Partida Rol por web

Comienzo a correr hacia la verja y luego poniendo mis manos en un buen lugar doy un salto hacia el otro lado quedando en el mismo lugar que estos chicos.

-Hey ustedes, que hacen aqui.

Mientras corro hacia uno intentando correrlo de su lugar.

Recibe los cinco dólares con algo de incredulidad, nunca había recibido dinero gratis en este lugar y parecía demasiado bueno para ser verdad. Gracias. dijo muy agradecido con el hombre. Fue solo cuando se retiró sin decir nada más, dejo de pensar en aquello para concentrarse en el juego.

Al parecer el hombre si tenia suerte y termino pasándole al menos un poco a John. Ayudándole a conseguir un premio, aunque no era nada del otro mundo pero lo suficiente para sentirse un poco mejor y convencerse que no le fue tan mal esa mañana.

Con algo de esfuerzo John se convenció en no gastar su ganancia en el casino, al menos por el momento. Saliendo un poco mas rico y contento de lo que habia entrado. Decidio vagar un poco por las calles de la ciudad hasta que sin darse cuenta termino frente a la playa, un lugar que aunque no aborrecía no habia tenido la costumbre de visitar seguido. Sin nada mas que hacer decidio descalzarse y caminar un tiempo por ella, relajándose con el sonido del mar.

Con mucha agilidad saltas la vaya sin problemas y corres hasta donde estan esos seres extraños.  Te vas acercando con sigilo, escondiente detras de los coches y consigues a partar de tu posición. Revolcandose por el suelo se vuelve a levantar y no le logras hacer daño y este se recupera poniendose de pie de nuevo. El resto de los 3 pillajes que estaban allí golpeando el coche, mirando como de coger algo en su interior, se giran ante el estrepito de su compañero.

Notas el frescor del agua del mar como baña tus pies. Te sientes relajado paseando entre la gente que disfruta del mar y la playa. Cuando a lo lejos, a unos 60 metros ves a gente correr asustada hacia fuera. Desde dentro del agua emergen 3 figuras extrañas. Parecen personas vestidas de etiqueta con traje negro y sombre de copa. La lejanía no te deja ver del todo con detalle. Los ves agitar los brazos y golpear a la gente sin ton ni són. Cuando llegan hasta donde estaba una pareja tomando el sol, el cual intentaban escapar, los sacan de allí y empiezan a rebuscar entre sus cosas y remover la tierra. Que buscaran? te preguntas. Ya que no parecen tener la intención de hacer daño, solo como asustar.

Observo bastante extrañado el bizarro espectáculo que se desarrollaba en la playa. Sin retroceder queriendo ayudar a los que se encontraban en medio de aquellas tres figuras y su objetivo, aunque claro que habia algo de curiosidad para ver que buscaban.

Sin ocultarse los miro con mucha atención corriéndose del camino de las personas que se iban. Ey, que les pasa?! Les grito mientras seguía avanzado a ellos con una determinación parecida a la que usaba con su padre. Miro por un segundo a la pareja por si necesitaban su ayuda para escapar.

Miro a las criaturas y luego intento golpearlas. -Alejensen malditas cosas.

Parad parad! - Dije intentando calmarlas - Como van a ser monstruos? Estais locas? Y tranquilizaos un poco lo que menos necesitamos es que cunda el pánico... - Dije mientras miraba alrededor buscando alguna salida y intentando localizar de donde venía el gentío para dirigirnos en dirección contraria y hacia el exterior...

La calle era de un solo carril, pero al tener pocos coches aparcados por los laterales encuentras el momento para hacer un derrape, aunque no te sale del todo bien. Los seres extraños se medio descuelgan y caen rodando cuando el coche hace un giro de unos 60º hacia la izquierda.

Estos se levantan habiendo perdido sus hachas, que estaban por el suelo, las intentan recuperar para volver a atacar el coche. Sales del coche y le aplicas tu Perky Gough al primero que te encuentras mientras al segundo se queda mirando con hacha en mano.

Lanzas al "Crow 3" por los aires de forma sorprendente y lo apartas de allí. Sus dos compañeros alertados por tu movimiento, empiezan a dar saltitos y emitir su raro sonido, como un cuervo, en señal de amenaza con sus hachas en mano.

Sales rápido con tu moto deportiva y tras 15 minutos de conduccion llegas al taller Motorbikes California. Allí en la puerta estaba tu novia esperandote. En ese momento se estaba maquillando un poco ante el espejo de mano. Dentro estaba el Mercedes y el propietario del taller arreglando la motod. Un hombre calvo con bigote, algo regordete.

Ahhh!!!! Que alguien nos ayude!!! Se escuchaba la voz de la chica, mientras el chico quedaba insconciente por un golpe del hacha en la cabeza. La chica empezaba a entrar en panico, pero no podía salir ya que le cerraban la salida los 3 seres. De más cerca ya puedes ver perfectamente sus detalles.

La zona ya quedó vacía con sola esa pareja siendo atacada. El resto de la gente escapó como pudo.

Se maldijo por dentro por dudar antes en apartarlos, pero se propuso corregir en su error. Empezo a correr furioso en direccion a los sujetos con trajes y cuando estuvo cerca los embistio con todo el impulso que habia ganado en la corta carrera.

Saca a tu novio de aqui, yo los distraigo. grito a la chica que se encontraba asustada, esperando que aprovechara la oportunidad que le creaba.

A ver, en estas situaciones la cosa es bien clara: porr valiente y arrojada que sea una, los otros tienen armas. ¡Pero tampoco puedo dejar que se cepillen a mis amigos!

"¡Que-Alguien-Me-Ayude!" grito, esperando que algo o alguien lo haya oido. Que demonios...

Sin esperar respuesta, intento darle una patada en el estómago al mismo tio raro al que le dí antes... sin caer en la cuenta de llevo 15cm de tacón y un muy precario equilibrio (Sacar un 1 en los dados creo que es una Señora Pifia) así que más que hacer daño termino dando un espectáculo a quien sea que esté por la zona...

Desde donde sea que haya acabado, intento esquivar...

"¿Por que no eligieron un lunes para atacar?" pienso, mirando a los tios y sus extrañas armas

 Me acerqué a ella, sonriendo:

 - Hola, ¿te he hecho esperar mucho, cariño?.

La gente alborotada salía del interior del museo, e incluso por detras vuestro, pasaba gente corriendo. Mas seres de estos revoloteaban dando saltitos pequeños rebuscando. Incluso algunos se metieron al interior del bar asustando a los clientes.

Rocío, como Elizabeth las dos estaban asustadas. Claro que son monstruos, tu crees que eso es gente disfrazada? Exclamaba Eli mientras miraba a todos lados, buscando a donde esconderse.

Rocío comenta: Lo mejor será meternos adentro del museo, seguro podremos escondernos.

Por mas que buscabais una salida, esa parecía la mejor opcíon. De otras zonas seguían apareciendo otros pegando a la gente, rebuscando por la calle entre las plantas, basura, mobiliario, etc. Se podían contar alrededor de unos 15 tranquilamente.

No demasiado cariño. Guarda el set de maquillaje en el bolso y te da un pico en la boca. Podemos ir a dar una vuelta por la playa? Quiero ver si compro algo por allí.

Angela se despide del mecánico: Ya me avisa cuando esté el coche, por favor.

No se preocupe. Cuando tengamos las piezas, en un par de días lo tendrá. No estamos saturados ahora de trabajo. Siento no despedirme correctamente.

EL mecanico estaba liado colocando el motor de una moto y con las manos ocupadas, ajustando algunos tornillos.

Atacas al Crow 1 usando tu talón, pero este se te escapa de la mano por el ímpetu. El mismo que se levanta se prepara para darte un puñetazo mientras el Crow 2 te intenta dar un hachazo por la espalda.

Lanzas con fuerza al Crow 1 bastantes metros atrás que sale rodando por la playa. Eso crea una apertura el cual el chico y la chica salen corriendo hacia el paseo.

Gracias, seas quien seas!! Grita la chica mientras se aleja cogida de la mano de su novio. Allí en medio estaban las dos toallas, una sombrilla y el bolso enorme con su ropa.

El Crow 3 se prepara para darte un puñetazo. Sin duda era bien potente dirigido hacia tu cuerpo. El Crow 2 se mantenia con su hacha en mano.
 

 Nos despedimos del mecánico y vamos a la playa, abrazados y acaramelados, paseando, puesto que el sitio está cerca:

 - Bueno... Y aparte de lo del coche, ¿como a ido tú día?. - Le pregunto, mientras vamos a nuestro destino.