Cerrando la puerta de la verja tras despedirse de Gaspar y Rut:
- Ya mismo anochecerá. La muerte de Tulio me ha dejado conmocionado. Rut no parecía muy afectada... la pobre tiene que estar hecha polvo por dentro.
Mientras trabajas en el arpón Elica se acerca a ti y te habla en susurros:
- Xose. Tengo que contarte algo.
Se toma un poco de tiempo, como si fuese a contarte un gran secreto:
- Desde que te recogí en Monte Pío, en la Zona, tengo pesadillas. Sé que tú también las tienes, te oigo por las noches. Ya no sé ni lo que vi, si fue verdad, o si es algo que tengo en la cabeza por el accidente.
Cabizbaja, abatida y preocupada me quedo parada en la valla cómo Gaspar se va alejando. Veo la tarde acabarse y el cielo se oscurece, igual que nuestras vidas y nuestro plan. Nada tiene sentido. Es absurdo.
Ahora estoy aquí atrapada con un puñado de extraños, sin mi familia, y sin saber qué hacer. ¿Dónde estás, Jose? ¿Tú también estás así de solo, como yo?
Cuando Antón habla lo miro y no le contesto, ¿para qué? Voy a dar un paseo por dentro del recinto en círculos, siempre al lado de la valla, para aclarar mi cabeza. Al rato, subo a la atalaya y oteo alrededor.
Motivo: otear + agudeza
Tirada: 1d8
Resultado: 7(+5)=12 [7]
Miré con pavor a Elica. Una lasca del arpón salió disparada a la pared, y me quedé parado, un poco asombrado. Pregunto:
-Elica, yo vi, vi algo. Algo. -Me angustia, de pronto, me viene esa imagen a la cabeza. No. No...- ¿Qué viste exactamente? ¿Qué te asusta?
-Nara, lamento que Gaspar se vaya. Sé que no es lo mismo, ni espero serlo. Pero os agradezco mucho todo, y puedes confiar en mí. Estoy agobiado también por cuando volverán, pero lo harán.
Luego, la dejo marchar. Tengo que terminar el arpón que hice mientras ellos partían, por puro estrés. Le faltaba el agujero de la cuerda para recuperarlo bajo el agua y tirar del pez... O del podrido.
Luego, miré a Antón. -Tampoco me gusta esto. Tu que llevas más tiempo aquí, dime qué se necesita. Y perdona si soy cortante... No... No me siento... Cómodo hablando con la gente. Y menos si estoy nervioso. ¿Crees que lo conseguirán? - comenté, respecto a Rut y Gaspar
NAra hablando por el walkie talkie:
- Tulio muerto. Tulio muerto. Tulio muerto. Tulio muerto. Tulio muerto. Tulio muerto. Tulio muerto. Gaspar y Rut Moraime. Gaspar y Rut Moraime. Gaspar y Rut Moraime. Gaspar y Rut Moraime. Gaspar y Rut Moraime. Gaspar y Rut Moraime. Yo Hoke protegiendo. Yo Hoke protegiendo. Yo Hoke protegiendo. Yo Hoke protegiendo. Yo Hoke protegiendo. Yo Hoke protegiendo. Yo Hoke protegiendo. ¿Cómo estás? ¿Cómo estás? ¿Cómo estás? ¿Cómo estás? ¿Cómo estás? ¿Cómo estás? ¿Cuándo vienes? ¿Cuándo vienes? ¿Cuándo vienes? ¿Cuándo vienes? ¿Cuándo vienes? ¿Cuándo vienes?
Todos los que la rodean la miran extrañada.
Nara, lo que escribas por la escena de Comunicación ponlo aquí también.
Asustada por la repentina ansiedad de Nara hablando por el walkie talkie:
- ¿Hablas con Sunhee y Declan? ¿Qué ocurre?
Antón mira a Nara como si estuviese volviéndose loca:
- Voy a ver cómo está Made.
Y sale del refugio.
Aún no he entendido nada de lo que dice, porque se corta, así que he pensado que repitiendo varias veces lo mismo hay más probabilidades de que ella me entienda. - le contesto a Asunta aferrándome al Walkie. Es mi única conexión con mi familia.
(Máster yo estaba en la atalaya sola tras pasear por la valla pero bueno le respondo a Asunta)
Ante los gritos de Nara al walkie talkie:
- ¿Qué ocurre?
- Luego hablaremos.
Dejemos esta conversación para después.
(Máster yo estaba en la atalaya sola tras pasear por la valla pero bueno le respondo a Asunta)
Cierto, pero esa forma de hablar llama la atención de todos. Además esta escena es importante como para que Xose esté presente también.
Después de charlar con Antón y terminar el arpón, salgo del refugio para ir a por un trozo de cordel, y probar el arpón con un pez, pero también porque oigo a Nara hablar con insistencia con el walkie. Me quedo mirando extrañado, y espero, con el arpón que se me resbala de las manos, a que Nara acabe.
Pregunto a Asunta, con acento cerrado y el habla propia de la zona -"¿Pasou algo? ¿Sabes algo?"
Cuando veo que Nara termina, ya está a mi lado Elica, y escuchamos la explicación de Nara. Parece nerviosa, agobiada. Incluso, asustada. Está muy aferrada a su familia, como ella la llama. -¿Puedo hacer algo por ti?
Antes de salir, le digo a Elica que:
---Hablamos luego, está noche o mañana
- Joder. ¿Qué hacemos? Ya casi es de noche.
- ¡Bajad la voz!
El viejo tiene razón, al final Nara está hablando desde arriba de la atalaya...
xD
Antes has dicho que oteabas el horizonte y has hecho una tirada incluso. Pero la niebla, y la oscuridad que empieza, no te deja ver nada demasiado lejos. Cerca de Hoke no hay nada sospechoso al menos.
Senés tenía razón... Sólo les faltaba un ataque de podridos a aquellas horas, con la mitad de gente y sin luces... Mal,mal asunto...
Miré a Nara, a ver cuando terminaba. Deseaba tranquilizarla.
Sube la escalerilla de mano de la atalaya, y una vez arriba:
- Ven, niña.
Te da un abrazo.
- Yo sigo vigilando, no te preocupes. Baja y entra en el refugio. Habla desde allí mejor.
El abrazo de Anuncia me pilla por sorpresa, no tenía conciencia de estar hablando tan fuerte. Tienen razón, me iré abajo a hablar. Al ir bajando, suena el walkie de nuevo.
Dice Sunhee que vuelven ya para acá. ¡Buenas noticias! - Sonrío radiante. ¡Por fin buenas noticias!
Bajo de un salto los últimos tramos de la escalera y me siento por fin un poco más tranquila.
Venid rápido, Sunhee...
Anuncia, en un ratito te relevamos. Mientras, haremos una rica cena - le digo mirando hacia arriba sin gritar.
Ahora que Sunhee vuelve y estará pronto de nuevo con nosotros, todo es de otro color. Solo falta el cabezahueca de Gaspar.