Partida Rol por web

Entran en la caverna a oscuras, dado que la antorcha no ilumina aquella oscuridad...

Sin embargo, al dar los primeros pasos a ciegas, la oscuridad desaparece, y el interior del lugar se hace visible, iluminado por antorchas colgadas en las paredes de roca mediante soportes hechos de algún metal.

Instantes después de que entran se voltean al escuchar como la puerta se cierra, aunque no logran ver nada ya que la oscuridad persiste en esa zona.

El interior de la cueva no tiene nada que ver con su interior. Las paredes son lisas y regulares y no tienen marcas de las herramientas con las que pudo haber sido excavada. El suelo es igual de liso y perfecto.

Se encuentran en un pasillo que no pareciera ser excavado sino construido y más adelante hay un pedestal de piedra con inscripciones que predece a una gran puerta.

   La construcción donde nos encontramos me parece demasiado nueva y distinta a todo lo que he visto; me siento maravillado ante tal arte arquitectónico. Sin embargo, no puedo llegar a distinguir a sus constructores, dado que la visión no me permite calcular la estructura a la perfección. Tal vez, de verdad...sean ellos...

   Oigan, no se confíen de lo que veamos aquí. No puedo llegar a saber con certeza quiénes construyeron esto, pero si pusieron a un golem en la entrada, imagino que este lugar estará lleno de trampas y magia oculta. Rimi, fíjate si encuentras trampas por aquí; podremos demorarnos, pero preferiría andar con seguridad- digo empuñando con cierto halo de nerviosismo mi poderosa hacha. Debemos estar preparados...

El extraño cambio de luz al pasar el umbral hace que el elfo pierda la orientación un par de segundos, mientras sus ojos se acostumbran a la nueva sala. Observa con detenimiento todo el lugar. No tenía mucha idea de las arquitecturas humanas, pero lo que allí podía ver, sin duda era obra de manos muy expertas o de magia.

- Rimi, si ves algo raro dínoslo antes de que empecemos a avanzar. – comentó mientras se aferraba con mas fuerza a sus filos.

Avanzo cautelosamente por el pasillo y no dejo de mirar en todas las direcciones.

Si si, en eso estoy - le respondo a mis compañeros mientras sigo con mi búsqueda -

Tras unos instantes de inspección de lugar, me relajo un poco y niego con la cabeza

Parece que aquí no hay trampas ...

Avanzan poco a poco por el pasillo, en dirección al pedestal y a la gran puerta.

Jormund: intentas distinguir rasgos característicos en la construcción para ver quién, o quiénes, crearon el lugar. Sin embargo, en las paredes y en el suelo no hay ninguna pista, seguramente han sido hechas con magia.

Rimi y Vened inspeccionan el lugar en busca de trampas y demás sin resultado alguno.

Llegan a la altura del pedestal de piedra, el cual tiene algunas inscripciones.

A continuación se encuentra su desafío.

En la siguiente habitación habrá un reto para sus mentes y uno para sus cuerpos, si pasan ambos podrán continuar.

Si fallan el reto mental deberán pasar a otra habitación con otro reto mental y físico.

Si fracasa en un desafío físico, su vida habrá llegado a su fin.

No habrá salidas más allá de esta puerta.

  Pero por las barbas de Saint Cuthbert! Y eso es la gran prueba? Bah...-digo con un tono despectivo. Luego me giro a mirar la construcción y vuelvo a encontrarme con las miradas de mis compañeros- se nota que esto está hecho con magia de esos viejos magos. Por otro lado, entramos todos o cómo funciona esto? Y todo por unas cosillas para ese viejo....shhfkhaihiohgihweiohgoahge- termino gruñendo y murmurando para mí mismo, perdido por la misión y por las pruebas que tenemos que hacer.

- No subestiméis la astucia de nuestro contrincante, maese enano. – respondió el elfo. – Aun no sabemos como de duras serán ambas pruebas. –

Los comentarios sobre la arquitectura del recinto no cogieron por sorpresa a Vened, se olía que había utilizado la magia para la creación de este sitio, por lo que no quería subestimar a sus creadores.

- Bien compañeros, avancemos. – comenta acercándose a la puerta y examinando su mecanismo de apertura.

Bien - exclamo con energía, seguro de  mí mismo -

Me acerco a la puerta a paso ligero y la empujo con firmeza.

Es una gran puerta de madera de doble hoja. No tiene ningún cerrojo ni nada por el estilo. Además, el suelo no tiene niguna marca lo que indica que está muy bien nivelada o que no se ha abierto muchas veces.

Cuando Rimi la empuja se desliza sobre sus goznes con apenas un susurro metálico, dejando a la vista una gran habitación con una bifuración en la salida. En el centro de la habitación hay un ogro que, peculiarmente, está encadenado y sentado en el suelo. Las cadenas llevan a dos estatuas de piedra con forma de soldados con armaduras que sostienen las cadenan con sus pétreas manos, ubicadas a los lados de la sala.

Cuando una de las hojas de la puerta se abre del todo se hace escuchar un chasquido metálico y las cadenas se sueltan.

La criatura se iergue en toda su extensión y una expresión de odio se hace visible en su rostro.

Ahí está...cada casilla son los 5' habituales.

   Emitiendo un gran grito de guerra, decido asestar un golpe directo al tendido ogro. A pesar de haberlo golpeado directamente, la criatura presenta una particular dureza.

   Aggghhh, eres duroooo!!- digo encolerizado.

No se por que pero me esperaba algo así… Pensó el elfo al ver al gran  ogro que se encontraba delante de ellos. Agarró con fuerza ambas espadas y se lanzó sobre el ogro con una velocidad endiablada.

- Veamos de que estas hecho. -

Un fulgor rojizo emergió de la espada larga que Vened portaba mientras impactaba sobre la pantorrilla del ogro haciéndole gemir de dolor.  Posteriormente, intenta asestar un segundo golpe con su mano izquierda pero falla en su ataque.

 Grácilmente Rimi se acerca tratando de tomar la retaguardia del ogro. Enano Flanquealo!! Exclama Mientras saca el el arco de un solo movimiento y grácilmente le lanza una daga.