Partida Rol por web

Mientras que esperaba que alguno de sus compañeros dieran el visto bueno para ir hasta el comedor, Máximo observó la costa desde donde estaba, sin ver nada destacable, pero fue suficiente para que sus pensamientos fueran hacia otro rumbo. Ese pescador sabía algo más, lo dedujo por su mirada, pero no pudo preguntar nada. Debía buscarle en cuanto hablara con sus compañeros. Al girarse, ya para comenzar a arriar a los demás, vio llegar a Ronan, quien seguramente ya se habría bañado.

-Ronan, después tenemos que hablar con el pescador que vimos en la playa- dijo para sacar esa duda de su mente y exponerla-. Acá la gente sabe más de lo que parece.

Cuando llegué a la entrada de la Villa, vi a Maximo acompañado de Mike y Bianca. A la joven se le notaba un tanto ausente, y Mike también permanecía un tanto callado, mientras que el periodista intentaba hablar con ellos, aparentemente sin mucho éxito.

-Los pescadores saben lo que está sucediendo -asentí, recordando lo que le había dicho el anciano barquero a Bianca luego de la desaparición de Ligeia-. Antes, el señor que transportó a Ligeia en su barca nos habló de monstruos marinos y le dio el pésame a Bianca, dándonos a entender que Ligeia ya tendría que estar muerta. Creo que deberíamos ir a hablar con los pescadores en cuanto fuera posible, Maximo. Al menos, así tendremos un poco de información sobre lo que sucede aquí.

Sonrió tiernamente a Val agradeciendo su caricia en el brazo y asintiendo a qué más tarde debíamos hablar (ya fuese a solas con el resto).

Miro también a Marc cuando suben tanto él como Valeria las escaleras.

Al ver que algunos de mis compañeros se dirigían al comedor , les sigo.

Una vez afuera, observa a Bianca fumando y se acerca para convenzar.

-Hola, ¿Bianca como estás?- le pregunta preocupado y agachando un poco la mirada. Mike se sentía bastante culpable de lo que estaba sucediendo, sobre todo con su estudiante, a fin de cuentas él le había propuesto este viaje para su tesis de diploma y resultó más un viaje de horror y misterios. Pero lo que más afectaba al profesor fue su propia reacción ante los eventos ocurridos, donde lejos de proteger a su estudiante, se enfrascó en resolver el asunto, valiéndose solamente de su propio ego... y... esto es sin lugar a dudas lo que más le avergonzaba, mucho más que el hecho de no poder encontrar respuestas tras casi 24 horas de investigación.

-Creo que te debo una disculpa- dice Mike, aún con la cabeza medio gacha y con ojos entristecidos- primeramente por traerte a este lugar infernal, y en segundo lugar, por comportarme como un capullo contigo. Cuando más afectada estabas, lejos de ayudarte- como debería ser- solo te agobié más.

Finalmente Mike pudo soltar aquello, llevaba rato intentando decirlo, pero las circusntancias apropiadas no llegaban, por algún motivo u otro se le hacía imposible chocar con la joven estudiante.

Ahora recordaba la primera noche en el Siren I justo antes del fatídico suceso...y contiene una sonrisa, algo pícara pero sincera, porque el viaje junto a Bianca apuntaba a ser inolvidable. Sin embargo, sí que será un viaje inolvidable, pero por otras razones más funestas y adversas.

Me apoyo en la pared de la entrada de la casa mientras sigo fumando tranquilamente el cigarrillo mientras a la vez escucho a Mike. 

Me agradaba ver que después de lo sucedido no tenía la cabeza para pensar en lo profesional y necesitaba asentar los nuevos acontecimientos. Aún así, intentaba mantener el buen humor  dentro de lo posible.

- Gracias por entenderme Mike, y siento si estuve algo borde en alguna situación.-digo con una pequeña sonrisa en la boca mientras me disculpo.- se que es duro para todos y entiendo que tú te centrarás en la investigación para evadirte de lo surrealista que está ocurriendo, cada uno afronta las cosas de manera diferente. -veía que parecía realmente afectado por no haberse dado cuenta de mi estado mental, pero yo no le daba tanta importancia. No nos conocemos como para saber de qué manera actuar con la otra persona en cada situación.

- de verdad no te preocupes, ya estoy más calmada pese a no haber aclarado nada de lo que está ocurriendo. Creo que hay que tener la mente fría y pensar con más claridad. Vamos a tomarnos el resto del día libre y mañana quizás podamos tener noticias nuevas y empezar a coger notas para nuestros respectivos trabajos .-le animo a mi profesor poniéndole mi mano en su hombro a modo de darle ánimo junto con una sonrisa para que viese que no estaba molesta con él.-tomamos otra copa ?

Mientras le hablo, intento estar atenta para ver si oigo cuando bajan la doctora y Marc al salón con el resto 

La sonrisa de Bianca le alegra el alma, finalmente se pudo quitar aquel nudo de adentro. Saber que su estudiante no estaba molesta con él le alegró- Por supuesto, vamos a por esa copa- le dijo contento mientras se para en la puerta de entrada como mismo lo hizo aquella vez en el camarote del Siren I- Señorita, pase usted- le invita con la misma cara sonriente y coqueta que mostró cuando salían a por la copa del bar de barco.
 

Por un momento parece que todo a vuelto a la normalidad al ver que Mike vuelve a su peculiar sonrisa con mi explicación sobre estos últimos días. Asiento con la cabeza mientras sonrió cuando oigo su invitación a entrar dentro de nuevo, y mientras me sujeta la puerta suelto una leve risita recordando que fue el mismo gesto que hizo en el barco.

El ascenso por el camino pedregoso es difícil debido al estado de Ligeia que no deja de temblar y a la falta de costumbre de Azariel de caminar aunque en poco tiempo sus piernas parecen adquirir fuerza y deja de tambalearse como al principio pudiendo caminar mucho mejor y sin apenas tropezar a pesar de la oscuridad.La chica no está muy segura de dónde se encuentran pero para su alivio ve que el camino desemboca en un lateral de las villas y no tarda en encontrar la que le corresponde por lo que sin perder el tiempo conduce a Azariel hasta allí

Azariel ve un lugar inmenso y que desprende riqueza por todos lados. Un camino de piedra sombreado por plantas trepadoras que se enrollan en pérgolas os da la bienvenida y desemboca en la puerta principal.

Una gran puerta de hierro se abre para daros acceso a un pequeño paraíso que no se aprecia desde fuera.Un hermoso jardín os da la bienvenida mientras que el olor de las flores os inunda las fosas nasales.Una escalera de piedra blanca conduce hasta la casa situada un piso por encima y a la derecha,semitapada por los árboles hay una piscina que en esos momentos se encuentra cubierta

Desde abajo Ligeia ve que las luces del salón están encendidas por lo que indica a Azariel las escaleras para que empiecen a subir.Una vez arriba podrán decidir si ir al salón o acceder a los dormitorios por el jardín trasero

Tiritando de frío, con las botas mojadas en una mano, y Azariel en la otra me dirijo hacia donde creo recordar que estaba la casa en la que nso alojaron. Tampoco estoy muy segura porque a penas llegué salí corriendo hacia aquella roca.

Mis dientes castañean en un inctrolable frío, me fijo en él que camina cada vez con más soltura y sonrío.

- Vas genial, creo que es aquí no lo recuerdo muy bien, la verdad – susurro después de mirar al cielo – Poe, ¿dónde estás? – murmuro verbalizando pensamientos. Luego lo miro a él, me gustaria pedirle que me abrazara de nuevo y me diera calor, pero ahora, aquí, quizás...

Una vez llegamos a la entrada descuelgo la empapada mochila de mi espalda y empiezo a buscar las llaves. Joder, necesito quitarme esta ropa, calor y mantas. Si no enitentro las llaves en un momento llamaré al timbre, hay luz en el salón así que hay alguien despierto.

Azariel intentaba captar todas las cosas que había a su alrededor. Subir aquellas rocas le resultó algo doloroso pues se le clavaban las rocas en la piel de sus nueva parte inferior. Las del fondo del mar eran resbaladizas, aquellas en cambio.... Coger aire le costaba su esfuerzo ¿porque? Miraba preocupado y de reojo a Ligeia, la cual temblaba constantemente. Esperaba que en su refugio pudiera entrar en "calor". Extraña palabra.

Por fin terminaron el ascenso y tras un rato caminando su respiración se fue normalizando, permitiendole disfrutar de su entorno. Sus ojos observaban todo a su alrededor y le iba señalando a la joven cosas por el camino para que le dijera que eran. Tenia que aprovechar ahora que estaban solos.

Olfateó el aire al entrar tras aquello que acababa de descubrir que se llamaba puerta - ¿Que olor ser ese? - preguntó. Fue entonces cuando se dió cuenta que estaba buscando algo. La observó iluminada por aquella extraña luz que provenia de aquella extraña cueva y sonrió, aunque era una sonrisa teñida de cierta ansiedad.

¿Intentaria allí dentro también separarlos? ¿Se creerian lo que les iban a contar? Le rodeó la cintura por detrás con sus brazos mientras apoyaba su barbilla en el hombro de ella y suspiró. El camino habia secado su cuerpo expuesto, salvo el bañador. Ella en cambio seguía mojada. ¿Sería por la ropa?

- Ya estar en tu hogar. Tu quitar esto. Quizás secar antes - dijo bajito mientras comenzaba a tirar de su camiseta hacia arriba como si fuera lo más natural del mundo

Azariel corre tras Ronan y le alcanza en el jardín delantero,en la entrada