Partida Rol por web

- "Bien será mejor que nos preparemos, saldremos de inmediato. Cobain busca a Gaheris y ponle al corriente... nos vamos."

Me levanto para prepararme para salir.

Langren piensa un momento y luego te responde:

 - "Si lo que harán es ir en las Speeder Bike, atacar y volver en ellas, no necesitan nada. Dudo realmente que deseen hacer un día de campo allá fuera y no se los recomendaría aun quisieran."

La verdad es que a menos que deseen enfrentarse a la naturaleza, no necesitan nada más que las speeder, las que deberían cuidar mucho.

Asiento y me levanto de la reunión.

Busco a Gaheris y le informo de que partimos enseguida hacia las cuevas en las bikes.

- "Compañero Padawan, usted irá con el señor Viquen." -

Me encojo de hombros y le doy una sonrisa a Nina mientras la tomo del brazo guiándola hasta la speeder Bike

 "huurh uughghhhgh raaaaaahhgh uughguughhhghghghhhgh raaaaaahhgh aarrragghuuhw aarrragghuuhw"

_{*Su carruaje la espera mi querida dama}

Le digo en tono jocoso , luego hago una venia exagerada 

-Al ataque entonces -dice la mujer del cabello azul con una sonrisa jovial. Después se levanta y mira hacia Roogbor-. ¿Dónde se ha metido mi equipaje, Rogui? No me lo digas, seguro que se ha vuelto invisible o algo...

- "Estoy aquí, Capitana." - Digo mientras oculto mis manos bajo mis mangas y sonrío levemente con una misteriosa sonrisa.

Después me subo a bordo de la hoverbike en mi puesto como pasajero.

 - Entonces creo que necesitaremos herramientas, para hacer reparaciones, en caso de que alguna se averíe, ¿me equivoco?. Por lo que pueda pasar... - Pregunté a Langren.

Mientras el equipo prepara las bikes para la partida hablo con Doren. Amigo mio necesito que esta vez te quedes con Langren, necesitará tu apoyo para organizar la defensa y temo que algo pueda pasarnos allí fuera.

-"Si no regresamos, encargate de que se repare la nave lo antes posible e informa al senador de todo lo que esta sucediendo para que envien refuerzos y poder evacuar la colonia. Que R8 permanezca atento a esta frecuencia, si tenemos alguna posibilidad de transmitir algo por poco que sea será así. Espero volver a vernos pero sino es así ha sido un placer tenerte en mi equipo."

Tras despedirme cojo el equipo médico.

- Sois muy galante, apuesto caballero. - digo, siguiéndole el juego a Roogbor, mientras camino, agarrada de su peludo brazo, hacia nuestra moto. - Estoy deseosa de poder pasear, junto a Vos, por esta extraña selva. Me pregunto, qué otros divertimentos habréis preparado, para mí, para el día de hoy.-

-Los pies ahí, sobre los estribos -dice Balael, señalando dos toscas piezas de metal recubiertas por goma-. No, eso es el carburador. Ahí. Ah, demonios... -la wrooniana se vuelve hacia la moto que está ocupando justo ahora su amigo Roogbor-. Peludo, desde ya te digo que como se me caiga el monje no respondo.

Los motores de las speeder bikes resuenan al momento de ser encendida por quienes atravesarán el mar de árboles y plantas hasta llegar finalmente a aquellas misteriosas cuevas que son mucho más de lo que parecía a simple vista. Los vehículos son cuatro y ocho los ocupantes sobre ellos.

El amanecer ha sido hace pocas horas y es el momento de comenzar una batalla dura por el dominio de Orinda. Será un ataque rápido y contundente que no verá piedad. Todos los involucrados tienen un semblante serio y decidido, listos para ir a luchar y acabar con quienes ponen en amenaza a las personas inocentes cuyo único error fue elegir el planeta equivocado para colonizar.

Las speeder bikes parten su camino y se dirigen raudas hacia su destino, esquivando troncos y malezas que pueden causar un muy grave accidente al menor error.

Me sujeto fuerte. A la velocidad que puede alcanzar una de estas Speederbikes, soltarse durante el viaje puede significar estamparse contra un árbol a una velocidad terminal...

El sonido de los motores rompe la tranquilidad de la colonia y muchos son los curiosos que nos observan. Pensativo recordó con mi mirada los presentes donde la tensión ya se puede sentir en el ambiente.

-"Bien, estamos preparados para partir. En cuanto salgamos ahí fuera correremos un gran peligro, debemos confiar los unos en los otros si queremos regresar con vida. No olvidemos que el destino de toda esta gente esta en nuestras manos. Fijaros en como nos miran esos niños. nos miran como a héroes, nos miran como su única esperanza, solo espero estar a la altura de su confianza. Puede que no estéis de acuerdo con mis métodos pero no os pido que hagáis esto por mi... Hacerlo por ellos."

-"Saldremos en pequeños intervalos de 30 segundos, la moto de roogbor será la última por si alguna moto tiene algún problema. Lleva tus herramientas y algunas piezas."

Hago una señal a Sake para que encabece la expedición, después sera Balael, yo y Roogbor. Monto en la bike, busco con la mirada a Langren y asiento en un mensaje de confianza.

Compruebo todos el instrumental de la moto para hacerme con ella, echo un vistazo a mi compañero y le digo -Todo bien? estas preparado? y cuando me contesta afirmativamente salgo el primero, como me dice Haka, en direccion a las cuevas.

-Agárrate todo lo bien que quieras, Jedi -dice Balael-, pero si quieres conservar las manos mantenlas alejadas de todas las zonas sensibles. 

 Me agarro con fuerza, mientras respondo al soldado:

 - Listo...

- "No se preocupe, Capitana." -

Lo cierto es que desde que comenzó esta misión, la Capitana me ha parecido una excéntrica y una insensata cabeza hueca, pero este último comentario me ha parecido gracioso y divertido.

- "No corre usted peligro conmigo, mi señora. Los Padawanes somos entrenados para resistir toda clase de tentaciones." -

-Pues sigue resistiendo -refunfuña la wrooniana mientras acelera bruscamente su moto esquivando por poco unos troncos cercanos.

- ¿Tú también vas a tener reparos en que pueda tocarte en alguna zona sensible? - le pregunto, de forma jocosa, a mi compañero de speeder bike, el Wookie Roogbor, mientras despliego mis antenas.