Partida Rol por web

- Estoy enterado – responde por la radio a aquel mensaje inesperado, antes de poder contestar a Shepard – mi grupo y yo estamos en camino, volvemos a la Prypiat a prestar apoyo. Dese prisa, puede que tengamos que salir de aquí antes de lo esperado – dice antes de cortar comunicación de nuevo. Inmediatamente vuelve a dirigirse a Shepard.

- Me parece justo – responde a la comandante. Piensa unos segundos, sabe que no puede simplemente dejar todo de lado para volver a la nave, así que tras unos breves segundos vuelve a hablar – pero antes tiene que saber por que estamos aquí – toma aire, da un paso al frente – Tanto yo como la Capitana y un grupo conformado por diferentes miembros del consejo tenemos la orden de llevarla de vuelta a la ciudadela. Su... cooperación con Cerberus nos esta trayendo muchos problemas, sumado a la amenaza de un ataque terrorista, el consejo desconfía de la alianza y estamos al borde de una guerra. No se hasta que punto trabaja con esos... - está por soltar una palabra, la cual contiene para cambiarla por otra – terroristas, ni que es lo que hace aquí. No me importa, realmente, y si la situación fuera otra no dudaría en llevarla de vuelta a la fuerza, así me ganara el odio de la Capitana, pero entiendo que tiene que ayudar a su gente, y yo a la mía, lo ultimo que necesitamos ahora son mas discusiones. Lo único que espero es que al saber esto tome una decisión, por que mucha gente depende de eso.

Sigue usando un tono informal al hablar, aunque no por eso deja de ser un poco frío y directo, ademas de que no quita la vista de los ojos de la comandante. Tras aquellas palabras hace un breve silencio, el cual rompe antes de tener respuesta.

- Tenemos que ponernos en marcha – mira a los demás soldados de su grupo – andando – les ordena mientras hace un gesto con la mano, y sin perder tiempo se pone en marcha, mientras da una ultima revisión a su arma.

¿La Prypiat? - Masculla Breil.

No quiere sembrar la duda enfrente de los demás, con lo que manda un mensaje por la omniherramienta a Riggs.

Mensaje por omniherramienta:

¿Que está diciendo capitán? ¿Pretende volver a la Prypiat y dejar escapar a Shepard? Eso no es factible, todos sabemos los riesgos al aceptar esta misión. Shepard es el objetivo, no la Prypiat ni sus tripulantes.

Shepard se para un segundo, ante la repentina sinceridad de Riggs. Escucha, y asiente. De algún modo, lo esperaba. No quería que sucediera, pero lo esperaba.

-Hay mucho más en juego, Capitán.- Espeta Shepard, ahora con un tono mucho más frío y duro. -Cuando todo esto acabe, responderé de mis actos, y aceptare las consecuencias. Y no necesitarán enviar a nadie para "escoltarme". Pero mientras la ciudadela, la alianza y el resto de la galaxia sigan bajo la amenaza de los segadores, los mismos que ahora amenazan a esta estación, no pienso detenerme ante nada ni nadie. Y si tanto lo desea, Capitán, entonces puede llevarme a la fuerza. O puede intentarlo. No me gustaría tener que meterle una bala en la cabeza, pero no crea que vacilaré si se convierte en un obstáculo.- Dicho lo cual, da media vuelta, y se dirige hacia la atalaya.

-Puede usted seguirme, o puede disparar. Elija.- Mira hacia atrás, sin dejar de andar.

Estoy enterado – responde por la radio a aquel mensaje inesperado, antes de poder contestar a Shepard – mi grupo y yo estamos en camino, volvemos a la Prypiat a prestar apoyo. Dese prisa, puede que tengamos que salir de aquí antes de lo esperado –

Breil se pone a andar siguiendo a Shepard, casi como si fuera de su grupo y no de Riggs.

Riggs lee el mensaje en su omniherramienta mientras camina, pero de omento no contesta, tan solo devuelve una mirada disimulada al sargento, y escucha la respuesta de Shepard.

- Como dije, ahora es su decisión – responde a aquellas palabras, mientras camina con el resto del grupo, atento a lo que puede haber mas adelante

 Excelente! Riggs va para el hangar, vamos de nuevo por nuestro objetivo. Inara, gracias le sonríe amablemente. A veces con tanta presión es difícil permanecer enfocado.

Kholan, el plan sigue, vamos a encontrar el carguero turiano a como de lugar!

Sin más dilaciones, Veigon se mueve hacia la salida al hangar 11

Asiente en respuesta al agradecimiento del espectro.

- Bien, si vamos a enfrentarnos a esos Geth, deberíamos ir lo antes posible. Debemos estar preparados, porque no podemos descartar la opción de que Saren esté con ellos. Además, cuanto antes acabemos, antes podremos volver a ayudar a la Pripyat y la Normandía.

Comienza a caminar con Veigon en dirección al hangar 10 y se comienza a hablar con Miranda y su grupo.

- Es increíble que hayan reconstruído y mejorado vuestra nave... Ahora tiene el doble del tamaño de la Normandía original. ¿Viaja Sephard en vuestra nave? - mira a Samara - ¿Y qué hace una Justicar viajando con un Geth y un miembro de Cerberus?

- Sargento Norman, Centinela. - Se presenta con el saludo militar a los compañeros de Shepard.

Como de costumbre, guardó silencio en mitad de la tensa charla. Cada grupo iría a defender su propia nave y Norman estaba de acuerdo, pero el nerviosismo no le abandonaba. Trataba de controlar sus emociones ¿Qué diablos les aguardaba en los hangares? Por otro lado esperaba que no hubiera que enfrentarse al equipo de Shepard, pero no parecía muy dispuesta a acompañarnos por las buenas.

Como Summer ya se había presentado, no dijo nada más. Se limitó a seguir a su oficial mientras echaba de reojo miradas a su heroína. Le apenaba profundamente todo lo que estaba pasando y esperaba que Shepard se entregara por las buenas. Su equipo sería probablemente de élite y no quería tener que enfrentarse a ellos. Temía no estar a la altura.

La justicar sale de su parapeto. Observa a Inara, y, tras unos segundos, le dedica una respetuoso saludo.

-El destino.- Contesta, únicamente a la pregunta de Inara, sin alterar su tono de voz, pero sin decir nada más. Quizás sea una persona a la que, después de todo, le guste guardar secretos. Quizás no confíe demasiado en ninguno de los presentes. O quizás, esa simple respuesta vaste para una justicar. Algo difícil de saber con exactitud, pues es un su cara todo lo que se puede leer es determinación, serenidad y un amago de frialdad.

Os sobresalta la radio.

-Aquí Águila 1. Recibido. Estamos siendo abordados. No obstante, Riggs se dirige hacia aquí, junto con la... Nuestro objetivo.- Por su vacilación, entendéis que se trata de Shepard. Parece que Riggs ha encontrado a Shepard, lo cual puede no ser muy tranquilizador. -Y Stenford acaba de llegar al hangar. Además, tenemos a una nave aliada y a unas defensas que están debilitando seriamente a nuestro oponente. No obstante...- La Capitana interrumpe su explicación. Oís disparos de fondo, y una ráfaga de ametralladora, seguidas de varias blasfemias.

-Temo que si las defensas de la estación caen en manos enemigas, y disparan contra nosotros... Recuperen esa estación, Sehabed. Maten al malo y salve al mundo. Águila 1 fuera.-

Gracias a la omniherramienta y al especial "diseño" del nuevo programa de Avot, oís también la conversación que Miranda, de Cerberus, mantiene por radio a la vez.

-Parece una especie de IV. No. Muy complejo. Tecnología GETH.- Es la voz de un salariano, aunque mucho más rápida y desquiciante que la del propio Avot, cosa que, ya de por si, cuesta de creer. Un hmaster con cafeína. -Es un sistema de comunicación. Tecnología de hologramas. Réplicas. No. Definición incorrecta. Incompleta. Quizas...-

-¡Doctor!- Miranda corta en seco. No os hace falta la omniherramienta para oírlo. -Solo deme la maldita confirmación. Dijo que Saren estaba en el carguero turiano, en el hangar. ¿Cierto?-

-Es la dirección de su holograma. Imposible rastrar la fuente.- Contesta el doctor salariano. -El carguero. Grandes cantidades de energía. Fuente más que probable. Lecturas incompletas. Los escáneres no llegan.-

-Entonces al carguero turiano.- Insiste Miranda, que empieza a perder la paciencia.

-Si.- Contesta únicamente el salariano. Miranda no da tiempo para más. Corta la comunicación. Os mira.

-No más preguntas. Estamos en el mismo bando. Nos necesitaremos mutuamente para acabar con los GETH.- Planta su mano frente al GETH que la sigue, antes de que este pueda responder. -Es es todo lo que necesitamos saber el uno del otro por ahora.-

Así pues, y tras alguna pequeña discusión para con Khalon, que desaprueba pero obedece con disciplina turiana la manera de hacer de Sehabed, os dirgís hacia el carguero. Atravesáis las puertas hacia el hangar 11. Un largo pasillo os lleva hacia unas escaleras que bajan, y hacia el propio hangar. No obstante, nada más llegar, las compuertas de salida y entrada se bloquean, dejándoos atrapados en el pasillo. Dos puertas de seguridad empiezan a cerrarse, pero el GETH lanza un poderoso e increíblemente certero y rápido disparo al sistema hidráulico y las puertas se encallan a la mitad, dividéndo el pasillo en tres, y a vosotros en tres grupos.

En el segmento más cercano a la salida al hangar 11, Miranda, el GETH y la justicar. En el centro, vosotros, y en el segmento más cercano al hangar 12, Khalon y su escuadra.

Al poco, oís un gemido, que pronto se convierte en un terrible aullido en masa. Algo se acerca, y muy rápido, en todas direcciones.

Reconoces la voz del salariano. Es difícil no saber quien es. El gran doctor que mutó la genofagia, y uno de los mejores científicos del GOE, y de toda la raza salariana. El doctor Mordin Solus.

Seguís a Shepard. El silencio es tenso, pero en ningún momento hay hostilidades, en ninguno de los dos bandos, aunque, de hecho, el Krogan parece desearlo con toda su alma. Shepard parece pensativa, ensimismada.

La seguís a la atalaya, y accedéis a un camino subterráneo que lleva directamente al afterlife, tras algunas curvas, pero sin cambiar de nivel hasta un ascensor, que se supone es el final del camino. Cuando dáis un par de pasos, oís un fuerte estruendo. Toda la plataforma tiembla, y os tenéis que esforzar para no caeros.

Pronto, el sonido del metal retorciéndose inunda el camino. La puerta se bloquea, y el sonido se hace más intenso. Un par de cables chisporrotean, y un tornillo salta, como una bala, dejando escapar un chorro de gas a presión. Empieza ha hacer calor. Poco a poco, los cables y los conductos empiezan a estallar, y a doblarse, hasta que el propio camino se dobla. Finalmente, una nueva explosión hace que el camino subterráneo estalle, se incendie y se parta, como una rama seca. Es entonces cuando véis, debajo, una gran caída, hacia el espacio. El camino subterráneo simplemente se desprende de la puerta. Las llamas avanzan. Hacia vosotros. El camino se desploma poco a poco.

-Mierda.- Masculla Shepard. -¡Corred!-

 Veigon guarda el rifle y saca su arma de apoyo, la locust.

Mierda! necesitamos poder movernos de nuevo, alguna idea?