Acciones estratégicas:
Abad - entrenar al hermano Daniel
reclutar lugarteniente: hermano Daniel
mejorar trasfondo lugartenientes
Hermano Ciferinos - contraespionaje
Padre Arnaldus - entrenar al hermano Daniel, prepararse para el viaje a Slobozia
Fray Domenico - espionaje en Slobozia
Padre Prior Severus - misión en Suceava
Me levanto de mi pequeño escritorio donde estaba leyendo unos pasajes de la biblia ante la inesperada visita de aquel mozo. No entiendo mucho de lo que me dice, entre la sorpresa y la falta de claridad de sus palabras. Tranquilamente le interrogo sobre el motivo de su visita y poco a poco me explica su situación. Al parecer tengo que acompañarle a Slobozia con una carta del Abad.
-Espera aquí en mi aposento mientras voy a hablar con el Abad, en cuanto regrese partiré contigo si es la voluntad de mi superior.
Salgo de mi habitación para hablar con el Abad y dejo al campesino un poco confundido en mi cuarto.
-Señor Abad, por el campesino que me ha enviado entendí que quería verme, aquí estoy a su disposición.
Arnaldus será pnjtizado hasta que su jugador pueda volver a postear, he hablado con él al respecto y ahora mismo no puede hacerlo. Hablaré con DarkMaste porque en estos casos quizá pueda llevarlo otro compañero de facción mientras o sino lo llevaré yo. Lo de las acciones estratégicas de los pnjs también tengo que comentarlo porque durante su pnjtización no pueden realizar acciones.
Un saludo.
RESULTADOS DE PRIMAVERA: MONASTERIO EN LA SOMBRA:
- Abad Lucius Sempronius:
1) Adiestra al Hermano Daniel (suponemos que en Academicismo).
2) Recluta al Hermano Daniel como Criado (para poder reclutarlo como Lugarteniente es obligatorio que primero tenga jugador, un Criado es similar, pero sin Acciones Estratégicas, excepto lo más básico).
3) Recluta como Lugarteniente a Fray Domenico de Sajonia (si no lo había hecho ya, y si el jugador de éste no tiene inconveniente).
- Hermano Ciferinos:
* Contraespionaje: Si supera una tirada de Percepción + Alerta a dificultad 6 puede entrenar la habilidad de Alerta, de 3 a 4
- Padre Arnaldus: Se prepara para el viaje a Slobozia.
- Fray Domenico de Sajonia: Misión en Slobozia.
- Padre Prior Severus: Misión en Suceava.
-Hermano Daniel (Criado PNJ): Salió de viaje con el matón para cumplir su misión en la Tirsa de Valcea.
AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y UNO.
ESTACION DE VERANO.
MESES DE JULIO, AGOSTO Y SEPTIEMBRE.
Tirada: 7d10
Motivo: PER+Alerta
Dificultad: 6+
Resultados: 1, 6, 2, 7, 6, 8, 7
Exitos: 5
4 Exitos.
SUCESOS DE VERANO: MONASTERIO DE BRAILA:
- Una noche de verano llega al Monasterio un monje inquietante, cubierto con un hábito negro con capucha. Desea ver al Abad.
Tirada: 1d100
Motivo: Sucesos de Verano
Resultado: 94
SUCESOS DE VERANO: MONASTERIO DE BRAILA:
- Una noche de verano llega al Monasterio un monje inquietante, cubierto con un hábito negro con capucha. Desea ver al Abad.
Cuando ve al Hermano Ciferinos, el extraño habla con una voz un tanto cavernosa:
- "Buenas noches, Hermano. Deseo ver al Abad cuanto antes. Hacedle saber que el Hermano Silas está aquí. Silas... de Capadocia." -
Tras hacer un par de reverencias, hace uso de su falta de tacto y examina al extraño de arriba abajo sin importarle que este le vea.
Seguidme pues... Frater.
Conduce al monje hasta la capilla y despues sigue solo hasta el despacho del Abad. Golpea varias veces en la puerta y espera a que le deje pasar.
Pater,ha llegado un monje que quiere verle... Dice que es el hermano Silas de Capadocia.
Hacedle pasar. Responde el Abad en voz baja tras hacer entrar a Ciferinos, siendo obedecido de inmediato.
Una vez el recién llegado entra en el despacho el anciano Abad despide a su fiel hermano con un gesto indicando que, como al parecer es habitual, deje solo al Padre con la visita. El gesto es inmediatamente entendido por el jorobado y los otros dos quedan solos en el despacho.
Saludos hermano Silas de Capadocia, bienvenido a mi monasterio saliendo de detrás de la mesa el anciano monje se acerca al desconocido bendiciéndole dibujando la señal de la cruz con un gesto de su delgada mano yo te bendigo en nombre del Padre, et Filio, et Spiritui Sancto.
¿en qué os puedo ayudar?
Como es habitual, el Abad espera del Hermano Ciferinos su comportamiento típico, que aunque parezca irse espere muy cerca de la puerta del despacho, incluso escuchando la conversación a través de la madera como hace cuando no puede controlar su curiosidad. El Abad Lucius sabe de esto y cuenta con ello.
- "Buenas noches, Abad. Debo advertíos que lo sé todo sobre vos. He hablado con algunos monjes que murieron aquí hace más de quinientos años, durante la invasión de los hunos.
No, no os alarméis. Vengo en son de paz. Tan sólo necesito refugio, información y algo de sangre de vuestros monjes." -
Bien... ¿y quién sois vos? el Abad deja caer la mano que acaba de trazar la señal de la cruz cambiando totalmente su expresión, sonríe ligeramente y su mirada parece tambien mucho más interesada en el desconocido, pero parece también más relajado tras la revelación.
¿Por qué debería recibir bien a un extraño que exige en lugar de pedir? volviendo detrás de su mesa el anciano Abad espera respuesta con las manos sobre la madera.
- "Ambos somos Cainitas forasteros en tierra de Demonios Tzimisce y yo tan sólo os pido algo de hospitalidad. Mi Clan tuvo en tiempos un enclave en estas tierras, pero perdimos todo contacto y me gustaría averiguar qué sucedió. ¿Qué podéis contarme sobre este país? " -
El Abad parece algo más satisfecho con las últimas palabras del recien llegado. Asiente lentamente antes de empezar a hablar pausadamente.
Si no teneis sangre Tzimisce estais tan fuera de lugar aqui como yo. Por lo que sé esa casta mantiene su hegemonía aqui desde hace una eternidad, el principe de Transilvania es un chiquillo de ese clan... aunque hay otros monstruos más preocupantes. Si buscais al responsable de algo en estas tierras en los últimos siglos yo apostaría por el Conde Florescu...
un expresivo silencio sigue a la mención de este nombre
...es el Demonio con más poder y el más vil de cuantos hay en este pais. Solía habitar en Suceava.
cambiando de tema con una sacudida de cabeza el Abad continúa:
Los Capadocios también tienen bastante presencia aqui pero ya sabeis, esto es Transilvania. Garous, seres feericos, hechiceros... aqui incluso los monstruos temen lo que se pueda ocultar en los rincones oscuros.
y vos... ¿de qué clan sois? ¿cuál es vuestra historia?
- "Creí que ya lo habíais supuesto. Soy un enviado del Clan Capadocio. Deseo averiguar lo sucedido a mis hermanos, pues hace años que no se han recibido misivas suyas.
Es preocupante lo que decís sobre ese Demonio de Suceava. Seguramente merezca la pena investigar más sobre él." -
Mientras la conversacion tenia lugar el hermano Ciferinos permanecia en silencio,atento,por si su mentor fuese a necesitar de su ayuda.
Envié a un hermano a averiguar más pero no ha vuelto aún, temo lo peor pues no era más que un mortal viajando en estas peligrosas tierras. Si solo estais aqui de paso... ¿por qué no investigais más y me haceis llegar vuestras averiguaciones? compartiendo nuestra información ambos podemos beneficiaros ya que parecemos tener mucho en común... y sería un pago más que justo por mi hospitalidad.
El Abad mira hacia la puerta cerrada un instante, a diferencia del invitado él sabe que su conversación muy probablemente no esté siendo tan privada. Posiblemente el pobre Ciferinos esté cuando menos preocupado por algunas de las revelaciones que se están haciendo. Después tendrá que arreglar eso, tomar nota mental de este hecho no le entretiene más de un segundo y toda su atención vuelve al misterioso monje esperando una respuesta.
¿qué decís?
- "Ambos somos, por así decirlo, forasteros en tierra extraña. Los Demonios Tzimisce con gusto nos destruirían si nos descubrieran en lo que ellos consideran su dominio sagrado, el país de Transilvania. En estas circunstancias, una alianza entre nosotros es lo más natural.
Si os parece bien, mantendremos una correspondencia y os informaré de cuanto averigüe sobre los Tzimisce y la fuerza de que disponen. Vos a cambio ofreceréis refugio seguro a los mensajeros y agentes de mi Clan que estén de paso." -
Así se hará, pero antes de ultimar los detalles debeis descansar. Me encargaré de que seais atendido, confío os quedareis al menos una noche más.
El Abad se levanta de su silla ruidosamente, tal vez para dar tiempo al Hermano Ciferinos de alejarse de la puerta. Disculpad... dice al monje cuando ya tiene el pomo de la puerta en su mano, y tras eso la abre buscando con la mirada al fiel guardián en el pasillo.
¡Hermano Ciferinos! llama despertad a los dos mejores escribas y hacedlos venir de mi parte, es un asunto de la máxima urgencia.