Partida Rol por web

En este punto Hoturi interviene decirle que es un asunto de vital importancia, hemos venido lo más rápido que hemos podido, Doji Hoturi-sama ha escapado de su celda.

Esperaremos, pacientemente aquí fuera, su respuesta.

Echas a correr hacia las murallas de Otosan Uchi. Tardas un poco, pues el camino no es corto, piensas que quizás no te dé tiempo luego de volver a ayudar a tus compañeros. Tras otear detenidamente, observas que aún no ha comenzado el ataque. Los samurai están controlando las afueras de la muralla y estas están cerradas. Liderando las defensas se encuentra Toshimoko-sensei, al que puedes ver desde cierta distancia. De momento no ves tropas Cangrejo. Y muchas de las unidades imperiales, que estaban antes de ir a liberar a Hoturi a tu vista, no las ves entre las defensas.

Uno de los guardias, hace un gesto al otro y llaman a la puerta con una serie interrumpida de golpes. Esta es abierta hacia dentro y el guardia transmite el mensaje sin adentrarse en la sala.

Al poco se abren las puertas hacia dentro de par en par y asoma la vista Bayushi Kachiko, una mujer pequeña y la más hermosa que hayáis podido conocer en vuestras vidas.

Oh, vaya, pero qué tenemos aquí. Un impostor. Guardias apresarlos. Sólo necesito vivo al que va vestido de Guardia Seppun.

El combate todavía no había comenzado, lo que le dio un arreón de esperanza al Trueno. No pudo ver por ninguna parte al ejército Cangrejo pero sí que pudo ver a la distancia al Sensei de Shiroi. Las fuerzas Imperiales estaban muy diezmadas en comparación con las que habían en la Capital en cuanto entraron hacía algunas horas. -"¿Dónde se encontraban? ¿Es que el combate se estaba llevando a cabo en otro lugar que no fuera ese?"

Oni Negro corrió como alma que lleva el diablo hacia la posición de Kakita Toshimoko, en busca de algo de información y un caballo, puestos a pedir.

Te diriges con la mayor celeridad posible, a lo que algunos samurai responden cerrándote el paso. Kakita Toshimoko se percata y se gira hacia ti, dejando que avances lo suficiente como para poder comunicarte con él. 

EL Cangrejo se arrodilló delante de comandante Grulla y proclamó alzando la voz. -"Kakita Toshimoko-sama, Os pido disculpas si mis formas no son las adecuadas que marca la etiqueta, pero solicito vuestro permiso para poder encontrarme con Hida O-Ushi-uesama y la convencerla de que dirija al ejército que dejó su padre en las afueras de la ciudad y se enfrente al ejercito que marcha hacia la capital Imperial. Si ese ejército os derrota, de nada habrá servido vencer al Innombrable ayer mismo".

El rostro detrás de la máscara del samurái se alzó mirando directamente al comandante. -"Dadme su ubicacón exacta, vuestro permiso, un caballo y vuestras bendiciones. Abridme las puertas y la infantería pesada Hida cargará en vuestra ayuda antes de que los muertos destruyan el Imperio Esmeralda que tanto hemos luchado todos por mantener vivo".

La magnífica visión de Bayushi Kachico me deja por un momento sin aliento ¿Cómo podía ser una mujer tan perfecta?
En cualquier caso sus palabras le quitaron todo el encanto a la mujer. Al ver a los guardias prepararse para la acción no dudo en desenvainar mi propio sable y prepararme para batirme de nuevo contra compatriotas ¿Honorables?

Una escorpión, lo que faltaba, es en esta clase de situaciones que el león debía mostrar los dientes, la contienda está a punto de empezar, y sin esperar un segundo, desenfundó la espada, no iba a permitir que los guardias seppun se acercaran.

Lo correcto es no matar a los guardias, esperaba no tener que hacerlo, cómo parte del "REI" la compasión también res parte de las enseñanzas del bushido.

-Retirense, no queremos pelear - 

Aún que sentía que ya es demasiado tarde, y el conflicto es inminente, ahora no podían hacer otra cosa que pelear. 

-Si pueden, no los maten-

-Kachiko-sama. –Contestó Shiroi con tranquilidad, elevando su brazo sobre la tsuba de su espada. –Tú nos ofreciste tu ayuda para enfrentarnos a Fu-Leng… tú nos empujaste al camino del Trueno… ¿y ahora que hemos liberado el Imperio quieres hacer que nos maten?

Escuchó, como a un mundo de distancia, las palabras de Hidenaga tratando de disuadiar a los guardias de que combatieran con ellos, y suspuso que el antiguo León disfrutaba tan poco como ella de derramar sangre inocente. Era algo difícil, pero no imposible, así que sumó su voz a la de su compañero.

-¡Somos quienes han acabado con Fu Leng! –Tronó de golpe, mirando a los Seppun con toda su autoridad. -¡Pero la Mancha ha consumido también a la Emperatriz! ¡Manteneos al margen!

Y sólo entonces su mano descendió hasta rozar la superficie de la empuñadura de su espada.

En todo momento, desde que Shizue le había hablado de la traición de la Emperatriz hacia su clan y hacia el Imperio, había dudado. Había dudado de si realmente Bayushi Kachiko, la misma que los había ayudado al inicio de su camino, habría podido obrar así. Al fin y al cabo, incluso nacida escorpión, debía mantener un mínimo de honor. Y por encima de todo, a pesar de sus habilidades, Shiroi odiaba matar.

Pero las palabras de la Emperatriz la liberaron de esas dudas. Las mismas palabras con las que los condenaba a muerte actuaron como una llave sobre las cadenas que la ataban. Ya no necesitaba dudar. La Emperatriz era culpable, como mínimo, de intentar asesinar a los Truenos que sabía inocentes.

-Gracias… -Susurró, en parte para Kachiko, en parte para sí misma. –Has liberado mi espada.

Tameiki tuvo dudas. Sabia que la Emperatriz estaba corrompida por las tierras sombrias. Habia cohabitado con el mismisimo Fu Leng, pero enfrentarse a la posición de tener que acabar con quien gobernaba el Imperio hacia que la duda naciera en su corazón.

De los cuatro guardias, tres se abalanzan hacia vosotros.

Uno sin embargo se mantiene a la vera de Kachiko-sama con el arma desenvainada y protegiéndola, sin hacer acciones ofensivas.

Es lo que tiene el maho... XD

Si uso posición Centrada para el siguiente asalto no me muevo, no?

Ya hemos enviado un emisario para que el cangrejo luche contra el ejército que se acerca. Se le ha prohibido que luche desde dentro de las murallas pero aún así ha accedido. Dentro de poco se reunirán las fuerzas Cangrejo en esta puerta.

Desde tu posición actual en lo alto de la muralla, no se divisa aún el ejército enemigo ni las fuerzas Cangrejo.

Las murallas que está defendiendo Toshimoko-sama y las fuerzas imperiales están dentro de la ciudad, por lo que lo que hay en las afueras de las murallas no es un campo abierto si no que está lleno de casas y negocios de la ciudad imperial que ha ido creciendo posteriormente a la creación de las murallas.

No deben tardar en llegar, al igual que el ejército enemigo. 

¿Sigues queriendo salir? Si es así no tenemos inconveniente, incluso te podemos proporcionar un caballo.

El rostro del Cangrejo se sorprendió tras de su máscara, no por que los samurái que su Clan luchasen contra sus enemigos Ancestrales, sino porque Kakita Toshimoko-sama seguía reconociendo a sus hermanos como a los miembros de u gran Clan del Imperio, a diferencia de los ExLeón o antiguos Escorpión. -"¿Ha accedido? ¿Quien los dirige a la guerra?"

Antes de que el veterano Grulla contestaste la luz de una nueva esperanza colmó el alma del antiguo Kaiu, el orgullo por el deber cumplido por parte de los suyos engrandeció su voluntad y fortaleció su decisión. Ya no importaba si era Hida O-Ushi ó Hida Sukune-uesama. La balanza se estaba moviendo a favor del Imperio Esmeralda. La victoria era cuestión de tiempo, un tiempo que no tenía y que necesitaría recuperar si quería llegar a tiempo para ayudar a los demás Truenos, pues si llegaba a tiempo para ayudarles esa balanza también se movería a su favor.