Partida Rol por web

Arquitectos de Voluntad. Libro-5.I: Residuos del Dolor

Pabellón C (Arokham)

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09/08/2017, 15:24
Socar Fonn'Aster

    Parecía que los primeros movimientos estaban teniendo lugar, aún no había ningún acuerdo tácito, pero la mayor parte de los que se habían aproximado a oír lo que Roriarkas tenía que decir a los nuevos habían decidido continuar a nuestro lado. Por su puesto esto no era compartido por todos, por su parte el hobgoblin había decidido esfumarse y seguir por su propia cuenta y riesgo, algo que me resulto bastante grato, mientras que el ogro y uno de los humanos parecían haberse quedado algo rezagados. Aquello merecía una mención especial, ver como una bestia descerebrada como aquella era capaz de reprimir su naturaleza beligerante era algo ciertamente loable, aún así todavía tenía mucho que demostrar, pero quizás hubiera algo a considerar en aquel bruto.

    Y ese pensamiento también enlazo rápidamente con otro, el juego de provocaciones había terminado y, pese a que algunos lo hubieran pasado peor que otros, todos habían superado la prueba de temple. Por ello, resultaba inadmisible que aquellos carroñeros pretendieran alargar sus tretas por más tiempo, especialmente después de ver como Roriarkas, uno de los respetables, se había pronunciado para guiar a los novatos. De este modo, giré en redondo abandonando la posición al lado de mi compañero para ir en busca de Hologor y detenerme de tal modo que impidiera su avance.

    Con su camino bloqueado busqué el cruce de miradas mientras tomaba una posición de guardia, aquel mequetrefe iba a cesar con sus intentos en aquel momento y más le valía llevarse al otro imbécil con él. -Vuestro estúpido juego se terminó ya hace rato y fracasásteis. Así que largaros de aquí de inmediato, atajo de patanes, antes de que vuestra estupidez os lleve a perder algo de lo que os cueste mucho más recuperaros.- Mis palabras fueron directas y claras, para que hasta un cerebro de chorlito como Hologor fuese capaz de entenderlas, no pensaba tolerar que se creyeran que podían hacer cuanto quisieran, menos aún cuando nos habíamos comprometido a guiarlos.

- Tiradas (1)
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09/08/2017, 16:33
Esderian Fonn'Aster

Notas de juego

Sigo a Lythrai que sigue a Roriarkas

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09/08/2017, 19:23
Nickar

La Tiflin revisó al grupo, y se percató de la ausencia del hobgoblin, Amok y Pain, por un lado sabía que el primero pasaría desapercibido y se uniría donde más falta le hiciera, el agresivo humano, que había amenazado a medio grupo seguramente, no le preocupaba en absoluto, pues no podría fiarse de él ni un ápice a menos que cambiaran mucho sus formas; ya de por si era reacia a confiar en alguien, y por ello sus armas eran sus únicos hermanos, pero era sorprendente percatarse de que en poco tiempo se había sentido agosto en un grupo bastante variopinto, y más le sorprendía pensar que el kobold ya lo valoraba tanto como a sus propias armas. Tal vez su deseo de que le siguiera un pseudodragón en un futuro jugara en esa baza, pero en realidad Cisco ya poseía su propio valor en el gélido pecho de la Tiflin, tal vez no era tan cruel o egoísta como quería aparentar o quizás el pequeño supo como ganar su caprichoso ego.

Por otro lado - ¡AMOK! - gritó - si no te apresuras ten por seguro que devoraré tu parte, no me culpes si luego tu estómago se pega a tu espalda.

Se fijó también en que el respetable ese le seguía, y escuchó hacer referencia a los que estaban marcados, por lo que sonrió, esa era una estrategia más correcta. Bajando el tono anterior y sentada en el aire, volando con calma de espadas, y tras rascar con suavidad el morro de Cisco, le dedicó unas palabras al tal Roriarkas - fíjate, dices que te desprestigia referirte a ellos, y yo en cambio, creo que es ahora, que vale la pena hablarte, es ahora que ofrecerte mi nombre es aceptable y sin necesidad de utilizar burlas - sacó su estoque y lo colocó ante su rostro, para saludar con el mismo dibujando un arco - Nickar, futura poseedora de este lugar, de Arkhania y posiblemente del mundo.

La seriedad de su gesto, mostraba la convicción que poseían sus palabras - de hecho, ya lo poseo, solo falta derrocar algunos reinos corruptos que se creen en el derecho de juzgar. La libertad de unos acaba en el límite en el que se obstruye la de otros - un mundo de anarkia controlada en el que solo se impidiera limitar la libertad de segundos, era un sueño tal vez demasiado pretencioso, pero se dice que contra mayor es el sueño, mayor es la determinación.

Notas de juego

Viajo ANTE Roriarkas :P

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09/08/2017, 22:04
Serge Leblanc

El ladrón mentiría si dijera que se esperaba aquel resultado. Habría apostado a que al menos Amok y Pain habrían acabado enzarzados en una pelea callejera con aquellos presos. Sin embargo, el ogro le sorprendió gratamente al ser capaz de contener su violenta ira y la bella Lythrai se encargó de frenar a Pain.

Serge sonrió sintiéndose un poco más tranquilo. Habían conseguido evitar el primer conflicto, lo cual muy seguramente les había evitado heridas, magulladuras y puede que hasta la pérdida de sus posesiones. La próxima vez se encargaría de dejar sus armas y armadura a salvo con los encargados de la prisión. Ahora que había visto qué se cocía en aquel lugar, empezaba a sentirse menos seguro con sus filos al cinto que sin ellos.

Sumido en sus pensamientos, el ladrón siguió caminando junto a Yzlin, Nickar y Lisa. No tardaron mucho en ser alcanzados por más de sus compañeros a los que se les habían unido el misterioso hombre de la armadura y un tal Roriarkas. También les seguía uno de los camorristas, pero el bueno de Socar se encargó de dejarle bien claro que podía meterse sus bravatas donde le cupiesen.

El hombre llamado Roriarkas acabó por adelantarles para ir guiándoles junto con la tiflin por las callejuelas de aquella ciudad prisión. Respetable, se había llamado a sí mismo. Fuera o no verdad, lo cierto era que aquel hombre sabía por dónde moverse en aquella ciudad y entendía bien la jerarquía que se empleaba allí. Y además estaba llevándoles al mismo lugar que la bella Nickar había decidido visitar, así que… ¿Qué podían perder dejándose guiar por aquel personaje?

Notas de juego

Con Roriarkas.

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11/08/2017, 10:53
Pain

Mi pregunta quedó en el aire, interrumpida, cortada, por la intervención de Lythrai; la Fonn'Aster debía ser mi aliada, debía ayudarme a acabar con los míos a la par que yo evitaba que sus hermanos, los que aún quedaban vivos en el mundo exterior, cayeran ante los Scahrossar. No sabía si lo había olvidado o simplemente, encerrada en aquél lugar, había perdido de vista el objetivo por el que habían sido llamados, pero lo que estaba claro es que cualquier posible alianza, cualquier unión, era ya inviable. En el mismo momento en que la mujer me agarró por el hombro y me amenazó a la cara, sentenció el final de algo que ni siquiera había comenzado, y el inicio de algo que iba a ser muy doloroso para ella.

Mis labios se tensaron, borrando la sonrisa que pocos segundos antes me había surcado el rostro. Mis ojos se entrecerraron, convirtiéndose en dos finas rendijas en las que apenas se entreveían mis pupilas veladas por una ligera ceguera que, de todas formas, no me impedía nada en absoluto. La tensión que alrededor se había empezado a disipar con el cese de las hostilidades ante la pelea que no se iba a llevar a cabo, se concentró entre nosotros dos, poniéndome en alerta y haciendo que todo mi cuerpo, cada uno de mis músculos, se pusiera rígido y tirante, exactamente igual que antes de una batalla. Un gruñido lento y en bajo surgió de mi garganta a medida que el contacto se prolongaba y, antes de que el sonido se perdiera en el ruido de pasos y movimientos a mi alrededor, me moví. 

Elevé los hombros con un movimiento rápido y seco, de improviso, haciendo que el agarre de la mercenaria perdiera fuerza por el impulso, y con la misma inercia con la que a continuación los bajé para eliminar el apoyo de sus manos, extendí un brazo y golpeé su pecho con la palma abierta. Imprimé al golpe la fuerza necesaria para hacerla retroceder mientras yo mismo daba un paso atrás para poner un metro de por medio entre ambos; desde ese lugar, con los pies afianzados en el suelo y en posición de combate...

...observé a la guerrera y, tras ella, a su inseparable guardián. Sus miradas indicaban que estaban también dispuestos, que si era el momento, actuarían. Yo sonreí, volví a relajarme y me erguí, manteniendo un pié por detrás por si era necesario moverse con rapidez, pero sin resultar amenazador, excepto tal vez por la sonrisa que volví a dibujar.

No quiero mataros. Prefiero que disfrutéis de esto, mientras fuera mis hermanos terminan de aniquilar a los vuestros. Pronto vais a ser una familia muy pequeña, y aquí estaré para ver las lágrimas cuando os deis cuenta de que sin mi ayuda jamás encontraréis los escondites y a los líderes de quienes os habrán dejado así.

Entoné una risa siniestra, profunda, que alargué apenas unos segundos antes de girarme del todo y mirar alrededor, dando por terminada la conversación y cualquier interés por mi parte; en ese instante, mi atención se desvió hacia algo más importante, hacia Roriarkas, que por segunda vez me trataba como si fuera un indeseable. Aquella actitud, lejos de incomodarme o enfadarme ahora que estaba en frío –además estaba más que acostumbrado a ser tratado y actuar como un mendigo, como un paria e incluso como cosas peores– me resultaba indiferente, no me afectaba lo más mínimo; para mi, solo era la manera de buscar mi próximo objetivo, y sabía que cuando el momento llegara la petulancia daría paso a los gritos. Siempre era así. Siempre.

Con ese pensamiento dejé que se alejaran todos aquellos que quisieran hacerlo, siguiéndoles con la mirada, divertido, al ver como les seguían los matones que habían buscado bronca y, a su vez, estos eran detenidos e increpados por el enorme ser de la armadura; incluso desde lejos, tuve que admitir que el hombre imponía, aunque tal vez no excesivamente teniendo en cuenta a quienes tenía delante. Además, yo sabía que ser grande y tener la armadura más pesada no siempre era sinónimo de tener lo que había que tener; era algo que podía extenderse a la mayoría de aquellos idiotas. Por suerte, idiotas, de lejos, se veían que eran, y ya que el respetable había decidido no satisfacer mi curiosidad, ellos podrían hacerlo.

Con pasos tranquilos, en sigilo, danzando sobre la piedra más que andando por el suelo, me acerqué por la espalda al lagarto al que Socar impedía avanzar, y carraspeé tras él. 

– Cof, cof… – interrumpí, tocando con un dedo el hombre del híbrido a la par que me echaba atrás, no fuera a ser considerado un ataque y pudiera responder –. No perdáis el tiempo con ellos, no van a pelear, cada uno de ellos es más listo que todos vosotros juntos. ¿Por qué no, mejor, dejas de hacer el estúpido y me invitas a comer algo ahí dentro? Seguro que eres más inteligente de lo que pareces, al contrario que tus compañeros. Yo consigo algo, y tú también, ya verás.

Guiñé un ojo a Hologor, esperando que aceptara aquello. Quería saber cosas, y más alto o más bajo en la pirámide, allí todos debían tener información. Ahora que el era un descastado, un marginado, era mejor buscar la compañía de los otros, sobre todo porque ya lo había hecho otras veces, en otras muchas, muchas ocasiones; por experiencia, cuando uno trataba con lo más alto de la sociedad era difícil ser más que un esclavo, un súbdito que asintiera con la cabeza y aceptara órdenes. En cambio, cuando uno iba con la escoria, mientras se mantuvieran los pies en el barro y la mierda, al mismo nivel, había posibilidades de crecer.

Además, conociendo a Virming, la maldita Comadreja daba igual si era un respetable o estaba hundido hasta las rodillas en el fango, tendría contactos en lo más hediondo de toda prisión, así que acabaría por encontrarme en El Grosero.

Notas de juego

Yo me quedo allí.

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11/08/2017, 12:13
Lythrai Fonn'Aster

Con un movimiento rápido se zafó de su agarre, y la empujó hacia atrás, sin que a Lythrai le diera tiempo a reaccionar. Cuando quiso darse cuenta él tenía los brazos y piernas dispuestos en posición de combate. -¿Pero qué?- Lythrai agarró con las dos manos su lanza y la interpuso en posición diagonal entre ella y Pain, sin apuntarle a él, en una postura más defensiva que ofensiva. ¿Tantas ganas pelearse tenía Pain que no le importaba en absoluto con quién? ¿O directamente se había vuelto loco y pretendía matarles, allí y ahora?

Y por su fuera poco, en medio de la genuina confusión de Lythrai, Pain... sonrió, y relajó su postura, dejándola aún más desconcertada si cabía. Al advertir que no se lanzaría a golpearles, Lythrai abandonó también la postura de combate, pero eso no significaba que el peligro hubiera desaparecido. Y luego Pain enseñó sus colmillos. Bien podría llamarse Cobra, en lugar de Pain, siendo que tenía la lengua como una de ellas. Y no sólo en sentido literal. Las palabras que le soltó estaban llenas de veneno, y la hirieron más que podría haberla herido con un combate sin más. Sabía exactamente dónde golpearla.

Lythrai no había olvidado el asunto de los 'Ssschorrossar', en ningún momento. Tenía el recordatorio especialmente fresco de cuando, arriba a las puertas de Arokham, cuando creyó haber visto muerto a Pain. Tenía muy presente que no era solo un enemigo peligroso, sino también un aliado insustituible, una pieza clave si quería cumplir aquello para lo que la habían llamado a Arokham. Acabada. Estaría acabada si los hermanos de Pain acababan con los Fonn'Aster de Arkhania. Entonces, sólo sería Lythrai, la reo 637, sin utilidad alguna para nadie. Ni para su Diosa, ni para los patrocinadores... ...ni siquiera para el resto de presos. No podía permitir que sucediera.

"E-eso no ocurrirá, mi familia no caerá, por que nuestro trato sigue en pie." le contestó con el ceño fruncido a Pain mientras él reía. Lythrai apretó con fuerza su lanza aguantando la ira y las ganas de pegarle un puñetazo por lo irreverente que siempre se comportaba. "...Tus hermanos morirán primero, porque tú y yo les daremos caza y tú tendrás tu venganza."

Cuando terminó, Pain se giró a mirar a su alrededor, dando por terminada la conversación sin más. No era la primera vez que pasaba. Él e Ishrad habían hecho exactamente lo mismo ya una vez en el Despeñapresos, o incluso ella misma se lo había hecho a Ishrad en el camino a Arokham, cuando se separaron en la bifurcación. Lythrai gruñó en un fuerte suspiro, pero lo dejó estar y marchó siguiendo a Socar y Roriarkas, o mejor dicho, a Nickar, que encabezaba de nuevo a la comitiva.

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11/08/2017, 21:36
Hazir Al-Tamsa

A Hazir le encantaba Lythrai. Era oscura, maravillosa, fuerte, con tantos o más recursos que cualquiera de ellos, y, por supuesto, hermosa como la noche. Sin embargo, eso también la hacía a veces demasiado impulsiva. Estuvo a punto de pelear con los alborotadores, lo que no habría supuesto una buena decisión, y, después, amenazó a Pain directamente, poniéndole una mano en el hombro. Hazir se tensó, agarró fuertemente el mango del alfanjón. Ponerle una mano encima a alguien versado en artes marciales es siempre una imprudencia absoluta, a no ser que quieras perder esa extremidad y la vida. Hazir sabía que había mil maneras de partirle el brazo a un hombre con solo aplicar una cantidad irrisoria de fuerza, y desde luego Pain no tenía una cantidad irrisoria de fuerza. Lo peor que se puede hacer con un enemigo así es proporcionarle un punto de agarre. Hazir dudó si podría desenvainar antes de que Pain le rompiera algún hueso. 

Por fortuna, Pain no atacó con intención de matar ni lesionar, sino solo apartó a Lythrai, moviéndose rápido como las alas de un colibrí. Probablemente no había sido muy doloroso para la Fonn'Aster, que podía considerarse afortunada de estar solo un poco aturdida. Inmediatamente, Hazir se situó a su lado sin soltar la mano del alfanjón, y le habló a la mercenaria sonriendo, pero con tono serio. 

-Vamos. Sigamos a Roriarkas.-dijo mientras la mercenaria gruñía, con ganas sin duda de abalanzarse sobre Pain, lo que posiblemente hubiera sido muy mala idea. 

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12/08/2017, 10:57
Ishrad Corlav

Observo la escena que Pain y Lythrai protagonizan sin apenas hacer un gesto que delate que es lo que pienso u opino. La guerrera probablemente caería ante los golpes del luchador. Lo había visto luchar un par de veces y me quedó claro que era simplemente una máquina sin alma de matar, ni siquiera orgullo u honor tenía.

Amok, ven con nosotros, vamos a asegurarnos bien de que hay que hacer para quitarte esa marca de la frente, ten por seguro que volveremos y aplastaremos alguna cabeza cuando sea el momento.

Tras eso miré de nuevo a la tiflin y me encaminé hacia ella, manteniendome a unos pasos de distáncia, no me interesaba para nada, solo quería que no muriera.

Notas de juego

Me toca seguir a Roriarkas xD

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14/08/2017, 17:43
Esderian Fonn'Aster

 Pain vuelve a acaparar la atención endulzando la atmósfera con su superioridad como un cadáver al exhalar los gases corruptos de la descomposición. -A veces te envidio. Pareces no tener miedo de nada. Pero luego recuerdo que el que no teme nada, no ama nada. Y sin amar nada ¿qué dicha hay en la vida?- Niego con la cabeza -Soy un iluso. Tú no siembras, sólo segas el trigo sembrado por otros. No necesitas amor. No echarás de menos a nadie y, hasta ahora, nadie te echará de menos. Hasta ahora.

 

Cuando mueras, Pain, yo te echaré de menos.- Avancé un par de pasos más dándole la espalda. Pensando en los Fonn'Aster y en los Scharrosar. Me detuve girándome hacia él -Un tipo demasiado molesto para buscar a un grupo- luego miré a Lyth -Mercenarios- inspiré hondo a medio camino entre el asesino de ojos velados y mi hermana. -Demasiado simple. Algo se nos escapa, estoy seguro.- Dije a ambos antes de continuar caminando junto a Lythrai. Siguiendo a Roriarkas que, a su vez, sigue a Nickar.

Sonrío ante la facilidad con la que nuestra compañera tiflin es capaz de dar la vuelta a las cosas. No podría decir si para bien o para mal pero lo que no hay duda es que las hace más interesantes.

El grupo, por ahora, se mantiene salvo las excepciones de Pain y Krishnarj. No obstante, quien más me preocupa en este instante es Yzlin y así se lo hago ver a Lythrai. Rozo el hombro de la mercenaria y al mirarme le hago un gesto hacia la medusa. Yz aún no ha iniciado el camino con nosotros, manteniéndose en un silencio meditabundo. -Nunca he sido partidario de tener una medusa en el grupo. Es como una bestia que en cualquier momento puede atacar la mano que le da de comer, pero reconozco que su estado, después de las cosas que han pasado, me conmueve. Me parece más humana que muchos humanos que he conocido.- Miro a Lythrai -Deberías hablar con ella. A ti te escuchará.- Le digo con sinceridad.

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14/08/2017, 18:38
Reo 640

Pese a mis pensamientos, pese a mi silencio. Veo y oigo. Mis ojos se dirigen a Esderian después de hablar de mí con Lythrai. -No quiero su compasión- Cuando mi compañera mercenaria me mira le sostengo la mirada con dureza, transmitiéndole que necesito estar sola. -Iré con vosotros, llegado el momento.- Dije sintiéndome algo mareada.

La muerte en Necrópolis había afectado algo dentro de mí que aún no acierto a comprender. Pero... palpo mi vientre con los dedos, la ausencia de escamas en esa zona me provoca un extraño sentimiento mezcla de horror y nostalgia.

Notas de juego

No voy con Roriarkas

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16/08/2017, 10:16
-Residuos del Dolor-

 No tardáis en llegar a la plaza descrita. Un círculo empedrado con un pedestal en el centro que luce una evidente ausencia de estatua. -Sería un buen sitio para erigir tu primer signo de poder- comenta Cisco a Nickar. Roriarkas ha caminado en silencio junto al Kobold que se puso a su altura casi al mismo tiempo que la tiflin tomó la iniciativa. El respetable tan sólo intercambió una mirada con Socar ante este hecho tan peculiar. Tras ellos caminaban Serge, Lisa, Lythrai, Hazir y Esderian. Y rematando la formación Ishrad y Amok.

Pain e Yzlin se habían quedado en la plaza. Tizoc había desaparecido poco tiempo después de salir de la posada y Krishnarj decidió seguir su camino.

El edificio al que Roriarkas hizo referencia se alza ostentoso y bien cuidado ante vosotros. La regia e imponente puerta de metal se halla cerrada con dos pesadas aldabas de bronce brillante listas para ser usadas. Todo aquel lugar posee cierto halo solemne y no os pasa desapercibido la evidencia de que los presos lo respetan.

 

-Vaya, vaya, vaya. Qué tenemos aquí. ¿Qué hacéis con este fracasado?- Escucháis decir a una voz conocida. Virming “Comadreja” Davenrost aparece desde la zona oriental de la plaza. Roriarkas se limita a sonreír ante la conocida bravuconería del contrabandista.

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16/08/2017, 10:18
Virming "Comadreja" Davenrost

Aplaudo ante la rapidez del humano. Sin duda se ha llevado a varios interesantes y me complace ver a los que no están. Sonrío -¿Pero realmente formáis grupo?- enarco una ceja viendo el rostro de Nickar y Cisco y el remate de la formación formado por Ishrad y Amok. Sin más, me coloco frente a la puerta por unos segundos -Pronto se abrirán y sabremos que nuevo fracaso obtendrás mañana- Anuncio a Roriarkas que se coloca a mi lado, luego miro atrás, concretamente a Hazir. -Tu relación con El Envenenador no es tan buena como para que el tipo del alfanjón se una a tu grupo.- Miro con divertimento a Socar y a Roriarkas -¿No lo sabes? En el Despeñapresos pasó la noche con Miraria Daragón... y no sólo durmieron.- Guiño un ojo a mi competencia respetable y me giro hacia Hazir -Bien hecho chaval-

Con una sonrisa triunfal me giro para dirigirme Al Grosero al tiempo que detecto una sombra al otro lado de la plaza. Alguien se acerca por allí -¡Ah! Ahí viene El Envenenador cuyo nombre es... Hernst...- miro a Hazir -... Daragón.- Vuelvo el rostro al respetable que faltaba, se acerca con su indumentaria noble y su porte educado. Atusándose la barba recortada con exquisitez -¡Papi!- lo saludo.

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16/08/2017, 10:21
Hernst Daragón

Camino con paso lento -Cállate Davenrost. Sé que mi hija estuvo en el Despeñapresos.- Mi voz demuestra desprecio y desdén a partes iguales. -¿Qué hacéis todos aquí? Estáis montando una fiesta sin mí... 

 

Así que vosotros sois los recién llegados- comento afirmando -Os resultará difícil, pero esto será vuestro hogar. Yo que vosotros buscaría un lugar seguro en el que descansar.- Les digo mirando a cada uno, luego miro a Roriarkas -Necesitas urgentemente ayuda ¿eh?- sonrío -¿Cuántos de los aquí presentes os uniréis a las filas de este fracasado? Jajaja, el pobre necio tiene un único objetivo: Fugarse.- Veo el destello en los ojos de Roriarkas al desvelar sus intenciones -Tus ilusiones te están llevando al fracaso. No me extrañará que pronto dejes de ser considerado un respetable.-

Sin más, continúo mi camino cruzando la plaza.

Notas de juego

Los que tengan intención de unirse al grupo de El Envenenador, pueden seguirlo y mostrar su interés.

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16/08/2017, 10:35
Roriarkas
Sólo para el director

-No todos estamos cómodos en esta prisión- comento echando una mirada a Socar -Y esa fantasía nos mantiene vivos- guiño un ojo a mi compañero. Tras ello me giro hacia los nuevos obviando que Virming aún está cerca.

-Si alguno de vosotros está interesado en salir de aquí, que nos siga.- Comento, me giro triunfal y camino hacia un lateral de la plaza. Por una calle descendente.

Notas de juego

Los que quieran, pueden seguir a Roriarkas. Se dirige hacia su "centro de operaciones".

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16/08/2017, 10:41
Virming "Comadreja" Davenrost

Buen intento, Roriarkas. -¿Conocéis la taberna El Grosero?- les pregunto viendo en sus rostros el desagrado aparente -No os dejéis llevar por la primera impresión. Lo que cuenta está en el interior- comento posando mi mano derecha en el pecho. Y sin más, camino hacia la taberna.

Notas de juego

Finalmente, los que quieran pueden volver a El Grosero y descubrir el reservado destinado para Virming tras la fachada de mierda que usa para persuadir a los no invitados.

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16/08/2017, 10:44
-Residuos del Dolor-

Krishnarj, Tizoc, Yzlin y Pain sois los únicos que habéis decidido apartaros del grueso del grupo. Así mismo, Krishnarj y Tizoc han usado sus dones para desaparecer.

Hologor, detenido por Pain, se gira hacia él escuchando sus palabras y provocando la atención de los que aún están cerca.

Notas de juego

Tizoc, te desvinculo del grupo para no pnjotizarte constantemente. En el momento que vuelvas te doy información suculenta, revelo lo que has estado haciendo y te incorporas a la partida sin problemas.

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16/08/2017, 10:47
Hologor Bane

Me giro inspirando profundamente y exhalando el aire con pequeños rugidos -Eres un gusano despreciable. Pareces escoria incompetente.- Le señalo la marca en la frente -Además, apestas. Eres feo, independiente y, seguramente, mejor que esos.- Hago un gesto hacia los que se acaban de marchar -Todo son cumplidos, por supuesto.- Sonrío mostrando la cantidad ingente de dientes que pueblan mis fauces -Me has caído bien. Pero no me subestimes creyendo que soy un estúpido. Todo forma parte de la misma estrategia. Ahora van directos a la trampa. Sí, nosotros podemos representar una amenaza... pero no somos nada comparado con lo que se oculta en lo más profundo de esta cárcel. Hacia donde van tus desdichados compañeros.-

Hago un gesto hacia el interior de la posada -¡Vamos!¡¡Y tú también medusa!! Esos no son más que bocazas. Sabemos que eres una de los nuestros. Debajo de esta capa monstruosa hay un corazón. JAJAJAJAJAJA- Escupo mientras camino hacia el interior de la posada esperando que el humano (y quizá ella también) me acompañen.

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16/08/2017, 12:04
Reo 640

Ahora mismo sólo quiero estar sola, algo me está ocurriendo y necesito saber qué. -Si tu corazón es la mitad de negro que el mío causaremos estragos en esta prisión.- Le digo con una sonrisa -Pain. Tú eres velocidad y agilidad. Lagarto, tú pareces más de potencia y fuerza bruta. Vamos dentro, preséntame a los tuyos y me pensaré no convertiros en hermosas estatuas de piedra para ser destrozadas.- Le digo con mirada fiera y comienzo a caminar hacia ellos. Si consigo pasar como una de ellos, podré encontrar mi pequeño rincón en esta prisión.

Uso las serpientes para cubrir la marca de mi frente.

Soy muy consciente de que, tal y como están las cosas, con mis actitudes, no duraré mucho. Eso debe cambiar. -La suerte es lo que nos mantendrá vivos. Ni tú con tu agilidad, ni yo con mi cerebro hemos conseguido librarnos de esto- señalo la marca -Labrémonos nuestra propia suerte-. Le digo al caminar a su lado para que Hologor nos escuche. Quizá nos presente a alguno más y pueda hacer que las mentes más planas, más superficiales, sean sumisas.

Miré en la dirección en la que se había marchado Krishnarj. -El tiempo dirá-

-¿Tienes un plan?- le dije enarcando una ceja -Tengo un plan.- El resoplido de Pain muestra el desinterés que siente ante mis palabras.

-¡Lagarto! ¿A qué respetable sirves?- le pregunto con creciente interés.

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16/08/2017, 21:08
Hazir Al-Tamsa

Por fin Virming hacía acto de presencia, y Hazir rió ante su comentario de felicitación. Sí, sin duda habían hecho mucho más que dormir, y había estado muy bien. Sin embargo, el hecho de que su padre se llamara El Envenenador no sonaba muy bien. El veneno era una herramienta habitual en la corte quishashi, y, aunque Hazir tenía una notable resistencia al mismo, no era inmune, ni mucho menos. Recordaba un par de veces en las que habían intentado envenenarle, y casi lo habían logrado, pues había estado en cama dos días, vivo solo por las pociones que su familia podía permitirse, hasta que los sanadores de la corte pudieron eliminar el veneno. Allí, en aquel agujero de prisión, no había tales lujos, y un envenenamiento podía ser fatal. Sin embargo, por suerte, la actitud de Hernst hacia él no parecía hostil, lo que podía significar tres cosas: o bien no había oído a Virming o no le había creído, y por lo tanto no sabía lo suyo con Miraria, o bien lo sabía y no le importaba, o bien lo sabía y le odiaba en secreto, esperando el momento justo para fulminarle. Esperó que no fuese la tercera. 

En un momento, los tres respetables comenzaron a intercambiar pullas, y pareció que se peleaban por ver cuál de ellos se llevaría a los nuevos presos. Hazir se relajó y sonrió: que los nobles se pelearan por él era una experiencia bien conocida y que le resultaba familiar, aunque hiciera años de ello. Los Al-Tamsa estaban continuamente siendo asediados por los nobles menores para ganarse su favor, al igual que las otras dos grandes familias, y, aunque a veces podía ser molesto, demostraba su elevada posición. 

Allí pasaba igual. Si se peleaban por ellos, es que tenían valor, lo cual, por lo menos de momento, era su seguro de vida. Muertos solo le servirían a los gusanos, al perro Khayim y a los matones. Y, por suerte, ninguno de ellos era un respetable, por lo que de momento estaban razonablemente seguros. 

Meditó su respuesta unos instantes. Sin duda debería hablar con Virming, tenía cosas que preguntarle. Era contrabandista, y, si no había entendido mal, la función que habían encomendado a Hazir era controlar también el contrabando con su patria. Había cosas que aprender, por lo tanto: señales, agentes dobles, sobornos, pasajes y túneles, todo aquello que hacía posible el contrabando. Además, mentiría si dijera que no quería ir con el Daragón: a pesar del riesgo, quería preguntarle por su hija y por algunas otras cosas. 

Sin embargo, Roriarkas ya les había invitado, y sería descortés rechazarle ahora. Además, les había ofrecido comida, y la piedra que se le había formado en el estómago era tan pesada que casi apartaba completamente cualquier otro pensamiento de la mente de Hazir. Por si fuera poco, su intención, si Virming no mentía, era fugarse, y eso era, al fin y al cabo, lo que ellos querían. 

Por eso, tomó su decisión, y habló con cordialidad y solemnidad, dirigiéndose a Virming y Hernst. 

-Señores, este caballero ya nos ha invitado a acompañarle y a comer con él, y hemos aceptado. Sin embargo, me gustaría hablar más tarde con vosotros, si es posible. -se dirigió a Virming- Dile al tabernero que me deje pasar a tu habitación más tarde, tenemos asuntos importantes que tratar. 

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16/08/2017, 20:57
Nickar

Hacían aparición dos nuevos respetables, a Virming ya lo había conocido, y ese tal "envenenador" nodaba la sensación que tuvo al inicio de que le desagradaría a la medusa, además ella le había dejado, en vez de caminar a su lado.

Las dudas de a quien acercarse primero se mezclaron en su cabeza, pero Davenrost dijo de traspasar aquella apestosa zona por tal de llegar a una supuesta zona mejor. Un suave estornudo expulsó el recuerdo de aquella pestilencia.

La Tiflin saludó al hombre "comadreja" dedicándole un gesto con su diestra - si algún día logro traspasar esa cortina fétida tal vez te visite, pero es demasiado para mi - no quería estar con malos términos con ninguno de los respetables, para ella todos eran el color de las fichas que representaban al rey en su tablero, al que debía manejar con cautela para protegerlo, fichas verdes, violetas y blancas, grupos hermosos que observar.

Al parecer sus fichas blancas buscaban la libertad y las verdes hundían con dureza sus palabras en contra de las primeras. Ir con fichas violetas no era opción, pues su olfato no lo soportaría. Por un lado el veneno llamaba su atención, cierto era que aún poseía veneno, pero aquella palabra le resultaba hermosa y casi hipnótica. Por primera vez se posó en el suelo, en aquel círculo empedrado en el que Cisco vio con buen atino un lugar en el que empezar, y fue para llevar a cabo su saludo circular con su estoque tras colocarlo ante su rostro, dirigido ante el tal "Hernst", sin duda el que más llamaba su atención, pero no lo único.

- Sería un honor para mí observarte desde cerca, señor "envenenador", sin duda espero poder conocerle más - sonrió emocionada, pero no por conocerlo, pensar en venenos era una emoción constante, pero no era lo que le atraía en esa ocasión - pero me habéis puesto un reto interesante delante, un juego entretenido y mordaz, llamáis perdedor a ese humano, y me parece un juego grandioso ayudarle a crecer - su sonrisa y su mirada eran un cobijo de lujuria latente que se mostraba deseosa de jugar, sus ojos rozaron el mostrarse blancos por el placer de su puopila roja flotando hacia sus pensamientos - sin duda no se, si obligáis a escoger un bando u otro - suspiros de aliento tras el momento pasional de una partida llena de diversión, y su rostro se normalizó - será un honor ofrecerte mi ayuda si la pides - terminaba de decir lo que quería rotando hacia Roriarkas - ¿pero hay algo más emocionante que dar poder al débil? - de nuevo sus colmillos asomaron - si se va, su puesto será mío, y será un buen inicio en el que iniciar mi posesión del lugar.

A ser posible, querría codearse con los tres, los juegos eran más placenteros cuando la estrategia era compleja y difícil, el azar debería volar de su mano para que la extenuante pasión del juego le satisfaciera lo suficiente.

Notas de juego

Los ojos no son rojos pero es el rostro que quería plasmar XD