Desde el jardín principal se puede ver toda Marina Piccola y la extensión de mar resulta relajante pues a pesar de la cercanía las voces de la playa no llegan hasta vosotros.Un comedor exterior resguardado por una pérgola os permita estar a la sombra pero si deseáis que el sol os bañe unas tumbonas dispuestas para ello os esperan un poco más adelante