Partida Rol por web

The Last Blade

Capítulo II: Enfermedad

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12/09/2011, 10:47
Director

El pequeño, que había vuelto a asomar los ojillos por la lona del carro, pareció fascinado por el utensilio de Lee y alargó rápidamente la mano para cogerlo, pero su padre le atizó en el brazo con la fina vara que usaba para picar a los bueyes. Se oyó un gritito y el pequeño volvió a esconderse.

- Podéis subir -dijo con indiferencia-. Aunque quizá estéis algo estrechos...

El carro era grande, así que por ese comentario era de intuir que dentro había aún más gente. Tras aminorar un poco el paso para dejar que el carro los adelantase, Akari, Lee y Juzoh pudieron ver que la parte trasera de la lona se abría y el muchachito asomaba otra vez con una amplia sonrisa mellada.

- ¡Vamos, vamos! -les apremiaba el chico dando saltitos.

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12/09/2011, 13:29
Juzoh

Se sentía muy incómodo en aquella estrecha carreta que apestaba a sudor y cuerpos apretujados. Pero lo que más incómodo le resultaba era tener que estar pegado a Lee, al que había empezado a detestar de todas las maneras y formas posibles. Ya no sólo había puesto en peligro a su querida hermana, sino que le había faltado el respeto a él y Akari con su actitud altanera. Decidió intentar llevar el viaje lo más cómodamente posible, y a los pocos minutos todo el mal humor se le había esfumado, ya que el camino, sentado y con más conversación que la que tenía, era mucho más llevadero. Incluso se permitió algunas carcajadas respecto a cierto comentario que alguien había hecho sobre los pollos y el feng-shui...

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12/09/2011, 23:02
Lee

-Muchas gracias honorable señor. Digo con una inclinación, y juntando mi puño con mi palma; inmediatamente ayudo a subir a mis compañeros, y subo mis cosas a la carreta; sonrío al niño y le vuelto a enseñar el disco de lado y lado, para que vea que los dibujos son distintos.

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13/09/2011, 14:05
Akari

Sonríe al hombre que lleva el carro.

-Muchas gracias por su amabilidad, y sentimos las posibles molestias que le hayamos causado... sólo viajaremos un rato con ustedes para descansar las piernas.

Sube al carro y despeina al niño. Seguro que se siente feliz con ese objeto que le ha enseñado el extranjero. Puede parecer magia, pero seguro que es algo más sencillo... quizá un truco de ilusionista.

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15/09/2011, 19:39
Director

El interior de aquél carromato de comerciantes era como un saco de arroz en el que no cupiera ni un sólo grano más, pero los tres jóvenes agradecieron poder descansar sus agotadas piernas durante un rato. Además del muchachito de pelo corto había dos personas más allí: una niña de edad similar que Juzoh, Akari y Lee supusieron que era su hermana, pero el doble de tímida; una anciana arrugada que dormitaba y otro hombre que remendaba una bolsa de arpillera tosca. Tanto la niña como el hombre saludaron a los nuevos compañeros de viaje, pero la anciana permaneció silenciosa.

- ¡Hola, hola! -saludó el chico-. ¿A dónde vais? ¿Vais muy lejos?

Luego intentó arrebatarle a Lee aquél curioso artilugio de las manos, para ver el truco más de cerca.

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15/09/2011, 19:55
Akari

Parece que el niño es muy curioso y que se aburre mucho mientras viaja en ese carro con su familia... seguro que le gustaría más estar en un pueblo jugando con sus amigos en la calle a ser samurais o alguna cosa así.

-Pues vamos hacia el Monte Fuji. Seguro que es impresionante, verdad? Lo has visto alguna vez?

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17/09/2011, 05:24
Lee

Saludo a todos los viajeros con una inclinación de cabeza, mientras  la palma cubre al puño como la luz del sol sobre la montaña, sonrío al levantarme a todos ellos, especialmente al niño, pues... el tipo más noble de hombre  es aquel que tiene una mente amplia y libre prejuicios; sin embargo, cuando intenta quitarme el juguete lo desaparezco en las mangas.

-Recuerda siempre pedir las cosas, pequeño, en lugar de solo tomarlas. Eso te evitará muchos problemas...

 

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19/09/2011, 20:06
Juzoh

El paseo, añadido a toda la preocupación que había tenido por su enferma hermana, había agotado a Juzoh, que empezaba a dar cabezadas en el carro. La gigantesca figura resaltaba entre los demás miembros del grupo, y pronto sus ronquidos empezaron a resonar, ya que abría la boca desmesuradamente e incluso se le llegaba a caer la baba...

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24/09/2011, 11:07
Director

El traqueteo del carromato y la luz decreciente, pronto hicieron que el trío de jóvenes viajeros cayera en un sueño profundo. A Akari le costó un poco dormirse, dado que estaba aún nerviosa por su hermana Hikari, pero la tensión del día había sido grande, y también acabó durmiéndose. Soñó con shikigamis que rodeaban a su hermana y se acercaban a ella lentamente, mientras que Akari no podía hacer nada.

Se despertó sobresaltada y sudorosa, y descubrió que se habían parado y el conductor del carro la zarandeaba suavemente.

- Perdone -le dijo en voz baja-. Pero algo ocurre, hay una luz extraña al oeste. Parece fuego...

Juzoh y Lee se despertaron también, aunque al grandullón le costó un poco más. El resto de viajeros del carromato no estaban ya en él, pero se oían voces fuera.

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24/09/2011, 14:10
Lee

Salto de cabeza por el borde de la carreta para caer de pie en la tierra, y contemplar mejor lo que ocurre, y lo que se dice.

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30/09/2011, 15:02
Akari

Se acurruca un poco más cuando intentan despertarla. Ahora que ha conseguido dormirse después de estar tanto tiempo sin poder dormir, pensando en su hermana... Pero cuando oye la palabra fuego, se despierta de golpe y sale del carro de un salto.

-Dónde hay fuego!?

Mira hacia el oeste, siguiendo el resplandor anaranjado.

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01/10/2011, 10:04
Juzoh

Cómodamente asentado en el carro, mientras una brillante baba bajaba por su barbilla, Juzoh soñaba con grandes barriles de arroz regados con salsa de soja y pollos a la brasa. Incluso podía paladear el sabor de la soja en sus...

Cuando su hermanita se movió, Juzoh sintió el vacío que había dejado a su lado, y abrió lentamente un ojo para mirar alrededor con cierta desgana. No vio a nadie en el carro, entonces se alarmó y miró fuera. Diantres, ¿qué miraba todo el mundo con tanta atención? Moviéndose muy lentamente, Juzoh salió del carro haciendo que las ruedas gimiesen por su peso.

- ¿Qué ocurre? ¿Hemos llegado ya a...?

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02/10/2011, 10:52
Director

Tanto Juzoh como Akari y Lee habían bajado del carro en cuanto escucharon la palabra "fuego", y al descender se encontraron con que realmente, hacia donde aquel hombre señalaba, podía verse un resplandor rojizo. Incluso había un olor extraño en el ambiente, como si alguien estuviera haciendo una enorme hoguera con maderos viejos y paja reseca, a pesar de que las llamas parecían estar lejos.
Los viajeros del carromato parecían muy nerviosos, y el conductor incluso murmuró:
- Esto es raro. En aquella dirección hay una aldea que tenemos que cruzar. Pero parece que se ha incendiado...
Los demás lo miraron con gesto de aprensión, y comentaron cosas en voz baja.
- Deberíamos dar un rodeo y tener cuidado -continuó el conductor-. Si hay bandidos por la zona y han quemado el pueblo, podemos tener problemas. Tardaremos más en llegar a casa, pero será más seguro desviarse...

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02/10/2011, 16:11
Lee

Tomo un bastón y me calo el sombrero.

-Señor conductor, si le permite ir a este joven monje el avanzar con cuidado para ver lo que ocurre, bien podría informar del posible peligro. Si son bandidos, bien podrían intentar tomar otro camino.

Notas de juego

El castrante Lee a la carga xDDD

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03/10/2011, 13:53
Juzoh

Todavía adormilado, e intrigado acerca de por qué le había recordado tanto al pato asado el olor que le venía a las fosas nasales, Juzoh se estiró, aburrido. Le estaba gustando viajar en carro, y la idea de tener que ponerse a caminar de nuevo le resultaba estremecedora.

- Sí, monje. Estoy seguro de que es una idea genial que vayas delante e investigues. Yo me quedaré aquí con Akari y er... protegeremos a los viajeros. Sí, eso haremos.

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05/10/2011, 12:21
Director

Al conductor del carro le pareció una gran idea el ofrecimiento de Lee, y asintió de buen grado. Le aliviaba bastante no tener que aventurarse hacia el pueblo sin saber qué pasaba. Parecía más que dispuesto a aceptar la ayuda de los viajeros.

- Pero... -dijo con voz apagada-, ¿de verdad va  a ir usted solo? Puede ser peligroso...

A pesar de su valoración, sin embargo, no parecía impaciente por ofrecerse a acompañarle.

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05/10/2011, 12:50
Lee

Sonrío tenuemente  mientras ladeo mi sombrero ante sus palabras de preocupación.

-No se preocupe por mi, estaré bien.

Acto seguido, y con el Bo en la mano corro hacía el pueblo, con la agilidad, gracia y velocidad, que solo un monje shaolin puede lograr.

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06/10/2011, 22:33
Akari

-Espérame!!

Sabe que no podrá correr tan rápido como él, así que invoca a uno de sus espíritus para seguirlo lo más rápido posible. No dejará que el monje extranjero se quede con todo el mérito.

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07/10/2011, 09:46
Juzoh

Juzoh resopló. ¿Cómo se le ocurria a su hermana salir corriendo tras ese irritante monje? ¡Con lo cómodo que estaba él allí!

Durante unos instante, se debatió entre acompañarla o quedarse allí. Ambos caminos eran buenos, ya que no podía permitir que su hermanita se quedara a solas con ese tipejo, pero tampoco podía abandonar a los viajeros a su suerte. Bueno, también estaba la baza de poder descansar...

Finalmente se sentó junto al carro con un enorme bostezo y se puso su gigantesca porra sobre las piernas.

- Yo me quedaré aquí con ustedes, así nos aseguramos de que no es una emboscada.

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07/10/2011, 20:20
Director

Los viajeros del carromato se quedaron de una pieza cuando Akari salió corriendo detrás de Lee y de un salto se subió a una grulla etérea que apareció de la nada, perdiéndose junto con el monje entre la espesura.

- ¿De dónde les ha sacado, señor...? -preguntó a Juzoh el chiquillo del diente mellado, con los ojos como platos.