Partida Rol por web

El semielfo sonríe al percibir que puede llevarse el premio, aunque mientras se acerca al orbe parece pensárselo dos veces.

- Uhmmm - mira de reojo varias veces al enano con sus cortes en los brtazos y a Nekrach con su enorme mangual colgado en la espalda, y luego pasea la mirada por la elfa de nuevo. La emoción parece consumirle hasta que carraspea y se vuelve con resignación. - Bueno, el trato era quedarme con el premio que escogiera en primer lugar una vez encontrásemos el tesoro, pero hay una cosa que valoro por encima de cualquier otra cosa, incluso la del poder de este sorprendente orbe... así que acepto que sea alguno de los guerreros quien porte tan fabuloso instrumento mágico. - al final parece hasta sonreir de alegría.

Me apoyo en la pared, casi me reacuesto, apoyado con una pierna en la pared y la otra soportando mi peso. De una bolsita de cuero, saco una rama de regalíz y la empiezo a masticar mientras observo el cuadro con los brazos cruzados.

-Habeis pensado que "eso" puede ser más una maldición que un beneficio?- Sentencio al ver la cara expectante y absorta de los demas.

Nekrach se cruza de brazos y frunce el ceño al escuchar la explicación del mago sobre la naturaleza del extraño hallazgo.

No me gusta. No me fío. -sentencia lacónicamente - El espíritu de un valiente guerrero que muere debe ser recompensado y recibido por los dioses, no quedarse atrapado en una cripta maloliente...¿Qué maligno poder puede haber hecho algo así? - añade recordando la historia de la bruja que sedujo y dominó a Darelguer.

Estirando el cuello mira entre los escombros para ver si en el suelo de la estancia hay los restos de algún cadáver que les pueda dar una idea del origen de "eso". Supone que no debería estar demasiado lejos...

Estoy de acuerdo con Mushu. Yo no quiero saber nada de eso hasta averiguar algo más de su origen. Porque...¿quién nos asegura que no sea el alma del propio pirata Darelguer, atrapada como castigo por su crueldad?

Sonríe algo cínico ante la desconfianza habitual que muestran sus compañeros con lo desconocido. Menos Gueldar claro. Gruñó algo entredientes, no había desvelado el poder del orbe para que un enclenque semielfo se hiciera con él.

No es algo maligno Nekrach - al menos no necesariamente - este alma podría haber sido confinada voluntariamente para saldar algún tipo de deuda o redencion que tuviera en vida, o porque quería seguir disfrutando de la lucha eternamente.

¿El alma de Darelguer? Podría ser.. aunque no lo creo. Me temo que a ese nos lo encontraremos en carne y hueso.. bueno, quizá solo en hueso.

Las palabras del mago resuenan en la cabeza de Voiran como canciones celestiales, y la posibilidad de obtener ese poder es muy pero muy seductora, de esa forma bien podría arreglar lo que debe...... los pensamientos de Voiran se paran al observar a Nekrach, ese gran guerrero que seguro lo merece al menos tanto como el, y al seguir mirando al resto de sus compañeros, cada uno tiene grandes virtudes

El pesamiento de Voiran se ve interrumpido por las palabras de Gueldar

Lo que faltaba, eso si que no,sabría este bribón que solo había una cosa y se ha querido aprovechar de ello, antes se lo doy a la mula

Voiran sigue mirando a sus compañeros

- Es una curiosa decisión, me preguto si no podríamos invertir los términos, ¿hay forma de que sea ello el que elija a uno de nosotros?. Darth, tu eres un hombre sabio, dime amigo

Escucha las palabras de Voiran , y con rostro pensativo se gira hacia el orbe-Hmmmmmmmm........ Eso no es posible, me tocará a mi decidir..

Ese maldito inútil de Gueldar no se merece este premio, nos sera mucho más útil si lo porta un guerrero. Ya que Nekrach no se pronuncia Voiran será el mas apto, no me gusta mentir pero una pequeña mentira de vez en cuando..

Pronuncia unas preguntas en el habitual y extraño idioma arcano, aunque en realidad lo que dice no tiene ningun sentido y se lleva las manos a la cabeza como si percibiera algo. Sin girarse hacia sus compañeros murmura al salir de su "trance" al "elegido".

Voiran.

...Acércate..

Al ver como el mago "entra en trance" para revelar al guerrero "escogido" por el extraño ser encontrado en la caverna, Nekrach no puede evitar enarcar una ceja (bueno, lo que en las razas "piel-blandas" sería una ceja) escepticamente. ¿En realidad el orbe ese es capaz de comunicarse con Dardh, o resulta que el mago es un farolero de cuidado?...En realidad, ni lo sabe ni le importa demasiado.

Lo único que le interesa al dracónido es acabar cuanto antes con la distracción causada por este sorprendente hallazgo y continuar con la misión. Si el orbe es de verdad una ayuda, pues bienvenido sea. Y si es un problema, ya lo solucionará en su momento a su manera...con decisión, disciplina y a mazazos.

Bien, maese Voiran, parece que sois el "elegido". Si deseais aceptarlo, por mí perfecto, ya que no deseo tener ningún trato con "eso". - dice con un tono cínico - Pero sobre todo tened cuidado - añade más serio.

Mientras espera la reacción que pueda provocar en el enano el contacto con ese extraño poder, el cauteloso Nekrach vuelve a embrazar su escudo y a empuñar su mayal de guerra. Teme que la voluntad de su compañero enano no sea dominada por alguna fuerza maligna. No me gustaría tener que enfrentarme contra uno de nosotros, pero hay que estar preparado para todo...

-Y si el alma de ese guerrero atrapada es de un cabrón de cuidado? Dardh... Te has asegurado que el alma es de buena fe? No quisiera tener que enfrentarme a un amigo.- Pregunto exceptico ante lo que se avecina. Mientras, sigo mascando la rama y me pongo a afilar la hoja del Wakizashi.

Cuando el enano expande sus brazos con el hacha sostenida en las palmas de sus manos, el orbe misterioso revolotea varias veces en el aire y se extiende por el hacha del enano consumiéndose entre ambos. Una luminosidad extraña acrecenta hasta tal intensidad que por un momento, apenas un suspiro, os deja completamente cegados.
El hacha aparece envuelta por una densa humareda que apenas permite verla, pero en el rostro de Voiran puede verse cierta fascinacion, más que suficiente para tratarse de un enano. Rompiendo un silencio cargado de ansiedad, Voiran alza su hacha varias veces y comprueba sonriente la mejoría no solo en su aspecto, embellecida en oro y platino con relieves perfectamente artesanales, si no también en su manejo, en su soltura para con el arma; a pesar de su aspecto, le parece ligera como una pluma.

Voiran no puede creer lo que está ocurriendo, parece que las cosas se van poniendo en el lugar adecuado.

- Todos estos sacrificios y luchas para que de momento yo sea el único que ha sacado algo de esta aventura, no es suficiente!. Amigos, cuando cualquiera de vosotros lo necesite este hacha estará presta para serviros y ayudaros en todo lo necesario

Voiran ensimismado observa el hacha una y otra vez dando gracias a los dioses por el obsequio recibido.

Al terminar de pronunciar el sortilegio, esta vez de verdad, sonríe levemente al ver al enano como a un niño con su juguete nuevo y contempla con él la maravillosa transformación.

Ese hacha parece que te pertenece. Espero que le des un buen uso partiendo cuellos antes de que partan los nuestros..

No debemos demorarnos, continuemos.

Ireth observa el discurso de Dardh con cierta extrañeza, compartiendo en silencio una mirada cómplice con Nekrach. No le va a aguar la fiesta, pero no está demasiado segura de que ésa "esfera" sea capaz de comunicarse... aunque también es cierto que no es precisamente experta en magia.

Cuando el estallido de luz se produce, Ireth retrocede un paso, cubriéndose los ojos con una mano y ahogando una exclamación de asombro y cierta alarma, hasta que al mirar alrededor comprueba que todo sigue en su sitio y se mantiene unos segundos fascinada por la nueva hacha.

-Es increíble... ¡digna de un maestro enano!- exclama con entusiasmo, contenta por el hecho de que al menos uno de sus compañeros ya haya conseguido una grata recompensa por las penurias pasadas, aunque lo mejro sería dar con esa supuesta "llave" cuanto antes.
-Sí, pero no vayas delante...- advierte a Dardh tirándole de la sucia camiseta para que deje pasar a otro de sus compañeros en frente, soltándole después para seguirle a poca distancia.

-De acuerdo, ains... Ya voy yo delante...- Comento con energias renovadas envainando el Wakizashi. Encabezo la marcha hacia el unico lugar que nos queda. Afino mis sentidos para ver lo que me rodea. Me engancho el cetro en las trinchas y camino con paso vacilante, pero con cuidado; Poniendo incapié en buscar y reconocer trampas.

Hummmm...excelente hacha, maese Voiran - comenta Nekrach entre (afilados) dientes sin poder ocultar del todo un ligero tono de envidia.... - Con vuestra destreza y con sus poderes, sereis un rival aún más temible de lo que ya érais, si cabe.

Pero a pesar de los posibles poderes que pueda poseer el nuevo arma del enano, una sensación negativa no deja de removerle las tripas...No es un simple arma mágica, es el alma de un guerrero atrapada voluntariamente en ella...

Oh, Gran Bahamut, Padre de los Dragones y de mi raza. Si caigo en la batalla, llévame a tu lado hasta que llegue el día de la Gran Batalla contra el Caos. No permitas que me vea atrapado de esa forma. Si consideras que mi valor ha de ser recordado, que sea en forma de canciones y en los libros de historia.- reza mentalmente el dracónido mientras un escalofrío recorre su espalda.

Lo que le ha quedado claro después de esto, es que Dardh el hechicero no es solo un digno aliado en la batalla, sino que también sus conocimientos arcanos pueden serles muy útiles frente a los desafíos que sin dudas les esperan cuando prosigan su aventura adentrándose en el oscuro pasillo que les espera....

También le ha llamado la atención el interés de Gueldar por conseguir el poder del orbe, pero no sabe juzgar si era por un deseo egoista de conseguir beneficio, o si realmente su interés es poder ser más útil en una próxima batalla...

Bien, Mushu, ve tú primero, explorando el terreno. Maese Voiran ¿vais tras él por si vuestra nueva hacha debe ser estrenada? -añade con una sonrisa.

BAHAMUT: