Mala elección. Después del naufragio volví a mi antiguo hogar
Sonrió
¿Qué hacías en la fiesta de Frederic? Quiero decir... ¿Qué intentabas conseguir allí, si no era el salvoconducto?
Oh, no, claro que no. Hablaba con otro de mis diez fantasmas particulares
¿Crees que podría ponerle nervioso? Parece tan maduro y seguro de sí mismo... ¿Qué tal un poco de jugueteo para ver hasta donde llega?
En su voz se adivinaba cierto tono cruel y burlón
Decidido: Xerine está borracha XD
Aaron fingió sentirse dolido por la respuesta.
-Que decepcionante, esperaba algo más rocambolesco. Estaba en la fiesta de Frederic precisamente por eso, por el salvoconducto, al igual que tú-Sonrió una vez más. Aaron parecía más relajado, pero todavía se mostraba ligeramente tenso-¿Por qué quieres entrar a Ark?
Siento decirte que no te estaba escuchando. Mi amo está rebosante de alegría y creo que voy a tener unos días "libres". Puede que te haga una visita, cariño.
Y espero que me acojas en tu seno como la última vez.
Uuuuooops. Y aquí acaba nuestro juego
Alice se apartó de la pared y se giró hacia Aaron, esbozando una sonrisa enigmática
Sin embargo, me vas a permitir una última pregunta personal... Nada de tu pasado, te lo prometo Se acercó un poco, quedándose a solo un palmo del rostro de Aaron ¿Puedo? No tienes que responder si no quieres...
Aaron mezcló el gesto juguetón con otro mucho más serio.
-Puedes, luego decidiré si contesto.
Eres el dueño de la sutileza, querido. Por otro lado, a decir verdad, no sé como tomarme eso de que tu amo está rebosante de alegría... Teniendo en cuenta que tu antiguo amo era un ex-sirviente del enemigo de Seline, y que este apareció en la isla poco después de tu muerte, intuyo que son malas noticias para nosotros. Pero siempre se agradece la charla con un viejo romance...
Alice acercó su rostro al de Aaron, y en el último momento, tal y como había hecho en la fiesta de Frederic, giró su rostro hasta encararlo a la oreja del invocador. Sus siguientes palabras fueron apenas un susurro
¿Me deseas?
La puerta se abrió de pronto, y la muchacha de cabellos dorados salió por ella. Había escuchado los murmullos de dos personas fuera y no pudo evitar la curiosidad de ir a mirar. Miró a la pareja y dijo preocupada.
¿Qué me he perdido? ¿Donde estamos? ¿Y los demás?
Alice se apartó de Aaron con suavidad, sonriéndole a Catherine
La que faltaba. Buenos días, bella durmiente. ¿Qué tal te encuentras?
Se acercó a ella, sonriente
Aaron apartó suavemente a Alice hasta que sus rostros quedaron a unos centímetros. Exhibía una expresión enigmática mezcla de diversión y asombro. La puerta se abrió y Catherine de ella. Incluso con la chica fuera, preguntando por lo que había pasado susurró.
-Es más divertido si lo descubres tú misma.
Diciendo aquello, se alejó lentamente de la mujer hasta doblar la esquina de la casa. Sería mejor que Alice le explicara todo.
Cagüen, me has pisado por nada.
Y no una, sino dos veces!
Voy a editar
TE edito
Tú quieres devorar mi alma, que es distinto
Se parecen, pero son distintos. Como las cuentas nómina
¿Es más divertido si descubro qué?
Catherine se quedó con una expresión extrañada. Al fin y al cabo, no sabía si Aaron se había referido a ella diréctamente, o estaba hablando con Xerine.
Alice hizo un gesto despreocupado con la mano, como quitándole importancia a la seca actitud de Aaron, que en esos momentos desaparecía por una de las esquinas de la casa
Discúlpale, está un poco mohíno con lo de que ha perdido la memoria y tal. Además, tiene mucho en lo que pensar, intuyo. Pero bueno, vamos a lo importante: ¿Qué tal te encuentras? Repitió
Creo que bien, ahí dentro no hay nadie y como he visto la puerta entreabierta y he escuchado vuestros murmullos me he atrevido a salir. ¿Sabes donde está mi esposo?
Cath se quedó mirando a Aaron mientras se iba, y le restó importancia al asunto, puesto que ella quería encontrar a su marido y a su hija. A nadie más.
Sí, claro. Ven, te llevaré con ellos
Se dispuso a entrar en la puerta, pero se detuvo en el último momento para girarse hacia su acompañante
Por cierto... Sé que lo del otro día no fueron formas de recibir a una vieja compañera de fatigas. Perdona si resulté algo distante... Y, aunque no te lo creas, me alegro de verte
Sonrió con calidez. Y, al menos esta vez, solo era una mentira a medias
Nathaniel dobló la esquina y cuando ya no pudo verle nadie esbozó una sonrisa juguetona. Xerine no había cambiado demasiado desde que la conocía. Máscara tras máscara, como si con ello pudiera conseguir algo. Era gracioso el modo en el que manipulaba a la gente, desde luego no había perdido su esencia. Magnética, misteriosa...mortal. Todavía no había arañado ni la superficie de lo que Aaron escondía, pero Nathaniel ya se había encargado de que el chico mantuviera la boquita bien cerrada y no creara sospechas. Al fin y al cabo uno no vive de buenas intenciones.
Eso si, con quien debía tener cuidado era con Faliar. Sospechaba algo y a Nathaniel no le hacía ni pizca de gracia que pudiera descubrir el "pequeño" secreto de Aaron. Vamos, no le hacía gracia a Nathaniel y tampoco se la haría a Faliar, porque claro, eso supondría la muerte del guerrero, y él no querría morir. Con un poco de suerte un par de palabras bien dichas le calmarían los ánimos.
Eso sólo le dejaba con un problema potencial entre manos. Quint. Estaba muerto. Debería estar muerto, y él no era una persona tan comprensiva como Faliar. Si veía cualquier indicio de maldad en Aaron (Que la había. A toneladas) le mataría sin pestañear. Sería mejor para él que el regreso de la muerte le hubiese templado los ánimos, porque si no Nathaniel se encargaría de que ni veinte litros de aquella dichosa agua le volvieran a revivir.
Estiró los músculos y se dispuso a dar un paseo rutinario. No sabía donde estaba y la desinformación le ponía nervioso, así que cuanto más supiera sobre aquel lugar, mejor. empezaría por dar unos cuantos pasos sin alejarse demasiado de la casa, a ver que encontraba.
Quint torció el gesto. A cada instante que pasaba su cara se iba poniendo más y más pálida, y por alguna razón no disfrutó del abrazo de su viejo amigo. Parecía haberse quedado como ausente.
-Espera... ¿Qué es eso que acabas de decir? ¿Volver de entre los muertos? ¿Yo?
Quint intentaba hacer memoria, pero todo estaba borroso. Recordaba haber venido a Moth, una serie de sucesos que le llevaron a asistir a la fiesta de un noble y que en esa fiesta reencontró al cgrupo al completo. Luego todo eran frangmentos sin sentido, recuerdos fracturados. Tal vez otra de sus visiones.