Partida Rol por web

Rincón

CAPÍTULO IV: CAMARADAS DE ARMAS

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31/05/2014, 13:54
Director

Marzo de 1358. Ya hace casi un año desde que llegasteis a Rincón, y muchas cosas han pasado desde entonces. Tantas, que pareciera que lleváis aquí toda la vida.

Llegasteis huyendo de una clamorosa derrota que acabó con la compañía mercenaria en la que servíais, a las órdenes de Pierre Navarres. Os encontrasteis con la benéfica acogida de un buen señor al que echáis de menos, don Ramiro, y fuisteis capaces de actuar donde él flaqueaba, acabando con la vida del menor de los Antequera, que estaba asesinando a los rinconenses por pura diversión. Ganasteis un buen botín saqueando su casa, y don Ramiro os protegió ante Lorenzo de Antequera, el padre del finado, que clamaba venganza, aunque luego no habéis vuelto a saber de él.

Luego asististeis a la muerte de don Ramiro por obra y gracia de un tósigo colocado por Isidro, escudero de Sancho el castellano, una jugada con la que casi consigue que su señor se convirtiera en el nuevo barón de Rincón. Pero llegó al pueblo su hijo y legítimo heredero, don Pedro, un muchachito de catorce años, inexperto y que con su aplicación literal de las leyes comenzó a soliviantar los ánimos de los rinconenses. Sancho tenía un plan para quitárselo de en medio, y mientras Isidro os acorralaba en la iglesia, él intentaba asesinarlo en una cacería... pero no fue capaz y al final salvó la vida a su hermanastro y huyó a la ciudad. Vosotros os deshicisteis de Isidro y os ganasteis la confianza de don Pedro, que convirtió a Xoan Manoel en su nuevo castellano.

Tres meses han pasado desde estos acontecimientos, y uno desde que reapareció Ruperto, al que creíais ya perdido, y además en compañía del cura, monseñor Luis, que os dijo que se había encontrado fortuitamente con Ruperto y había solicitado su protección para un viaje que había de hacer a Toledo. Al poco tiempo, otros tres soldados se incorporaron al servicio en el castillo, que estaba necesitado de efectivos.

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31/05/2014, 14:23
Director

En dicho viaje, Ruperto conoció al Pater Toleti (padre toledano) de la Hermandad de la Luz, y le juró lealtad a él y a la hermandad, convirtiéndose en miembro de la misma. Los tres soldados que se incorporaron al castillo son miembros de la hermandad que viajaron con Ruperto y Luis y se quedaron en algún lugar del valle para disimular mientras tanto.

Así se lo contó monseñor Luis a Xoan Manoel. Le dijo que Ruperto le había seguido hasta el monasterio de San Gabriel, donde había ido a esconderse, y allí había intentado asesinarle pensando que era el responsable de la muerte de su padre, antiguo miembro de la hermandad que sirvió precisamente en el castillo de Rincón pero fue asesinado por Alvar el sanguinario y sus bandidos cuando se disponían a irrumpir en un aquelarre presidido por la abuela Inés, la bruja de Estañedo. Sin embargo, antes de que Ruperto pudiera hacer nada, fue descubierto y, por fortuna, Luis pudo aclarárselo todo, y viajaron juntos a Toledo para que Ruperto hiciera el juramento.

Los tres soldados nuevos son muy aguerridos y se muestran muy leales a Xoan Manoel, pero su verdadero jefe es Monseñor Luis. En el mes que ha pasado desde su regreso, Luis ha estado moviéndose y haciendo averiguaciones sobre Inés. Su obsesión es averiguar dónde y cuándo se celebrará el próximo aquelarre.

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31/05/2014, 14:23
Director

Os encontráis ahora acompañando a don Pedro en uno de los campos de cultivo a este lado del río Calmoso, todos propiedad del barón. El tiempo está mejorando y el aspecto de los campos también, y por eso don Pedro está pensando en subir los impuestos. Sin embargo, estáis ahí también porque últimamente los vecinos de Carrigón están invadiendo los pastos y el barón se ve obligado a enviaros a vosotros para proteger a los rinconenses, ya que en ocasiones a punto se ha estado de llegar a un conflicto serio con los invasores.

Este es el aspecto de los cultivos de trigo en primavera.

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31/05/2014, 14:24
Don Pedro

-El puente está en muy mal estado -explica don Pedro a José, el campesino al que satisfizo mandado cortarle la lengua a su rival (orden que vosotros cumplisteis)-. Arregladlo.

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31/05/2014, 14:24
José

-Pero señor -se queja este, que parece hablar en representación de todos los demás, que escuchan detrás-, si apenas habemos gente pa trabaxar vuestros campos.

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31/05/2014, 14:25
Don Pedro

-Pero bien que habedes gente para trabaxar los vuestros -replica el barón.

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31/05/2014, 14:25
José

-Si no non dexades trabaxar los nuestros, nada habremos para comer.

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31/05/2014, 14:26
Don Pedro

Don Pedro se cruzó de brazos, pensativo.

Notas de juego

Podéis intervenir si queréis, ya que el barón se muestra receptivo a vosotros desde el episodio con Isidro. Si no intervenís, el barón lo resolverá a su manera.

Os explico la situación: algunos campesinos de los feudos, en esta época, tenían campos propios, pero tenían que dar prioridad a los campos del señor. Los impuestos se cobraban en especie o bien realizando servicios como la reparación de caminos y puentes. El barón se refiere al puente que cruza el río Calmoso, el cual conocéis ya algunos de vosotros, y está muy mal estado. Sería Ventura el que tendría a cargo la reparación y los campesinos se pondrían a sus órdenes. Pero eso no les deja tiempo para trabajar sus campos, que son su única fuente de alimento.

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31/05/2014, 14:29
Director

Notas de juego

Si necesitáis hablar algo entre vosotros, más tarde haremos un "flashback" con lo que os hayáis dicho desde el regreso de Ruperto.

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31/05/2014, 14:30
Director

A pesar del jaleo, tú estabas algo perdido en ese momento, y es que no habías conseguido cumplir el trato con Inés, la bruja de Estañedo. El cura seguía vivo, y había vuelto, además, en compañía de Ruperto, que parecía haberse olvidado que debía la vida a la abuela. Esta, sin embargo, no se os había vuelto a aparecer desde el asesinato de don Ramiro.

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01/06/2014, 01:12
Simplicio Ruipérez

Simplicio mira al nuevo castellano Xoan, como pidiendole que intervenga en la discusión.

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01/06/2014, 14:40
Xoan Manoel

Allí nos encontrábamos todos otra vez. Yo con la armadura reparada y brillante y con la capa recién bordada la cruz de Santiago en rojo muy brillante.

Me mantenía detrás de Don Pedro mientras escuchaba la discusión hasta que di un pequeño paso hacia delante y agachándome junto a Don Pedro le recomendé:

-O ponte ha de ser reparado mi señor. Necesitámoslo para comercio, et conseguir que prospere Rincón et acudan novos campesinos. Si nos quedamos sense una vía de comunicación y la altra queda cortada por cualquier coxa, quedarémosnos enxerrados aquí. Os soldados poden axudar. Agora que son tempos de pax iríales ben un poco d' exercicio. La guerra non solo es atizar con armas al enemigo.

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01/06/2014, 20:14
Don Pedro

Don Pedro se da la vuelta y observa a Xoan Manoel.

-Non sé si a los soldados les gustará esa idea -dice-, pero vos habedes buena mano con ellos. Encargarvos vos pues daqueste negocio et dalle a Ventura los hombres que haya menester.

Entonces el barón dirige su mirada a algún lugar por detrás de su castellano, y cuando seguís su mirada veis a un caballero que cabalga hacia vosotros, acercándose campo a través desde el camino que conduce a la ciudad. Está solo y en su escudo no hay ninguna insignia. Vosotros sabéis perfectamente lo que significa eso, porque durante un tiempo también habéis estado en esa situación: es un mercenario. Como no lleva la lanza en ristre, don Pedro levanta una mano para que no lo abatáis con vuestras ballestas.

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01/06/2014, 20:46
Sancho

Cuando llega a vuestra altura, el caballero detiene el caballo, se baja, y cuando levanta la celada de su yelmo os lleváis una buena sorpresa: ¡Es Sancho!

Su hermanastro, el barón, también está sorprendido y no entiende lo que pasa, pero Sancho enseguida se explica:

-Señor, juré que nunca volvería a pisar el señorío de Rincón, pero la situación es grave: he vivido estos meses como hombre de armas y he servido a varios amos. El último es un francés llamado Pierre Navarres.

En ese momento se os hiela el corazón... ¡no puede ser! Vosotros visteis el caballo de Pierre Navarres sin su jinete, huyendo de aquel maldito pueblo que no pudisteis asaltar. Pero Sancho continúa.

-Él et los sus hombres esperaban conseguir grande botín en la guerra de los Pedros, pero la fortuna les ha sido adversa. He sabido que uno de los hombres que acompañaban a Mateo de Antequera les ha fablado de Rincón, y que piensan arrasallo con la ayuda de Lorenzo de Antequera. Su tropa la componen más de cincuenta combatientes expertos, a los que hay que sumar diez más de don Lorenzo, et su plan es asentarse en el valle unos meses, aprovechando que durante la guerra la ayuda del rey llegará tarde et mal. Conseguí desertar de la compañía de Navarres et vine a galope tendido a avisarvos. ¡Hay que preparar la defensa, et hay que facello agora!

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01/06/2014, 20:47
Don Pedro

El joven barón se muerde los labios, pensativo. Por fin, dice:

-Lucharemos. Non dejaré que el feudo de mi padre sea arrasado demientre lo miro cobarde desde las seguras murallas del castiello. Pero organizar la defensa requerirá tiempo. Hermano, si alguna vez quisiste al nuestro padre, dame algo más precioso que el oro en aquestos momentos. Dame tiempo. Toma a estos hombres -añade, señalándoos a vosotros-, son los mejores. Et retrasa como sea a los invasores mientras reúno mis fuerzas.

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01/06/2014, 20:47
Sancho

Sancho se os queda mirando. Sabe que ha sido muy injusto con vosotros, que influenciado por su escudero, Isidro, al que eliminasteis, estuvo a punto de usaros para firmar la paz con don Lorenzo de Antequera. Por eso, se acerca a Xoan Manoel, y le dice:

-Olvidemos nuestras diferencias. Fagámoslo por don Ramiro, que tan bien vos trató, por su fijo et por su feudo.

Y extiende su mano, esperando que Xoan Manoel se la estreche.

Sin embargo, no es tan fácil para vosotros: un reencuentro con el mercenario francés podría descubrir vuestro turbio pasado a todo Rincón...

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02/06/2014, 00:30
Xoan Manoel

Mirando a los ojos del castellano alargué mi mano poco a poco hacia el mientras le decía en voz baja:

-Calquer treta u engaño, et clavaré la teva testa en una pica a la entrada do castelo.

Ahora mismo no podíamos despreciar a un aliado, y si nos atacaban sabríamos perfectamente quien era nuestro objetivo principal.

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02/06/2014, 19:35
Simplicio Ruipérez

Simplicio incogiose de hombros. Tocaba luchar de nuevo. esta vez merecia la pena, o ¿ no?

 

Y mirando a Xoan: ¿ noc cree vuesa merced que agora toca hacer levas  en tre los del pueblo?

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02/06/2014, 23:20
Xoan Manoel

Asentí mientras escuchaba a Simplicio:

-Malos tempos amicus, si facemos reclutamento, nadie atendrá os campos et falleceremos de fambre. Non se si tenemos suficientes provisiones no castelo, et podría ser una causa para que los rinconenses abandonen o poblo. -finalicé- Igualmente, Don Pedro sería quien ha de decillo.

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03/06/2014, 12:26
Sancho

Sancho permanece impasible ante la amenaza de Xoan Manoel, pero no frunce el ceño, pues son de entender las reticencias.