Partida Rol por web

Aunque también hay que tenerlos bien puestos para fiarte de darme la espalda para sanar eso después de llamarme maricona

Ni lerdo ni perezoso tras escuchar las palabras de Scott, Jeremiah le respondió -Descuida que mientras tu estabas con los negros en las duchas, yo me la pase comiendo vidrio, así que mi culo se volvió una picadora de carne… vamos a ver si te dan ganas ahora – Negó con la cabeza mientras Zoe observaba la herida – Quieres cantar sobre qué?- Media sonrisa aún estaba en el rostro del Fostren.

-Si vas hablar de jhonny por lo menos exagera algo, no vaya a ser que me dejes mal parado- Le dio dos palmadas en la cabeza – En una de las alforjas tengo una pala, asi que yo no seré quien cabe la fosa común de estos hijos de puta – se estiro para que la herida dejara de molestar.

¿Vidrio, Jeremiah? Que blando te has vuelto. He visto cosas peores en la trena...

Lo digo en tono de broma, pero al recordarlo me inunda un poso de amargura. No es una exageración. En ese pozo de corrupción que es la prisión, he visto de todo. Cosas horribles. Si no hubiera tenido ayuda dentro, me habría vuelto loco. O algo peor.

Me quito el guardapolvos de nuevo, liberando mis brazos para el trabajo mecánico, atendiendo disimuladamente la escena entre Zoe y Jeremiah con una media sonrisa. Tenía ganas de esto, de salir de ese antro y convivir con ellos, con mi familia, con sus bromas y bravuconadas.

¿No teníamos novatos para ocuparse de esas mierdas? -Digo agachándome de nuevo junto a la rueda delantera- No le hagas ni puto caso, Zoe, está cabreado y furioso porque caga cristales, jaja. -Miro a Bastard de soslayo, con picardía, antes de desplegar el bulto de las herramientas a un lado- Ven aquí y échame una mano. Me he pasado cinco años en la trena por proteger ese culo tuyo, y no para verte cavar zanjas inútiles. Te dije que iba a enseñarte algo de mecánica y, salvo que alguien con autoridad real diga lo contrario... -Lanzo una mirada en dirección a Scar- ...es lo que voy a hacer.

Miro la rueda de cerca. Con algunos ajustes en la tornillería y unos golpes, puede volver a ser funcional. Habrá que hinchar el neumático en la primera gasolinera, y en cuanto tenga un taller a mano necesitará un equilibrado de los plomos, pero...

Además, ¿para qué enterrarlos? No creo que vayas a enterrar también los coches... Y una vez que los vean aquí abandonados buscaran esos cuerpos hasta encontrarlos, por muy profundo que los enterremos. Pásame una llave del doce, por favor. -Le pido a Zoe, interrumpiendo mi razonamiento- Yo los metería en los coches y los prendería fuego. Menos trabajo, y el fuego borrará huellas y pistas que seguir para los cerdos. Estos tíos ni siquiera deberían estar aquí, cuando empiecen a investigar sus muertes sin pistas claras, sólo seremos una línea más en la larga lista de posibilidades...

Jhonny… ¿Le ha puesto nombre?

Aguante las ganas de reír, aceptando resignada las palmaditas en la cabeza del Fostern, al parecer me había tocado hacer el trabajo sucio.

Por graciosilla.

-Vale, ya lo pillo… - sonreí, y me dirigí a mi Harley, quitándome la chaqueta y las gafas y dejándolas sobre esta.

Volví entonces junto al Philodox y busqué en las alforjas de la moto la mencionada pala. Terminaba de ensamblar esta cuando Scott intervino, diciéndome que no hiciera caso a Jeremiah y le echara una mano con la moto, que pensaba enseñarme algo de mecánica.

-Tendrá que encargarse otro entonces. – sonreí al viejo, con cara de satisfacción, y me incliné hacia él. – En realidad no haría falta exagerar… - le susurré y le guiñé un ojo.

Tras ello me volví y caminé en dirección a Scott, con la pala en la mano, hasta dar con el otro Cliath.

-¡Matt! – llamé su atención y le pasé la pala para que la cogiera. – Lo siento, te debo una.

Alcancé la maltrecha moto y me puse en cuclillas junto a Scott, observando cómo hacía su trabajo a la vez que explicaba la mejor forma de deshacernos de los cuerpos. No tenía ni idea de lo que hacía con la burra, pero por algún lado había que empezar. Fui pasándole lo que me pedía, mientras trataba de quedarme con cada detalle. No había tenido la oportunidad de estudiar o aprender una profesión, así que aquello no era mala idea.

Por un instante desvié la vista del vehículo, sonriendo mientras miraba a Scott tan concentrado haciendo su trabajo, se notaba que sabía lo que hacía y que además lo disfrutaba de verdad.

Ojalá algún día yo también pueda ser así.

Zoe se sitúa finalmente a mi lado, en cuclillas. Busca la llave que le he pedido y me la pasa, aunque la cojo sin girarme siquiera a mirarla. Con la llave aflojo algunas piezas y suelto el cilindro exterior de la rueda, comprobando el interior. Los daños no son demasiado, con unos golpes, unos ajustes y un poco de ayuda de los espíritus, debería ajustarse en poco tiempo.

Toma, guárdala en su sitio y dame la del catorce. -Le digo a Zoe en voz baja, tendiéndole la llave. Pero, cuando la va a coger, no la suelto, sino que la mantengo agarrada mientras me giro y miro a la chica con una sonrisa. Tan sólo es un instante, no puedo permitirme más a pesar de que me gustaría, pero es suficiente de momento. Suelto la llave y espero a que me pase la que le he pedido- Tendremos que hablar en algún momento... -Susurro volviendo a fijarme en la moto, apretando algunas piezas mientras de cuando en cuando le lanzo miradas de soslayo.

Poco a poco mi cuerpo volvio a su forma hominida. El fervor del combate me habia sentado bien, extrañamente. No habia nacido para ser un guerrero como varios aqui presentes... pero maldicion, si que estuve a su altura. Especialmente al final del combate contra el ultimo malnacido. No se ellos, pero yo estaba entusiasmado, en especial el trato que estaban teniendo todos, bromeando casi como si nada hubiera sucedido, o por lo menos como si esto fuera un comun de todos los dias. Se sentia la hermandad en el aire. Esto si que se daba agradable. 

Teniendo en cuenta mi pasado... esto parecia Disneylandia. Lo que siempre quise tener, una familia. Estire mis hombros sonriendo como se me conocia. Siempre el colorado risueño. Mis jeans olgados y desgastados junto con mi camisa y mi chupa de Prospect no habian tenido mayores roturas, ya que no soy demasiado grande aun en mi forma Glabros. 

El momento de relax habia terminado rapidamente en cuanto Zoe me pasa la tarea... Aunque siendo honestos, ya sabia que me tocaba a mi hacerlo desde el momento en que Jeremiah saco la pala de su alforja. 

- Demonios, y yo que creia que iba a escapar desde la ultima vez que lo hice... Esto esta mal. - Susurre por lo bajo cabizbajo. Camine hacia Jeremiah, con un poco de desgano. Tome la pala y me acerque a los cuerpos usando la pala de baston.

- Alfa, creo que tengo una idea. - Apolle la pala sobre el piso y me apolle en ella cruzando los brazos encima, encorvando mi cuerpo y apollando mi cabeza en ellos. Con un ojo cerrado y a duras penas abriendo el otro la mire a los ojos, ya que tenia el sol frente a mi. 

- Revisemos los cuerpos y los vehiculos, algo o alguien debio haberles avisado que veniamos por aqui. Quizas encontrar municiones o hacernos con sus armas. Despues de todo.... no creo que les sea de utilidad en estos momentos. Verdad? - Rei por lo bajo, mirando a Jeremiah y Zoe buscando complicidad, que quizas compartiria mas mi pensamiento al ser de mi misma Tribu.

Me ergui y acompañando mis palabras con muecas de mis manos termine de cerrar mi supuesto consejo o al menos algo que mi astucia de Ragabash intentaba aflorar. Sabia que no tenia experiencia, pero de alguna manera hay que aprender. La lengua es algo que mi naturaleza evitaba controlar, era mas fuerte que yo.

- Tomamos los cuerpos, los subimos a los autos mientras el señor Scott arregla la burra de Zoe y se asegura que el disparo que recibio la de Jeremiah no haya causado daños mayores, los llevamos en medio del desierto, los quemamos y enterramos ahi. Podriamos borrar los numeros de chasis y motor de los autos e incendiarlos unas millas mas lejos. Asi parecerian solamente unos autos quemados. Nadie buscara polis. - Termine abriendo mis palmas al cielo y levantando mis cejas esperando una suerte de aprobacion o al menos que tome algo de mis palabras. De a poco tendria que ir ganandome el lugar en la hermandad.

- Que les parece a todos? - Termine mirando a Jeramiah. - Que tal lo hice? -Pense para mis adentros.

Continué mirando lo que Scott hacía, atenta a su trabajo, pero con mi cabeza echando al vuelo de vez en cuando. Era inevitable. Casi me dolía el estar tan cerca de él y no poder tocarle, tal y como sucedía en la cárcel, solo que aquí ni siquiera podíamos hablar con libertad. Tendría que conformarme con mirar sus manos, con sentir su olor.

La voz del Theurge me sacó de mis pensamientos, tendiendo la mano para tomar la llave que me ofrecía, pero al intentar cogerla este no la cedía y terminó por girarse para mirarme con una sonrisa. Aquello duró unos pocos segundos, en los que no pude borrar mi cara de sorpresa.

Como sigas así se va a ir todo a la mierda…

Finalmente soltó la llave, y entonces sí, mientras la colocaba en su lugar, sonreí para mí. Tomé la otra y se la tendí, recibiendo otro susurro por su parte, mientras proseguía con su labor.

-En algún momento… - repetí a modo de respuesta, esperando que ese instante llegara cuanto antes.

Sin apartar la vista de la burra de Scott, respondí a las palabras de Matt.

-Sí, deberíamos agenciarnos lo que nos sea útil. – dije alzando algo la voz.

El que guarda, encuentra.

Matt continuó planteando una posible opción para librarnos de las pistas. La verdad es que para ser un prospect me pareció muy bien aleccionado. Aquello no era precisamente mi fuerte, prefería dejarme aconsejar.

-Como sea, pero deberíamos darnos prisa. – recordé a mis hermanos, y es que una reunión importante nos aguardaba. - ¿O queréis ser recordados como la manada de moteros más lenta de la historia? - reí.

Río por el comentario de Zoe, aunque mi risa se mezcla con ligeros gestos de esfuerzo al apretar la tornillería de la rueda. Lo cierto es que el novato tiene resolución, no parece un mal fichaje.

¡¡Scar, el novato tiene sesera, jajaja!! -Grito a nuestra alfa, con humor, aprobando el plan en parte- No es tan tonto como me dijisteis que era, ¿eh? -Bromeo- Aunque no entiendo eso de llevarles al desierto, ya estamos en el puto desierto. Esta carretera no puede ser más desértica, por eso nos han tendido aquí esta puta emboscada. Este es un buen sitio para quemarlo todo. Novato, coge todo lo que valga y entrégaselo al de mayor posición. -Digo señalando a Scar con la llave en la mano- Ella repartirá la presa, el botín, como considere. Y luego quemalo todo...

Gire rapidamente mi cabeza hacia Scott aunque este estuviera dandome la espalda forcejeando con sus herramientas. Se le veia concentrado, como un buen artesano en su viaje. Mis reflejos fueron puramente de ansiedad y dentro de sus bromas, me senti bien. Estaba aportando al grupo y era un buen comienzo. 

Levante la pala rapidamente y en un trote me dirigi a los autos y cadaveres que habian quedado por ahi. - De acuerdo, sere lo mas breve posible. Si alguien se aburre de mirarme, es bienvenido a darme una mano. - Dije esto sabiendo que era mas que probable que se queden ahi mirando y fumando algun que otro cigarrillo mientras compartian anecdotas y viejas situaciones con su viejo amigo recien salido de la carcel. Habia mucho tiempo perdido y poco para recuperarlo.

Deje caer la pala a mi lado y comence a urguetear en los cadaveres para luego pasar a las patrullas. - Bueno, veamos que regalos tienen para nosotros... -

La moto estará lista en breve. Por suerte, aún no hay compañía en el horizonte. El hecho de que no aparezcan refuerzos podría ser indicativo de que el dispositivo para deteneros no estaba muy bien preparado. O bien no es oficial, como alguno ha insinuado ya. Mientras arreglan la máquina, Jeremiah sigue rezongando sobre su herida. En Winters debería haber alguien capaz de tratar la herida, o al menos, una farmacia donde mangar una buena cantidad de calmantes.

El joven Matt, como prospecto, es quien recibe la poco gloriosa labor de despojar a los muertos de armas y munición, que seguro que al club le sirven de algo, al fin y al cabo. Mientras registra los cuerpos, se da cuenta de que ninguno tiene identificación, y que uno de ellos lleva en el bolsillo una foto de Scott, la que le hicieron cuando entró en chirona, presumiblemente.

Hora de dar lumbre a los coches y ponerse en marcha. Con un poco de suerte, podréis llegar a la hora feliz.

El cuerpo despedazado a mis espaldas no hace ni que me gire a mirar, es Wyrm y debe ser erradicado de la superficie de Gaia. No vamos a perder la guerra.

Esbozo una media sonrisa por el comentario de Scott. Camino hasta el resto y miro a Jeremiah 
¿Crei que los Camada erais mucho mas duros?  quejarte por un simple rasguño.
Le hago un gesto para que se suba un poco la ropa y pueda verla para hacer un trabajo de urgencia hasta llegar a nuestro destino.

Miro a nuestro novato y le hago un gesto para que me diga. 
De acuerdo, pero vais a dejar los cadaveres donde estan, vamos ya tarde a nuestra reunion y no podemos llegar como si fuera una cita. 

Observo todo lo que esta sacando de los cuerpos, ya sabia yo que alguien nos ha dejado con el culo al aire. ¿Quien? es algo que necesito saber, esta encerrona podia haber acabado con nuestra disfuncional familia. Voy a hacerlo mas personal de lo que deberia y rasgare huesos, musculos y carne cuando encuentre al culpable. 

En cuanto este la moto arreglada todos a las burras y nos vamos de aqui. Tener que aguantar la rabia que a veces me sobrepasa esta deseando destruir todos los vehiculos y los cadaveres que quedan a la vista para decir que nadie toca a los mios...

- No creo que nuestros antepasados esten de acuerdo con esto... pero, al demonio ellos se lo buscaron. Estoy haciendo esto por nuestro bien. Si, creo que asi es, o al menos es lo que quiero pensar. Ni modo, ya lo estoy haciendo asi que... prendere un cigarro y a terminar esto pronto. - Palabras que zurcaban mi mente, mientras mi autorespeto caia cada vez mas bajo. Saque del bolsillo de mi chaleco los cigarros y encendi uno para proseguir mi tarea.

- No, definitivamente esto esta mal. - Susurre para mis adentros, justo cuando en los bolsillos del gordo calvo encontre la foto frenando mi lengua. La tome con mi mano derecha mientras el cigarro reposaba en mis labios. Me quede pausado por un segundo, lo suficiente para que justo la ceniza callera al suelo. Me levante de cuclillas como estaba, tire el pucho al piso y comence a andar. 

- Eh... Alfa, Scar. Creo que encontre algo... a Scott. - Le lleve la foto cuanto antes. - No se que habra pasado alli dentro, pero no puede ser bueno. - Ni bien la tomo, me hice a un lado, bajando la mirada. La hija de puta si que intimidaba, mas viendola de cerca, no me extraña que sea la Alfa de los Wyld. - Ehm... seguire en lo mio. - Me retire nervioso, con las manos en los bolsillos del jean.

Una vez separado armas y municion, deje los cadaveres tal como Scar habia dicho y saque los autos del camino, posicionandolos uno al lado del otro. Con la ropa de los policias hice unos jirones y los puse en los tanques de nafta. 

- Cuando usted diga Alfa, ya esta todo preparado. Solo hay que encender los trapos - Dije un poco entrecortado, no exhausto, sino haciendo fuerza mientras agarraba las armas y la municion del piso para llevarselas. - Es todo lo que pude rescatar, señora, Alfa. - Se me trababa la lengua, no sabia exactamente como referirme a ella en estos casos. 

Miro al theurge mientras degusto mi chupetín y me encojo de hombros en una tácita expresión de "yo que sé". Con la excepción de no atraer aves de rapiña, no se me ocurre que más podriamos hacer. Si él quiere jugar al indio y quemar todo, adelante; lo mismo que si decide enterrarlos o tirarlos en la umbra. Con tal que no pensara que ella se iba a bajar a hacerlo.

Padre se pone a coquetear con Zoe - Eso te pasa por preguntar -digo entre risas, mientras la veo mirar más de cerca los atributos del philodox y fastidiarlo. Matt - ¿Porque esta mal? Yo diría que está bien, estoy teniendo una buena vista desde aquí -me coloco las gafas de sol y observo a Matt parlotear y moverse. Hay que admitir que tiene bastante iniciativa para ser el nuevo. Espero despreocupada sentada en la moto hasta que se arma un jaleo por una foto o algo, escucho los murmullos y me rio - Pues si no es una de él desnudo, no vale la pena -sigo reposando en mi sitio.

Hasta que después de unos momentos nos hacemos a la marcha.