Partida Rol por web

Vale, en ese caso, Meepo, lleva a tus amigos a la casa de Jorr, enseguida os haré llegar comida y yo misma prepararé algo para aliviar al drow. - afirma Grunja, asintiendo con su cabeza al ver como Lucius se rinde ante la evidencia.

Tendréis nuestra hospitalidad durante el tiempo que necesitéis, así que espero no causéis problemas a ninguno de los míos. Si eso es así, todo esto será agradable para todos.

Tras pronunciar las ultimas palabras, la trasga os dedica una nueva sonrisa y se vuelve, encaminándose a través del resto de trasgo a alguna otra de la pequeñas casas de madera. Con ella se marchan dos de los trasgos armados, mientras que el resto, os vigilan atentamente de forma pacífica, tal y como ha ordenado su líder.

Con la marcha de Grunja, Meepo no evita suspirar, al parecer aliviado, antes de volverse hacia vosotros para dedicaros una sonrisa, a excepción de Lucius, al caul ni se digna a mirar.

Yo llevar casa para comer y dormir, ser esa. - os explica, señalanado una no muy lejanda del pozo y que da directamente a la especia de plaza. - No grande, pero suelo mejor que piedras, y también mantas y comida. Todo ser mejor hoy, ¿si?

Sin dejar de hablar, acerca de las ventajas de su poblado con respecto a seguir durmiendo y comiendo como hasta ahora, el trasgo trota hasta la casa en cuestión, en la cual se adentra tras abrir (no hay cerradura ni nada) la pequeña puerta de madera.

Desde fuera veis que el interior de la casa esta compuesto por una única estancia que abarca toda la superficie, donde divisáis bastante polvo, señal inequívoca de que hace tiempo que no se usa. A parte de eso, lo único que llama vuestra atención son los restos de alguna manta y poco. Una ventana, en la pared contraria a la entrada, es el único adorno del lugar.

Todo y la frialdad y sencillez de lugar, deducís que dormiréis mucho mejor que las ultimas noches, pues el suelo parece firme y el ambiente es mucho más caliente en el interior que el exterior. Además, tan pronto os ponéis en marcha hacia la casa, varias trasgos se acercan a vosotros portando varias mantas para cada uno, así como una lámpara de aceite.

Tomo asiento en uno de los rincones de la casa cerca de la ventana, y bien?, digo mirando a Zenram y Lucius, y vosotros habláis de confianza, Tu, Zenram con tu daga, que vete a saber por Aelyn, que demonios hará, y posiblemente este entuerto se halla organizado por ella, y tu Lucius el problema que tienes con mis hermanas es debido a la muerte de la tuya, lo cual no me sorprende porque es típico de los humanos buscar la venganza.

Echo un vistazo a Ugluk el cual cada vez parece estar peor, y tu, mi querido amigo, vete a saber el porque te tenían preso los trasgos, pero si estabas aquí dentro seguro que estás relacionado con ello también, la única que parece estar fuera de lugar soy yo.

Les sonrío a los tres, pero mi sonrisa dista mucho de ser sincera como las anteriores, es una sonrisa amarga, de alguien que se siente traicionada...

El guerrero asiente satisfecho al ver que Lucius a dejado de lado sus inquietudes y se adentra primero que nadie en la cabaña, tranquilamente observa en su derredor y golpea levemente con las botas el suelo esperando encontrar algo, mas al no encontrar ningun peligro toma asiento tranquilamente...

Al ver el interior de la casa hago una mueca de fastidio ante el polvo que parece residir en el interior, pero acto seguido, me adentro en ella con suma cautela, asegurándome bien de donde pongo mis pies en cada uno de mis pasos. Detrás de mi, escucho como Zenram también entra, así como Daenerys, la cual parece deseosa de hablar, y no tarda más que un instante en pronuncia las palabras que he estado esperando desde que Grunja habló.

Yo no busco venganza, así como tampoco he traicionado ninguna confianza, Daenerys. - afirmo, tajante, y mostrando con mi tono que no es así como pienso con respecto a ella. - Y, para que lo sepáis, si, ando detrás de mi hermana, pero no para vengarla si no para rescatarla. - agrego, sin poder evitar cabrearme al recordarla y pensar en el tiempo que hace ya de su desaparición.

Y ahora estoy cerca de conseguirlo, así que nadie me lo va impedir, la encontraré, y haré lo que haga falta para ello...

iré conocer,el por qué me tenían preso,pero antes me gustaría que mi enferedad se curase...cof!

Mientras habláis, más o menos acomodados en el suelo de la casa gracias a las mantas, Meepo se encarga de encender la lámpara de aceite, iluminando el lugar, hasta el momento tan solo alumbrado por el leve fulgor amarillento que penetraba por la ventana.

Fuera, parece que la mayoría de trasgos se resguardado en sus casas, aunque alguno de ellos aún corretea por la plaza o el pozo, de donde extraen varios cubos de agua.

Yo ir buscar agua y comida. - afirma el trasgo, abriendo la puerta y saliendo por ella sin esperar a que nadie le responda a su palabras. - Ahora volver

Por tu tono de voz denoto que estás cerca de conseguirlo, mis hermanas son las que la tienen prisionera?, le pregunto a Lucius interesada por el tema ya que nunca había visto tan afectado al joven guerrero.

Mientras sigo mirando de reojo a Zenram esperando su respuesta respecto a la daga, mírale, que tonta he sido, esas son cualidades humanas, hay que ser mas práctica, ponte en tu sitio Daenerys, y Ugluk, en fin, parece que tan solo hay un camino...

El humano sonríe... Pero es que acaso tenia que contarles que he comprado esta daga con mi sudor y mi sangre, después de todo si hemos seguido el mismo camino es por que no teníamos otra opción, ¿O si?, ¿Acaso creyeron que vine aquí por las amenazas del inútil aquel?...

No exactamente, aunque si son ellas las que me llevaran a ella. - afirmo, aún en un tono bastante alterado, tras la pregunta de la drow, aunque mi mirada no está fija en ella, sino en la puerta por la que acaba de desaparecer el trasgo.

Entonces escucho la voz de Zenram, y con una irónica sonrisa, vuelvo mi rostro hacia él. Ah, ¿y es que no era por eso?? - inquiero, con toda la ironia que soy capaz de reunir en mi voz. - Vale, vale, entonces es por esa daga espada que llevas. Dime algo Zenram, ¿que diablos tienes que hacer para completarla? Ya sabemos que no es matar trasgos, ¿entonces?

Para ser franco ni yo lo sé, aun que tengo claro que encontrare la respuesta en este templo, quizá deba obtener el favor de Aelyn... Aventura el guerrero. Lo que puedes tener seguro es que no me importan los motivos que tenga ninguno de ustedes para estar aquí, pero haré lo posible por que salgamos todos...

Salir todos?, que hará lo posible por ello, dudo que lo consiga. escucho atentamente las conversación mantenida por ambos guerreros acerca de la famosa daga y observo atentamente la mirada que dirige a Lucius a Meepo al salir por la puerta, tras ello me retraigo en mis pensamientos analizando las palabras de mis tres compañeros.

Asi que harás lo posible, bueno, en ese caso ahora me siento mucho más tranquilo. - respondo, al comentario del guerrero, con una mueca de fastidio. - Ya, lo mejor será que guarde mi espalda y cuide mi mismo, si alguien debe morir aquí, no seré yo.

Como sea, - vuelvo a hablar, ahora con mi mirada calvada en la silenciosa drow, sin duda es la más peligrosa, sus artimañas, sus palabras... con poco parece tomar el control de todo...y todos. - lo mejor será que durmamos y nos pongamos en marcha cuanto antes, estos trasgos, por mucho que vosotros no lo veais así, no son de fiar, y en especial Meepo. - afirmo, tajante y esperando que Daenerys, la primera defensora del trasgo, como en ocasiones anteriores, no tarde en replicar.

Con las últimas palabras de Lucius aún flotando en el ambiente, la puerta de la casa vuelve a abrirse para dar paso a Meepo, el cual sonrie mientras os muestra los bultos que sostiene entre los brazos.

Traer carne, pan y queso, y agua, ser buena y fria. - afirma, avanznado hasta el centro de la habitación para dejar lo enumerado encima de una de sus mantas. - Carne estar caliente, lo mejor será comer rápido para no enfriar. - agrega, desenvolviendo lo que parece una fuente repleta de carne asada, la cual despide un agradable y sabroso aroma. - Ah, Grunja decir que no poder venir, ella dar esto... - continua, mostrandole a Ugluk un pequeño vial transparente repleto de un liquido azulado. - ... decir que si beber, enfermedad mejorar mucho rápido.

El guerrero observa la comida y a pesar de lucir increíblemente apetitosa se limita a servirse su porción pero sin ingerirla, al parecer esperando a que alguien mas lo haga. Por mi parte no creo prudente que todos comamos al mismo tiempo, yo esperare para que podamos estar listos para cualquier imprevisto. Sin prisas toma asiento a la espera de que el resto haga los honores a la comida.

Ah, veo que la confianza no tan firme como ostentabas, Zenram. - comento, al ver como el guerrero se sirve algo de comida, pero sin intención de comer hasta que otro lo haga.

Con una irónica sonrisa en los labios, procedo a hacer lo mismo, y al igual que él, no pruebo la comida que me sirvo, sino que desvío mi mirada hacia Ugluk y Dae. - Bueno, entonces lo mejor será que uno de vosotros la pruebe antes que los demás, ¿no?

Al ver llegar a Meepo con las bandejas de comida y escuchar los comentarios de mis compañeros, niego con la cabeza, esa bruja entiende de hierbas, así que si hay algo será de reacción lenta, no será tan tonta.

Gracias Meepo, huele muy bien, me aproximo a la comida haciéndole una caricia en al cabeza al pequeño trasgo, cojo uno de los trozos de carne, comiéndolo plácidamente, me sirvo un trago de agua y bebo también de ella.

Agarro con todo,el brebaje que me da,me lo bebo,de un sorbo.

glub,glub!!

Una vez termino el líquido,me limpio los labios...