Partida Rol por web

Los Dhaeva de Transilvania.

TERRITORIO 18: Pitesti. - Tirsa de Arges.

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12/01/2010, 00:35
Cancerbero Ghoul.

Los dos cancerberos retornan al fuerte Vixar apestando a sangre y entrañas y con los hocicos manchados de sangre, es obvio que consiguieron su objetivo.

Cuando Durius despierta, Bigun no es más que una carcasa destrozada, que los fieros canes ociosamente mordisquean, y sabe que de Gorax no queda tampoco más que el recuerdo.

En cambio, las dotaciones de las armas de asedio y los aqueros no han regresado. Son unos desertores.

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12/01/2010, 17:06
Durius de Slobozia.

El despertar trae buenas y malas noticias. Mis amados perros han cumplido sobradamente su misión. Por otra parte, los arqueros y las dotaciones conquistadas en el fuerte de Vixar han huído, mostrando su alma traidora. Bien pensado, es lo mejor que podría habernos ocurrido. No quisiera que nuestra seguridad dependiera de seres tan débiles en nuestro camino hacia Bucarest. Un alma traicionera siempre está dispuesta a que la mano empuñe un arma lista para segar la vida de aquellos a quienes temen.

- Bien hecho, cachorros míos - murmuro acariciando sus cabezas. Acto seguido, observo nuestras pertenencias y nuestros efectivos. Mis criados sumados a los de Vlava, hacen un total de nueve. Pero sus dondellas dudo sean de gran ayuda. Nuestros carruajes, el carro con las provisiones, dos carros jaula y sus correspondientes tiros. Mi caballo de guerra y la vieja mula. ¡Qué viejos recuerdos me trae ese animal!

Es hora de tomar medidas. Habrá que sacrificar uno de los carros jaula. Mis cancerberos y los Slatzcha deberán compartir espacio. Los caballos de tiro del mismo, servirán de refresco, llegado el momento. Cuatro de mis criados, podrán manejar los cuatro carruajes. Conforme nos acerquemos a Bucarest, podremos sacrificar alguno más de los carros. Una lástima haber perdido la oportunidad de contar con la ayuda del séquito de Sveta Basarab. Sin embargo, no tiene sentido llorar sobre la sangre derramada.

Una vez decidido, doy las instrucciones pertinentes. Cuatro de mis criados se montan en los pescantes de los carros y carruajes. Los caballos de tiro del carro jaula y la mula, son atados a los restantes carros. Los Slatzcha y los cancerberos descansarán en el carro jaula que queda, cuya puerta no estará cerrada,  y Vlava junto a sus doncellas viajarán en su lujoso carruaje. Los dos criados restantes, irán en los pescantes. Y yo viajaré en mi caballo. El sacerdote y el mensajero, constituyen un problema. En su estado, no sobreviviran mucho tiempo.

- Vlava, mi querida dama Szantovich, ¿creéis que Rosch aceptaría el sacrificio de estas dos almas antes de que partiéramos? Nos ahorraría trabajos y nada puede asegurarnos que sobrevivan siquiera unas horas. Si aceptáis, tras su inmolación podríamos partir bajo el abrigo de la noche hacia Bucarest.

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12/01/2010, 19:39
Rosch el Devorador.

Una vez más, el ansia de sangre recorrió el cuerpo de Vlava/Rosch, anticipándose a la carnicería. Por un único segundo, Durius creyó ver cómo los ojos de la mujer se tornaban completamente opacos, ennegrecidos por una bruma negra como la noche sin luna.

Sin embargo, un instante después, los ojos de la mujer parecían tan hermosos como siempre, or lo que el noble vampyr lo atribuyó a una jugarreta de las sombras de la noche. Quizá...

Notas de juego

nianonianooooo comidaaaaa   :9

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12/01/2010, 22:02
Vlava Szantovich.

La noche había llegado y Durius estaba ya en movimiento. El Slatzcha despierta a la joven con unos golpes en la puerta. Había que moverse, y la noche era siempre demasiado corta.

Se despereza y arregla para salir de la habitación perfecta. Como si unas horas antes no hubiese asesinado a alguien con sus propias manos...y devorado su corazón. Eso le recordó que tenía un poco de hambre. Ya comería algo por el camino.

Salió de la habitación con el vestido que usó en el ritual hecho un paquete y envuelto con unas telas que empezaban a calar la sangre. Al llegar a su carruaje pensó que lo mejor sería dejarlo con el "cuerpo" de Bigun que no ir provocando a Durius con el olor de la esencia vital. Tras ello empezó a remolonear por los carros hasta que se dirigieron a ella.

Antes de que ella pueda siquiera hablar su sonrisa y sus ojos cambian, para volver de nuevo a su tono normal.

- El Devorador está de acuerdo...Supongo que querréis presteza, ¿verdad? Sonríe a Durius...si tan solo la hubiese visto cómo alargó el ritual en el desayuno...

"Rosch, guía mis pasos...pero que sean rápidos..." sonríe en su interior "Te vas poner gordo comiendo tanto y sin moverte"

Con destreza saca la daga de entre sus ropas.

Notas de juego

Perdona, Equis, que no te había puesto de destinatario

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12/01/2010, 23:06
Rosch el Devorador.

En aquella ocasión las imágenes resultaron menos truculentas. Quizá el hecho de haberse "alimentado" hacía poco, o quizá porque el demonio era consiciente de la prisa, simplemente se contentó un sacrificio ritual.

Vlava se vio a sí misma colocando a ambos prisioneros en el suelo, atados y amordazados. Su cuerpo practicaba sendos cortes en los tendones de cada uno de ellos y acto seguido les liberaba los pies. Obviamente, ninguno de ellos pudo escapar corriendo, y poco a poco fueron desangrándose.

Cuando el charco de la carmesí sustancia fue bastante, la mujer dibujó un círculo y un pentáculo en su interior. Para cuando acabó, los dos sacrificados se hallaban justo en el centro del arcano dibujo. Fue entonces caudno les degolló, observando cómo la vida escapaba de ellos lentamente...

Vlava despertó de golpe. Seguía delante de los dos prisioneros, vivos, que esperaban que la mujer decidiera su destino...

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13/01/2010, 23:32
Vlava Szantovich.

Durius había dado cuenta de sus piernas, quebrandolas anteriormente con una maza, pero aun podía desangrarlos lentamente...

Tomo las muñecas de ambos cortando las cuerdas que las unían y les asestó un profundo corte a cada una de ellas

- Id despidiéndoos del mundo...dentro de poco seréis "libres"...

Al religioso, irónicamente, le practicó un nuevo corte largo y perpendicular al primero, haciendo una cruz latina en sus antebrazos, y provocando un sangrado más abundante y rápido.

La sangre iba bañando el suelo ya de por si oscurecido en la noche. Mojando sus dedos en la tibia esencia, fue dibujando el símbolo que le indicó Rosch, y para cuando estaba terminando la última punta de la estrella, ambos caían inconscientes en el círculo.

Vlava se acerca por sus espalda, y apoyando la rodilla en sus espinas dorsales, tira del cabello revelándoles el cuello y seccionándolo profundamente con la daga, para terminar de vaciarlos y permitir al fin que el Devorador tomase sus almas

- Rosch, como has dicho he cumplido. Siguiendo tus imágenes, tus fetiches, te hago entrega de estas dos almas, para que te alimenten y den fuerza. Regocijate porque uno de ellos era predicador de la palabra de tu Enemigo, y en vez de ver su cielo, ¡será prisionero en tu infierno!

Lame una de las caras de la daga y limpia la otra en su propia falda, sobre su muslo. Sonríe, satisfecha. al menos no se ha agitado tanto como en la mañana...no quería tener que montarse en el carro y comenzar un viaje jadeando y con el hambre de una bestia. Miró por unos instantes la escena y guardó de nuevo la daga, volviéndose a Durius.

- Ya está hecho, cuando queráis, mi querido Durius...

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14/01/2010, 12:37
SITUACION

- Dariu el Mensajero y el Hermano Daniel son sacrificados a Rosch el Devorador.

- El espíritu oscuro consume sus almas y se siente atiborrado. Le hubiera sentado mucho mejor devorar estas almas despacio, con al menos un día entre cada sacrificio, pero no hay tiempo para ello.

- Tras los sacrificios, el grupo encabezado por el Caballero Durius de Slobozia emprende la marcha hacia Bucarest.

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14/01/2010, 14:53
Hermano Daniel.

El destino fue completo.

 

Nada de lo que oyes es verdad, nada de lo que ves es verdad, nada de lo que hueles, de lo que tocas, de lo que sientes es verdad. Todo entra en un círculo de medias certezas del que no escapa nadie. Para mi, que el servicio al prójimo es mi día a día, el ser bondadoso es el mayor de los milagros. Yo, que predico la palabra de Dios tal como mis maeses me la enseñaron. Esa es mi verdad.

 

Pero no es la verdad. La verdad no es la de un Dios complaciente y adorado, en esta época de engaños y maldades, mi Dios está apartado, luciendo su falta de poderío contra estas personas que se regocijan del dolor de otros.

 

En esta época donde la juventud es decadente e indisciplinada, los jóvenes ya no escuchan los consejos de los viejos y donde se ignora la libertad del prójimo. El fin de los tiempos está cerca.

 

Yo, que ya no estoy en ninguna época.

Ni en ningún lugar.

Ahora me siento a gusto

Es hora de descansar.

No temo al susto.

He encontrado mi sitio.

 

Hosannah

 

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14/01/2010, 17:27
Dariu el Mensajero.

 

     -- Sali de mi pueblo queriendo vivir grandes aventuras y creo que he vivido una demasiado grande, no estoy triste pues aunque he muerto he aprovechado bien mi vida.

 

 

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14/01/2010, 17:31
Durius de Slobozia.

Con la luna como muda testigo de nuestra marcha, avanzamos hacia Bucarest. Mantenemos los caballos a buen paso, pero sin forzarlos para no agotarlos antes de tiempo. Debemos progresar lo máximo posible, en el menor tiempo.

Si lo que mi mentor me escribió fue cierto, toda nuestra tierra debe de ser un verdadero caos agitándose bajo el fuego magyar. A pesar de ello, me sigue pareciendo soprendente que el Voivoda haya puesto tierra de por medio, abandonando la ciudad de Bucarest. Siento que la ira despierta en mí. Un día antes, unas horas antes y Prato no hubiera muerto inútilmente. Porque tan solo así puede calificarse su muerte. Lo que fuera una misión ha perdido todo su sentido. Y con ella, nuestras acciones y las muertes sembradas por el camino.

¿Y cuál habrá de ser nuestro destino? Tras regresar a Bucarest, será necesario actuar con presteza. Planificar la defensa o la huída. Difícil decisión que, en última instancia, no me corresponderá. Tan solo espero que los caminos estén libres de gentes que solo entorpecerían nuestro avance. O de ladrones y bandidos.

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14/01/2010, 17:48
Vlava Szantovich.

Tras los sacrificios parten, abandonando el fuerte y los cadáveres en él. El viaje tenía pinta de ser todo lo divertido que Vlava se esperaba: sola en su carruaje con otras mujeres cuya conversación más interesante eran los nombres de los retoños que aun no habían tenido...conejas sin metas en la vida más que parir hasta que fuesen pasas...

Si pudiese al menos pasar algunas horas con Durius...

Suspiró aburrida, y se apoyó sobre el cristal del carruaje. Miró fuera, por si veía el del vampiro. Pensaba en mil cosas, en la batalla, en los sacrificios...en que ella no quería tener mil hijos...Menuda alegría se iba a llevar su padre cuando conociese que su hijo favorito había muerto...su primogénito...

No había visto la batalla, pero debía haber sido extraña. Aun apoyada en el cristal de la ventana, con la vista perdida en el infinito de la oscuridad nocturna, habló a sus adentros

- Rosch...creo que no te he preguntado antes...¿qué te ha pasado para que hayas tenido que poseer mi cuerpo?

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14/01/2010, 20:24
Rosch el Devorador.

La presencia del devorador era aún patente en el interior de la mujer. Peor aún, pues al saciar su voraz apetito no había hecho sino incitarle a pedir más. aunque deseaba tanto salir para hacerlo por sí mismo... fue entonces cuando la mujer intentó preguntarle a qué se debía su intrusión.

El demonio parpadeó. O lo hubiera hecho de tener párpados y de encontrarse físicamente en el plano material. Realmente no sabía porqué no había podido regresar a la Umbra, su plano natal. Y eso era muy preocupante.

Rosch a la Umbra quiso volver
para sus energías reponer.
Mas una fuerza extraña
trocó su intento en patraña.
Los planos cerrados están,
y Rosch necesitaba descansar.
Ahora comparte cuerpo de mujer
pues ya recuperado tampoco puede acceder...

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14/01/2010, 22:34
Vlava Szantovich.

Vlava se puso un poco rígida en su asiento, pero trató de disimular un poco

"¿Que no puedes volver a Umbra? Que extraño... ¿y tienes idea de qué podría estar impidiéndotelo?"

No es que le importara tenerlo dentro, aparte de las sensaciones de hambre que despertaba en ella no le molestaba, siempre y cuando se comportase como hasta ahora.

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18/01/2010, 00:00
SITUACION

- La Comitiva del Caballero Durius de Slobozia abandona la región y se dirige a Bucarest.