Partida Rol por web

Juan Manuel de Rosas mira a Kashya y luego dijo:

-Disculpeme señorita Kashya,pero no tengo la fuerza necesaria para correr,agote todas mis fuerzas al sobre exigirme como lo hice,solo tengo fuerzas para levantarme y caminar.

Suspiro dado que odiaba ser una carga en estos momentos para sus compañeros.

-Bien, pues iré a por el coche y le recogeré aquí. No se mueva-le digo mientras salgo directa hacia el coche sin darle opción a Yakov a seguirme, ahora mismo creo que De Rosas necesita más ayuda que yo.

Juan Manuel de Rosas asintio y luego dijo:

-No se preocupe,no me movere de aqui.

Y asi lo hizo se quedo sentado alli.

Yakov mira atónito a Kashya, sorprendido por su decisión y su iniciativa.

-Orrquidea, quédate tú con Juan Manuel y ayúdale a llegarr hasta el descampado-le comenta el Bruja a la asesina, y siguiendo a Kashya, se interna en el túnel para llegar al descampado.

Junto atraviesan el terreno vacío hasta el viejo Seat Ibiza, y con él atraviesan la polvorienta distancia entre la calle y la estación; mientras de Rosas y la Assamita recorren con cansancio el pasillo de azulejos.

Más tarde, con Yakov al volante, enfiláis la Castellana en dirección contraria a como hicisteis hacía pocas horas.

Sabéis que no podéis dejar escapar el coche. La misión ha salido mal y a quien (o quienes) Rael persigue pueden tener más de una respuesta.

Tomas la calle Agustín de Foxá hasta Plaza Castilla, viendo como pasan velozmente las farolas a ambos lados, mientras intentas encontrar con la vista el Seat Panda rojo.

Llegas a la plaza y, bajo el brillo oscuro de los cristales de las Torres Kio, ves el coche girando en la rotonda para cojer la Avenida de Asturias, rumbo al Barrio del Pilar.

Tomando las precauciones necesarias, le persigues. Parece no percatarse de tu presencia. Notas como aminora la velocidad y gira a la derecha al pasar la boca del metro de Ventilla. En una calle estrecha y flanqueada por edificios de viviendas de clase media, aparca. Decides dejar la moto a una calle de distancia, mientras él se dirige a un portal cercano, abre la puerta y entra.

Te da tiempo a ver que es un señor mayor, encorvado y de andar incierto.

Si me da tiempo, me muevo rápidamente hacia él para cogerle por la espalda y ponerle el cuchillo en la garganta antes de que se cierre la puerta del portal

Si ya ha entrado, compruebo que la pistola tiene balas (si no las tiene, recargo el arma o saco el cuchillo si no me quedan balas) y me dirijo a la puerta y la abro. Si lo veo cerca, le apunto con la pistola. Si no, sigo los ruidos que haga al subir las escaleras o el ascensor.

Llegáis a Plaza Castilla y pasáis por debajo del arco de cristales y reflejos que forman las Torres Kio. Yakov os mira y dice:

-Tomarré esta calle de la derrecha,-dice Yakov mientras entra el la glorieta,-¿os parrese bien?

Todos asentís o el Brujah enfila la Avenida de Asturias. Pasada la boca del metro de Ventilla, Kashya grita:

-¡¡¿Ésa no es la moto que ha robado Rael?!!-exclama mientras señala un ciclomotor que se interna por una calle a la derecha.

Yakov gira rápidamente el volante y persigue la moto que, al cabo de una par de calles, se detiene y Rael se baja de ella.

Vas a enfilar hacia el portal cuando oyes que se acerca un automóvil. Intentas ocultarte entre las sombras, pero te das cuenta que es el destartalado Seat Ibiza en el que habíais llegado a la estación. Dentro están de Rosas, Kashya, Orquídea y Yakov al volante.

Mientras, se enciende una luz en una ventana del primer piso del portal en el que el señor entró.

Por un momento pensé que no conseguiríais seguirme. Doy un suspiro y les expongo la situacion. Un hombre viejo nos estaba observando en la estación y se dio a la fuga. Está en esa ventana. Señalo a la ventana con la luz recien encendida

La Assamita mira a Rael:

-¡Menos mal que lo has encontrado!-dice.-Para otra vez grita algo... Menos mal que te vio Kashya, que si no todavía estamos en Chamartín como unos pasmarotes.

Se gira y mira hacia donde ha señalado el Ravhno.

-¿Sabes si está con alguien más o está solo? Es que meternos así, "a pelo", en una casa... puede ser peligroso.

Me bajo del automóvil con pesadez. Habíamos tenido suerte en encontrar a Rael, pero esperaba que no se nos hubiese acabado aún.

-Todo esto es muy rrarro... ¿la Camarrilla sólo manda un viejo a espiarrnos?...-digo, en un término medio entre a mí mismo y a los demás.- ¡Y además sale corriendo al verrnos! ¿No serrá un señuelo?

-¿No podrían mandarnos refuerzos?-nada más decirlo me arrepiento de la pregunta.-Bueno... me imagino que quizá alguien pudiera echarnos una mano... Entrar así, sin más, puede ser peligroso como ha dicho Orquídea.

No tenía tiempo de gritaros - digo contestando a Orquidea - Y yo solo lo he visto a él, puede que halla alguien en la casa. Y yo diría que es un vampiro puesto que un viejo humano no suele moverse tan bien... pero esto es solo una suposicion. 

Luego miro a Kashya. ¿Refuerzos? Mas nos vale no pedir refuerzos porque de alguna forma se han enterado de nuestros planes.

Sigo hablando mirando a la ventana. Yo voy a entrar a por ese malnacido, ¿quien viene?