Partida Rol por web

Sirenas de leyenda

Capri - Villa Sirenella Entrada

Cargando editor
14/06/2019, 23:24
Azariel

- ¡Esperar! - gritó tras la espalda de Ronan casi dandose de bruces con el suelo por culpa de las prisas y de las dichosas chanclas que le habia dejado Marc. - Por favor - Avanzó despacio ante el temor de chocar contra el suelo con un brazo extendido y mostrando su palma abierta. En el mar uno nunca se caia...

Frenó ante la cercania de aquella cosa y bajó la voz - Por favor, yo... - no sabia como explicar aquello a un desconocido - Yo tritón. Yo saber que algo atacar humanos - se percibia con claridad la ansiedad en su voz aunque hablara en susurros y la tensión que marcaba su cuello y los biceps que asomaban bajo las mangas - pero yo ayudar a averiguar que. A cambio no llevar eso - dijo endureciendo su voz - hacer mal - su cuerpo enteró se preparó por si el humano decidia atacarlo.

Cargando editor
15/06/2019, 08:34
Ligeia

Notas de juego

Entro

Cargando editor
15/06/2019, 12:37
Ronan Parker

Aquello me sorprendió. Azariel parecía estar poniendo todo su empeño en que no me marchara. Estaba asustado por el hecho de que yo saliera con el arpón y no comprendía por qué. ¿A quién temía que pudiera hacer daño? ¿A las criaturas del mar que atacaban a la gente?

Entonces había empezado a hablar. En voz baja y con palpable ansiedad, había afirmado era tritón y que sabía que algo atacaba humanos pero quería ayudar a averiguar qué era. Era evidente que Azariel sabía mucho más de lo que afirmaba. Un hombre supuestamente amnésico, según Ligeia, que no parecía reconocer los televisores ni las botellas de agua, que se asustaba cuando le enseñaban a la sirena de la película Slpash en el móvil, y al que le costaba hablar con normalidad. No era algo normal y, por el momento, la doctora tampoco había dado un diagnóstico de lo que le ocurría al joven, más allá de comérselo con la mirada. Lo que si estaba claro es que Azariel parecía más cuerdo que la mayoría de los que quedaban en la villa, por lo que quería darle la oportunidad de explicarse.

-Eh, tranquilo -dije, colocando una mano sobre su hombro izquierdo, de forma afectiva-. Nadie quiere hacer mal a nadie. Vamos a entrevistar a dos personas. -Sin saber si Azariel me entendería tras decir tantas palabras, agregué-: Hablar con personas. Pescador. Guía. No hacer mal. -Me llevé la mano a la espalda para descolgarme el arpón, de forma lenta, como el doctor Alan Grant con los velocirraptores de Jurassic Park 3. Se lo mostré, levantando el arma hacia arriba, sin apuntarle-. Esto es por precaución. Se llama Arpón. Pescador en playa. En playa puede haber ataques, y tú sabes que algo ataca humanos. -Mi tono era como el de un padre explicándole algo de suma importancia a un hijo de corta edad-. Es arma. No hace mal, no hace bien. Depende del uso que le dé el que la use.

Volví a colgarme el arpón a la espalda, con lentitud para que el hombre no pensase que pensaba atacarle. Azariel no parecía violento, por lo que no creía que fuera a atacarme.

-Creo que es mejor que volvamos adentro o busquemos un sitio para hablar todos juntos -Me fijé entonces en que Ligeia estaba por ahí. No sabía cuánto tiempo llevaría escuchando la conversación-. Marc. Maximo. La doctora. Ligeia. Y nosotros dos. -Hubiera mencionado también a Mike, pero mi compañero y amigo parecía depresivo y silencioso desde ayer, y Bianca... no estaba muy seguro de que estuviese participando en el viaje por ninguna investigación-. Creo que tienes explicarnos qué sabes sobre lo que ataca humanos. No tengas miedo -esbocé una sonrisa, intentando infundirle confianza al hombretón-. No tienes nada que temer con nosotros... -"Bueno, la doctora te quiere comer entero y Bianca tarda demasiado en responder cuando le hablas, pero más allá de eso no tienes nada que temer" me dije para mis adentros, aunque consideré que era mejor no decir nada. Capaz de que asustaba más al pobre Azariel-. Tritón... así es como se le llama a una especie de anfibio y como comúnmente se conoce a los sirenos masculinos. ¿Es una especie de apodo por el que te llaman?

Azariel tenía un torso musculado y buenos brazos, por lo que pensé que lo más probable es que le conociesen como Tritón por lo bien que nadaba. Porque la otra opción, que fuera un sirenito, era descabellada, aunque después de lo que habíamos visto dos noches atrás... no podía descartar nada.

Cargando editor
15/06/2019, 16:06
Ligeia

Ligeia frunció el ceño decepcionada enormemente por cómo había salido Ronan de allí, ella había hablado bien de sus compañeros, les había creído pacíficos y buenos. Pero no así. El ser humano siempre decepciona, primero dispara, luego pregunta. Siempre. Aquel discurso que le estaba soltando era tan cínico. Miró a Azariel y en cuanto pudo lo cogió suavemente por la muñeca para apartarlo de Ronan.

- ¿Qué? Un arpón no depende del uso que le des, no sirve para plantar plantas, ni para nada más que matar a seres acuáticos ¿Crees que es idiota? Tú no explicas nada, sales con una cosa para asesinar y te vas ¿y pretendes que a ti te expliquen algo? ¡Y una mierda! Esa cosa no es un boli, ni es un folio, ni es una grabadora y te niegas a soltarla y dejarla aquí a pesar de su miedo. Está aterrado ¿No lo ves?

Li suspiró un instante, estaba nerviosa, muy alterada, sentía miedo, algunos recuerdos le venían a la mente y afloro el sentimiento que antaño sintió. Empezaba a enfadarse de verdad, quería proteger a Azariel a cualquier precio, lo había prometido y eso haría.

Habían estado en la casa, nadie había respondido a nada, nadie parecía querer hablar y ahora salían con ese chisme. Bastaban unas cuantas preguntas para que él, y sólo él, quisiera contar su historia, pero yo tampoco lo haría. No así. Ninguno de ellos había mostrado un poco de humanidad, empatía, escuchar a alguien que no comprenden, aparte de dejarle una chanclas y un poco de ropa, burlarse de él y ellas de mirarlo babeando. No entendía su especie pero desde luego no se sentía nada arropada con sus congéneres.

- Vámonos, no va a comprender nada, ellos nunca lo hacen, no va a soltar el arpón, se lo llevará y lo utilizará si lo cree conveniente. Ellas no se acercarán mientas lleve esa cosa encima. De hecho en cuánto lo vean no se acercarán nunca más.

Tiró un poco del brazo de Azariel preocupada, mirándolo suplicante, estaba enfadada pero la seguridad del chico era lo único que coupaba su mente, sus compañeros no parecían nada comunicativos ni dados a la comprensión, no quería exponerle más.

- Por favor, vámonos. Necesitas comer algo. Vámonos.  Vámonos de aquí…

Cargando editor
15/06/2019, 16:17
Ronan Parker

Escuché la retahíla de tonterías que pronunciaba Ligeia y me llevé la mano al rostro, en un claro gesto de facepalm de no poder creerme que se le hubiera ido tanto la cabeza a la mujer. ¿Había oído siquiera lo que le decía a Azariel?

Recordaba que le había comentado la tarde anterior a Maximo que Ligeia le parecía más cuerda que otros miembros del quinteto, pero ahora daba muestras de justamente lo contrario, un claro trastorno mental. Aquello era auténtica enajenación. Ni la reconocía. No sabía en qué había cambiado la joven o si algo más había sucedido en el interior del comedor desde que salí, más allá de haber escuchado que Marc le respondía un comentario a Ligeia.

-¿Y tú no ves que estoy intentando que se tranquilice, tía pánfila? -le espeté a la mujer con sonrisa de tiburón, más bruscamente de lo esperado. Tomé el arpón, levantándolo con una mano, a lo Charlton Heston con su rifle-. ¡Sí, esto es un arma! ¿Sabes que hay algo atacando a las personas en estas costas, Ligeia? Porque él lo sabe. Lo ha dicho. Y quiere ayudar a averiguar qué es, a diferencia de ti. Lo mismo que queremos hacer nosotros. Es decir, sabe que hay un peligro del que tú aparentemente no nos has dicho nada y haces como si no fuera real. Tú misma viste cómo unas criaturas con manos hundían a dos hombres en las profundidades y acababan con ellos. ¿Y todavía te preguntas por qué voy a salir con un arpón?

Bajando el arpón, comienzo a retroceder en dirección a la villa, sin dar la espalda a Ligeia. Azariel era un cacho de pan, quería ayudar a que no hubiera más ataques, pero Ligeia en cambio... Era peligrosa, pero sobre todo para sí misma.

-Sea lo que sea lo que está atacando a la gente, no voy a acercarme a la playa, arriesgarme a que alguien esté siendo atacado en la costa y tener que volver a casa con la culpa de no haber podido hacer nada al haber dejado el arpón en mi habitación porque me lo dijera una loca.

Pero fue una frase que había dicho Ligeia la que hizo desmontar su contradictorio testimonio de la noche anterior, demostrando que en efecto había mentido, pese a que Azariel estaba intentando explicar parte de lo que sucedía en las costas de Capri. "Ellas nunca lo hacen". Aquello sonaba a que Ligeia había visto a esas criaturas.

-Azariel, sabes que no tienes nada que temer. Nadie te va a hacer daño. Soy biólogo. Estudio las plantas y los animales marinos, no los cazo -Mi tono se relajó. El hombretón no tenía la culpa de lo pirada que estaba la mujer a la que había rescatado-. Ligeia, no sólo estás loca, también eres una mentirosa. -Le espeté, divertido-. No sólo Máximo y yo hemos explicado dos veces en el comedor que vamos a visitar a un pescador, sino que además Azariel dijo antes que quería acompañarnos. ¿Escuchas a la gente cuando habla, Ligeia? A la gente real, no a las voces de tu cabeza, me refiero.

Cargando editor
15/06/2019, 17:27
Ligeia

Ronan no había comprendido nada, Ligeia hizo caso omiso a sus acusaciones, ignoraba todo lo que había pasado y no le culpaba por ello. Juzgaba sin saber nada y tampoco le culpaba por ello, también era costumbre bajo el mar, así que era algo normal al tener en frente algo que no comprendes. Tampoco hizo caso de sus insultos, la había llamado loca muchas veces, pero en su vida muchas más, así que estaba acostumbrada a que la gente no la entendiera y la insultara de aquella manera. Supuso que sus palabras podían influir en la opinión que Azariel tenía de ella, pero bueno, él era libre de creer lo que quisiera.

Simplemente esperó a que Azariel, que ahora sí tenía mucha información, decidiera, tal y como habían hablado en un principio. Ella había dado la cara por sus congéneres pero no estaban ayudando mucho. Lo único que la hizo suspirar es que por fin había bajado el arpón.

Notas de juego

Ahora sí espero a Azariel.

Cargando editor
17/06/2019, 11:59
Azariel

- ¿Apodo? - seguía manteniendo cierta distancia prudencial con el joven pero sus palabras parecian tener sentido para él. Bueno, casi todas. Ligeia salió, pero al parecer había cometido el error de preocuparla más de lo debido. Si, le tenia miedo al arpón, pero él era un guerrero entre los suyos, su miedo era que lo usara con sus semejantes.

Comenzó una batalla verbal en la que la mayoria de las cosas se le escapaban y generaba impotencia dentro de él. Pero otras si las comprendia y le hirieron - Ella no mentir. Ella proteger a mi.  - se señaló a si mismo, como si fuera necesario especificar con gestos lo que hablaba - Yo proteger a ella - alzó el mentón para que viera que la defenderia de lo que fuera.

Tiró con suavidad de la joven de pelo azul para atraerla hacia su pecho y rodearla con sus brazos - Calma. Ellos poder averiguar cosas. Tú saber que importante ser - la miró con dulzura mientras le apartaba el pelo del rostro - ir juntos todos. Yo llevar tridente bajo el mar... a veces...- bajó la mirada algo avergonzado - a veces ser necesario - alzó la mirada de nuevo y sondeó sus preciosos ojos azules esperando encontrar comprensión.

- Por favor. Ir tú y yo con ellos. Así asegurar que no usar esa....cosa - su agarre se aflojó, como habia hecho en el mar, para darle espacio de decisión

Notas de juego

joder. ¡si que hablais! XD

Cargando editor
17/06/2019, 12:28
[Maximo Cossetti]

Notas de juego

entro

Cargando editor
17/06/2019, 13:54
Ligeia

Y no podía más que sorprenderme y maravillarme de haber encontrado aquel tesoro en el agua. Para cuando alza el mentón yo estaba ya mucho más tranquila. Cada gesto, cada palabra, cada mirada, no las merecía y sin embargo aquí estaba.

Pero él tira de mí, sus brazos me rodean y todos los recuerdos relacionados con el arpón se esfuman. Los fantasmas del pasado desaparecen y con ellos el miedo. Ya no soy un mar embravecido, soy una tranquila cala cristalina. Toda la diarrea verbal que Ronan ha soltado sin criterio alguno sobre mí, se diluye.

Le devuelvo la mirada cuando me retira el pelo de la cara. Lo sé, por eso estamos aquí, por eso te has expuesto tanto. Mi ceño fruncido de preocupación se relaja, presiono los labios, yo no entiendo de armas que disparan, pero si él confía un poco en él, yo también; a pesar de la necedad de Ronan, no parecía un mal tipo. Sus modos y su manera de insultar y de espetarme sandeces no eran lo mejor, pero tampoco esperaba nada bueno de nadie así que podía tolerarle sin problemas.

Suspiro de nuevo, el miedo que me despierta esa cosa es tan visceral que me resulta difícil estar cerca, atrae fantasmas que me aterran por completo y me hacen temblar como un animal acorralado. Pero aquí están sus ojos castaños. Mis manos rodean su cuello un momento, me apoyo. Mis talones se levantan sobre los dedos de mis pies para llegar a juntar mi frente con la suya unos segundos y al final sonrío.

- Proteger, y para eso necesitas comer algo. – Sonrío de nuevo, mis ojos le preguntan ¿está todo bien? Y sí, parece que sí; él decide, es su historia no la mía, lo prometí así que yo seguiré protegiéndola hasta cuando él decida – está bien, vamos con ellos – murmuro algo más contenta.

Vuelvo a dejar mis talones en el suelo y a bajar las manos. Y miro a Ronan que seguramente tenga cosas que decir que a todas luces creo que harán subir el pan en tiempo record. Ladeo una sonrisa renovada.

- Perdona Ronan, ahora entiendo los motivos por los que llevas… eso, me he alterado demasiado. Me dan mucho miedo esas armas. – Al resto no me voy a molestar en responder, no me preocupa lo que piense de mí – lo siento. ¿Qué tiene de especial ese pescador? ¿Ha sobrevivido a algún ataque?

Notas de juego

Perdón por cambiar de tercera a primera U_U Espero no marearos mucho xDDD Voy cambiando según veo que en primera se me van demasiadas cosas.

Cargando editor
17/06/2019, 14:37
[Maximo Cossetti]

No sabía que había pasado, pero todo estaba en orden, aunque se notaba que el ambiente había estado caldeado segundos antes. Había llegado tarde a la noticia, en fin, cosas que pasan. Tomó aire, intentando controlar su respiración. Debía dejar de fumar y ponerse a hacer ejercicio. Mañana

-¿Todo bien?- dejó la frase en el aire, aunque no esperó respuesta, pues luego le habló a Ligeia con voz seca y directa, era una advertencia-. Ligeia, te lo digo como amigo, tené cuidado. No tanto por vos sino por Azariel. Si reacciona así viendo un video de una película, hacerlo pasear por una zona turística donde las sirenas son la atracción, podría atraer miradas. Sabés bien quien nos contrató y sus motivos- enarcó una negra ceja, pues desde un primer momento no le agradó nada el asunto de meter a un montón de desconocidos a buscar sirenas. Algo ya sabían y ellos eran solamente los peones en un juego enorme. Aunque era por naturaleza paranoico, de otra forma no sería periodista, lo que podría estar exagerando-. Tenelo en cuenta.

Soltó un profundo suspiro, esperando que Ronan contestara a la última pregunta de la joven, mientras él tomaba aire y controlaba su respiración.  

Notas de juego

llegué para los aplausos XD

Cargando editor
17/06/2019, 14:41
Ronan Parker

Escuché las palabras de Azariel. Si ya había quedado patente que, en su forma de ser había algo extraño, el hecho de que mencionara que llevaba un tridente bajo el mar, me hizo comprender lo que pretendía explicarme, pese a que una mente racional lo hubiera considerado un hecho imposible biológicamente. Era un tritón, como me había revelado antes. No era ningún apodo con el que lo denominasen en Capri, sino que parecía tratarse de un macho de sirena, pero extrañamente no se diferenciaba físicamente en nada de un ser humano corriente.

No obstante, para alguien que se cuestionaba todo como yo, no podía evitar preguntarme si estaría diciendo la verdad o sólo era lo que él creía. Era un shock demasiado grande y mi mente aún buscaba una explicación racional. ¿Estaría diciendo la verdad o sólo era lo que el propio Azariel pensaba de sí mismo? Ligeia, en medio de sus neuras en su sentido, había dado entender haber visto a las sirenas, y viendo lo cercana que se mostraba con Azariel y que toda la historia de la amnesia y el rescate que había contado hacía aguas por todos lados... Blanco y en botella.

En otras circunstancias, me habría sentido alucinado e incluso hubiera querido examinar con detenimiento a Azariel para estudiar en que se diferenciaba de un ser humano. No obstante, la presencia de Ligeia era incómoda. La tipa no estaba en sus cabales y que pasase de la rabia, con el modo "intensita" activado, a la más absoluta tranquilidad en apenas unos instantes indicaba que claramente no era de fiar. Del mismo modo en que se había convertido en una auténtica arpía al reparar en un arpón que había estado colgado a mi espalda desde hace dos días, podía llegar a atacar a alguien si lo consideraba oportuno. "Por encima de mi cadáver" recordaba las palabras exactas de la mujer con sonrisa de tiburón. Era peligrosa, y no estaba bien de la cabeza.

-Lo siento, Azariel, no vais a venir con nosotros -dije, con amargura. Lo sentía por el chico, pero no iba a dejar que Ligeia viniera con nosotros a entrevistar al pescador-. No por ti. Por ella. -Fijé la mirada en Ligeia-. No puedo confiar en una persona que delira de tal manera, viendo sólo lo que quiere ver. Salgo a la calle con un arpón que ya llevaba ayer para ir a la playa y buscar a un pescador y, según ella, soy el mismísimo capitán Acab. ¿Crees que es normal la forma en la que te has comportado, Ligeia? -Imaginaba que la mujer, del mismo modo en que no me había visto subir al Siren con un arpón, tampoco consideraba que comportarse como un chimpancé oligofrénico se tratase algo anormal-. Necesitas ayuda.

Dirigí una mirada a mi recién llegado compañero de investigación, quien había salido fuera, a tiempo de asistir a los últimos coletazos de la discusión.

-Máximo, volvamos dentro. Creo que conviene que hablemos con Mike, Marc y la doctora. Exponer lo que sabemos. Azariel me ha contado algo interesante antes de que Ligeia llegase hecha un basilisco. Vamos.

Regresé al interior de la Villa Sirenella con paso decidido, para reunirme con el resto de mis compañeros y poner todas las cartas sobre la mesa.

Cargando editor
17/06/2019, 15:59
Ronan Parker

Notas de juego

Salgo

Cargando editor
17/06/2019, 16:33
Ligeia

La manera en la que Ronan exageraba mi comportamiento de una forma estratosférica y normalizaba el de Azariel me pareció tan curiosa como increíble.

- Creo que nada aquí es normal. – Murmuro - ¿lo llevaba en la playa? La verdad es que no lo vi… apenas llegamos me fui directa a la piedra, ni siquiera firmé el contrato.  

Miro a Máximo, que a decir verdad tiene razón en su comentario.

- Él también lo sabe y puede ayudarnos mucho…

Presiono los labios y miro al sireno, aun cogiendo su brazo con cariño.

- Has hablado del tridente… ¿qué más le has contado? – suspiro apesadumbrada por todo aquel lío que al parecer había provocado yo, me siendo avergonzada  - lo siento… siento mucho haberme alterado tanto.

La verdad es que no sabía qué más añadir a aquella situación.

Cargando editor
18/06/2019, 10:46
Azariel

- ¿Por... - no pudo terminar la pregunta. A la velocidad de las corrientes más bravas aquel hombre soltó su retahíla sin dar tiempo a réplica, sin aceptar una petición de perdón. Y encima hablaba de contar a todos lo que él le había comentado en confidencia. Si, lo había hecho por la desesperación, por apelar a sus sentimientos para que nadie resultase herido, no porque confiase en él, pero... tampoco pensó que fuera a contárselo a todos. 

Cuando pudo dejar de mirar perplejo la puerta por donde se había marchado se giró de nuevo hacia Ligeia - Yo contar que ser Tritón. Yo ofrecer a ayudar a averiguar que pasar con ataques - sus ojos miraron de soslayo a Máximo. Total, se enteraría cuando entrara a la casa.

- Yo no entrar ahí. Él no aceptar tus palabras disculpadas. Yo no aceptar sus órdenes - se apartó un poco de ella -  Además, tener que hablar con madre urgente - esperó respuesta antes de moverse

Notas de juego

Voy a acabar llamando a Ronan, Flash. Me cago en sus muelas. XD

Cargando editor
18/06/2019, 13:13
Ligeia

Todo se había ido al carajo y la sensación de que todo había sido mi culpa me dejaba el alma en los pies. Las palabras de Azariel, sobre todo las últimas...

- Espera... está molesto conmigo, sólo eso. Pero ya que él va a contar lo que eres, puedes contarlo tú mismo a los demás. Me disculparé de nuevo, no pasa nada - pienso con el ceño fruncido de preocupación y miro a Máximo - como amigo has dicho...

Suspiro, a pesar de que fui dura con él en el salón me llamaba amiga, lo que me hacía pensar que quizás en él sí podíamos confiar. De todos modos se enteraría dentro.

Miro al sireno de nuevo.

- No puedes volver así después de lo que pasó ayer. Si tú corres ese riego yo iré contigo, pero espera un poco... Máximo, ¿Tú sabes dónde está el pescador? - miro a Azariel - has visto los mordiscos de Marc, dices que son de sirenas. Quizás ese pescador tenga más información.

Abrazo a Azariel con cariño, rodeando su torso con los brazos, pegando mi mejilla a su pecho. Se me dan muy mal estas cosas.

- No te quedes con este mal sabor, ha sido por mí, no por ti, es normal que no entienda nada pero nosotros podemos hacer mucho más. Estoy convencida de que podemos solucionar las cosas - entrelazo sus dedos con los míos escrutando sus ojos - océano y tierra. Juntos. Tenemos las piezas, sólo tenemos en encajarlas. Necesitamos encontrar a esas criaturas. Si aún así quieres que nos vayamos, nos vamos.

Suelto el abrazo, si quería marcharse él solo tampoco podría retenerlo pero sí lo seguiría para despedirme antes de verlo ir. No sé muy bien como conciliar ésto, pero pongo todo mi empeño en ello.

Notas de juego

Máximo, perdón si te piso, soy una ansiosa xD parece que no llegaste solo para los aplausos.

Cargando editor
18/06/2019, 15:13
[Maximo Cossetti]

Máximo asintió, un par de veces, mirando a Azariel mientras arrugaba la boca. Luego apoyó sus manos detrás de la nuca, volviendo a asentir y a respirar lento, intentando conciliar lo racional con lo irracional. Lo sospechaba, lo intuía, pero era muy diferente tener una confirmación. Podría ser mentira, su lado racional se lo gritaba al oído, esto solo podrían ser delirios de un chico muy afectado… pero no era el caso.

-Está bien…- ahora miraba a Azariel como si lo viera por primera vez, sentía que su cabeza entraba en ebullición, terminando luego en una explosión psíquica-. Ronan no es un mal tipo, el chavón es precavido- miró a Ligeia y al Tritón… ¡Era un tritón!-. Siempre busco la verdad… pero a veces la verdad no debe ser contada, no cuando las personas no están listas para ella- se puso las manos en los bolsillos, mirando el suelo-. No sé porque te fuiste de tu “hogar”, pero los ataques son un problema. Los humanos no son famosos por entender cosas, sino por… ya saben…- movió su cabeza sin terminar la frase, aunque seguramente Ligeia si la entendería. Su reacción era la de alguien que esperaba lo peor de las personas, algo que compartía con Máximo, solo que el periodista sabia ocultarlo mucho mejor-. El pescador “loco”- alzó un dedo cuando dijo loco-. Suponemos que es el mismo con el que hablé cuando desapareciste. No tenemos nombre o dirección. Solo muchas suposiciones y ganas de encontrarle.

No le gustaba que le mintieran, pero entendía el motivo por el que ella ocultó el origen de Azariel. No les conocía de nada, compartieron unas palabras, unos cigarros y ya. Así que, estaba dispuesto a interceder por ellos.

-Puedo hablar con los demás, para que la cosa no escale más. Solamente quiero saber qué pasa.

Cargando editor
19/06/2019, 17:00
Azariel

Azariel respiraba contenido mientras devolvía el abrazo de Ligeia con intensidad. Había sentido el desprecio y el odio en las palabras de aquel hombre aunque no entendiera todo. E iban dirigidas a su tesoro. No quería volver dentro. No quería verlo, pero....

Retuvo la cálida mano de la joven - Quedar contigo -

Se le escapó el aire entre los labios con pesar. - Mi gente no estar a salvo si humanos saber, pero parecer que humanos buscar de igual forma. ¿Ellos entenderán que yo querer ayudar? ¿No querer matar a mi? - miraba sobre todo a Máximo, que parecía conocer más a los de la casa. - ¿Ser buena idea que tú hablar primero? - preguntó con cautela mirando de nuevo la fachada de la casa.

Cargando editor
19/06/2019, 21:14
Ligeia

Veo en máximo la expresión de sorpresa cuando se da cuenta de todo, ladeo una sonrisa cómplice cuando habla, parece comprenderme, lo que le confiere calidad humana que hacía tiempo que no veía.

Podría haber dejado marchar a Azariel, podría haber ido con él, pero alarmar a las demás sirenas quizás habría sido mucho peor, menos por la pataleta de un hombre que tiene un problema conmigo, no con él. Debía intentar hacerlo encajar todo aún sin ayuda de los de mi especie. Pero ahí estaba Máximo. Ayudando. No sé por qué siento algo de complicidad con él.

Aún estoy preocupada mirando al sireno cuando retiene mi mano. Una sonrisa de fascinación siempre en mis labios cuando le miro, porque la gente cuando me conoce actúa como Ronan, casi como si hiciera falta ponerme una camisa de fuerza. Nadie, jamás había actuado como Azariel. Nunca. Dejo un poco de espacio para que Máximo mastique todo lo que está pasando, creo que Azariel se ha explicado bien, aún así yo me extiendo un poco más, por si acaso, mirándolos alternativamente.

- Ellos casi necesitan más ayuda que nosotros. Estamos hurgando demasiado en lo profundo del agua y quieren seguir escondidos – presiono las labios y miro a Máximo – supongo que entenderás sus motivos, la especie humana es… en fin, mi idea era encontrar a esas criaturas, acabar con el problema; que la persona que nos contrató vea que son monstruos y no hay sirenas, y deje el mar en paz. Ronan habrá contado a los demás que Azariel es un tritón y yo una loca peligrosa y mentirosa... no sé cómo arreglar ésto para que todos rememos en la misma dirección.

Cargando editor
20/06/2019, 14:07
[Maximo Cossetti]

Máximo soltó un largo suspiro, rebuscando en sus bolsillos hasta sacar un arrugado atado de cigarros, en donde aún quedaban un par. Mientras pensaba, reflexionaba y deducía a gran velocidad, encendió un cigarro y mientras soltaba el humo comenzó a hablar.

-¿Querés hacerles creer que monstruos atacan a las personas? ¿O de verdad otra cosa esta atacando a la gente?- no había entendido eso ultimo-. Necesitás algo que mostrarles, porque si es solo una historia, solo conseguirías lo contrario: que intenten buscar a esos “monstruos” para acabar con ellos- un humano podía desmontar hectáreas y hectáreas de bosque, cazar a una especie hasta extinguirla, contaminar todo a su alrededor… pero si un animal mata a un humano el animal debe morir. Así ha sido siempre y costaría muchísimo cambiarlo-. Ahora, si tenés algo que mostrar, que aleje la atención de las sirenas. Copado, lo hacemos así. Y si no, vamos a tener que hacer algo y rápido.

Se giró hacia donde estaba la villa, pensando en que les diría a los demás y el lio que podría estar armando Ronan. Tenía que ser la voz de la razón, evitar que el fuego se extienda, pero para ello había que sentarse, hablar y enfriar la cabeza.

-Voy a hablar con ellos, pero va a costar hacerles ver que de verdad tenés una sirena al lado- lo más normal sería pensar que solo eran una parejita adorable de locos-. La mejor forma de que todos empujemos el carro es hacerles ver que vos no sos una mina peligrosa y él no es una amenaza para nadie. Ahí está el asunto. Después, todos juntos, podemos ver que se nos ocurre.

Miró ambos, arrojando su cigarro al suelo totalmente consumido, luego de haberlo fumado de forma metódica mientras hablaba. Desde su punto de vista, lo mejor era poner las cartas sobre la mesa con el grupo, sobre todo ahora que Ronan iba a contar toda la verdad.

Cargando editor
20/06/2019, 20:37
Azariel

Azariel escuchaba a aquel humano intentando concentrarse lo máximo posible para comprender todo lo que decía, pues hablaba algo distinto que el resto, como si enfatizara cantando el final de algunas palabras, y le costaba más. 

- Sirenas no atacar. Querer vivir con paz cada uno en su lugar, pero saber que algo atacar humanos. Nosotros intentar averiguar que... por eso aquí yo - hablaba despacio, intentando no perderse en explicaciones tontas e ir directo al grano. Se acercó al hombre aún aferrado a la mano de Ligeia y puso su zurda  en su hombro - Yo agradecer tú ayuda - dudó un momento

- Entrar todos. Y tú hablar - su mirada se había clavado en Máximo para hacerle ver que hablaba de él. - Mejor saber ya que pensar ellos de.... mi - 

Notas de juego

He pensado que si no esto se va a eternizar. Mejor quitar la tirita ya, XDDDDDD