Partida Rol por web

Nothgoth - Memento Mori

Capítulo 3: Perdida

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30/05/2016, 19:47
Erina Goldspark

Erina asiente, pensativa, contemplando lo que está aprendiendo ahora y contrastandolo con sus vivencias pasadas.

-Hm... Creo que entiendo, pero entonces... Si solo puedes manipular energía y vincular energía, ¿Cómo has creado fuego?-, afortunadamente no es tonta, solo poco experimentada y con una mente poco abierta. -Has... Uh... Manipulado energía y... Las has vinculado al... ¿Calor?-, se frota el mentón, frunciendo el ceño.

-Esto es complicado. Pero supongo que si no lo fuese, todo el mundo haría magia...

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30/05/2016, 19:57
Mister Salzinni

Mr. Salzinni se ríe entre dientes. 

En eso tienes razón, aprender a dominar la magia no es algo sencillo. - Algo más serio prosigue. - Y sobre el vínculo de antes... No, no puedes hacer un vínculo con algo tan general cómo eso. El vínculo que he realizado es uno de los más elementales para un mago... Un vínculo con el aire. Es algo inestable por lo que no se puede mantener durante mucho tiempo, pero es muy sencillo traspasar grandes cantidades de energía a través de dicho vínculo porque básicamente, aunque nadie pueda verlo, por el aire viaja energía de forma natural. La manipulación en este caso consistiría en... - Tarda unos segundos en encontrar las palabras. - Digamos que sería algo así cómo zarandear la energía a gran velocidad y después concentrarla antes de pasarla a través del vínculo... - Mr. Salzinni mira a Erina con el ceño fruncido. - ¿Entiendes más o menos lo que estoy diciendo? Quizás es demasiado específico para un aprendiz. 

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01/06/2016, 19:36
Erina Goldspark

-Uh... Entonces... Espera. ¿Como que por el aire?-,  mira alrededor, confundida. El concepto de que el aire es algo "físico" le resulta extraño.

-... Entonces... La energía puede moverse por el... Aire. Por el cual pasa energía naturalmente... Y tu has movido el aire muy rápido... Como cuando encendemos fogatas. ¿Verdad? Como si frotases las rocas rápidamente para generar las chispas que encienden el fuego... Solo que sin rocas. Porque las rocas... Son la energía. O algo así.-, se frota el mentón. Al menos parece captar el concepto, si bien los detalles se le escapan.

-Ya veo. Parece complicado. Y peligroso.-, si al menos la explicación sirvió para darle a entender a Erina de que nada de lo que aprenda es para usar a modo de juego, algo es algo.

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01/06/2016, 21:06
Mister Salzinni

Si, sin duda es peligroso. - Dice Mr. Salzinni, riéndose entre dientes. - No te preocupes por los detalles, ahora mismo no tienes porque entender esto. Ya llegará el momento... - Después vuelve a ponerse serio. - En todo caso, cómo bien sabrás, la magia puede usarse para sanar a parte de para atacar. Esto es debido a su propia esencia, la energía vital, ya que tiene esa propiedad en su forma más pura. - Sonríe. - Me gustaría empezar por ahí con tu entrenamiento, ya que para sanarte a ti misma sólo debes saber cómo manipular la energía en el interior de tu cuerpo. Eso sí. - Levanta un dedo de advertencia. - No puedes abusar de esta habilidad. Al poseer sólo tu fuente natural de energía, el hecho de sanarte una herida te debilita poco a poco el cuerpo en general. - Se encoge de hombros. - Pero llegados a un caso extremo, yo mismo podría transmitirte parte de mi energía. 

Mr. Salzinni mira alrededor y le indica a Erina que se siente. Le indica además que se coloque en una postura relajada, pues iba a necesitar toda esa relajación si quería llegar al estado de concentración requerido para un principiante. 

No te obligues demasiado, de todas formas. Comenzar no es sencillo, no espero que domines esto hoy mismo... Pero pretendo enseñarte algunos ejercicios para que vayas practicando cuando tengas tiempo y la privacidad adecuada. - Mr. Salzinni también se acomoda. - Está bien, en primer lugar supongo que sería adecuado hacer una demostración... - Saca una daga del cinturón y con delicadeza se hace un pequeño corte en el dedo. - Concéntrate en la energía... - Dice Mr. Salzinni al tiempo que cierra los ojos. 

De la misma forma que antes, Erina pudo ver cómo una fluctuación viajaba del pecho de Mr. Salzinni hacía su brazo, aunque está vez la misma era mucho más delgada y parpadeante. Cuando llegó hasta el dedo de Mr. Salzinni, la herida se cerro lentamente por arte de magia. 

Ahora que lo recuerdo... - Comenta Mr. Salzinni guardando la daga tras abrir los ojos, con la naturalidad de quien no ha hecho nada especialmente sorprendente. - Habrás podido notar que por este vínculo viajaba mucha menos energía que por el anterior... Esto es también parte de la manipulación. Tienes que saber controlar cuanta energía quieres traspasar, pues en el caso contrario podría salir una llama de un tamaño indeseado o podrías desperdiciar energía en una herida tan simple cómo la que me he hecho. 

Después de que Erina indicara sus impresiones y dejara claro que lo había entendido, Mr. Salzinni prosigue. 

Llegó tu turno. - Dice sonriente. - Cierra los ojos, y recuerda que la prioridad ahora es que estés relajada. No debes intentar acelerar el proceso. - Mr. Salzinni espera varios segundos, después de que Erina cierre los ojos, y prosigue. - El primer paso debería resultar sencillo para ti, se que puede sonar extraño... Pero debes olvidarte del exterior y concentrarte en tu interior. Debes buscar tu fuente de energía, aquella que reside en tu pecho. Y una vez que la localices... - Añade un tanto dudoso. - Debes intentar... Tocarla con tu mente. No puedo explicarlo de otra forma... Para mí es demasiado natural cómo para entrar en detalles... Suerte. 

Erina intenta seguir las indicaciones de Mr. Salzinni. Poco a poco intenta olvidarse del sonido de las hojas zarandeadas por el viento, de su propia respiración, de los pájaros... Y intenta concentrarse en su interior, quedándose a solas en el vacío con los latidos de su corazón. Y se pasa en este estado durante varios minutos, a punto de perder la paciencia en varias ocasiones a pesar de que Mr. Salzinni se mantenía tan silencioso que tan siquiera parecía que estuviera ahí. Pero la determinación de Erina le impide abrir los ojos. ¡Era la hija de Marshall el Imparable! Algo tan sencillo cómo concentrarse no la iba a detener. 

Y de pronto la ve en medio del vacío. Una luz parpadeante, débil e inestable. No era nada comparado con la energía que rebosaba de su madre o de Mr. Salzinni. Pero algo en Erina le estaba diciendo que aquello era suyo, que le pertenecía. Y su parte más precavida le advertía que eso era su propia vida... Que no podía jugar con ella... Tendría que tener cuidado. 

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02/06/2016, 13:02
Erina Goldspark

Poco a poco Erina iba comprendiendo mejor. Le cuesta, está claro que son conceptos muy extraños para ella... Pero afortunadamente creció rodeada de esa magia y pudiendo percibirla, lo cual facilita el aprendizaje: Una vez va asociando las explicaciones a vivencias pasadas, todo va cobrando sentido.

Erina se muestra curiosa. Ante cada explicación... Hasta que da con algo: Las heridas. Muchas veces ya ha despertado sin ninguna herida. No solo ahora en sus nuevas aventuras sino en el pasado: Cuando alguien se rompía una pierna o se hacia un corte, solía tardar días sino semanas en recuperarse, o a veces la marca quedaba para siempre... ¿Cómo puede ser que ella no tenga prácticamente ninguna cicatriz después de todo el entrenamiento que hizo, en particular tras perder varios combates en estos últimos tiempos? ¡Claro! ¡La magia! ¡Debió haber estado haciendo esto de sanarse a si misma inconscientemente! Pensar en que es capaz de hacerlo la llena de confianza: Solo tiene que aprender a controlar ese instinto y estará un paso más cerca de conseguirlo...


Pasa bastante rato. ¿Qué hora será ya? ¿Cuanto quedará para la salida del sol...? Erina se mantuvo sentada en pose meditativa, al principio esforzándose mucho por concentrar su mente pero poco a poco aprendiendo a relajarse gracias a la guía de Mr. Salzinni.

Ella no se sorprende al caer en su vacío interior. ¿Por qué? Porque esta relajada y con la mente en blanco, claro. Sino se daría el susto de su vida y saldría inmediatamente de su estado de concentración. Poco a poco va empezando a percibir lo que sucede y notar esa energía: Notar que ese brillo es tan pequeño y frágil la llena de temor... Por un momento parece que va a perder el foco pero finalmente logra calmarse.

Intenta acariciarla: No con la mano sino con la voluntad, su intención es sentirla y moverla. ¿Cómo planea manipularla? Realmente no tiene ni idea... Solo sabe que la energía de Salzinni se movió de una determinada manera para llegar a su dedo herido. Quiere imitarlo tal y como imitaba a su padre cuando él le enseñaba un ejercicio con el cuerpo. ¡La fuerza de la repetición! Si una estocada le salía mal, debía repetirla cien veces hasta que aprenda a ejecutarla correctamente.

Le es difícil contener la adrenalina a medida que más se acerca a obtener resultados.

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02/06/2016, 15:06
Director

La luz en su interior se hace más clara cuanto más se concentra en ella. A pesar de que no tenía nada para compararla, Erina juraría que era del tamaña de un puño cerrado. Esférica pero con muchas perturbaciones, cómo si estuviera formada por diferentes corrientes de energía entrelazadas. La misma se mantenía en su sitio por mucho que Erina intentará mover la esfera. Sin embargo, cuando se concentró en un punto en concreto de la misma, casi podría jurar haber visto una perturbación en su forma. 

En general el proceso comenzaba a resultar agotador mentalmente. 

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06/06/2016, 13:48
Erina Goldspark

Tras quien sabe cuanto tiempo, Erina ya no puede más. Consiguió generar algunas perturbaciones en su propia energía, ¡Progreso, sí! Pero está claro que esto no será cosa de la noche a la mañana...

Finalmente ella abre los ojos y se sostiene la cabeza. -Ugh... Tengo una jaqueca que me está matando...-, exhala. -Esto es difícil... Pero la he visto, mi energía. Es... Tan pequeña.-, frunce el ceño, eso no le gusta para nada. ¡Mr. Salzinni la tiene más grande que ella!

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07/06/2016, 12:51
Mister Salzinni

Mr. Salzinni se ríe por lo bajo con mirada de diversión. 

- No te preocupes por ello, Erina, es normal que sea pequeña... Al fin y al cabo no tienes acumulada más energía que la que tu cuerpo genera de forma natural. - Mr. Salzinni medita durante unos segundos. - Supongo que hasta que no domines el control sobre la energía no podré enseñarte nada de utilidad. Cómo he dicho antes, deberías practicarlo siempre que puedas y sólo si estás descansada y a solas. Aunque... Antes de volver con el grupo, creo que hay una cosa más que debería mostrarte. - Mr. Salzinni se levanta y le indica a Erina con un gesto que lo imite. - Dame la mano. - Erina lo hace, colocando su mano encima de la palma que le ofrecía Mr. Salzinni. - Debes saber que la transmisión de energía puede funcionar en ambos sentidos. De la misma forma que le puedes extraer energía a alguien también se la puedes ceder. De esta forma es cómo los curanderos pueden curar las heridas de sus pacientes... Pero también sirve para esto. 

Erina puede ver cómo un pequeño flujo de energía viaja por el brazo de Mr. Salzinni hasta su mano. Y de pronto, un extraño calor acompañado por un inesperado cosquilleo comienza a desplazarse a través de la mano de Erina. Ella misma puede ver cómo la energía viaja a través de su brazo, hasta su pecho. Y puede ver cómo el flujo de calor se enrosca a través de su propia esfera de energía. De alguna forma, Erina se sentía más bien en ese momento, algo más relajada y descansada. 

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14/06/2016, 15:11
Erina Goldspark

-... No te preocupes, no esperaba hoy mismo, no sé, convertirme en una dragona y arrasar con un ejército.-, respondió, frotándose la cara con cansancio.

Erina le ofreció la mano cuando esta fue requerida. Su cuerpo se estremeció un poco ante la sensación de vigor recorrió su cuerpo. Con un suspiro, la más relajada Erina esbozó una sonrisa.

-Ah. Gracias, "Maester Salzinni".-, dice con tono rimbombante. Se mira la mano, curiosa. -... Hm... Ahora que me has explicado todo esto, entiendo mejor por qué se ha movido como se ha movido la energía dentro de tu cuerpo... Quizás una vez aprenda a manipular mi energía no me cueste imitarte.-, sonríe ella, emocionada. -... Deberíamos regresar, deben estar preocupándose.

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14/06/2016, 21:35
Director

Tienes razón. - Dice Mr. Salzinni sonriente, poniéndose en marcha. - Ya tendremos tiempo de hablar sobre esto con más calma. No te olvides de practicar. 

Con el tramo recorrido ya no estaban muy lejos del campamento por lo que tardan muy poco en llegar. Allí Samantha y Ron estaban tomando una sencilla y silenciosa comida, mientras que Cormac y Rupert parecían seguir dormidos. Ambos estaban hablando en susurros, Ron parecía estar dándole una reprimenda a Samantha por su expresión, aunque la misma parecía estar feliz de escucharla. Cuando los ven llegar se detienen y le invitan a comer también. 

Eventualmente, todos se sienten lo bastante descansados para retomar el viaje. La investigación sobre los Golem tenía que continuar a pesar de todo lo que estaba ocurriendo, y si querían aprovechar de verdad el viaje tendrían que hacer una parada en todos los lugares habitados cercanos a la zona dónde los Golem solían deambular en el pasado.

El viaje sigue su curso sin incidencias, aunque acaba resultando bastante agotador (Sobretodo llevando Erina su armadura). Aprovechan caminos de montaña, aunque no se topan con viajeros por los mismos. En cierto sentido, la paz que le ofrecía la montaña le estaba resultando revitalizadora a la estresada Erina, pero otra parte de ella, la más prudente, no podía evitar preocuparse por lo desconectada que estaba del mundo en aquel lugar. Con todo lo que estaba ocurriendo, ¿Cuál sería el verdadero peso de su viaje? Aunque en realidad, Erina siempre intentaba descartar estos pensamientos debido a que al fin y al cabo ya no había vuelta atrás.

Aunque si que había otra cosa que perturbaba especialmente a Erina y era el silencio con el que avanzaba la marcha. Había conversaciones y comentarios puntuales, pero pronto las cosas sobre las que hablar se acabaron. Erina hablaba sobretodo con Mr. Salzinni, puesto a que algunas noches intentaba practicar los ejercicios y le pedía ayuda o consejos. Sin embargo, a pesar de preguntárselo en la más estricta privacidad, Mr. Salzinni no parecía muy propenso en extenderse con sus lecciones cuando el grupo estaba cerca. 

Erina no acababa de comprender esta aversión por no hablarles de algo cómo aquello a sus compañeros, pero por otro lado sabía en quien no confiaba especialmente Mr. Salzinni. A pesar de llevar días con ellos, parecía que nadie se había acostumbrado a la presencia de Rupert, aunque el mismo no parecía predispuesto a mejorar esa situación. Se mantenía callado y levaba unos días en los que parecía permanecer continuamente de mal humor. 

Notas de juego

Dejo esto en el aire por si tienes curiosidad en indagar sobre Rupert, en caso contrario continúo con el FF. 

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15/06/2016, 11:50
Erina Goldspark

Erina hizo lo posible por mantener buena cara durante el viaje. Algunas noches soñó con el hombre de las vendas y el juez con su puñal, ninguno de ellos contribuye a un buen descanso.

Afortunadamente los entrenamientos con Master Salzinni, aunque no resulten particularmente extensos o detallados, la ayudan a distraerse. ¡Está aprendiendo algo nuevo! Aunque le preocupa un poco el estar haciendo menos ejercicio físico... Por suerte todo el viaje y cargar la armadura la mantiene en forma.

Cuando Salzinni no está libre para descansar, convoca entrenamientos con el grupo. Intenta hacerlos amenos, hace combates amistosos con sus amigos... En general, Erina no es la mejor guerrera del grupo pero entiende a la perfección el estilo de cada uno, sus debilidades y fortalezas: Con su conocimiento y perspectiva suele ayudar a los demás a mejorar aunque ella esté más o menos estancada.


En uno de los descansos, Erina se acercó a Rupert mientras él estaba ahí como siempre, apartado del resto.

-Hola. ¿Puedo sentarme aquí?-, le pregunta antes de sentarse, asumiendo que le dirá que sí. Realmente solo preguntó por educación y ya.

-No te sientes muy cómodo, ¿Verdad?

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15/06/2016, 21:05
Rupert

Rupert se encoge de hombros cuando Erina le pide permiso para sentarse, a pesar de que ella lo hace igualmente. Cómo siempre tenía mala cara, comiendo de espaldas al grupo. Cuando Erina hace la segunda pregunta, el responde sin muchos ánimos y sin dejar de mirar hacía adelante. 

No puedo estar cómodo en un lugar en el que no se me acepta, pero no me importa. - Le dice quitándole importancia con la mano. - Todo estará bien siempre que estés a salvo. - Suspira. - Es el único motivo por el que sigo aquí. 

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18/06/2016, 23:47
Erina Goldspark

Erina asintió con suavidad, observando a Rupert.

-Entiendo. Os agradezco ello.

-... Quizás podríamos intentar ayudar a los demás a que confíen un poco más en tí, ¿No crées? Seguro hay cosas que te interesen o te gusten que no tengan que ver con secretos y tal... No lo sé. Mr. Salzinni es el tipo de persona a la que le gusta leer, quizás podeis hablar de libros y eso... Y Ron ha estado en el ejército, seguro que podemos hablar los tres de estrategia, si eso te interesa.

-Samantha quizás parezca dura pero es una persona muy buena y atenta. Quizás si tienes alguna historia sobre tus aventuras o desventuras, le gustaría escucharla.

-... A lo que intento llegar es que... La situación no va a mejorar sola y creo que por el bien de todos, sería mejor que no hayan tensiones internas.

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19/06/2016, 15:26
Rupert

Rupert escucha a Erina con paciencia al principio, pero a medida que su sermón continua, el mismo parece cada vez más molesto e incómodo. Sin embargo, cuando Erina termina, Rupert da un largo suspiro y la mira con una sonrisa triste. 

Gracias por su consideración... Pero no me importa que las cosas sigan cómo están. No he venido aquí a hacer amigos o enemigos... Sólo a protegerte. Y si ellos no buscan la tensión, yo tampoco lo haré. - Se encoge de hombros y vuelve a mirar al frente. - Pero si insistes, intentaré mostrarme algo más colaborador, y vigilaré también por su seguridad.

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19/06/2016, 18:34
Erina Goldspark

Erina asiente un poco.

-Lamento haberos importunado. Os agradezco vuestra paciencia y vuestras buenas intenciones. Si puedo hacer algo por vos, solo tenéis que pedirlo.-, responde con amabilidad, poniéndose en pie. Cuando no lleva la armadura y no está cabreada, parece una noble como cualquiera.

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19/06/2016, 19:05
Director

El viaje continúa su curso y a pesar de que las relación del grupo con Rupert no parece mejorar, si que era cierto que ya no se mantenía tan apartado mientras que avanzaban por los caminos. Aunque aquello no era complicado, debido a que a medida que subían se volvían más angostos y peligrosos. Los recursos comenzaban a escasear, por lo que encontrar una aldea en medio de un lugar cómo aquel fue su salvación. 

No parecía un sitio especialmente transitado, pero sin duda era bastante pintoresco. Un grupo de cabras pastaba en prados dónde la hierba empezaba a escasear por culpa de la llegada del invierno bajo la atenta mirada de un pastor. Al mismo le pidieron indicaciones para saber si había una posada en el pueblo dónde pudieran pasar la noche, pero cuando llegaron ahí vieron que la pregunta sobraba. Al lado de un cartel dónde rezaba "Ayuntamiento/Posada" parecía estar la estructura más grande y resistente de toda la aldea. Cómo su nombre indicaba, era el alcalde el que ofrecía su casa a los viajeros siempre que tuvieran el dinero para pagar las habitaciones. 

El resto de casas eran prácticamente cabañas, y el lugar más transitado (Y por más transitado nos referimos a una docena de personas) era una pequeña plaza en el centro de la aldea con una sencilla charca en el centro dónde en el pasado debía de haber habido una fuente. Las gentes del lugar miraban con cierto recelo a la comitiva, seguramente poco acostumbrados a la presencia de extranjeros en aquella zona.  

Ron, Cormac y Mr. Salzinni fueron a hablar con el alcalde, dejando solos a Erina, Samantha y Rupert. Y Rupert parecía ser el más incómodo con aquella situación, por lo que simplemente se sentó en el primer tronco que encontró a esperar. Samantha, sin embargo, miraba los alrededores con cierta añoranza en los ojos. A Erina le costaba recordar que Samantha había crecido en una sencilla aldea cómo aquella, a diferencia de Erina que había estado siempre rodeada de muros.  

Samantha miraba con especial curiosidad de varios niños que se aglomeraba alrededor de alguien cerca de la charca. 

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21/06/2016, 10:47
Erina Goldspark

Erina se da por contenta. Ha hecho lo que ha podido y al menos hay un poco más de contacto aunque las tensiones no hayan bajado.

Al llegar al pueblo, Erina suspiró con alivio. Necesitaba comer bien y descansar un poco en una cama cómoda, todos estos entrenamientos con Senzei Salzinni (El Senzinni) le estaban agotando debido a que su rutina se veía reducida a viajar todo el día y parar para comer o dormir. Esto último realmente significaba parar para entrenar media noche y dormir el resto. La pobre está empezando a tener ojeras.


Finalmente en el pueblo y a solas con el grupo, se acercó a Sam para darle algo de espacio al agobiado Rupert. Empieza a asumir que simplemente no es una persona muy sociable y el tener que esforzarse en mantenerse en grupos 'grandes' le desgasta mucho.

-¿Tu hogar se parecía a esto, Sam?- le preguntó mientras intentaba ver mejor qué hacían los críos por ahí. Se acerca un poco para ver quien es la persona que atrae a los pequeños.

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21/06/2016, 16:40
Director

No habían pasado muchos días, pero el duro entrenamiento de Erina comenzaba a dar sus frutos. Si bien no lo podía hacer con la misma velocidad y precisión que Mister Salzinni, ya comenzaba a poder manipular ligeramente su energía interna. Transportarla a otros lugares aún le costaba horrores, pero dentro de su posición podía hacerla cambiar de forma e incluso alterar su flujo a voluntad. 


Parece que Samantha tarda unos segundos en darse por aludida tras la pregunta de Erina. 

- Oh. - Dice algo sorprendida, y sonríe al pensar en ello unos segundos. - ¿Parecerse? No estoy muy segura de si considerarlo parecido... Al fin y al cabo, ni siquiera vivo en las montañas. Pero aún así, la atmósfera... Huele a hogar, ¿No te parece? - Respira profundamente, extasiada. - Se siente cómo un lugar al que es imposible que lleguen los conflictos. 

Mientras Samantha hablaba caminando a su lado, Erina se había asomado ligeramente a curiosear cerca del corro de niños. Había un viejo sentado en la piedra que rodeaba la charca. Su aspecto no indicaba que pareciera estar muy bien de la cabeza y de hecho algunas madres estaban llamando a sus hijos para que se alejaran de ahí. Por la forma en la que el viejo gesticulaba con los brazos y la pasión en su rostro, era evidente que estaba contando una historia. 

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22/06/2016, 13:13
Erina Goldspark

-Sam, por la diosa, no digas que es "imposible que lleguen los conflictos" que a este paso nos invocas un Golem o tres encima.-, a estas alturas ya asume que a su paso la ley de Murphy se aplica de manera automática e inexorable.

Una vez llegan cerca del anciano, Erina ladea un poco la cabeza. -... Parece ser un cuenta-cuentos o algo así. Por el tono de esas madres, diría que se debe tratar de un extranjero también.

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22/06/2016, 14:13
Director

Erina y Samantha se habían parado sin darse cuenta cerca de uno de dichas madres. La mujer, que sostenía un bebé en brazos, parece darse por aludida con su último comentario. 

No es extranjero. - Comenta de pronto, dirigiéndose a Erina con el ceño fruncido. - Es Harrot el Loco, lleva aquí desde antes que yo pero hace años que está mal de la cabeza. Se pasa el día asustando a los niños con sus historias inventadas. Ahora no para de repetir que los Golem aplastaran esta montaña. - Chasquea la lengua, asqueada. Y de pronto vuelve a gritar hacía uno de los niños. Parece que el mismo por fin se da por aludido y va hacía allí, pero su recompensa es ser regañado por su madre. Ambos se van por uno de los callejones que llevaba hasta la pequeña plaza.