Partida Rol por web

Los Dhaeva de Transilvania.

TERRITORIO 3: Baja Mare.

Cargando editor
19/09/2008, 07:53
Director II

Notas de juego

Un par de apuntes: en cuanto a las tiradas serían 3 éxitos (el 1 anula uno de lo éxitos) pero tienes dos 10 así que tienes que volver a tirar dos veces a ver si sumas algún otro.
Se que estás editando el post todavía pero cuando acabes las partes en las que hablais a la gente tienes que hacerlas públicas para todo el mundo porque Sibiu y Fray Blois están allí.
Un saludo.

Cargando editor
19/09/2008, 12:13
Caballero Vladimir Dravescu

Notas de juego

No habia tirado el 10 por Darkmaste suele ignorar un poco esa regla. Al menos por lo que he visto... Tanto la del 1 como la de los 10. O al menos así lo hace en la de Aliens Conquest...

Cargando editor
19/09/2008, 12:21
Director II

Notas de juego

Si en Aliens usa otro sistema distinto, pero aquí si se tienen en cuenta...

Cargando editor
19/09/2008, 14:23
Fray Blois de Ruan.
Sólo para el director

El anciano Bernard entró en la estancia con pasos apresurados, visiblemente agitado.

- Hermano Blois, el caballero está hablando a la asamblea. Aún no se ha reunido toda la gente, pero aquellos que ya han llegado escuchan atentamente sus palabras. ¿Qué debemos hacer?

Blois estaba terminando de ajustar las correas de su pesada armadura. Se había demorado lo suficiente como para que no hubiera el más mínimo descuido en su imagen. Cada pieza debía ser mudo testigo de su presencia imponente. Sus palabras harían recordar al poblado todo el esfuerzo que había puesto en ayudarlos, pero su regio porte debía transmitirles confianza suficiente en que también podían contar con él para defender sus hogares.

- Tranquilo, amigo. Ese caballero nos está dando una mano, aunque aún no lo sabe. Está tratando de convencer al pueblo, explicando su posición y demostrando la conveniencia de escuchar sus palabras. En realidad, podría limitarse a disolver a los rebeldes en un mar de sangre. Y nadie movería un dedo. Incluso puede que le dieran un título o algo parecido, tal es la barbarie que gobierna este lugar.

- Sin embargo, ha decidido combatir en nuestro campo. Ha decidido aceptarnos como contendientes y enfrentarnos en el terreno de las palabras y los argumentos. Y eso nos da una oportunidad que, hasta ahora, nunca habíamos tenido. Tan solo ocúpate de que no se salga de control.

Bernard abandonó el salón y se dirigió a la asamblea. Una vez allí, comenzó a dar indicaciones a los demás monjes. Debían distribuirse entre la multitud, incitando a la multitud a apoyar ruidosamente las palabras de Fray Blois. No era la primera vez que se veían en una situación similar, y tenían alguna práctica en la cuestión. De hecho, era una de las razones por las cuales habían penetrado tanto en territorio hostil.

Su principal objetivo era acercarse a los grupos que prestaran menor atención al espectáculo y, mediante sus propios gritos, generar un clima de aceptación entre quienes los rodeaban. Esto se lograba tanto con una efusiva invitación a vociferar, como con intimidatorias miradas ante los menos demostrativos. De este modo, aquellos que no tuvieran una posición definida, se volcarían ante los deseos más masivos, tan solo por seguir la corriente o para no contradecir a la turba.

En cuanto a los incondicionales del fraile (que los había), no era necesario más que alguna palabra de aliento, para que cumplieran, inconcientemente, el mismo rol de los monjes.

El único problema estaba comprendido por los seguidores del Capataz Sibiu (que también los había). Tal vez no hubiera forma de torcer su voluntad, pues su postura era mucho más definida que la de los “neutrales”. Estos sujetos podían ignorar los impulsos de la turba, o incluso enfrentarse abiertamente con ella.

En tal caso, debía de procederse de dos maneras. Si estos hombres se encontraban aislados, los monjes debían rodearlos e imponer sus vítores, simplemente gritando más fuerte. Si, por el contrario, los seguidores de Sibiu se agrupaban en algún sector, debían ser ignorados, de tal manera que los esfuerzos de los monjes se concentraran fuertemente en los “indecisos”. Si todo salía bien, pronto el grupo “disidente” se encontraría en minoría y se vería superado por la masa irracional que los rodeaba.

Fray Blois había discutido en reiteradas ocasiones está táctica con su anciano consejero. El fraile no terminaba de aceptarla. Sin embargo, debía reconocer que había probado una y otra vez su eficacia y, como decía siempre Bernard al terminar sus discusiones, “El Señor solo ayuda a quienes están dispuestos a ayudarse a si mismos…”

 

Notas de juego

Ignoro si debo hacer una tirada por todo esto. En cualquier caso, en breve pondré el post donde Blois da su discurso (tirando Carisma + Liderazgo) y habrá posibilidad de corregir cualquiera aclaración.

Cargando editor
19/09/2008, 15:27
Fray Blois de Ruan.

Casi en la conclusión del discurso del caballero, un murmullo comenzó a elevarse entre el auditorio. De hecho, se hizo difícil para los que estaban más alejados escuchar las palabras finales de Vladimir. Un sujeto de porte más que respetable había llegado al lugar y atravesaba la multitud, que se apartaba de su paso como las aguas del Mar Rojo lo habían hecho en un remoto pasado.

El extraño vestía una brillante armadura de caballero, impoluta y radiante ante la escasa luz de las antorchas. Consistía en una pesada cota de mallas de gran calidad, coronada por un macizo yelmo, también de alta calidad. Ambas manos se encontraban cubiertas por recios guanteletes de hierro, y una de ellas descansaba tranquila en el pomo de una poderosa espada ancha, la cual estaba firmemente sujeta a un trabajado cinturón de cuero. Una simple túnica blanca cubría el frente y la espalda del extraño, dejando parcialmente visible la armadura de sus flancos. La túnica tenía grabada una sencilla cruz de color negro, que dominaba todo el pecho del sujeto. Tres monjes con sus picas servían de escolta al augusto caballero, que en la oscura noche de luna parecía irradiar un aura de imponente beatitud.

El extraño se acercó con paso seguro al escenario que el noble Vladimir había improvisado. Hizo una ligera pero visible reverencia y se acomodó a escasos metros al lado suyo. Luego, se giró en dirección a la multitud y se quitó el yelmo con cierto dramatismo. Hasta el momento, los pobladores no habían tenido oportunidad de conocer la veta guerrera del fraile, y este tenía pensado aprovechar al máximo esa “nueva primera impresión”. Se tomó su tiempo para culminar el proceso, asegurándose de que todos se sintieran afectados por la teatralidad del momento. Llevaba años predicando, y conocía muy bien el valor de las imágenes y de las sensaciones. Finalmente, habló con voz profunda y pausada. No era el tipo de voz que utilizaba en sus sermones regulares. Era la voz de un noble. De un general.

Cargando editor
19/09/2008, 15:56
Fray Blois de Ruan.

- Hermanos míos. Agradezcamos la presencia del noble caballero Dravescu en esta, nuestra reunión. Es un claro signo de que nuestro camino es el correcto. Cuando iniciamos nuestras reuniones diarias, hace ya mucho tiempo, pocos eran los que se acercaban a interiorizarse por los asuntos de sus semejantes. Con el tiempo, hemos logrado que más gente se acerque a las “Asambleas”, a ofrecer su apoyo a sus hermanos. Hoy, al fin contamos con la presencia de alguien con sangre noble en sus venas. Siento una profunda satisfacción, pues nuestro trabajo no ha sido en vano.- varios gritos de júbilo estallaron entre la multitud. No eran demasiados, pero estaban claramente dispersos entre los concurrentes.

- Sin embargo, la premura con que ha actuado el caballero Dravescu tal vez lo haya hecho pecar de apresurado. Pero no debemos amonestarlo. Evidentemente, tantas eran sus ganas de dirigirse a nosotros que ha olvidado preguntar por las costumbres que rigen nuestra Asamblea. Bastante esfuerzo habría ahorrado, si se hubiera detenido al menos un instante para conocer el motivo de esta fraternal reunión. En muy poco tiempo, cualquiera de los presentes le podría haber explicado que no estamos aquí reunidos para poner en entredicho la nobleza del honorable Cnezi Tiberiu Bratovich, de quién conocemos muchas de sus hazañas. – un silencio expectante acompañaba cada frase.

La voz de fraile se tornaba cada vez más imperiosa, trasladando su fervor a los presentes. Evidentemente era un tema que lo enardecía.

- Y menos aún podríamos albergar en nuestros corazones la idea de cuestionar al Venerado Patriarca, o a su Iglesia. Solo pensar algo semejante nos condenaría a todos al infierno.- sus ojos despedían chispazos oscuros y un apagado murmullo recorrió al público.- No, caballero Dravescu. No estamos aquí para enfrentarnos entre cristianos. Todos saben que soy un enviado de la Santa Iglesia de Roma, nunca lo he ocultado. Y también son testigos de que, desde mi llegada, nunca he cuestionado las creencias de los que siguen la doctrina ortodoxa.

- Tal vez, en los últimos tiempos, el Patriarca de la Iglesia Ortodoxa ha estado demasiado atareado y no ha podido prestarle a Baja Mare el tiempo y el esfuerzo que requiere. Por eso el Señor ha guiado mis pasos a esta región olvidada. Alguien debía acercar la palabra de Dios a estos desposeídos. Sin importar donde haya transcurrido su Ordenación. Porque la misión de los cristianos es clara, y es una sola. Combatir al Maligno en todas sus formas!!!!- un estallido de la multitud coronó sus palabras.

- No traslades aquí divisiones que no son nuestras, sino de orondos señores que viven cómodos en sus palacios!!!! No intentes enfrentar a los cristianos!!!! Aquellos que trabajamos duramente día a día para conseguir el alimento de nuestras familias sabemos muy bien quién es el enemigo!!!! Y, no importa la cruz que lleve, EL ENEMIGO NUNCA SERÁ CRISTO!!!!! – algunos sectores estaban visiblemente enfervorizados, gritando a viva voz y gesticulando vigorosamente.

Cargando editor
19/09/2008, 15:59
Fray Blois de Ruan.
Sólo para el director
- Tiradas (2)

Tirada: 5d10
Motivo: Discurso
Resultados: 2, 10, 7, 8, 2

Tirada: 1d10
Motivo: Repetición de 10
Resultado: 8

Notas de juego

No se tengo que hacer una tirada por post o una general. En cualquier caso, aca va la primera.

Carisma: 4 / Liderazgo: 2

Uso 1 Punto de Fuerza de Voluntad.

También quisiera usar "Aura Sagrada", aunque no se si es aplicable (y tampoco conozco bien las reglas)

Cargando editor
19/09/2008, 17:04
Capataz Sibiu. - Gobernador de Baja Mare.

La gente parece exaltada ante las palabras del Fray, pero no es algo que me deba preocupar. Sus palabras aún resuenan en la sala y la gente se encuentra dividida. Está claro que el Caballero Vladimir me apoya, lo ha dejado bien claro con sus palabras, pero ahora es mi turno.

Sé que durante todo este tiempo, la gente me ha visto como un tirano, una persona que sólo se preocupa por su seguridad y no por la de mi pueblo. Pero la charla con el Knezi de Satu Mare me ha abierto los ojos. Ya no estamos bajo el férreo reinado de su padre, ya no debo preocuparme por amanecer encerrado en las mazmorras por que su tributo no ha sido debidamente entregado.

Me adelanto en el escenario mientras me aclaro la garganta. Muchos se callan al verme sobre las tablas, muchos otros abuchean mi presencia. Levanto las manos pidiendo silencio y espero unos segundos para hablar.

- Habitantes de Baja Mare, no estamos aquí reunidos para poner en tela de juicio las creencias de las personas. Nadie será perseguido aquí por seguir la fe cristiana o la ortodoxa. No… -, digo mientras hago una pequeña pausa.

- No estamos aquí para hablar de eso, estamos aquí reunidos para ver quién queréis que sea vuestro líder… este cristiano con sus hombres armados que tomaron Baja Mare mediante la coacción militar o yo, vuestro antiguo gobernador. –

Algunas de las personas comienzan a gritar el nombre del Fray, seguramente partidarios del cristiano, mientras que otras, se quedan calladas, esperando mis palabras.

- Sé que he hecho las cosas mal, sé que mi gobierno no ha sido el mejor. Pero voy a decir aquí y ahora, delante de este hombre de dios, que me comprometo a mejorar. Ya no estamos bajo el tiránico gobierno del padre de nuestro Knezi, ya no más, ahora Tiberiu es el gobernador y ha sido él el que me puso al mando para construir una nueva Baja Mare. –

La gente continúa inquieta ante mis palabras, pero decido guardar lo mejor para el final. Todo ha cambiado, ahora empieza una nueva era, la era del Knezi Tiberiu Bratovich.

- Prometo, ante todos, destinar la mitad de mis ingresos a mejorar Baja Mare. ¿Dónde están los ingresos de este año? Preguntadle al Fray Blois, él es el que lo tiene. Baja Mare está ahora bajo la protección del Knezi de Satu Mare, el Caballero Vladimir, aquí presente, me apoya con sus palabras por que el mismísimo Tiberiu me ha otorgado su confianza. –

El público parece ahora estar indeciso. Muchos están callados, muchos de los que antes coreaban el nombre del cristiano, ahora escuchan atentamente mis palabras.

- Por eso, aquí ante todos, me comprometo a mejorar para mejorar Baja Mare. Elegidme y a partir de ahora todo cambiará. Bajo el ala protectora de Tiberiu Bratovich, Baja Mare dejará de ser la aldea que es ahora, para convertirse en un lugar digno de admiración. -

Cargando editor
19/09/2008, 17:05
Capataz Sibiu. - Gobernador de Baja Mare.
Sólo para el director

Notas de juego

FV

5 Dados.

Cargando editor
19/09/2008, 17:06
Capataz Sibiu. - Gobernador de Baja Mare.
Sólo para el director
- Tiradas (3)

Tirada: 5d10
Motivo: CAR + LID
Dificultad: 6+
Resultados: 2, 10, 10, 2, 8
Exitos: 3

Tirada: 2d10
Motivo: CAR + LID ( Repito 2x10)
Dificultad: 6+
Resultados: 10, 6
Exitos: 2

Tirada: 1d10
Motivo: CAR + LID ( Repito 1x10)
Dificultad: 6+
Resultado: 7 (Éxito)

Notas de juego

6 Éxitos

1 FV

Total : 7 Éxitos.

Cargando editor
19/09/2008, 19:58
Fray Blois de Ruan.

El monje se tomó su tiempo, calibrando las respuestas del auditorio. Antes de que el ruido disminuyese su intensidad, elevó su brazo, en un gesto que transmitía tranquilidad. Luego, comenzó a internarse entre el público, caminando con paso pausado y deteniéndose cada tanto, para mirar a los ojos a los hombres allí reunidos o para palmear sus hombros. Su estatura era imponente, superando la media de los pobladores. O al menos, así lo parecía en la fantasmal luz de la noche, enfundado como estaba en su brillante armadura. Sin embargo, cuando habló, su voz había adquirido un tono más familiar, menos autoritario. Ahora, caminando entre sus hermanos, no hablaba como un líder, hablaba como un compañero, un igual.

- Parece que al fin te has dignado a dirigirte a tus “súbditos”, ohh gran “Gobernador Sibiu” – había ironía en su tono y, tal vez, incluso desprecio. Prácticamente escupió las últimas palabras. – Al fin has dejado de ocultarte detrás de otros, utilizándolos para que justifiquen tus mezquinas acciones. Al fin podrás enfrentar al pueblo que traicionaste !!!- sus últimas palabras fueron dirigidas a un pequeño grupo de hombres, a los cuales traspasó con la mirada.

- En cualquier caso, caballero Dravescu, admiro tu tenacidad y tu honradez, pues defiendes con pasión lo que consideras justo. Pero tus certeras palabras no son necesarias aquí. Nadie cuestiona a tu Cnezi, ni a tu Iglesia. Ni siquiera tu cargo está en entredicho. Nadie puede poner objeciones a él. Si has sido consignado por tu Señor como Defensor del Pueblo, pues adelante…defiéndelo, como todos los presentes estamos dispuestos a hacerlo. Defiéndelo con el mismo valor con el que defiendes a este farsante. – hizo una pausa, acompañada de gritos y bravuconadas de algunos sectores.

- El honorable conde Bratovich, no debe sentirse preocupado por la presencia de la Iglesia Católica en estas tierras. Hemos venido a velar por las almas de estas gentes. Solo aquellos que renieguen de Cristo pueden albergar temor ante ello.- otra pausa, esta vez seguida de un murmullo indeterminable.

- Aunque ninguno de los presentes ha tenido el gusto de conocerlo personalmente – aquí hizo una pausa, para que todos los pobladores comprendieran el verdadero significado que encerraban esas palabras (nunca tuvieron noticias de que fuera su señor) - el caballero que ha enviado en su representación demuestra que su dignidad y sabiduría están fuera de toda duda. No necesito decir que tales virtudes no abundan por aquí. – otra vez, su caminar lo había depositado en medio de otro grupo de hombres, a los cuales parecía amonestar severamente con su mirada.

Cargando editor
19/09/2008, 20:01
Fray Blois de Ruan.
Sólo para el director

Notas de juego

Lo que pretende el fraile es intimidar o convencer de alguna forma a los distintos nucleos de discenso que sus hermanos no han podido inclinar en su favor. Por eso se interna en el publico, dirigiendose a algunos sujetos en particular. No se si debo tirar algo y, en cualquier caso, quisiera saber si Aura Sagrada tiene alguna influencia en todo ello.

Cargando editor
19/09/2008, 20:04
Fray Blois de Ruan.

- Sin embargo, déjenme preguntar ¿cuál es la ayuda que brinda a Baja Mare? ¿El regreso de Sibiu, tal vez? Aquel que huyó cuando esta gente más lo necesitaba. Aquel que abandonó al poblado en medio del desgobierno y la rapiña. Hermanos, recordémosles a estos recién llegados como era la situación de Baja Mare cuando el Señor tuvo la gracia de guiar los pasos de esta compañía hasta aquí.

- No había un solo hombre capaz de empuñar un arma en defensa de sus semejantes. Estaban a merced de los hombres y de las bestias. Sin ninguna protección. No había organización, ni siquiera la más mínima autoridad civil o religiosa. Estos hombres no habían oído la palabra de Dios en años. Algunos puede que jamás en su vida!!!! Vivían y morían alejados de su gracia. Además, casi un cuarto de la población había abandonado la aldea, movilizados por el terror y el hambre. Todos los que hemos pasado por estas penurias sabemos lo difícil que fue sobrevivir a ellas. Solo a un ignorante, o aun perverso se le ocurriría pensar en el dinero. Baja Mare luchó contra su aniquilación. Simple y claro. El dinero era un lujo que poco nos importaba. Mientras Sibiu se atiborraba de carne y de alcohol en los banquetes de palacio, nosotros apenas podíamos subsistir.- se llamó a silencio, dando tiempo a todos para recordar aquellos tiempos.

- Ahora, hay un grupo de personas que están dispuestos a dar su vida por sus compañeros. Dios ha vuelto a hacerse presente en la zona, ignorada por otras corporaciones religiosas, sin duda ocupadas en asuntos más importantes. Un sentimiento de esperanza renueva los corazones.

El fraile volvió a encaminar sus pasos hacia Sibiu, incinerándolo con la mirada. Sin exteriorizar una actitud amenazante, igual hizo gala de su mayor plenitud física.

- En cuanto al dinero que tanto parece importarte, te alegrará saber que permanece a la espera de ser utilizado para cubrir las necesidades de todos. Cada moneda está en su sitio, hasta la última de ellas. Estamos en una nueva era, es verdad. Ya no se utilizan los recursos del pueblo en caprichos personales y mezquindades. Ahora, el pueblo mismo es el que decide como administrarlo, según sus necesidades. Para eso son convocadas estas Asambleas. Para decidir sobre “la totalidad de los impuestos”. Necio!!!! Crees que yo o mis hermanos buscamos riquezas. Todos son testigos de que nos mantenemos con lo mínimo. ¿Te crees magnánimo porque otorgas graciosamente “la mitad de tus ingresos”? – el fraile había vuelto a su vozarrón casi militar. Se notaba claramente ofendido y, peor, estaba indignado. Su dedo índice apuntaba al Capataz, y seguramente, el resto de mano estaba blanca por la tensión.

- ¿¿¿¡¡¡¡ Y encima me hablas de “tomar Baja Mare mediante la coacción militar”!!!!????

- ¿¿¿¡¡¡¡ Tú preguntas por los “impuestos” !!!!????

- ¿Dices que has hecho las cosas mal? SI FUERA POR TI, NO HABRIA BAJA MARE !!!!!!– el fraile estalló en una furia desencajada. Sus seguidores estaban al borde del éxtasis fanático.

- Abandonaste Baja Mare a su suerte. En busca de una beneficiosa “unión que permitiría un mejor gobierno para todos”, según tus propias palabras. Puesto que has pasado tanto tiempo en el lujo de la corte del conde, es evidente que esta alianza ha traído grandes beneficios para vos, “Gobernador Sibiu”. Sin embargo, ¿qué les ha reportado a las gentes de Baja Mare?

- Ohh, si, claro. Has traído unos cuantos papeles y muchas promesas prepotentes. Y un ejército muy valeroso… aunque de un solo hombre!!! ¿Con eso piensas proteger a esta comunidad? Repites hasta el hartazgo las palabras “confianza” y “apoyo”. Dime una cosa ¿has traído dinero acaso? ¿Hombres? ¿Comida, tal vez? ¡¡Nada de eso!!! Ni siquiera un mísero caballo de tiro. Se cansan de decir que “no estamos solos” pero ¿qué haremos cuando una compañía de mercenarios entre a la región? Avisaremos al conde Bratovich, por supuesto. Y esperemos que los bandidos se tomen su tiempo, pues ¡¡¡ sabemos muy bien lo que tarda en llegar la ayuda de Bratovich!!!! Al menos cuando le es encomendada a Sibiu. – hacía tiempo que el fraile había perdido toda compostura y estaba hecho una furia.

- Has disfrutado de las sedas de palacio y de sus manjares hasta aburrirte, mientras esta pobre gente moría de hambre o por la peste. Y ahora pretendes volver como el “salvador del pueblo”. Un pueblo que nunca te pidió que lo salves y que incluso casi condenas mientras tratabas de dirigirlo. Por otro lado, ¿quién te otorgó poder para semejante misión? ¿Eres el titular de estas tierras, acaso? ¿Eres el Voivoda de Trasilvania? ¿Fuiste comisionado por el pueblo para esa tarea?

- Estas tierras nunca estuvieron bajo la jurisdicción del conde. Pertenecen al voivoda y estoy seguro que no tendrá inconvenientes en dejarlas al cuidado de aquellos que si pueden protegerlas. En cuanto a ti Sibiu, nunca tuviste ni los títulos ni el poder para someter estas tierras. Si el conde Bratovich pretende algo de ellas, gustoso podemos discutirlo entre todos.- hizo un ademán, incorporando a la masa de campesinos en el “todos”.

- Pero no dejaré que queden en manos de esta lacra que vendió a sus hermanos por unos momentos de placer. – luego de esto, el monje se llamó a silencio, aguardando la reacción de los pobladores.

Cargando editor
20/09/2008, 02:52
Capataz Sibiu. - Gobernador de Baja Mare.

Me vuelvo a acercar al borde del escenario, mientras observo como el Fray intenta convencer a la gente. Muchos de ellos siguen apoyándolo, pero aún hay pobladores que me aceptan como su gobernador.

Mis palabras han llegado a muchos, y estos me miran expectantes cuando me dispongo a hablar.

- Es verdad, Padre… tiene razón. He convertido a Baja Mare en una aldea sin futuro… pero como ya dije, esto cambiará a partir de ahora. Se acabó la tiranía, se acabo vivir a costa de los demás. Ya no temo por mi vida, el tirano Bratovich ya no está entre nosotros… -

La gente parece estremecerse cuando nombro al difunto padre de nuestro nuevo Knezi.

- Escucháis ahora las palabras de una persona desesperada. Primero, alabando al Knezi Tiberiu, para después, dejar su figura por los suelos. No entiendo como puede hablar así de mi señor, de nuestro señor. Habéis conocido a su hermana, habéis conocido a uno de sus Caballeros… Sabéis que el Knezi es un hombre honorable… -

El publico parece entusiasmado con mi relato por lo cual mi voz se torna más firme y la puede escuchar hasta el último de los hombres allí presentes.

- El mismo me ha dado el título de gobernador, y me ha enviado aquí para hacer cumplir su mandato. Baja Mare no será la de antes, el Caballero Vladimir se ocupará de que las palabras del Knezi seán cumplidas… pero la pregunta es sencilla… -

Hago una pausa de unos segundos antes de continuar.

- ¿Queréis ver como Baja Mare resurge de las cenizas y se convierte en un lugar próspero para todos? ¿O queréis vivir bajo el mandato de una persona que no sabe lo que es vivir en el norte de Transilvania? Allí esta esa persona, ataviada con una armadura y con sus soldados… -

Digo mientras señalo con el dedo al Fray Blois que se encuentra entre la multitud.

- Es irónico que aparezca así vestido una persona cuyos “mandamientos” no le permiten matar. Yo no he venido aquí a hablar demostrando cuan fuerte soy, he venido a demostrar que puedo convertir estas tierras en un lugar increíble. Yo, junto con el Knezi Tiberiu, vamos ha hacer que Baja Mare pase a la historia. -

Cargando editor
20/09/2008, 03:12
Director I

Notas de juego

No era aquí la tirada, era en otro territorio. Mea Culpa.

Cargando editor
20/09/2008, 04:57
Black_Sirius
Sólo para el director

Notas de juego

Hay que buscar un jugador para Sibiu, ya que Ted sigue sin constestar ni postear, aunque se conecte a Umbría.

Llevaré a Sibiu mientras tanto. Tu dime si necesitas que lo lleve de alguna u otra manera.

Sigo actualizando Territorios.

Con respecto a Janos, como él ya empezó a viajar antes de terminar la estación, lo he movido a Bucarest, así tenemos más pj juntos en ese territorio y es más fácil rolear.

Te mando un MP con novedades.

Cargando editor
21/09/2008, 18:33
SITUACION

Después de todas las disertaciones el pueblo sopesa los pros y los contras de cada uno de los candidatos y sus motivos y acciones en Baja Mare.
Pero la última intervención de Sibiu parece que decanta la balanza definitivamente, aunque todavía hay un pequeño grupo reacio a la vuelta de su antiguo capataz la mayoría empiezan a aclamalo. Incluso un grupo de jóvenes lo coge en volandas y lo lanza por los aires repetidas veces.

Cargando editor
21/09/2008, 18:45
Capataz Sibiu. - Gobernador de Baja Mare.

Cuando la gente me alza en volandas me siento el hombre más feliz del mundo. No puedo dejar de mirar de reojo la cara de amargura del Fray Blois ante la reacción de todo el pueblo de Baja Mare. Tras unos minutos con la gente, me vuelven a depositar en el escenario y levanto las manos pidiendo calma y silencio.

- Gente de Baja Mare... -, digo con un tono cordial pero fuerte en la voz para que todos me escuchen. - Este es un nuevo comienzo para la aldea. Gracias a vuestro apoyo podremos salir adelante bajo mi mandato. Aquí, el Caballero Vladimir, enviado de nuestro Knezi, me ha apoyado y juntos hemos podido lograr que casi todos nos apoyen. -
Cuando termino la frase, paso mi mirada por el Fray y sus hombres, que no están de acuerdo con lo que el pueblo ha decidido, pero su desición es soberana y ni siquiera él con diplomacia o por la fuerza podrá destruir lo que acabo de lograr. Mi mano señala a Blois, mientras todo el público se gira para mirarlo seriamente.

- Pero no me olvido, que aún hay gente, poca, pero gente de Baja Mare que quiere ver al Fray Blois en este lugar. No me olvido y como he prometido cambiar mi forma de actuar desde ahora, propongo esto... -, continúo mientras miro al Fray y le pido que suba al escenario junto a mí. - Este es un buen hombre, un hombre de Dios sin duda, que me ha demostrado como se debe actuar. Y por eso, te quiero a mi lado, no bajo mis órdenes, sino como un consejero. Seguirás teniendo la libertad de acción de siempre. Me propongo otorgarte unas tierras en las cuales podrás edificar tu iglesia y continuar con tu labor cristiana. Podrás exigir el diezmo a todos los que se unan a tu iglesia, y no pienso oponerme. Además, pretendo enviar un comunicado al Knezi, para que te permita establecer una iglesia en cada territorio de su jurisdicción para que continúes predicando la palabra de Dios. -

EL público parece entusiasmado con la propuesta. Aunque no sé si lo hace por que realmente le interesa la religión cristiana o simplemente, por que si el Fray se queda con nosotros, sus tropas velarán por la seguridad de Baja Mare.

Cargando editor
21/09/2008, 20:40
Fray Blois de Ruan.

Blois observó a Sibiu con mirada tranquila y sosegada. Sus ojos ya no mostraban la furia demencial que parecía haberlo dominado en los últimos momentos, y solo unas ascuas candentes quedaban, allí donde el fuego lo había dominado todo. Se acercó con andar pausado pero regio y, cuando estuvo a escasa distancia, estrechó la mano del antiguo capataz con firmeza. No apartó ni un segundo su mirada de él y, por un instante, pareció que una leve sonrisa asomaba a su rostro. Después, se dirigió a los presentes.

- Pueblo de Baja Mare… su antiguo capataz, Sibiu, ha hablado. Y todos hemos escuchado sus promesas. Todo el pueblo ha sido testigo de los compromisos que ha aceptado. Tanto hacia la Iglesia que represento, como hacia todos ustedes, aquí reunidos. Ahora, cada uno de los pobladores de Baja Mare es conciente de las responsabilidades de aquellos que deben guiarlos. Ya nunca más deberán someterse ante el yugo del opresor. Pues hoy, aquí, se ha sellado un pacto. Y aquellos que pretendan gobernar deberán respetarlo, pues incumplir el pacto implicaría incumplir el mandato. Y ningún gobernante puede regir sin el mandato de su pueblo. Pues no solo deberá responder ante ese pueblo, sino ante Nuestro Señor Todopoderoso.

- Yo, por mi parte, en representación de mis hermanos y de mi Iglesia, también quiero manifestar mi compromiso. Pues me comprometo a ayudar a esta comunidad, aunque no me lo haya pedido. Me comprometo a trabajar codo a codo con sus habitantes, a esforzarme y a luchar por ellos, si es necesario. A derramar sangre, sudor y lágrimas por cada uno de los pobladores de esta comarca.

- No puedo decir que estoy feliz por el resultado de esta reunión. Pero estoy tranquilo. Pues se ha cumplido la voluntad del pueblo. Hoy, los habitantes de Baja Mare han dado su veredicto. Que así sea. VOX POPULI, VOX DEI !!!!!!

 

Cargando editor
02/10/2008, 03:51
Capataz Sibiu. - Gobernador de Baja Mare.

- Espero que todo esto nos logre unir... -, le digo estrechándole la mano al Fray. - Creo que juntos podemos hacer muchas cosas por Baja Mare. -

- Vamos a vuestra iglesia, debemos comenzar a planificar como sacar a la aldea de este pozo. -