Partida Rol por web

Miraba fijamente a Harrisom mientras Murphy ponía en su lugar aquel tipo, intentaba descubrir algún gesto que lo traicionase, algún sentimiento aflorando a las palabras de Murphy y en las suyas al invitarnos a tomar una copa.
Aunque para ser sinceros yo si tenía sentimientos contradictorios, por un lado quería aceptar a su invitación e intentar descubrir allí algo de nos explicase su presencia en aquel hotel o al menos sobre él. Por otra parte aquel hombre me hacia estar a la defensiva como si un sexto sentido me indicase que no era buena idea acercarse tanto a él y aun menos acudir a su habitación a tomar nada, esto debía ser planeado entre todos pero no había tiempo ni oportunidad para ello.
Incluso se me ocurrió rechazar su invitación alegando que nuestra amiga estaba indispuesta y seria una descortesía dejarla tanto tiempo a solas, pero dado que era Murphy el que había mantenido aquella conversación debía seguir con lo establecido. Me fiaba del instinto de Murphy y decidiera lo que decidiera se llevaría a cabo, aunque si nos metíamos en aquella habitación no pensaba tomar nada, no me fiaba de cómo nos miraba en especial a Rachel y Murphy.
Continúe desayunando haciendo ver poco menos que lo ignoraba, ya que el tema no iba conmigo.
Aunque mire a Murphy arqueando una ceja preguntándome que iba hacer.

Solté el pan de inmediato, despistada por un momento, mirando con la boca entreabierta a Harrisom, pero sobre todo algo indignada. Luego un cumplido, de nuevo confusión... y seguidamente parece que todo se calmó, así que suspiré mientras seguía mirando a ese hombre, algo confusa.

- Por supuesto, podremos vernos luego... - Dije en voz queda, aún sin comprender si tenía que estar enfadada o contenta. - Disculpe, - Le dije antes de que se marchara o la conversación se diera por concluida. - ¿Nos hemos visto antes, alguna vez?

Seguidamente mantuve la mirada en sus ojos, tratando de ver algún asomo de nerviosismo, de miedo o de duda.

Rachel parecía reconocer a aquel tipo de algo... pero Ryan no estaba seguro de si le conocía para bien o para mal.

- No se preocupe, - contestó Ryan fingiendo aceptar las disculpas de Harrisom - no pasa nada. Y sí, claro, aceptaremos su invitación para luego. - confirmó con otra sonrisa fingida. - Después de todo, con la inundación y todo eso, poco más podemos hacer aquí, ¿no? - finalizó con una sonrisa aún más grande y extendiendo los brazos mostrando claramente que estaban todos ahí porque no podían hacer otra cosa.

Ryan seguía con el objetivo de su misión entre ceja y ceja... no lo había olvidado y pensaba que quizás aceptando la invitación de Harrisom estuvieran más cerca de averiguar dónde estaba la dichosa caja.

Muy bien, tendrá su puñetera historia y si le apetece luego le firmo el puto libro con una X... Ahora lléveme a donde esté la puta caja.

Quiero largarme de este puto sitio ya. Lo pensó un momento, quizá debería avisar a Hanna pero no se atrevía a volver a verla. Además si era una trampa jamás querría ponerla en peligro, a ella no.

Usted delante señor Newman. Con un movimiento de la mano le invitó a avanzar.

¿Con una X?.- pregunto el escritor algo confuso mientras salia de la habitacion, indicandote el camino. ¿Esta seguro? En el capitulo 34 hay una escena increiblemente tierna en la cual le enseñan a leer... no como un erudito pero si decentemente... Oh, lo siento... ya me cayo.-  dijo el escritor, pero le resultaba imposible mantener la promesa.-¿Como es posible que olvidaran esas cosas?¿y como... han llegado a nuestros dias?¿Un agujero de gusano, un salto en el tiempo...?

Mientras hablaba se movia por los pasillos hasta llegar una enorme suit en el fondo. El escritor la señalo.

Brown se limitó a cerrar la boca y soportar la cháchara del escritor mientras le guiaba. ¿Agujero de gusano? Que coño era aquello de un agujero de gusano... Se lo apartó de la mente, tenía otras cosas en ella, principalmente a Hanna. La alejó recitando los salmos de su padre.

Cuando llegó delante de la suite quedó callado delante de la puerta, busco alarmas o cualquier cosa que le llamase la atención, hizo un gesto al escritor para que no se acercara. Cogió aire y comprobó que la puerta estuviese cerrada.

Curiosamente la puerta estaba abierta. Solo hacia falta girar el pomo.

La habitacion tenia un aura siniestra. Parecia vieja pero todos los muebles eran nuevos. El aire pesado se mantenia en la habitacion de un modo extraño pues ni al abrir la puerta parecia moverse. Podias notar como si estuvieras ante los aposentos de un aliado del inferno.

- Si quiere puedo quedarme y vigilar, si aparece alguien puedo avisarle.... si quiere.- sugirio

Esta bien, pero no me joda.

Le dijo aquello sin girarse, toda su atención puesta en el sito que tenía delante de él, por su mente pasó que aquello parecía de algún modo un eco de el pasado o una antesala del infierno. Aguantó la respiración, recitó un salmo y con un paso dubitativo entró en la sala.

Hechó un vistazo pensando en que si fuera un malnacido heredero de nazis y con el arma definitiva encerrada dentro de una jodida caja de música... ¿Donde la escondería?.

Jeremiah comenzo a mirar por la habitacion mientras el escritor esperaba fuera. Paso ante el espejo notando, por el rabillo del ojo, que una sombra pasaba por el otro lado del cristal. Una imagen espectral que duro media decima de segundo... ¿o era su imaginacion?

El viento parecio llamar al hombre con un susurro fantasmal y la misma corriente cerro la puerta de golpe dejando al escritor perplejo y aislado en el pasillo.

El hombre se marcho despues de ofrecer una sonrisa siniestra.

- Uff... que mal rollo da ese tio. comento el Will dejando la comida en el plato, habia perdido el apetito de repente.

Sintió un escalofrío que le recorría por la espalda. Miró alrededor tratando de olvidar la cara del escritor. Le parecía que Newman había percibido lo mismo. Su primera reacción fue abrir la puerta empezando a correr sin detenerse hasta encontrar una iglesia, a pesar de su impulso logró contenerse y se centró en la misión. 

Tenía que terminar aquello. Suspiró y se enfrentó al espejo, contuvo la respiración y miró a su propia imagen. Cuando el miedo desapareciera se concentraría en registrar la puta habitación. Estaba asustado se tenía que admitir, empezaba a renegar como un borracho pendenciero.

La corriente fria llevo a rozarte la columna como si te hubieras tumbado en el marmol de una losa funeraria y el corazon te dio un salto cuando a tu lado en el espejo viste a una persona, una cara detras de ti.

Al girarte no supiste si aliviarte o sobrecogerte al ver que ese hombre era real y tangible.

- Buenas noches señor. ¿Puedo ayudarle en algo?.- pregunto con un cierto tono de cinismo. 

Si hubiese aparecido el mismísimo Satanás del espejo con la piel roja agrietada y escamosa portando en la mano derecha un tridente y apestando a azufre el corazón de Brown saltado más en su pecho. El sudor de su frente al helarse sobre la piel y la sensación de frío hicieron que aún no descargara aquella idea.

La primera idea fue golpear a aquel hombre, la segunda echar a correr y no parar. No hizo ninguna de las dos cosas, las piernas se negaron a obedecerle, parecía que estuviesen dentro de un jodido bloque de hormigón.

Estoy buscando algo que... Ha perdido una amiga... Una caja de música... Me dijo que estaba aquí. ¿La ha visto amigo? -Preguntó Brown orgulloso, apenas había tartamudeado-. 

Fruncí el ceño mirando a Will.

- ¿Sí? La verdad es que es un poco raro... Yo no he coincidido mucho por él, pero me pone algo nerviosa. ¿Crees que hay alguna razón? ¿Debería tenerle miedo por algo?

- ¿Es verdad? ¿Le conoces? - pregunté a Will, refiriéndome al tipo raro, Harrisom.

Nadie le conoce... aparecio de la nada hace unos tres años y se convirtio en el empresario del año. Tiene su propia editorial y dice que una firma de abogados propia... lo cierto es que esta limpio. Demasiado limpio, ni una multa de aparcamiento y tiene amigos demasiado importantes como para que la policia se atreva a mirar que esconde confeso el hombre.

Visteis que Garrisom se levantaba y se disponia a marcharse. Unos segundos despues Will se levanto y se disculpo caballeroso.- Tengo que hacer una llamada, disculpenme.- dijo saliendo unos segundos despues...¿siguiendole? posiblemente.

- Interesante.- dijo el hombre con una sonrisa heladora.- Creo que tengo la caja que su amiga busca pero no estoy seguro. ¿Por que no trae aqui a su amiga para que le enseñe la caja y pueda decirme si es esa?

Ryan siguió con la mirada a Will mientras se alejaba, y lanzó una mirada inquisitiva a Peterson y Rachel.

Esperó un par de segundos para asegurarse de que Will no se percataba, y Ryan comentó a su superior:

- Voy a seguirle, señor. -

Con pasos rapidos e increíblemente silenciosos, Ryan siguió de lejos a Will, escondiéndose por el camino una vez que hubo salido de la sala.

Permanecí callado incluso más que de costumbre, pero debía seguir en mi papel y parecer un ricachón engreído. Incluso ignore la invitación de Harrisom, aun así el tipo no parecía ni molesto.
La verdad no estaba totalmente convencido de que fuese buena idea de ira a la habitación de aquel hombre, para ser sincero no me gustaba nada aquella idea, pero ya estaba hecho y teníamos que ir, aunque yo tomaría mis precauciones... Tan solo levante la mirada para clavarla en  el Sr. Will parecía que sabia bastante sobre Harrisom o como mínimo más que nosotros y eso no era difícil, lo que me parecía difícil tras escuchar al Will era que alguien llegase a saber algo de aquel hombre tan misterioso, me preguntaba a que sería debido tanto secretismo y quienes eran esos amigos tan poderosos como para que la policía no lo investigasen si es que había motivos para que fuese investigado.
Asentí con la cabeza a Murphy, me habría gustado ir con el pero me temía que levantaríamos demasiadas sospechas, debíamos continuar allí, terminar el desayuno y quien sabia quizás podríamos sacar algo más de información de algún otro huésped.
En voz baja mirando a Murphy.
Extreme las precauciones, nos reunimos en nuestra habitación.
Mientras me tapaba la boca con la taza de café.
Deje pasar unos minutos y me dirigí a  Rachel.
Creo que deberíamos hablar con otro huésped antes de volver a la habitación…
También en voz baja.