Partida Rol por web

La chica se encoge de hombros.

Bueno, lo que para ti es un hobby, para mi es la ilusión de mi vida, llevo desde siempre preparándome para ello.

Tras esto se retira a limpiar las últimas mesas para terminar a jornada, ya que parece que la conversación se ha terminado ahí.

El barbaro no parecia que quisiera dejar escapar a la "presa" a la que habia echado el ojo.

- ¿te quedaste sin ahorros? - dijo intentando quitar hierro al asunto - ¿que paso? ¿un novio se lo gasto todo en cerveza?

La chica sonríe.

No, no, no es nada de eso. Vine aquí para proseguir mis estudios con los Ciframagos, pero no he conseguido que me cojan de aprendiz y me he quedado sin dinero, pues tenía que comer y dormir pero no tenía ingresos.

Cita:

Sonrío para mi. Si tú supieras ...

Observo como Aleena y el elfo se alejan para hablar con la camarera nueva, cuyos tatuajes han llamado la atención de más de uno. El elfo seguramente ha recibido más de un varapalo en la vida, lo que ha agriado su carácter, aunque por suerte aún no se ha olvidado de alegrarse con las cosas buenas. Quizás el relacionarse más con la gente (sobre todo con Aleena) ayude a que sea más positivo ante la vida. El tiempo lo dirá.

Por un instante Aleena se queda mirando al elfo, esperando que sea este quien se acerque a hablar con la camarera. Pero el instante se hace más largo de lo que la mediana esperaba

Hombres , piensa la mediana con cierto cansancio moral, mucha boca pero en cuanto tienen que retratarse... seguro que le intimida ir conmigo. Ya cantaría de otro modo si fuera con seis o siete y quisiera tirarle los trastos. Es evidente que cuando no se trata de apabullar a una jovencita no tienen arrestos

Finalmente bufa casi como si perdonase la vida a Eleanail y se acerca a rápidos (y eso sí) cortos pasos hasta donde está la nueva camarera.

- Buenas. Mi nombre es Aleena. Tenía ganas de hablar contigo, entre otras cosas porque llamarte nueva-camarera, o camarera-semielfa, o chica-guapa-tatuada-misticamente, como que queda peor que lo que te dirán los palurdos con los que vas a tener que lidiar cada noche. Pero acompañame que no quiero que se enteren de nuestra conversación hasta las piedras - Aleena habla con bastante velocidad, casi ametrallando a la joven- ¿Este? - dice cuanto la joven acierte a mirar a Eleanail- Sí, si, un elfo, exacto. También mago. ¿O tu no eres maga sino solo simpatizante o aficionada? Bueno, tanto da, ahora nos explicarás. Eleanail, esta es... ¿aun no nos has dicho tu nombre? Bueno, bueno, no importa. Acompáñanos un momento. ¿De donde dijiste que eras?

La chica sonrie cuando se acerca la mediana. Pero pronto cambia el gesto de simpatía a sorpresa, pasando por desconcierto. Cada vez que intentaba responder a la mediana, solo era capaz de hacer un gesto y pasar la mirada de la mediana al elfo y viceversa, pues Aleena le apabullaba con preguntas.

Finalmente, en cuanto se acostumbra al ritmo del habla de la mediana, se relaja un poco y comienza a sonreis algo más. Cuando Aleena termina y se queda mirandola, casi olvida que debía responder a todas sus preguntas. Pero reacciona pronto.

Yo soy Samaritha, para servirte. La verdad es que cualquiera de los nombres que has dicho son música comparada con lo que he tenido que oir de los borrachos que abundan por aquí. Pero como sé que ni unos ni otros son utilizados con malicia, quizá con un poco de broma, prefiero tomármelos todos con humor. Encantada de conecerte también a ti, Eleanail. Y es un placer conocer a alguien versado en las artes arcanas, sobre todo trabajando como yo en un sitio que no parece el nuestro. Me sentía ya como un bicho raro.

Visiblemente animada y relajada, comienza a encaminarse hacia la barra de la taberna para tomar un trago de agua.

Yo provengo de Magnimar. Y vosotros, ¿sois de aquí?

- ¿Si soy de aqui? Me temo que si, mas que la mitad de los paletos de este antro, y más desde luego de lo que quisiera, lo que no es mucho decir porque no conozco a nadie que esté tan loco como para afirmar que está contento de vivir en esta ciudad. Aunque en realidad no sea peor que ningún sitio. ¿Y por qué viniste de Magnimar Samaritha?, es raro ver a alguien como tu en un sitio asi, la verdad sea dicha

Vine buscando a algún maestro que quisiera acogerme como aprendiz. Siempre he deseado entrar a formar parte de los Ciframagos, y deseo seguir aumentando mis conocimientos arcanos. Reuní algunos ahorros y me vine aquí.

Samaritha suelta un suave suspiro antes de pegar un trago al agua fresca.

Pero con la cosa esa rara del cielo apenas tienen tiempo para esas cosas, y ninguno parece estar en disposición de ello. El problema es que los ahorros casi se me han ido en el alojamiento y la comida en la ciudad, por lo que debo trabajar para tener ingresos. Y éste me pareció un lugar tan buneo como otro cualquiera, así que... aquí estoy.

- Un placer, Samaritha. - Responde finlamente el elfo. - La verdad es que bastante mejor que otros muchos lugares sí es. Pero bueno, en esta ciudad casi se sobrevive, mas que se vive y hay que recurrir a lo que se pueda para salir adelante. Lo que sí es obvio es que la fisura del cielo esconde algo pero el qué sigue siendo un misterio. - Luego presta atención unos segundos a los tatuajes, acto seguido vuelve a fijar sus ojos en los de ella. - La verdad es que si yo mismo me sentía fuera de lugar aquí, en tu caso debe ser aún mas acusado. - Señaló delicadamente los tatuajes con un gesto de cabeza. - Sin duda tu don o tu maestría deben ser elevados para haberlos merecidos. Extraño que ningún ciframago haya querido interesarse un poco mas por tí.

La política de no armas está tan sólidamente implantada que ya casi no hay que insistir para que se cumpla. De hecho, los parroquianos de siempre ya se han acostumbrado y no hace falta pedírselas, entran directamente a la armería a entregarlas.

- Vaya... - dice con una sonrisa de aprobación la mediana- ¿Así que debe ser mejor maga que tu, no Eleanail?. Bueno, es normal, las mujeres de cualquier especie suelen ser mas inteligentes y sacrificadas que los varones - reflexiona casi para si- ¿Qué significan exactamente esos tatuajes?