Partida Rol por web

No tienen cerradura al menos a simple vista. Están pegados a sus escamas. No entiendes que no tengan cadenas, algo extraño, supones.

Te fijas en Ssirt. No ves ningún indicio.

"Si es verdad lo que dices...Significa que alguien dio un golpe de estado. ¿Como se que no nos estas mintiendo? Akal dijo que mandó a otros antes que a nosotros, ¿Sabes donde estan? -pregunto sin moverme- "¿Puedes decirme tambien cuantos guardias hay?

-¿Para qué? Creo que ganaríamos más tiempo dejando a este panoli aquí y yendo a hablar con el nuevo emperador. 

El emperador da un largo suspiro mientras aprieta los barrotes. No parece que Yador vaya a ser su nuevo bufón real.

"Esos otros de los que hablas llevaban mucho tiempo en la corte, desconozco que les ha ocurrido pero probablemente corrieran el mismo destino que sufro yo y mis subditos; encadenados esperando la muerte. Ahora sacadme de aquí rápido, no tardarán en venir algunos guardias."

Sonrío viendo que se relaja un poco.

-¿Cómo se piden las cosas, emperadorcillo?

Para ti parece que miente.

Me doy la vuelta nervioso. Observo las rejas.

Me dirijo a Yador - "Tú, siervo. Has estado en muchas más cárceles. Demuestra cómo has escapado de ellas."

-Podría forzar la cerradura. Pero no soy ningún siervo. Soy compañero de misión y, como mucho, un subordinado tuyo en el ejército de Akal. Pero siervo mis cojones.

"Mmm, si te sacamos intentarán matarte ¿no?" -sigo mirandole.

"Yador...Me preguntaste para que servia el brazalete, si te lo pones puedes crear lo que quieras, una daga que nadie mas que tu pueda tener y que es imposible perder...O una llave para abrir a nuestro emperador..." -dicho esto me giro hacía SSirtash.

"¿Tu crees que miente?"

-Creo que es probable que esté mintiendo para que lo saquemos. Y no necesito magia para abrir puertas -escupo al suelo.

"Mas te vale sacarme de aquí." - Comenta amenazante. - "Si es que quieres vivir, claro..."

Los grilletes son obviamente mágicos, inhiben el uso de la magia.

"Si nos miente lo matamos, no hay mucho de que preocuparse, somos tres contra uno. Aunque si por el contrario dice la verdad...Estamos en un pequeño aprieto"- Me rio por lo bajo al terminar de decir esto.

Me giro hacía las otras celdas y miro cuantos cadáveres hay, buscando alguno que pueda servirme.

Todos te sirven, pero tienen el mismo problema que el emperador: Las puertas están cerradas.

Escucháis pasos a lo lejos del pasillo, hay una esquina no os permite ver más allá. Al menos dos personas a juzgar por el sonido de sus pisadas. 

-¿No querías cadáveres? Aquí tienes de sobra. A ver qué eres capaz de hacer.

Saco con disimulo mi cuchillo chachi. 

"Abreme las puertas y lo verás" -Digo señalando una de las celdas.

- "Abridle" - susurro.

Me dirijo sigiloso hacia la esquina. Preparo el estoque.

falla sigilo por 1