Partida Rol por web

El Misterio del Windsor

La caída del Windsor

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11/10/2017, 07:44
Teniente Valladares

- Estaremos en la sede del Centro Nacional de Inteligencia. Allí dispondremos de tecnología si las medidas de seguridad contra estos casos han funcionado...nunca se habían testado con un arma de este calibre...

Saca una serie de tarjetas doradas con el logo del CNI y del ministerio del Interior. Os las entrega a los presentes. 

- Si os paran en un control mostrad esto. Os dejarán pasar inmediatamente. A partir de ahora son agentes del Estado y tienen sus poderes y obligaciones. Responderán sólo ante mí. 

Parkour sonríe al recibir la tarjeta, parece que le hace mucha ilusión. Hace una pausa y añade:

- Espero que su hermana esté bien. Al resto, si quieren ver a sus familiares o amigos vayan. Nos veremos en la sede del CNI mañana a las 9 horas. Descansen si pueden y cuídense.

Luego se da media vuelta y podéis verlo realmente hundido. La culpa que soporta ahora es muy grande.

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14/10/2017, 07:11
Josu Bergara

Aquel maldito pitillo era lo único capaz de aliviarme mínimamente en aquel instante. Imaginaba la nicotina recubriendo mis pulmones, germinando un cáncer de pulmón que me postrarse en una cama esperando un triste final, y a la hija de puta de Sorgina contemplando cómo su premio se le escapaba lentamente entre sus dedos infernales. Pero ese tipo de pensamientos eran fugaces, duraban menos que el cigarro en mis labios, en seguida recordaba que aún tenía cosas que hacer antes de rendirme del todo. 

Cargarme a Kruger, por ejemplo.

Adele también se apuntó, aunque necesitaba hacer alguna cosa antes, asegurarse de que su familia estaba bien. Su hermana. ¿No estaba casada? ¿O lo entendí yo mal? Igual no necesitaba saber si su marido estaba bien. Igual no le importaba. Igual no debería importarme a mí.

Alargué la mano y cogí la tarjeta que me tendía Valladares. Ser agente del Estado seguro que tenía sus ventajas. La cita era al día siguiente, y se nos daba tiempo para visitar a familiares y amigos. Una sonrisa llena de sarcasmo afloró a mis labios. Yo no tenía ni una cosa ni la otra, pero desde luego haría visitas. Un contacto me debía el ritual con el que encargarme de cierto "angelito", y pensaba ponerle tanto a él como al resto de mis conocidos a buscar cuanto dato o pista pudiera ponerme tras el rastro de Kruger. Venta de tecnoarmaduras o piezas de las mismas en el mercado negro, componentes para montar bombas de electromagnetismo de esas, grandes movimientos de pasta, lo que fuera. Nadie montaba un tinglado de esa envergadura sin levantar algo de polvo. 

Si me dices dónde vive tu hermana, te llevo. -Propuse a Adele, con desgana, tirando la colilla al suelo y pisándola para apagarla- No creo que vayas a encontrar un taxi al centro. ¿Rafa? ¿Te acerco también o vas por tu cuenta? ¿Parkour? ¿Rubita? -Abrí un portal común gesto de mis manos, a unos cinco kilómetros de nuestra posición, más cerca del centro de la capital, esperando a que lo cruzase quien quisiera acompañarme.

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15/10/2017, 19:17
Parkour

- Nosotros vamos por nuestra cuenta, quiero pasar a ver si cierta chica está herida. Espero que no pero prefiero confirmarlo... - dice mientras aporrea las teclas de su móvil que no funciona. - Inezumi se viene conmigo por si necesito protección... - añade.

Os mira al resto y se despide:

- Mañana nos vemos en la sede del CNI, no os metáis en líos que ya veo que os va la marcha...

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16/10/2017, 13:08
Adele Arjona

Valladares nos explicó dónde volveríamos a encontrarnos y nos dio aquella tarjeta con la que no nos pondrían pega alguna para poder acceder a donde necesitáramos, dejándonos claro que ahora teníamos cierto poder, pero también obligaciones.

Tomé la tarjeta con un asentimiento de cabeza, escuchando cómo nos daba tiempo hasta la mañana siguiente y deseaba que mi hermana se encontrara bien.

- Muchas gracias, señor. Descanse usted también. – le deseé con una muy tenue sonrisa, dudaba que el hombre pudiera dormir aquella noche.

Ni siquiera sabía si podría hacerlo yo. Puede que sabiendo a mi hermana a salvo pudiera echar una cabezada, o no. Tampoco es que durmiera mucho últimamente, atormentada por continuar unida a aquel hombre. Frédéric… ¿Qué pasaría por su cabeza en esos momentos? ¿Sabría ya lo que había sucedido en España? Porque continuaría en Francia… ¿No?

Sentí un escalofrío que me llevó a encogerme, sujetando mis propios brazos, pues tenía la impresión de que aunque nada de aquello lo hubiera provocado yo, el verse en la situación de no poder contactar conmigo sería algo que terminaría pagando en mis carnes.

En ese momento escuché la voz de Josu, girándome hacia él.

- Pues si no te importa, te lo agradecería… - acepté, tratando de limpiar el maquillaje que hubiera podido correrse de mis ojos mientras preguntaba al resto. – D-debería estar en la zona de Arganzuela. – le informé acongojada, tras ver que abría aquel portal. - Hasta mañana, ten cuidado. - me despedí de Parkour, pensando en lo irónico que era que precisamente él nos dijera eso.

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16/10/2017, 19:06
Director

-. FIN DE ESCENA .-