Partida Rol por web

- ¡¡Perfecto!! ¡Los quiero en celdas separadas! ¡Que no confabulen entre sí! Llévame ahora mismo junto a ellos, quiero ver quién de los tres está en mejor disposición de darnos información.... ¡venga, camina!...

Mientras apresura al soldado sigue mascullando para sí con una mueca sádica...

- Je.... de todas formas... creo que pondre a alguien a "trabajarlos" a todos.... seguro que acabamos descubriendo algo interesante después de un rato....

Ves que dos de los salvajes están ilesos, pero no parecen tener intención de hablar, de hecho a pesar de los golpes a los que los goblins les someten no han conseguido arrancarles ni un grito.

Me dirijo al tercer salvaje.... esperemos que este tenga mejor disposición de ánimo.... tengo que llevarle algo al rey....

- ¡Tú! ¿Estás cómodo ahí metido, sabandija? Pues espero que aprecies el lugar donde te encuentras.... porque como no hables pronto y me digas todo lo que quiero saber estos señores tan amables de aquí te van a llevar a otro "sitio" que créeme.... no te gustará nada conocer... jejejeje....

El salvaje echa la cara a un lado asustado. Para volverla más adelante a su lugar.

No puedes hacerme daño, porque ya estoy muerto. Mi alma pertenece a los Neths y ellos me han resucitado. Vosotros sanguijuelas verdes, no tendréis tanta suerte.

Una vez ha dicho esto regresa a su ostracismo ignorando voces y agresiones sin pestañear.

La revelación del salvaje me ha dejado sin habla.... ¿qué ha querido decir con eso?... ¿Los Neths le han resucitado?.... ¿Es eso posible?... Pero... si no parece un zombi ni nada parecido....

Le miro con atención... y juraría que me parece de lo más saludable....

Tengo que decírselo al rey.... esto es importante....

Giro sobre los talones y escupo en dirección a los guardias.

- ¿Y qué hay de los salvajes apresados antes del ataque? ¡¡LLevadme hasta ellos!!...

Están en la otra mazmorra.

Se aparta uno de los guardias con gesto de terror ante su jefe.

Observando al kadvuri, ves una enorme cicatriz en su abdomen, una herida que a tu parecer causaría la muerte a un humano. Sin embargo está cicatrizada.

Mmmm.... antes de seguir al lento guardia hacia la zona donde se encuentran los otros dos presos descubro una fea cicatriz en el vientre del salvaje...

No debería seguir en pie con semejante tajo.... ¿será cierto lo que ha dicho? ¿ha vuelto de entre los muertos? ¿cómo pueden tener los Neths esa increíble habilidad? y más dándole un aspecto tan saludable.... impresionante...

Creo que tenemos serios problemas.... Asco de día...

Me giro hacia el guardia y le sigo mientras digo entre dientes...

- Venga, vamos... no hagas que me impaciente... quiero ver a los otros dos....

Tras ir por varios pasillos y llegar hasta la mazmorra que han indicado, uno de los guardias abre la celda donde retiene  a uno de los kadvuries.

En la oscuridad de la mazmorra los ojos de un goblin detectan a la perfección la diferencia entre el anterior y éste. El anterior salvaje era mucho más pálido de piel, la de este era casi de color broncem su aspecto era más saludable, pero no mucho más.

- Bien bien bien..... veamos muñequito... ¿y tú qué tienes para decirme? ¿qué han hecho contigo tus papás Neths?... y lo primero... ¡Ponte en pie, maldito gusano!

Con un gesto hago que los guardias lo enderecen para poder verle entero y captar alguna herida o algún otro dato de su aspecto físico...

El enorme kadvuri de casi dos metros se levanta intimidando a Gustirk, para esupirle con sarna.

Enano insolente, morirás pronto. Muy pronto.

Dicho esto se volvió a sentar, ignorando al goblin. Que no aprecia ninguna herida en el salvaje.

Me limpio el escupitajo temblando de rabia...

- Ocupáos de este engendro... para esta noche quiero que no recuerde ni su nombre... ¿¿ME HABÉIS OIDO??..

Y salgo de la celda como un huracán. Agarro por la pechera a uno de mis guardias mientras el otro cierra la celda y con los ojos desorbitados de rabia siseo...

- ¿Dónde está el último?....

El dedo tembloroso del guardia indica la celda de em ferente a él, mientras sus pies apenas tocan el suelo.

¡Ahí eztá, zeñod!

Otro de los guardias abre la puerta con rapidez, para no enfadar a Gustirk. Justo en ese momento el salvaje se lanza contra la puerta, pero el guardia que la abría le detiene impidiendo que ataque o escape.

- ¡Cierra esa puerta! Parece que estas malditas ratas de cloaca tienen ganas de jugar ¿eh? Lástima para vosotros que vuestro ataque al castillo haya quedado en agua de borrajas, ¿no te parece?

Miro fijamente al kadvuri desde detrás de la seguridad de los barrotes de su celda... no es conveniente ponerse a su alcance... y desde luego no pienso hacer nada que ponga en peligro mi preciosa y verde piel...

Sigo tratando de presionarlo.... si no me equivoco estos dos prisioneros no deben de saber cómo habrá terminado el ataque al castillo, aunque viendo que siguen aquí algo se supondrán...

- ¿Me has oido? Habéis muerto como perros, que es lo que sois, perros lameculos de vuestros queridos amos los Neths...  ¿valía la pena el esfuerzo?... yo creo que no....

Mientras lo provoco para que conteste lo examino concienzudamente... su piel, su pelo, cicatrices...

El salvaje se vuelve a lanzar contra la cancela enseñando los dientes. Para detenerse y sonreír abiertamente.

Malditos estúpidos, aún no sabéis a lo que os enfrentáis. Jajajaja.

Mientras aún se ríe se gira hacia el final de la celda para sentarse y proseguir sus carcajadas, cada vez más audibles y socarronas.

No tenéis ni idea de lo que se os viene encima.

Aprieto los dientes contrariado... malditos sean... son más difíciles de sonsacar de lo esperado...

Sin embargo... no pienso dejar que crea que me ha vencido...

Me acerco a las rejas con cuidado, listo para apartarme si se lanza hacia ellas y ladeo la cabeza mirándole con una mueca de falsa tristeza...

- Y en cambio.... sé perfectamente lo que te espera a tí... - mi voz se vuelve hiriente y aguda mientras la mueca falsa se desliza de mi rostro para sustituirla una de profundo desprecio-  ¡la podredumbre de estas cuatro paredes hasta que se te coman los gusanos!.... ¡si es que los mismos gusanos deciden rebajarse tanto para masticar a un ser tan miserable como tú!...

Sin darle tiempo a moverse me aparto de la celda y me lanzo pasillo adelante hacia la sala del trono... aquí poco más queda por hacer.. es hora de dar parte al rey sobre lo que he conseguido averiguar....

Gustirk llega a la sala del trono y entra enm  la sala cuando todos están ya sentados hablando unos con otros sin mucho orden.