Partida Rol por web

No dijo nada sobre el comentario de la romana, tomando ese beso de los labios de la guerrera. Sin apartar las manos de ella sintio estas tomando su culo que a pesar de todo se conservaba en buena forma. Sin duda una de las mejores partes de esa mujer.

Al separarse la otra mujer te vio y sonrio complacida cuando le dijiste eso. "Gracias. El tuyo tambien estuvo bueno, aunque te senti algo nerviosa con este." comento ella con delicadeza cuidando de no ofenderla. "Dejate llevar..." le dijo ella mientras sus manos se posaron en el culo de Brinda, copiando su gesto.

Sonriendo empezo a levantar la corta falda del traje de gladiadora dejando mas de su piel. Ahi fueque sus manos empezaron a sentirse en la piel de ella. Incluso entre sus cachetes que separa, pero tambien buscaba separar sus piernas tomando la iniciativa. Entonces Brinda sintio como una de las manos de ella se internaba detras de ella entre sus piernas. Empezando a acariciar su sexo. "Eres hermosa. Me hace esto mas facil, la verdad es que no soy de tomar mucho la iniciativa."

Me quedo pensando por un momento y finalmente decido que tiene razón. Lo mejor será que me deje llevar y veamos cómo acaba la cosa.

Cuando ella levanta mi falda, yo hago lo mismo con la suya para acariciar sus nalgas. Me estremezco sintiendo esa mano que entra entre mis piernas y las separo para darle más acceso a mi sexo mientras tanto dejo una mano acariciando su trasero mientras llevo la otra hasta uno de sus pechos para acariciarlo primero sobre la ropa y luego cobrando la mano dentro sobre la piel, sintiendo la suavidad de su tacto y la dureza del pezón.

Me muerdo el labio mientras llevo la mano que tengo en su trasero lentamente hacia delante, buscando acariciar por primera vez un coño que no sea el mío.

Su falda es mas larga que la tuya pero igual es facil de sacar si ella no se resiste. Asi siguio imitandote y abriendo esas piernas que te dejaban sentir un sexo algo humedo y diferente al tuyo, pero no por eso te costaria satisfacerlo como al tuyo.

Mientras la mujer se aparto un poco dejando que acaricies sus pechos y sientas como suspiraba, devolviendote su placer con sus dedos largos que se internaban cada vez mas en tu sexo. Buscando y examinado tu cuerpo para dar con un lugar donde pudiera rozar para causarte gran placer.

"En cualquier momento tocara sacarnos la ropa." dice sin preocuparse de que las encontraran a ambas desnudas y haciendose el amor. 

Gimo bajito mientras disfruto de sus dedos entrando y saliendo de mi sexo yo procedo a hacer lo mismo, empezando lentamente pero aumentando un poco la velocidad.

¿Está bien que lo hagamos aquí? pregunto, pero mientras me responde me separo lo justo para quitarme la ropa y quedar completamente desnuda ante ella. Si para entonces ella no se ha desnudado del todo, la ayudaré antes de volver a besarla y acariciar ahora su cuerpo completamente desnudo.

Puedo sentir como mi respiración se acelera ante tan poca cosa, sintiéndome excitada con la visión de su cuerpo desnudo. Parece increíble pero así es, ver el cuerpo desnudo de una mujer me está excitando.

Tu pregunta la hace dudar por un momento, mirando la puerta. Aunque ese momento que se separan tu te desnudas de una forma tan seductora que no se lo piensa, mordiendose por momento te responde. "Pensaba que hariamos algo rapido..." dice ella mientras con tu ayuda se va desnudando mostrando un cuerpo que mereceria de algo mas que una sirvienta. "Pero mejor recemos que no me necesiten por un tiempo." decia ella que ese momento tal vez sentia algo de morbo por la posibilidad de ser atrapadas.

Toda desnuda frente a ti acepta tu beso con mucho deseo mientras al igual que ti, empieza a tocarte y abrazarte. Su mirada solo se despegaba de ti para ver esa cama que habian terminado de arreglar y que bien podria servirles. "Eres hermosa. La verdad es que las demas guerreras no se comparan." comento tras que se liberara del beso, empezando a moverse al costado de tu rostro con sus labio besandote mientras bajaba a tu cuello saboreandote.

"Sientate en la cama. Ahora recuerdo que debia ayudarte a aprender." comento tras darse cuenta de porque habia empezado.

Tú eres hermosa, y mucho le digo admirando su cuerpo tan sorprendentemente bello. Cuándo empieza a mover su boca hacia en lateral de mi cara, aprovecho para irle dando besitos por dónde pillo.

Escucho su petición y afirmo, moviéndome despacio hacia la cama para sentarme en ella. Una vez allí no sé muy bien que hacer, pero luego tiro de Neitin que se ponga de pie frente a mí.

El intenso aroma de su sexo me llega, pero al contrario de lo que podría pensar no me parece nada desagradable. Muy hermosa digo mientras la miro desde esa posición antes de dar un tentativo beso en su pubis, intentando comprobar sus reacciones.

Finalmente me decido a sacar la lengua y probar por primera vez el sabor de una mujer, sabor que no se me hace desagradable aunque prefiera el de un hombre. Seguro que no lo hago bien, pero al menos voy a intentar poner todo el empeño que pueda.

Neitin parecio mirarla por un momento, pero no parecia esperar que le besaras ahi y ahora. De cualquier forma no se alejo, aunque temblo un poco su cadera ante el beso de la otra mujer. Su rostro se mostraba contento, mordiendo su labio mientras suspiraba.

Mas fueron sus suspiros cuando sintio la lengua de ella, apoyando una mano en la cara de Brinda para que siguiera. "Que ansiosa. Sabe bien?" pregunta ella alejandose un poco.

"Acuestate en la cama. Dejame mostrarte como lamer." Cuando lo hiciera se puso arriba de ella con su cuerpo estaba alreves de ella. Con su rostro en el sexo de Brinda mientras le daba el sexo a ella. Ahora podias ver mas de ese sexo que poco se parecia al del hombre que sentias diferente al tuyo aunque no habias visto al tuyo.

Entonces sentiste los dedos de ella ahi abajo, estos tocando la paredes, de tu sexo, separandolas antes de de dejar sentir el aliento calido de ella. Luego sentiste otra cosa calida que era la lengua de ella. Esa lengua que empezo a recorrer tus paredes buscando como con los dedos esos lugares donde sentirias mas placer.

Mmm... Sí, sabe bien. Tenía mucha curiosidad del sabor de una mujer.

Me acuesto cuando me lo pide viendo entonces cómo se acuesta al revés de mí. La verdad es que no se me había ocurrido que con una mujer también se podría adoptar esta posición.

Entonces noto sus dedos separando mis labios y su aliento y lengua acariciando los rincones más ocultos de mi sexo. No puedo reprimir un gemido bajito antes de imitar sus gestos.

De principio sobre todo llevo mi lengua donde está el clítoris, uno de los sitios que más me ha gustado siempre que me toquen. Luego voy explorando otros sitios que le gusten aunque siempre termino regresando al clítoris.

Lo extraño es que sé que, si nos pillan haciendo esto, probablemente nos castiguen, pero eso solo hace todo más excitante.

Neitin dio con tu clitoris lamiendolo unas cuantas veces sintiendo como contenias tus gemidos, moviendose a otros lados de tu sexo con su lengua que parecia incluso mas larga que la de otros hombre o simplemente la mujer sabia usarla bien para satisfacer a otra mujer.

De cualquier forma tus lamidas en su clitoris no fueron ignoradas y a pesar que estuviera pegada a tu sexo sentiste con tus oidos gemidos de gusto mientras la atendias en ese lugar. Los muslos de las piernas de ella teapretaron un poco como apresandote para que siguieras ahi. Sin quedarse atras sentiste sus dedos frotandose contra tu clitoris y yendo mas adentro.

Mientras la lengua de ella buscaba mas de su interior. Para luego volver a tu clitoris este lugar sensible que la sentiste no solo lamerte sino tambien darte besos al sentir sus carnosos labios pegarse a un lugar tan intimo tuyo.  

Realmente había empezado esto casi más como una forma de aprender cómo hacer disfrutar a una mujer, pero me está encantando hacerlo. Escuchar esos gemidos ahogados contra mí, mientras los míos también se ahogan contra ella, me provocan una excitación que nunca había sentido.

Llevo mis manos a sujetar sus nalgas y acariciarlas un poco mientras aprieto contra mí. Luego, imitando lo que ella me hace, llevo uno de mis dedos a su interior, palpando en círculos. Las veces que me he masturbado siempre conseguía encontrar una zona rugosa que me daba un placer increíble, y esa zona es la que estoy buscando ahora.

Mientras tanto sus actos me van dando cada vez mayores descargas de placer, mientras mis piernas empiezan a temblar. Es increíble lo buena que es en esto, así que debo suponer que no es ni su primera ni su segunda vez.

Escuchas y sientes mas gemidos de su parte, mientras la humedad se va haciendo mas presente entre sus gruesas piernas. Tus dedos llegan rapido a esa parte que buscan y masturbarla desde ahi parece sencillo solo con otro angulo distinto al habitual.

Pero sigue no por ello se queda pasiva siguiendo lamiendo el clitoris de ella y adentrandose aun mas adentro del sexo de Brinda ayudada por sus dedos que van separando sus labios. Con su otra mano sigue rozando tu interior aunque ahora va mas rapido, sintiendo la humedad y tembles de tus piernas como una señal para apurarse, por lo que empiezas a sentir como sus dedos entran no muy timidamente sino de varios en principio dos pero se vuelven tres.

"Aprendez bien." dijo separandose un poco de tu sexo y dandote una mirada como podia por abajo esperando concidir con tu mirada para que vieras que ella tambien estaba disfrutando de ello. Aunque no por mucho tiempo antes de volver a lamer todo alrededor y besar sin asco ese mato de pelo que tenia, para luego internarse en su sexo de nuevo mostrando la gran habilidad de esa lengua.

Estoy más cerca de mi orgasmo, algo que no me puedo creer. Quiero decir, ¿con una mujer también puedo llegar al orgasmo? Y sin embargo es así, cuando mete los tres dedos siento como mi placer se multiplica.

Lanzo un gemido mientras la miro, sudorosa y con cara lasciva. Tengo buena maestra le digo con una sonrisa. Y está a punto de llevarme al orgasmo añado volviendo yo también a devorar su sexo.

Pruebo a meter dos dedos para tocarla por dentro como ella hace mientras mi lengua no deja tranquilo su clítoris, buscando más de sus gemidos.

Me aparto un momento para preguntar ¿es conveniente... quedarse... Mmm... mientras la mujer se corre...? Sobre todo lo pregunto porque yo estoy muy cerca, tanto que empiezo a mover mis caderas buscando más de esos contactos, más de sus dedos, más de su lengua. Ojalá pudiera arrancarme también a ella uno, y es lo que voy a intentar con todas mis fuerzas.

La mujer parece reir un poco al escuchar tus palabras, divertida y entusiasmada con tus palabras. Aunque el entusiasmo se muestra mas cuando metes un par de dados en ella y sientes no solo que puedes meter mas sino que su sexo casi parece querer quererlo succionar todo.

Entre que gemidos levanta el rostro. "Es como desees, a mi gusta que te quedes." comento ella como pudo casi gimiendo las palabras.

Cuando volvio la sintio estando muy cerca y la vio acercarse con su cuerpo. Por lo que ella acerco mas su rostro en ella enterrandolo y lamiendo todo como si fuera el plato mas rico que habia tenido en su vida. Pareciendo disfrutar de hacerlo mientras sus dedos descargaban su energia en ella moviendolos con todo el gusto.

Sin embargo antes que Brinda pudiera decir mas o siquiera seguir su juego sintio la cadera de ella apoyandose en ella. Toda esa piel humeda por sudor y fluidos de ella. Esto incrementa mas cuando la sentis tensarse por ese momento hasta que mas fluidos salen de ella mojando tu rostro con su alegria que le diste. "Ah...soy muy sensible." la escuchas decir.

Chupo, lamo, bebo todo lo que suelta como si tuviera sed. El sabor es un poco fuerte, pero agradable. Incluso llevo mis manos a sus nalgas para incrustar más mi cara entre sus piernas y poder llevarme más de ese sabor.

Mientras tanto mi cuerpo se tensa, anunciando con temblores el inicio de mi orgasmo. Ahogo mis gemidos entre sus piernas mientras mi sexo se humedece todavía más. Placenteros estremecimientos recorren mi cuerpo mientras lágrimas de felicidad bailan en mis ojos hasta acabar cayendo.

Intento prolongar su orgasmo con mi lengua tanto como pueda, e intento que ella prolongue el mío tanto como pueda. Pero al acabar quedaré tendida en la cama, con una sonrisa de oreja a oreja. Intenso es lo único que digo.

Aunque me siento cansada, me muevo para estar junto a ella cara a cara. Escucho su pregunta y suelto una risita. Claro, lo tenía planeado desde el principio digo con un guiño antes de buscar sus labios para un beso que provocará una mezcla de nuestros sabores.

Pues nunca había probado esto pero la verdad es que se me hace bastante... Ufff... Bastante bueno. Me parece que no me importará repetir cuando sea necesario... o cuando tú quieras añado mirándola con una sincera sonrisa.

Miro a mi amiga desnuda y luego hacia la puerta, nerviosa. Me parece que será mejor que esperemos a otro día digo, a pesar de sentir una excitación que está volviendo a nacer, haciendo que mis pezones también se endurezcan.

Sabes que yo no debería estar aquí, y si nos descubren el castigo irá para las dos. Y no podría permitir que tu hermosa espalda sufriera de latigazos. Vamos, te ayudo a arreglar el estropicio y vuelvo a las zonas de los gladiadores.