11/03/2010, 23:16
Hermano Ciferinos.
Sólo para el director

Aunque Ciferinos y el resto de los monjes ya llevaban dias celebrando ceremonias para honrar la memoria del abad,participaron en esta ultima como si fuese la primera.Manteniendo sus votos de silencio,como lo hacian en el antiguo monasterio y ayunando, con el fin de encontrar la direccion divina.

Pero ademas de elegir el camino correcto, el nuevo abad queria saber mas de la muerte de su sucesor, por lo que fue a solicitar una audiencia con el Regente.

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12/03/2010, 08:44
T23: Szagy el Mayordomo del Voivoda.

- "Buenas noches, mi señor Durius. El Regente continúa indispuesto, aunque me ha indicado que os facilite todo cuanto necesitéis. El nuevo Padre Abad quiere hablar con el Regente sobre la muerte de su predecesor, imagino que será mejor que hable con vos." -

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12/03/2010, 15:00
Maserrak de Flambeau.

Mientras espero la visita del caballero Durius de Slobozia, la noticia de la muerte del Abad Lucius Sempronius sacude nuestras miserables vidas. ¡Y pensar que hacia varias noches viajé junto a su carruaje al castillo de la ciudad... ! Se rumorea que el viaje desde Bralia hasta Bucarest, unido a su avanzada edad, han sido las causas de su defunción. A mi mente vienen imágenes de nuestro último encuentro: recuerdo al Abad caminando al lado de su carruaje, muy cercano a los devotos y rezando con un tono de voz cada vez más vigoroso, mientras los feligreses suman sus voces casi como en un coro eclesiástico, sumidos en un fervor religioso, aunque en algunos momentos suene más como una estridente cacofonía. Luego llegó el caballero Durius...

He hablado con el resto de refugiados de Slobozia. Les he relatado parte de mi conversación con el caballero. No he dicho nada sobre Lisander a su esposa Pavetta, no es mi deber. Como esperaba, la alegría se ha reflejado en sus ojos y la sonrisa ha vuelto a sus labios. Entonces, mientras los sentimientos iban aflorando y se corría la voz del regreso de su señor, me he sentido como el difunto Abad Lucius: caminando entre la muchedumbre, repartiendo esperanza y atrayendo a los creyentes y desesperados a mi vía, con promesas de un futuro que, tal vez, no se cumplan jamás.

 

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15/03/2010, 18:50
Durius de Slobozia.
Sólo para el director

- Ofreced al Regente mis respetos y decidle que le deseo una pronta mejora, cuando tengáis una oportunidad. Nuestro país depende de ello. En cuanto a su oferta, había un asunto del que me hubiera gustado hablar con él, aunque entiendo que como mayordomo encargado de los asuntos domésticos y de avituallamiento del palacio, os afecta directamente, Mayordomo Szagy. Tal vez ya estéis al corriente y tendréis conocimiento de que una pequeña parte de la población de Slobozia se halla refugiada en la ciudad. Por lo que se me ha transmitido su situación es precaria. Quisiera saber si podríamos ofrecerles ayuda. Me refiero a dos carromatos cargados de víveres. Básicamente algunos sacos de harina y legumbres, así como algo de verdura fresca. Coles o repollos bastarían así como cebollas. Si pudiéramos añadir algo de carne en salazón o curada, os estaría muy agradecido, así como algo de miel.

Entiendo que mis peticiones, humildes en otro momento, pueden constituir un problema dada la situación del país. Pero siento que es lo que les debo a mis ahora súbditos. Tierras sin mano de obra, son una pobre herencia.

- En cuanto al Abad Ciferinos, decidle que hablaré con él cuando lo desee y comunicadle el estado del Regente y pedidle que ore por él. Mayordomo Szagy, si los víveres pudieran organizarse de inmediato, me gustaría partir a continuación al campamento de mis súbditos. Debo hablar con ellos. A partir de ese momento, algo que no debería llevarme demasiado tiempo, estaré libre para hablar con el Abad. Comentádselo así.

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15/03/2010, 23:21
T23: Szagy el Mayordomo del Voivoda.

- "Viniendo de cualquier otra persona, vuestra solicitud habría de ser denegada. Pero la situación política es fluctuante, y en estos momentos entiendo que vuestra autoridad política, mi señor Caballero, es superior a la mía propia. Por ello, podéis contar con esos dos carros de provisiones, así como con el resto de vuestras peticiones, mi señor." -

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16/03/2010, 20:15
Durius de Slobozia.
Sólo para el director

- No era mi intención poneros en un compromiso, Mayordomo Szagy. Y entendería perfectamente vuestras reticencias e incluso una negativa si mi petición fuera en perjuicio de vuestras previsiones de futuro. Pero quiero creer que se trata de excedentes, pues confío en vuestro buen juicio, o no ocuparíais el lugar que ocupáis - dijo en respuesta al comentario del mayordomo -. Así pues, dad por favor instrucciones para que los dos carros sean cargados y partiré de inmediato con una pequeña guardia como escolta.

Dando por finalizada la conversación, me dirijo al patio para ensillar mi caballo. Dudo si llevarme a mis amados perros, pero entiendo que su presencia en el campamento pueda causar más alboroto que otra cosa. Cumpliré con mi pueblo y con Maserrak, aunque este último me resulte indiferente a decir verdad. Pero siempre conviene tener aliados. Y espero poder ver a Pavetta y, muy especialmente a Lindor. Él es mi verdadero objetivo. Tengo grandes proyectos de futuro para él.

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16/03/2010, 22:35
T23: BUCAREST.

CASTILLO DE BUCAREST:

- Son preparados dos carros de provisiones a toda prisa por los lacayos a las órdenes del Mayordomo Szagy, para ser llevados a los refugiados de Slobozia.

- Una escolta de diez jinetes es reunida para proteger al Caballero Durius de Slobozia y los dos carros.

- Vlava Szantovich se entera de estos preparativos por casualidad, al escuchar a unos lacayos en un pasillo.

- El Mayordomo Szagy se reúne por la noche con el nuevo Abad Ciferinos y le informa de que el Regente se encuentra indispuesto, le ruega que rece por él. Le informa también de que pronto podrá hablar de nuevo si lo desea con el Caballero Durius, quien habla con la plena autoridad y soporte del Regente.

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16/03/2010, 23:41
Vlava Szantovich.

Vlava se entera de la próxima salida de Durius, de casualidad. Lo primero que siente es algo de enfado ¿por qué no le ha dicho nada? Lo siguiente es la esperanza de poder salir de aquella ratonera. Llevaba semanas metida en su habitación contando telarañas y un poco de aventura no le vendría mal...

Aparte, echaba de menos a compañía del vampyr...aquí estaba muy solicitado.

Se dirigió hacia donde había oído estaban los carruajes...

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17/03/2010, 20:56
T23: BUCAREST.

CASTILLO DE BUCAREST:

- Vlava Szantovich llega al patio del castillo a tiempo de ver como Durius se dispone a partir, con una escolta de diez jinetes y dos carros llenos.