Partida Rol por web

Recuerdas ciertas historias que os contaban en la lumbre. Eran terroríficas historias sobre un barco fantasma, que recorría las aguas por las noches. Subyugaba a los barcos que veía con su magia maligna, esclavizándolos para toda la eternidad. Esos barcos sólo iban a por la gente valiente, aquellos que estaban destinados al Valhalla para así arrebatárselos a Odín y su progenie.

Miro el barco que se aproxima hacia nosotros...es realmente hipnótico. Me embeleso mirándolo, pero me agito y me repongo. Rebusco entre mis cosas mi cuerno sonoro Ojalá pueda despertar a mis brodir... Lo encuentro y soplo con todas mis fuerzas repetidas veces. No parece que ocurra nada en especial.

El barco cada vez se acerca más. Eso...eso es... Busco en mi memoria alguna leyenda o cántico que me haga entender qué es este espectáculo que tengo delante. Mientras, aprieto más el mango de mi espada.

spaki esta atendiendo a Erik cuando oyes la pregunta de su hermosa brodir, antes de poder articular palabra spaki cae desmayado encima de Erik

Intentas recordar, pero las ideas se escurren entre tus dedos mentales antes de poder aferrarlas. Es molesto, y un extraño dolor se hace presa de tu mente. Las voces que oyes desde el barco te acarician el cerebro, te hacen sentir más placer que las caricias de una mujer. Sin embargo, algo bulle en tu interior. La furia primigenia de tu raza, la llama que os hace sentir vivos y prestos a la guerra. Parece incluso que tu espada te llama, con las voces que creiste olvidadas de todos los muertos de tu gente. Sin darte cuenta, tu mano se dirige al puño de la espada. La fuerza de tus antepasados recorre tu cuerpo entero y te hace librarte de la somnolencia. Un gruñido escapa de tus fruncidos labios...

El barco enemigo se acerca pavorosamente hacia vosotros, llenando vuestras mentes de duras imágenes de vuestros antepasados, sometidos al yugo de demonios innombrables qeu subyugaban sus mentes con hechizos y cánticos. Un terror supersticioso se aferra a vuestros corazones, y vuestras manos aferran inconscientemente las armas. No estais seguros de que os puedan defender medios mundanos, pero no deja de ser un magro consuelo el saber que moristeis luchando como verdaderos hombres e hijos de Odín.

Cojo mi arma ancestral, y me ajusto el casco de mi armadura ancestral. con voz grave y potente, empiezo a recitar:
-“He aquí que veo a mi padre, he aquí que veo a mi madre, a mis hermanas y mis hermanos. He aquí que veo el linaje de mi pueblo hasta sus principios. Y he aquí que me llaman, me piden que ocupe mi lugar entre ellos, en los atrios de Valhalla, el lugar donde viven los valientes para siempre.”- hasta acabar gritando a pleno pulmón.

Habrald pone una flecha en el arco mirando atento lo que se les viene encima, oye los gritos de Askar mientra el reza para si:

- Odin, guia nuestro barco, nuestras hachas lanzas y espadas, guianos a traves de las tormentas que nos azotan y en la brutal guerra.

SPAKI!! Maldición, nos ataquan con brujería!!
Afirmo mis manos en el timón y miro a mis hermanos caidos y los pocos que aún estamos de pié. Con expresión sombría, miro al barco enemigo que se aproxima...
Un escalofrio me recore la la espalda hasta el cogote, aprieto la mandíbula y entrcierro los ojos desafiante.
Oigo como Askar dice la llamada de los ancestros, veo como Habrald murmulla a los dioses... Yo, rechino los dientes.

Y ahora qué , hija de Arinhoff... Como las hazañas que me contaba mi padre del anterior Jarld...
Que freya, nos sonría, solo quedamos el Capitán Oled; Habrald, el arquero; Ragnar, el berserk; Askar, el guerrero y yo... Desde luego, Odín, tus desafío no son nada justos... Pero si es mi fin, iré a tu encuentro gritando tú nombre...NO VOY A HUIR!!

¡¿Pero qué clase de demonios son estos?! Me estaba sintiendo muy relajado, pero el grito de Brynhild me ha espabilado. Miro a mi alrededor y la nao enemiga casi está sobre nosotros. Brynhild, déjame el timón, yo controlaré la nave. Ten mi espada si quieres. ¡Acabemos con esta magia! ¡Odín, guíanos!

Mi cara de satisfacción al ver a Oled agarrar el timón es como si me quitaran un peso de encima.
No lo sé, capitán Oled, pero estoy segura que lo vamos a descubrir...[B]
[B]Guarda tu espada, gran Oled, la necesitarás, sea aquí o en el Valhala...Mi expresion es estóica y sin emoción, solo mis ojos revelan el escepticismo con que miro la situación.
Me acerco a la borda y miro al enemigo desafiante, recojo uno de los escudos que lo "adornan" y me dirijo hacia el centro de la nave. Me preparo y miro a Oled.
Que tienes pensado, Capitan? Lo embestimos y lo abordamos??

Me quedé un paso por detrás del jarl, miraba hacia el navío enemigo con ansias de sangre y dije con voz gutural -Embestimos……al abordaje……- acaricié la hoja de mi hacha ancestral con gesto significativo.

Agarrando el timón, intento colocar nuestro drakkar ligeramente a la derecha de la embarcación enemiga, enfrentándolas. Pienso un poco qué podemos hacer, y al final me viene una idea con la que poder responder a Brynhild.

Ni una cosa ni la otra, querida guerrera,...preparad brea para ponerle a unas flechas, vamos a hacer arder sus velas. No podemos abordarlos sin más, somos pocos y no sabemos cúantos son ellos. Embestirlos podría servir, pero su nave parece sólida. Hago una pausa, para terminar de creerme mi última idea, que me ronda por la cabeza. Y buscad a ver si encontrais unas cadenas, unos garfios o cualquier cosa similar. Vamos a destrozarles los remos de un lateral. La nave debería de estar dotada de todo lo que os he pedido.

Te explico el porqué de estas decisiones: si son seres mágicos poco podrán hacer nuestras armas mundanas. Además estamos muy pocos despiertos. Esto también implica que sólo disponemos de nuestras velas para maniobrar, no podemos sacar los remos. La mejor opción es ponerles en las mismas condiciones que nosotros: sin movilidad.

Y después de eso, tras haber creado el caos del fuego y el humo, saltamos dentro y les pasamos a cuchillo, llevándonos todo lo que halla de valor.