Partida Rol por web

-No mataremos a nadie si podemos evitarlo.-indica muy serio, sobre todo fijándose en las duras palabras de Fair.- Puede que sean unos miserables, pero no pienso rebajarme a su nivel. No podría tener la conciencia tranquila si matase a uno de ellos sin motivo. -aclara con orgullo. Echa un vistazo a los ponies inconscientes.- Tendremos que dejar a alguien para que los cuide en lo que tardamos en volver, sin atención esas heridas podrían infectarse.

Una vez escuchadas las palabras del alcalde asiente y se dirige al grupo.- Bien, no hay mas que decir. Book, no te separes mucho de mí. -le dirige una mirada agradecida a Moonlight por darle las palabras de animo a su pupilo.- Debemos estar listos para partir cuando el resto lo estén, el tiempo es vital. -dicho esto acompaña al alcalde, haciendo uso de su magia para transportar a los dos heridos.

El pueblo entero no tarda mucho en estar preparado. Distan mucho de ser un ejercito organizado, la mayoría portan herramientas de labranza o van desarmados y solo unos pocos pueden contar con algo que pueda ser llamado armadura. Una vez todos están presentes y se ha decidido quien se quedará en el pueblo, los demás empiezan a marchar por el camino en dirección hacia donde se supone que debe tener Cinder su guarida.

Rain observa al grupo:

-Estoy pensando que si lo que necesitáis primero es que Fair y yo los distraigamos antes de nada, creo que sería buen idea que nosotros dos nos adelantáramos y vayamos los primeros para que no sospechen de la presencia del resto de los que vayamos.

Terminadas las platicas y acordados los planes Cookie salio a reunirse con los bravos ponies que iban a arriesgar el cuello con ella en el campo de batalla. No se sintio muy motivada al ver ponies pobremente armados y equipados, esto era como guiar nuevamente a uno grupo de campesinos hacia un zafarrancho, esto era muy diferente de aquello pero no podia sentir un dejo de nostalgia, como si peleara contra lo Apple por las tierras de cultivo otra vez.

Tomando un profundo respiro Cookie se acerco a los presumieblemente inexpertos luchadores y en tono firme empezo:

-Atención Ponies, tratare de ser breve, se que estan emocionados y hasta cierto punto euforicos por la pelea que se avecina, pero esta entre mis responsabilidades decirles la verdad.

Cookie hizo una pausa para que sus palabras fueran asimiladas por la multitud y continuo:

-Nuestro enemigo no son simples bandidos, son luchadores experimentados, ellos tienen encima de su lomo varias batallas y parece que ganadas. No quiero asustarlos pero es mejor que lo sepan antes que arriesguemos la vida alla afuera.

La cocinera hizo un poco de silencio esperando escuchar algunas protestas, sabia que asustar a los novatos con la verdad sobre la guerra era casi siempre malo y contraproducente mas ahora que la señora Green habia el miedo a la muerte en ellos, era una apuesta arriesgada pero tenia que jugarsela, mas si queria que no colapsaran por la presión durante la confrontación:

-Esta bien que tengan miedo, no los culpo, el enemigo es fuerte y es posible algunos que nosotros no regresemos. Pero escuchen, si por algo vale la pena morir es por la libertad, el derecho a vivir felices y en paz con nuestros amigos y vecinos.-Volvio a hacer silencio para dejar que las palabras hicieran echo en sus cabezas y continuo-El enemigo podra ser fuerte pero nosotros podemos serlo mas, ¿por que?, por que ellos no saben pelear bien en equipo. Si trabajamos juntos podemos vencerlos y acabar con su amenaza por siempre.

Dicho esto la cocinera empezo a trotar frente a ellos despacio, como si inspeccionara a todos y cada uno de ellos y continuo:

-La idea es atemorizarlos para que sean vencidos por la intimidación, si es posible nos apegaremos al plan, pero en caso contrario si ellos prentender pelear nosotros  pelearemos tambien, ellos tienen armaduras viejas, usaremos los trinches para darles en las aberturas de estas. No los mataremos si se puede pero recuerden: ellos no dudaran en intentarlo contra ustedes.

Hizo otra pausa corta y continuo:

-Los que tengan hoces, palas o espadas iran atras de los que lleven trinches y los defenderan como puedan, es vital que ataquen a sus patas o sus costados para neutralizarlos, ya deje claro que la idea es no matar, pero si no hay remedio ataquen a los ojos o el cuello, esos son puntos  vitales vulnerables.

Ya para terminar Cookie se paro enfrente de ellos y dijo:

-Para terminar quisiera dejar una cosa clara, DEBEMOS TRABAJAR JUNTOS. Si ellos se lanzaran con todo la unica forma de sobrevivir es trabajando en equipo. Los ponies a travez de los tiempos solo han podido vencer y superar las crisis solo con trabajo en equipo y en armonia, si podemos hacerlo nosotros podemos tener por segura la victoria........

Cookie levanto su fiel sartén frente al grupo y grito esperando recibir apoyo de la multitud:

- ¡¡¡¿¿QUIEN ESTA CONMIGO??!!!*

Sintiendo como las fuerzas del grupo habian bajado Cookie bajo su sartén y apelando a su sentido de unidad como pueblo dijo:

-No soy una buena lider, pero al menos espero que luchen conmigo hasta el final, yo me comprometo a devolverles su pueblo, espero que puedan ayudarme*²

Book sonrió a Moonlight, creyendo que tenía razón. No podía irles mal porque tenían una misión que cumplir para la princesa. De un modo u otro iban a conseguirlo. Un poco más seguro asintió a las palabras de su maestro que, una vez más, estaba siendo excesivamente sobreprotector. Pero de todas formas no pensaba alejarse ni un poquito. Él estaba listo. Podían irse cuando hiciera falta.

Trato de ponerme el yelmo sin que la crin salga de debajo de la capa*. A duras penas consigo ponerme el yelmo, pero sigo con la capucha puesta. 

Desenvaino mis espadas, es cierto que vamos a teleportarnos pero podría haber guardias dentro. Lanzo una mirada de preocupación hacia el pueblo, le deseo suerte a Night Green y a los demás y lanzo una pequeña sonrisa maternal a Book. 

-Cloudy Sight, creo que ya estamos listos. Cuando ordenéis.-

Mantengo una pose erguida para imponer confianza. He de aprovechar que mi aspecto les de algo de fuerza.

Rain mira al resto:

-Coincido con Moonlight cuando ordenéis...

Night Green iba a una prudente distancia junto con el grupo de unicornios tratando de ser rapida y lo mas sigilosa posible.

Una vez todos han tomado posiciones, la columna marcha hacia adelante con un paso ligero aunque no demasiado apresurado, pues por las indicaciones que os dan todavía queda un largo trecho hasta llegar a vuestro destino. De nuevo se hace patente que os acompañan aldeanos, no soldados, pues el grupo no permanecen junto y homogéneo, a veces partes dela columna se distancian más de lo que debieran de otras.

Tras varias horas de camino, la motivación que os acompaña no ha desaparecido, pero sí se ha hecho mucho más calmada. Ahora que os acercáis a territorio enemigo empiezan a verse caras de preocupación y dudas, pero ya es demasiado tarde para retroceder y ningún lugareño lo hace.

La ventaja del vuelo hace que percibáis un grupo de ponies algo más adelante, al aproximaros veis que son solo seis. Uno de ellos está claro que es de los que os atacó horas antes, pero el resto no os suenan. Estos van revestidos con buenas protecciones de cuero laminado que cubren todo su cuerpo, así como cascos, guanteletes de metal. El brillo de las armas hace pensar en algo mejor que los que los anteriores bandidos lanzaron contra vosotros.

Y en el centro hay una figura encapuchada, cubierta con una capa negra, que no deja captar ningún detalle de su portador, salvo que se trata de un semental (es demasiado robusto como para ser yegua). El resto rodean a esta figura y no pierden detalle de sus movimientos.

Parece que os esperaban, pues ya estaban mirando hacia los cielos con cierta asiduidad cuando vosotros aparecisteis, esta claro que su compañero debe haberlos avisado de la existencia de pegasos. Sin embargo no toman ninguna medida hostil, a pesar de que varios llevan arco. En lugar de eso siguen avanzando por el camino, tranquilamente, en dirección hacia los ciudadanos de Berryland, aunque ni unos ni otros pueden verse aún.

Rain mira a Fair:

-Deberíamos volver y avisar a los demás y estar con ellos, para que cuando los encuentre podamos intentar distraerlos...aunque hay algo que no entiendo...tienen ballestas ¿Porque no nos atacan?. Tu que eres más ducho en el combate ¿Que crees que están intentando hacer?.

Observó al grupo desde el aire, estaba claro que su presencia no había pasado desapercibida. Los observó un buen rato y a diferencia de los zarrapastrosos de antes, estos estaban mejor preparados. Clavó sus ojos en el encapuchado -¿Será ese...?- arrugó el morro, no le gustaba ni un pelo esta situación. Seguramente tenían un AS escondido... Miró a Rain y negó con la cabeza.

-No lo sé... y eso es lo peor, seguramente tienen ventaja sobre algo que desconocemos... Parece que no tienen intenciones de atacar... quizás de.. ¿parlamentar? 

Entrecerró los ojos y miró en los alrededores. -_{Rain, avisa de que van hacia ellos, vuela lo más rápido posible... yo voy a ver si tienen listo algún tipo de emboscada. No me fío de estos ponies. -} susurró a su compañera, en cuanto se marchara, volaría en busca de alguna trampa. 

Rain asiente a Fair sin decir nada después de escuchar sus palabras, y se marcha a buscar a los otros ponys, lo más rápido que le es posible, para explicarles la situación mira a atrás un momento, por una parte teme de que un momento a otro los que llevan ballestas le ataquen pero por otro piensa: "Tiene experiencia en la batalla le ira bien...espero". 

Al ver como Rain se aproxima de nuevo al grupo y desciende, Cloudy se adelanta mientras el resto de ponies se miran entre sí y esperan a que la joven pegaso hable y les diga que está pasando exactamente.

-Ink dice que ya estamos cerca. ¿Has visto algo?

Examinas la zona, pero no observas que haya ninguna trampa en todo el espacio que les rodea. Ni ponies ocultos para una emboscada ni nada que te haga sospechar, solo el grupo que has visto. Ellos siguen avanzando, sin prestarte atención.

La marcha había sido bastante silenciosa en la opinión de la cocinera, Cookie había visto uno de sus peores temores hacerse realidad, estos ponies era campesinos, trabajaban la tierra no el hierro de una espada. Ella sabia de primer casco que un ponie campesino era capaz, si le quitaban sus tierras o amenazaban su modo de vida podían volverse en bestias salvajes que podían quitar una vida guiados por su rabia, eso si la princesa Celestia no hubiera intervenido a tiempo. Ahora que el coraje y la motivación habían disminuido temía por la vida de todos ellos, si no lo daban todo era posible que nadie volviera con vida.

Sacudió la cabeza nuevamente, ya le había dado demasiadas vueltas al asunto, pensar demasiado también era malo estando en el frente, te alentaba si no tenias buenos reflejos y un cuerpo entrenado acorde a eso. Subió la vista al cielo y contempló a la luna que eclipsaba al sol, no podía creer que solo unos días atrás estaba muy a gusto en su cocina preparando zanahorias al vapor condimentadas para el festival de la elevación del sol, hubiera querido ver a la princesa Luna probarlas y preguntarle que le parecían, ahora era un monstruo oscuro que quería llevar al mundo conocido a una noche eterna, una lágrima de tristeza rodó por su cara al recordar a la benevolente yegua oscura que gobernaba la luna.

Bajo la cabeza volviendo la vista al camino señalado por el alcalde, no podía bajar la guardia, estaban en territorio enemigo y era posible que ya los estuvieran observando, como lo señalo Rain, con una ondanada de ballestas listos para convertirlos en alfileteros equinos. Volteando la vista de un lado a otro dijo a los ponies que venían con ella al frente:

-Mantengan la vista al frente, no bajen la guardia.

Dicho esto puso la vista en su compañera pegaso en el aire y preguntó

-Raini ¿puedes ver algo? ¿Algo de humo o luces de alguna antorcha?

Cuando Rain llega a donde están los demás empieza a hablar:

-Se aproxima un grupo de seis ponys, cinco de ellos van con cuero laminado, las armas que portan parecen algo mejores de aquellos que nos atacaron, llevan arcos. Uno de ellos va vestido con una capa negra y no he podido verle bien, pero estoy convencida de se trata de un semental. Lo más extraño es que nos han visto a Fair y a mi pero ninguno nos ha atacado a pesar de llevar arcos, no se que estarán tramando.

Night dice casi en un susurro, pero lo suficientemente alto para que la oigan.

- No os fieis pese a ello, alerta permanente.

Era posible que atendieran a razones si veian a tantos ponis unidos o era posible que no, pero no pretendia permitir ni una baja mas de la necesaria.

-Cinder. -murmura Ink Stained.- Veamos que quiere ese desgraciado.

Las palabras de Rain sumadas a las del alcalde hace que todos los ponies se pongan nerviosos, pero a la vez refuerza su convicción, ayudada por las palabras de aliento de Night y Cookie. Yeguas, sementales, todos agarran su armas fuertemente y esperan a que se presente ante ellos el grupo de bandidos.

No tienen que esperar mucho. Al cabo de unos minutos, por el mismo sendero, aparecen los seis ponies que habían sido anunciados. La descripción que Rain hizo de ellos es bastante acertada, parecen unos guerreros bastante temibles. Los que tienen arcos ya llevan flechas preparadas para ser lanzadas, pero antes de que pueda desatarse un conflicto el pony encapuchado se adelanta.

-Tranquilos, no hay motivo para recurrir a la violencia. -expresa educadamente, su voz es grave pero bastante melodiosa, os recuerda a un ronrroneo.- Solo deseo que parlamentemos como ponies civilizados.