Partida Rol por web

El paquete era un paquete, no tenía nada misterioso, así que decidiste abrirlo mientras los sonidos se aproximaban cada vez más a ti.

Una tirita infantil con una nota que decía "Cazadora cazada" es lo que había dentro del paquete.

Encontraste varias ramas, pero no sabías si serían buenas para crear una fogata. Te faltaba yesca y pedernal u otra manera para encenderlo.

Leroy se había alejado de allí y te permitió estar un rato en silencio. Te moviste un poco por los alrededores, pero no había nada ni nadie alrededor. Te acercaste a la orilla del riachuelo de nuevo. Al contemplarlo de nuevo, viste cómo en el rio, por debajo de la puerta, había pequeños orificios. Viste algún que otro cable suelto. ¿Sería eso lo que electrocutaba a los peces? Seguramente.

Y de pronto, la luz se volvió roja.

De la alambrada empezó a salir un sonido. El mismo pitido que habíais escuchado al caer la noche.

No habías dado ni dos pasos cuando los insectos, con la cara formada, se volvieron hacia ti. Se alzaron hacia arriba, formando un remolino y empezaron a ir hacia ti. Los insectos te iban a atacar.

Trepaste con facilidad al árbol. Llegaste a la cima en pocos segundos, pero justo a tiempo.

Allí, donde calculabas que estaba la Cornucopia, pudiste ver a los insectos. Seguían con su forma de cara, pero ahora estaban fijo en un punto. Por suerte, esta vez no eras tu. Se alzaron en el aire y empezaron a caer en picado, como habían hecho contigo. Habían encontrado a un tributo. Si no lo mataban, con suerte lo debilitarían para poder acabar con él fácilmente.

El sol cada vez estaba más alto, las sombras eran cada vez más evidentes. Y, con ese movimiento solar, llegó una alarma que ya habíais escuchado antes, al llegar la noche.

Un paquete de un tamaño considerable cayó a tus pies.

Un paquete de un tamaño considerable cae a tus pies.

Un paquete de un tamaño considerable cae a tus pies.

Un paquete de un tamaño considerable cae a tus pies.

Un paquete de un tamaño considerable cae a tus pies.

Dos paquetes caen sobre las ramas, manteniéndose a tu alcance.

Esto era lo que se temía. Un regalo dado tan rápidamente no podía ser nada bueno. Tal vez, era un sorteo para animar un poco los juegos. Al parecer, que hubieran muerto más de la mitad de los tributos no era suficiente diversión. Debían impregnar de emoción el ambiente pero Savera no caería sin pelear, ella no se dejaría matar tan fácilmente. Al menos, debía tratar de escapar.

Savera no toca el nuevo paquete y busca aquel camino que había trazado anteriormente. Tenía gran desventaja con las dos aves y ahora, aquella amenaza que estaba en esa caja. Debía correr hacia un lugar seguro. Lo mejor sería buscar un árbol alto pero no podía perder de vista sus amenazas, aunque por el momento, debía concentrarse en salir de allí.

Savera sabía que su pie había apenas descansado pero debía correr, correr a toda velocidad y buscar un lugar seguro para ella. De encontrar un árbol lejos de allí y lo suficientemente alto, trataría de subir a él. Ahora, sujeta más fuertemente el cuchillo y con los sentidos en alerta, comienza a correr.

Cojo los paquetes sin muchos miramientos y sin perder de vista a los insectos, ellos habían encontrado a su presa y si huía lo suficiente, sería la mía. No me gustaba cebarme en alguien que se comiera ese marrón, pero la piedad tendía a matarme tarde o temprano.

Asentí al oirlo y empecé a caminar hacia el campo que había vislumbrado.

_{-Botiquin, prismáticos, chaqueta, machete y abrojos. Y un cinturón de herramientas extra, si lo necesitas.-} Dije tendiéndole uno como el que yo usaba para llevar las cosas.

Quizás estas ramas ayuden, aunque no me fío mucho de que sean adecuadas para un fuego, mientras me hacia con alguna que otra rama escuche el sonido de alarma que había escuchado la noche anterior, parecía provenir de la alambrada, estaría indicando un aviso de peligro, a la vez que continuaba buscando algo para provocar el fuego, no dejaba de fiarme si aparecería otro peligro atraído por el sonido, y sin darme apenas cuenta algo estaba a mis pies......

Al ver el paquete frente a mi, dejo las ramas en el suelo e intento escuchar si emite algún sonido, en el caso de no notar nada lo abro con cuidado.

_{- Avancemos con cuidado.} - digo rechazando el cinturón señalando el que llevo puesto. _{Ve usando los Prismáticos para ir con ventaja sobre el resto. Yo vigilaré nuestros pasos.}