Partida Rol por web

El hamster en su estampida, no piensa en dueño ni compañia y teneis que acelerar vuestro paso para llegar a verlo convertido en una polvareda en la calle del tenebroso pueblo, mientrás que los conciudadanos os miran con curiosidad, viendo como un barbaro que empieza a sudar, una mujer con un conejo asomandose del bolso y un pequeño gnomo que les sigue el paso persiguen a la pequeña bestia. Finalmente, cuando pensais que os esta llevando en circulos, porque todos los malditos edificios os parecen iguales, os encontrais enfrente de una taberna, pequeñita con un hombre vestido de mayordomo mirandoos con fijeza al veros tan polvorientos y machacados, en el letrero pone "cubo de meados". El hamster se adentra por la puerta, abriendola de par en par como si fuera una pequeña fuerza de la naturaleza...

- Cubo de meados? - leo sorprendido - Estais seguros? No parece ser buena idea.

De alguna forma el hamster habia llegado a una taberna pero no parecia ser mejor que las demas, era la tipica taberna escondida donde la muerte esperaba a los viajeros.

- No se... - aunque al menos alli no parecia haber alguien esperando a echarnos.

— Un hámster gigante del espacio ahora en miniatura nunca se equivoca... —Y diciendo esto, entro tras mi roedor, a ver que se cuece ahí dentro.

¿A quién le importa el nombre, si el alcohol es bueno y barato?

A la retaguardia y con la nariz ya arrugada esperando recibir el aroma de cuyo titulo hace gala el local, así con aire estirado, ya repugnada por la evocación de recuerdos que provoca... sigo a los buscadores de información hacia el interior del supuesto antro

mañana os posteo :P¡¡¡

Antes de dirigiros al interior del bar de tan ... pintoresco nombre, escuchais como se acercan a vuestra espalda el resto de vuestro grupo, al parecer las compras han sido más rapidas de lo que esperaban. El hombre que se encuentra enfrente de la puerta con un frac puesto os mira desde un bigote bastante poblado y dice:- ¿Estais seguros de que venis aquí? ¿Seguro que no quieren ir a las otras tabernas?- Mirandoos de arriba a abajo, al parecer en este pueblo se tiene por norma sospechar de todo...

— Lo siento amigo, pero vamos donde el roedor quiere. Él es nuestro lider, es la luz que nos ilumina en los momentos de tinieblas. Si ha decidido que entraremos en esta taberna, por algo será...

Diciendo esto, y sin oportunidad de que me replique, entro en la taberna, colándome entre las piernas del hombre si hace falta

¿Que tal ha ido todo? ¿Habeis comprado algo chulo? - Comento a los rezagados mientras ya paso tras Ziffbong como si su réplica valiera de pase a toda la pintoresca compañía que iba a entrar en el local en estampida tras él, Verne pregunta principalmente a Blancaflor a quien mira extrañada, tal vez haya estado en apuros por ahí, de ser así, se notaría un aire heroico en el gesto de Bifidus.... pero no notaba nada extraño

Sonrío tímidamente a nuestro recién completado grupo y luego al portero.

- Permiso - le digo con una sonrisa mientras me pongo de lado para pasar entre él y el marco de la puerta evitando tocarle.

Al menos va bien vestido... eso es bueno supongo. Normalmente la gente que viste así no intenta arrancarle la cabeza a uno, a lo sumo envía a alguien a que lo haga por él.

-Pues sí, bastantes cosas. Respondió Gregory a su coneja amiga. Aunque nos hemos tenido que conformar con irnos sin lo más esencial, al menos solo es una cosa lo que nos falta, pero material para la expedición tenemos bastante, puedes comprobarlo tú mismo.

El zombie sindicalista le echó el saco encima a su compañera y añadió:

-Puede que el pequeño bárbaro pueda ayudarnos con lo que nos falta, y si no, tal vez yo mismo pueda encontrar algo en el cementerio de la zona, que ya me conozco esos barrios... Y ya que estamos ¿Dónde está la manifa? Por el alboroto pensaba que había empezado una carga de las buenas, y que corriais por delante de la ley a causa de una negativa del gobierno local a realizar una reforma laboral, que ayude a las hadas y duendes de arcoiris marginados a integrarse en este tétrico mercado laboral. No he visto ni un solo representante feérico desde que llegamos, y esa gente es capaz de dar mucho miedo si se lo proponen, no sabeis lo que es estar perdido en un bosque lleno de hadas durante dos semanas seguidas. Terminas con los nervios desquiciados de tanto oir campanillas y flautas de pan.

Blancaflor no podía dejar de mirar para todos lados, muy nerviosa, mientras entraban en la taberna. Ese no era un sitio para una doncella como ella. Estaba segura que si llegaba a encontrarse en apuros, allí no hallaría ningún caballero dispuesto a salvarla. Por suerte contaba con Bifidus y el resto de la compañía... pero ellos ya eran viejos conocidos y así, su reputación no aumentaría nunca y no llegaría a ser la protagonista de ningún cuento.

Iba a responderle a la chica conejo pero el zombie se le adelantó. Sin embargo, cuando pudo meter bocado, lo hizo. -Bueno, ya lo verás por ti misma, pero hemos conseguido buenas cosas, sobre todo para la próxima vez que debamos dormir al aire libre. Eso sí, el señor de la tienda comenzó siendo de lo más amable y luego se avinagró de una forma... ¡que ni te cuento! Al parecer, en este pueblo no saben tratar a los turistas, y lo de "el cliente tiene siempre la razón" nadie se los ha enseñado- la doncella se enfrascó en una verborrera sin fin. Tanto tiempo lejos de casa comenzaba a notarse. Extrañaba a sus amigas cotillas de la academia de Doncellas en Apuros, así que viendo que Verne se interesaba un poco en sus andanzas decidió adoptarla como confidente. Con semejantes orejas no parecía que hubiera algún problema en escucharla. O al menos eso es lo que ella creyó.

El portero os deja pasar como si hubiese visto fantasmas, y trás traspasar las puertas comprendeis por qué, pues no hay nadie en la susodicha taberna, a excepción del tabernero tan engalanado como el portero y una aburrida camarera con traje negro y minimo que  permite ver sus largas piernas que está tamborilenado en el suelo. Al veros el tabernero se frota los ojos y luego dice con voz aguda:- Clientes, ¡Hay clientes! Josephine venga ahora mismo a mostrarles un asiento, o los aseos, o lo que quieran....- Ya hablando para vosotros con voz queda:- Bienvenidos a mi taberna, señores y señoritas, en que puedo servirles...- De repente ve como una bola de pelo se pone en la barra y le mira inquisitivamente, como si la entendiera pone una escudilla y la llena de cerveza. El hamster de Ziffbong puede ser muy claro cuando la necesidad de trincar cerveza entre pecho y espalda apremia.

La camarera se levanta y con una sonrisa algo extraña(No parece haber tenido mucho contacto con el publico, y parece no saber que cara poner os pregunta:- ¿Quieren una mesa o vienen con más amigos? O mejor, son la avanzadilla de toda una horda de gente sedienta... digame que si...- La desesperación se pone en su cara linda, pero algo pecosa.

Bifidus accede al local junto a sus compañeros, aun pensando el lo que habia podido fallar con su tecnica de hipnosis...

No me habia fallado antes... bueno o al menos antes de este extraño viaje....

Con el run-run detras de la oreja, dandole vueltas al tema, intenta centrarse en lo realmente importante en esos momentos... Cogerse un ciego para olvidarse de sus fracasos como monstruo de armario. Una mala racha se avecinaba, depresion monstruil incluida, e iba necesitando un armario para saciar su necesidad de miedo infantil...

- Un licor, camarera... que ssssea fuerte, pleassse!

— No, pero casi —contesto a la camarera— No somos una horda, pero mi hámster y yo estamos sedientos, y podríamos beber casi como una horda de gente sedienta. Así que ahora... ¡Ponganos bebida!

Por supuesto, paso de las presentaciones y reencuentros, y me ubico junto a mi roedor en la barra, a la espera de la bebida. No lo hago por pasar del grupo realmente, lo que pasa que ninguno está preparado para aguantarnos el ritmo a mi roedor y a mí.

¡ A mí un zumo de zanahoria ! ¡Bueno dos!

Me he sentado en el extremo de un banco, con el saco a un lado abriendo y revolviendo con una mano, palpando el interior para encontrarme con palos de tiendas de campaña y otros enseres que de poca utilidad seguro me parecerán. Por el vacío del lugar y la voz de los anfitriones parece que tenían problemas con la clientela..... sería culpa del nombre

Deberían pensar en cambiar el nombre del lugar, tal vez: agujero lleno de bebidas chachis, o algo así

Verne no era muy inteligente ni creativa, y tampoco se exprimió los sesos por tratar de sacar un nombre de bar que inspirara sorpresa y risa cuando lo vieras para que te animara a entrar, simplemente puso un nombre que evidenciara su buen producto.

- Oh... - exclamo sorprendido.

Aquello no era lo que esperaba, creia estar por entrar en uno de esos muy reservados clubes para gente con una cierta capacidad de gasto de la que nunca he podido alardear. Un sitio donde los insultos fueran demasiado complejos para ser comprendidos. Sin embargo en aquel sitio no habia nadie, o casi nadie.

Esto esta muy bien... el sitio esta limpio - pienso mirando alrededor - no hay caras amenazadoras ni parece ser un lugar donde una rata gigante pueda vivir.

Observo a la camarera mientras Claus le habla

Y la muchacha parece amable y muy bonita... quizas se llame Gloria...

De repente lo noto, claro como el agua el entendimiento llega a mi mente.

Pero entonces... por que no hay nadie? La gente debe temer este sitio! Es demasiado bueno... la comida debe estar hecha con la carne de quienes se atrevieron a entrar y la bebida con su sangre!

Nervioso y con una sonrisa estupida por un torpe intento de parecer tranquilo me mantengo de pie sin atreverme a sentarme a mirar como Claus y el hamster toman lo que sea que les esten sirviendo, a la espera de que caigan o bien muertos o algo aun peor.

No debimos alejarnos de la zona turistica... seguro de aqui no salimos.... Por Patina... Por Patina...

El parloteo de Blancaflor cesó cuando entraron al lugar y vio que estaba vacío. Eso no era bueno. Allí no habría oportunidad de verse en apuros. De hecho, en ese lugar parecía no haber oportunidad de nada. Se disponía a dar media vuelta y salir cuando vio que el gnomo y su hamster se instalaban muy plácidamente en la barra, y que tanto Verne como su ex-monstruo del armario habían ordenado sendas bebidas, así que se detuvo en seco y suspiró, haciendo ondear hacia arriba su flequillo. ¿Qué mas da? Tal vez hasta la comida sea decente...

La chica se sentó en una mesa próxima a Claus para no perderlo de vista, esperando que los demás se sentaran allí también. -Yo quiero algo livianito. Y un poco de guiso o lo que tengan de plato del día, que ya me ha dado hambre... por favor.

Gregory caminó al interior del lugar junto al resto y observó el local.

Nada del otro mundo. Pensó. Y era verdad, si hubiera sido algo del otro mundo, aquello estaría lleno de espectros, fantasmas y tumularios, cosa que no era así.

-No me sirva nada, señorita, me aconformo con sentarme en esta silla. Le dijo a la camarera mientras se apropiaba de una de las sillas del local. A decir verdad, cuesta retener nada solido, o líquido cuando los alimentos se te caen por los huecos del cuerpo según los ingieres. No tengo ganas de manchar mi armadura.

El barman empieza a llenar los vasos de lo que habeis requerido, con rapidez, aunque para lo pedido por la coneja y la dama en apuro, el barman se aleja un momento para ir a la cocina para que lo preparen, mientrás que los que no os quedais en la barra, la camarera os dirige hacía una de la mesas, aunque en realidad todas están vacias. Todos las personas a cargo del restaurante se mueve como si fuera un sueño y no se lo creyeran. Cuando ya estais todos servidos, y el plato y el zumo está siendo preparado, el barman con pesar responde a Verne:- Señorita, esto es un pueblo "túristico" y por eso tenemos que tener un restaurante de postín, desgraciadamente por ser turístico tenemos que mantener los nombres de los edificios, aunque hayan cambiado de uso, es una norma del conde... - La muchacha se une llorosa a la platica de su patrón:- Y no sabes lo que cuesta poner las malditas telarañas y poner todo negro para que de miedo... es más complicado que dejarlo limpio.-

CHA CHAN¡¡¡¡... XD postear anda...