Partida Rol por web

Interesante, así que el capitán te ofreció parte del rescate? bueno quizás si le llega para pagar sus deudas te pueda dar algo más para ropa bonita, pero por ahora de quien te fías debe mucho dinero y no está en condiciones de gastarlo libremente hasta que no salde sus deudas, una malversación de fondos ante los tribunales le puede dejar sin nave rápidamente, y te aseguro que los prestamistas obran por el bien de sus intereses. 

Aunque ahora que lo dices espero que al resto de la tripulación no le moleste que tengas un trato preferente respecto a ellos que llevan mucho más tiempo aquí. 

 Miro a Precius, con cara muy seria, y le respondo:

 - Precisamente porque es la nueva necesita ayuda para adaptarse. Le prometí la parte de Dirk, y creo que a estas alturas ya se la ha ganado. No voy a ponerme a discutir de esto, Precius, soy el capitán y tú la primer oficial, pero parece que lo olvidas. Se supone que tu deber es ayudarme a mantener el orden, no buscar pelea por cada cosa que te molesta. Si yo hiciera lo mismo, nunca despegaríamos de ningún sitio... Si hay algo con lo que te preocupa, lo hablamos con calma, no me lo tiras en la cara, delante de todos, como si buscaras menoscabar mi autoridad...

En la oficina de correos, Alex entrega la carta de Ilia...

Informandose en la misma oficina, Alex descubre que los correos destinados a las televisiones y los informativos que emiten los sucesos, llegan casi cada dia pero puede que dependiendo del sistema de origen, esa informacion tendria semanas o meses...

La orden de busqueda de Ilia proviene de Regina 1910 y se realizo la denuncia de su desaparición el 032-11105 por el Capitán Salvador Gerechtigkeit y su primer oficial John Walker, de la nave Hiperión

Con todo lo sucedido los dias pasan con rapidez y la fenix esta nuevamente lista para partir...

Eso no se trata de una decisión de direccion de la nave, sino de contabilidad; pero tranquilo, podrás justificarla a gusto cuando hagamos reparto de dividendos y tengamos que vender la nave para poder afrontar tu desastre económico.

¿o se te olvida que por mucho que dirijas la nave, la mitad de ella es mía, y sus beneficios nos son tuyos sino nuestros, por lo que no puedes regalarlos como te plazca? Cuando dejes de actuar como un niño dejaré de tratarte como tal. pero por ahora podemos partir, la mercancía está lista y la nave reparada.

Miré mi camiseta de tirantes y mi pantalón lleno del polvo que se acumula en los equipos electrónicos cuando Precious hizo referencia a la ropa bonita, me crié en una granja de cerdos, pero hasta yo sabía que la ropa elegante no era esto.

Iba a hablar, pero la primer oficial ya había montado en cólera, así que decidí callarme, no me gustaban los malos rollos ni las peleas en una nave, y menos en una tan pequeña como esta.

Walter negó con la cabeza ante la énesima vez que Precious y Alex discutían. Ultimamente lo hacían en todo momento y por casi cualquier motivo. Esta vez le había tocado a Ilia estar en medio de la discusión, probablemente era todo un malentendido, pero tal y como estaba la situación saltaba la chispa por cualquier cosa.

-Estaré en la zona de los reactores. Dijo en un tono de voz neutro y apagado, sin tan siquiera dirigirse a nadie en concreto.

Al menos allí estaría tranquilo, los motores nunca discutían, tan solo se estropeaban, y los de Walter no demasiado. Tenía muchas ganas de que aquella misión terminara, pues todo se había torcido desde el principio.

 - Necesitaba ropa, ¿o acaso es un crimen eso?. Precius, por favor, esto es ridículo. ¿Te das cuenta del tema de todo esto?. Ilia necesitaba ropa, yo la ayudé a comprarla, ropa funcional, por cierto, nada caro, ¿y te cabreas por eso?. No recuerdo que te ofrecieras a regalarle parte de tu vestuario. - Le dije, desganado, harto de la mujer y sus berrinches. Esto no podía seguir así, ya que nos arriesgábamos a crear un mal ambiente en la nave.

Nadie ha hablado de esa ropa, te estoy hablando de que le hayas ofrecido una comisión del trabajo que estamos haciendo. no trates de desviar la atención. Pero tu tranquilo, cuando hayamos puesto a salvo a la señorita Aledon Aledon, ya resolveremos estos asuntos, mientras tanto te recomendaría limitarte a tus funciones, y consultar cuestión de importancia a alguien competente.

 - ¿Me estás llamando incompetente?. - Pregunté, molesto por lo que había dicho. - Mi deber como capitán es, entre otras cosas, asegurarme del bienestar de esta tripulación.

-Chicos, chicos... interrumpió Lucy aun a riesgo de ponerse a tiro. -Tenemos cosas más importantes que hacer. Esta discusión la podéis tener mientras viajamos al siguiente punto de nuestra ruta.

-Así que os recomiendo que estéis en la nave cuando haya finalizado la secuencia de despegue... dijo mientras desaparecía hacia el interior de la nave.

 Lucy tenía razón, con un suspiro entré en la nave, dispuesto a ocupar mi lugar en el puesto de piloto de la nave...

Perfecto, espero que lo recuerdes la próxima vez que busques piratas por el espacio -tras lo dicho se marcha a su puesto par poder despegar cuanto antes. 

Una vez más, la tensión entre Alex y Precious estalló dejando el ambiente y la moral de la tripulación por los suelos. Cada uno lo llevó a su manera. Walter refugiandose en los motores y Lucy a la cabina, el santuario de cada uno de ellos. La pobre Ilia todavía era demasiado nueva para tener el suyo propio. ¿Y Marck? Buneo. Hasta él se había cansado de la situación y de alguno de los comentarios dicho por los dos oficiales de la Fenix.

Con gesto serio se levantó de su asiento.

Alex. Si de verdad eres el capitán de la Fenix Estelar, empieza a comportarte como tal. Y preocupate en serio por tú tripulación, cosa que no estás haciendo aunque parece que no lo ves.
Precious tiene mucha razón en la mayoría de cosas que dice. Aunque su talante y caracter no sean los adecuados. Y no es tan buena como se cree.

Os voy a dar un consejo a los dos, luego hacer lo que os plazca por supuesto.
Arreglar esto antes de llegar a nuestro próximo destino. No por vosotros, lo necesita la nave y la tripulación. Y a ella os debeis también.

Ahora voy a asegurarme de que la niña siga bien, y no se traumatice más de lo que está por vuestras discusiones.

Pocas veces se había visto al médico tan airado.

Sistema Kinorb 2512... Fecha imperial 075 - 1105... 18:43h...

Lucy conduce a la Fenix rumbo a las estrellas, en minutos sale de la órbita de Kinorb y en horas estará a suficiente distancia del planeta como para realizar el salto con seguridad, tiempo más que suficiente para hacer los cálculos de astronavegación necesarios... siempre que se sepan las coordenadas de destino...

Desde Kinorb 2512 hay 4 parsecs hasta Celepina, siguiendo la ruta mas corta son dos saltos hasta el destino, la opción lógica es Risek 2712, pero no siempre es la lógica lo que mueve a las personas...

En la pantalla de navegacion, la carta astral recuerda la ruta más corta:

Ruta a Celepina 2913

Leyenda

La información sobre los sistemas, se encuentra en el terminal biblioteca y Risek forma parte de la base de datos...

 Observo la siguiente ruta más segura, y la más cercana a nuestro destino final, que tenga baja presencia tanto de la armada como pirata...

-Capitán, sigo el plan de ruta que teníamos o pongo rumbo a algún otro sitio? Preguntó Lucy, extrañada, al ver que Alex abría el mapa espacial mirando rutas.

 - Si, hazlo, seguimos... - Aprobé, antes de añadir. - ... Y esperemos haber dejado atrás lo peor del viaje... Pon los programas evasivos preparados, por si acaso...

 Una vez terminado de trazar la ruta, quito el interfono para que nadie pueda escuchar nuestra conversación:

 - Lucy, quiero que seas sincera, ¿Marck tenía razón?. ¿Piensas que no me preocupo lo suficiente de la tripulación?. - Le pregunté, preocupado.

Lucy bajó la cabeza, avergonzada como si la hubieran pillado haciendo alguna trastada, ante la pregunta de Alex.

-Pues... la verdad... es que sí, tiene razón. Dijo con timidez. -Pero más que preocuparte de nosotros, creo que lo que falla es una falta de atención y liderazgo, capitán.

Giró la silla para no darle la espalda. Lo que iba a decir podría sonar duro, pero ella quería suavizarlo lo máximo posible. Así que con voz suave y calma, junto con una mirada preocupada, se explicó.

-Alex, sabes que para mí eres un modelo de referencia. Comparto muchos puntos de vista contigo y tu actitud servicial es ejemplar. Me encanta que aun haya gente como tu en este universo con la que poder confiar y echarse unas risas. Empezó ensalzando las virtudes, pero siguió con el quid de la cuestión.

-Lo que a muchos nos preocupa, nótese la inclusión de Lucy, es que a veces parece que no sabes ni que estamos haciendo. Seguía con su suave tono, intentando no sonar muy agresiva. -Deberías poner un poco más de atención en nuestro alrededor. Lo que pasa en la nave. Nuestros objetivos... piensa que nosotros miramos al capitán para saber que hacer, nuestro siguiente paso. Si este no lo sabe, nosotros estamos perdidos. Y si nos perdemos... dejó la frase inacabada, para que Alex entendiera lo grave de la situación. Aún así, tenía que plantear lo peor y le estaba costando decidirse.

Cuando por fin pareció haber reunido suficientes fuerzas, añadió un poco más. -Alex, no tenemos ni una duda de que eres buena gente y que la Fénix es más tuya que de Precious, pero como ha señalado Marck, toda la tripulación está en esta nave y lo que decidas nos afecta a todos. 

-Últimamente tus decisiones, aunque moralmente irreprochables, no han sido del todo... acertadas. Quizá hay alguien en esta nave que tenga más madera de líder. Dejó entrever sin decir nombres. -No hay que tener vergüenza a la hora de ver las debilidades de cada uno. Y si de verdad te preocupa esta nave, deberías dejar que ocupe la posición la persona con más... aptitudes. Iba a usar competente, pero sabía que Alex podría malinterpretar esa palabra.

-Pero eso no quiere decir que abandones la nave, faltaría más! Está claro que tus dotes de negociador son de un valor incalculable y si podemos volar, es gracias a los negocios que cierras tú, que nos dan para comprar combustible y seguir navegando.

-Si me permites una sugerencia, en cuanto terminemos la entrega de la pequeña Seldrina, y después de dividir los beneficios con Precious, intenta negociar la compra de su parte de la Fénix y conviértete en el patrón de la nave. Que ella, o quien tu creas más adecuado, sea capitán y trabaje para ti. Así podrías delegar las faenas de gobernar la nave y dedicarte a buscar negocios y contactos que nos faciliten el poder seguir explorando nuevos mundos de este curioso universo. Lucy se quedó pensativa antes sus últimas palabras.

Ya había hablado suficiente, pero se le acababa de plantear una duda que le picaba la curiosidad.

-Alex, cuál es tu motivo para estar en la Fénix? Sería enriquecerse? Explorar mundos(Como quería Lucy)? Huir de algo? El simple hecho de volar en una nave? La chica permanecía intrigada.

 - Libertad... - Fue mi respuesta, antes de concentrarme en el pilotaje, meditando la conversación que habíamos tenido, aunque quedaba claro que lo que Lucy me había dicho, aunque bienintencionado, me había sentado como un tiro.