Partida Rol por web

Le devolvió el beso rodeando su cuerpo con sus brazos. 

- Ya me comentó la domina que quizás nos pidieran esas cosas... - Rio ante sus palabras - Tu mujer será lo suficientemente astuta para escoger a hombres decentes con los que yacer si el suyo no está disponible para satisfacerla... Porque espero que ese hombre digno pueda satisfacerla todas y cada una de las noches... 

Su mano fue directamente hasta el miembro de él, tomándolo con ella y ejerciendo una ligera presión para después besar sus labios con pasión. 

Si no pasa nada raro tu marido va poder satisfacer todas las noches tu deseo... afirmo colando una mano entre sus pernas jugando con su sexo u la otra con sus pezones. Mis palabras desencadenan un nuevo beso pellizcando mas fuerte sus pezones.

Con cada pellizco sobre sus pezones un gemido escapa de su garganta y cuando él comienza a jugar con su sexo puede notarlo húmedo y cálido. 

Le devuelve el beso mientras su mano comienza a masturbar el miembro de él con deseo, caricias suaves que van ganando en intensidad mientras su lengua se cuela buscando la de él con anhelo. 

- Eso espero... 

Mis manos dejan su cuerpo para quitarle el vestido blanco a la vez que me masturba y mi miembro crece poco a poco en su mano. Soy yo quien vuelve a comenzar a masturbar con dos dedos penetrando su sexo, lento al comienzo y cuando entren con facilidad con fuerza y rapidez. La otra se preocupa de hacer lo propio con sus pechos y pezones, apretando y estimulando suave al principio incrementando la fuerza hasta llegar hacerlo tan fuerte como le gusta a la rubia

Su cuerpo quedó completamente desnudo mientras él comenzaba a masturbarla de nuevo, provocando que la humedad y calidez de su sexo fueran en aumento mientras su mano se centraba en darle placer masturbándolo y besando sus labios con pasión. 

Las caricias sobre sus pechos y pezones provocan que estos se endurezcan cada vez más y ella comience a gemir y jadear mientras poco a poco aumenta la intensidad de las caricias de su mano sobre su miembro. 

Mi miembro crece mas cada vez mas con su excitación y la intensidad con la que va dedicando a mi miembro. Tumbado a la rubia sobre el camastro atrapo sus pechos con mis dos manos continuando con el trabajo anterior a la vez que mi miembro ya duro entra dentro de su sexo comenzando a penetrar con contundencia su interior, cada vez mas fuerte y rápido.

Dejó que la tumbara sobre el camastro y se abrió de piernas para que él se acomodara entre ellas mientras continuaba con las caricias sobre sus pechos provocando que ligeros jadeos y gemidos de placer escaparan de su garganta.

Sintió como el miembro de él entra en ella, duro y directo, provocando un gemido de placer que buscó ahogar entre sus labios para después comenzar a lamer su cuello y morderlo con suavidad mientras sus manos se enroscan sobre su espalda.

Comienza a mover las caderas para sentir sus penetraciones mientras acompasa su ritmo al de él mientras los jadeos y gemidos se suceden al tiempo que su sexo se humedece cada vez más y las paredes de éste aprisionan su miembro.

Aplicando cada vez mas fuerza en los pechos de la rubia, miro sus ojos, con esa lujuria desatada que no es habitual poder tener con una mujer sin que se convierta en aburrida porque no es compartida. Muerdo su labio hasta hacerle sangre en el labio y limpio su sangre con mis labios saboreando ese sabor a hierro que me traslada en mi mente a mi hogar.

La mirada de él sobre sus ojos, su cuerpo sobre el de ella penetrándola con aquella intensidad no hacían sino provocar que gimiera de placer.

Sintió los dientes de él sobre sus labios, la sangre manar de estos y sonrió con lascivia mientras ella también mordía los labios de él hasta hacerlos sangrar para después lamer la sangre con deseo al tiempo que enroscaba sus piernas alrededor de él elevando ligeramente sus caderas para sentirlo aún más profundamente.

Podía acostumbrarse a aquello, a disfrutar del placer del Nórdico cada noche que les permitieran y aunque no podría pasar toda la noche junto a él, el calor de un lecho en compañía era mejor que uno en la soledad de la noche... Había olvidado qué era pasar toda una noche en brazos de un amante y realmente podía llegar a ser algo reconfortante pero entre la guerra y ser capturada apenas había disfrutado y ahora, ahora tenía un hombre con quien disfrutar y que podría otorgarle cierta protección en el lugar en el que se encontraba... Al menos, un tipo de protección que por la condición de ella no podía tener por ella misma...

Sus caderas siguieron moviéndose al ritmo de él mientras besaba sus labios y mordía su cuello, acompañándolo con caricias de sus uñas en la espalda de él.

Los gemidos y jadeos iban ganando en intensidad con cada presión de él sobre sus pechos, con cada una de sus duras e intensas penetraciones... Si algo quedaba claro es que estaba disfrutando y le gustaba... 

Con el dedo recupero sangre de mi labio para hacer unas marchas de "guerra" en su rostro sin dejar de embestir de forma salvaje. Volviendo a lamer su labio saboreando lo que le queda de sangre.

Azotando su culo mientras la follo hasta dejarlo rojo con una mano y con la otra fuerzo al máximo sus poniendo a prueba la propia resistencia de la rubia de modo que si no lo disfruta volver in poco atrás con la fuerza en sus pechos.

Sonríe con lascivia y picardía mientras él dibuja aquellas marcas en su rostro mientras sus caderas continúan moviéndose ante la salvaje intensidad de las embestidas de él.

Cada azote y pellizco sobre sus pezones provocaban que gemidos de placer escaparan de su garganta mientras su sexo se humedecía cada vez más aprisionando el miembro de él en su interior. Hubo un momento en que él usó demasiado fuerza que sintió como los dientes de ella se cerraban con fuerza sobre su hombro. 

- Cuidado... 

Le dijo mirándole con algo de seriedad y esa chispa de deseo. 

Continuó moviendo sus caderas, con las piernas alrededor de la cintura de él hasta que sintió como todo su cuerpo se tensaba para tras unos segundos destensarse tras un húmedo e intenso orgasmo que fue acompañado de un gemido de placer. 

El orgasmo de la rubia y6 la humedad de su sexo deja empapado mi miembro, alargando el orgasmo de la rubia con mas embestidas y mas potentes para exprimir mas su orgasmo. Tras su orgasmo le beso con un deseo como si fuera el ultimo beso que voy a darle, sacando mi miembro de su sexo para llevarlo hasta la entrada de su ano y poco a poco introducirlo y conforme se adapta su ano ir aumentando la intensidad.

El orgasmo llegó y sintió como todo su cuerpo temblaba y como él seguía moviéndose para que se alargara provocando que su gemido fuera algo más intenso mientras buscaba ahogarlo en sus labios para que no se escuchara tanto en aquella estancia. 

Al poco sintió cómo él salía de dentro de ella y emitió un ligero gruñido de disconformidad pero al notar como buscaba estimular su ano para poco a poco entrar por detrás simplemente se relajó y le dejó hacer.

Una vez que se había adaptado a su miembro continuó disfrutando de su embestidas, gimiendo cuando éste aumentaba la intensidad y entre jadeos consiguió hablar.

- Si es... por... la posibilidad... de... quedarme en... en cinta... hemos... hemos conseguido que... que nos permitan... disponer de... las hierbas... y... preparados para... evitarlo... 

Ahora ya... respondo con un beso sin dejar de embestir su ano con mi miembro disfrutando de la gran noticia de las hierbas. Con cada embestida sus pechos y pezones rozan con mi cuerpo en cada penetración con nuestros cuerpos bien unidos piel con piel...

Una sonrisa se dibujó en su rostro ante su respuesta mientras sus palabras quedaban silenciadas entre los labios de él mientras su cuerpo se acompasaba a las embestidas de él al tiempo que acariciaba sus torneados músculos con sus manos y sentía las caricias que su piel provocaban en sus pezones.

Besaba sus labios con pasión y deseo, jugando y buscando su lengua mientras acomodaba sus piernas para que acto se sintiera aún más para ambos mientras sus jadeos y gemidos quedaban ahogados entre los besos compartidos. 

Mi lengua baila junto a la suya en un festival de besos y pasión, mientras mi miembro embiste su ano para el goce de ambos aprovecho con una de mis manos liberándola y penetrar su sexo con dos dedos en la busqueda activa de su punto g en dichas penetraciones.

Él seguía embistiéndola, penetrándola y llevándola de nuevo rumbo al placer y entonces sintió como él comenzaba ahora a introducir sus dedos en su sexo lo que provocó que comenzara a gemir aún más mientras sus uñas seguían marcando su piel. 

- Gib es mir... ich will... ich will fühlen... und sehen... dein... Vergnügen...*

Una cosa está clara, pese al poco tiempo en este ludus la complicidad con ella es excepcional, comparte la mas pura esencia de mi tierra y lo que busco en una esposa.

Lamiendo la sangre que puse en su cara antes derramo mi semilla en su ano tras una última embestida en la que mi miembro sale de ella totalmente y entra de golpe, mientras lleno su ano y la sangre en mi lengua busco su lengua para compartirla en un gran beso.

Sintió como se derramaba en ella, sintió la calidez de su semilla y gimió de placer al tiempo que él la masturbaba y un pequeño orgasmo llegaba de nuevo a ella. Sintió el sabor de la sangre sobre sus labios, disfrutando de aquel carmesí beso mientras su respiración buscaba relajarse pero sus labios seguían deseosos de los de él. 

- Ich liebe dich... jede Nacht... im Bett...*

Atraigo su cuerpo para tumbarle junto a mi besando después sus labios con mas suavidad y dulzura, rodeando su cuerpo con mis brazos mientras ambos nos terminamos de relajar. Ich werde alles tun, um dies zu erreichen...