Partida Rol por web

Sora inclinó la cabeza levemente hacia un lado, evaluando lo que había visto. Los profesores conocían sus quirks de sobra, así que era natural pensar que habían ido fácil en todos ellos.

Mizushima parecía tener un mal rato en enfrentamientos directos, aunque tenía una capacidad de movilidad superior.

Takeshi era fuerte aparentemente, y...bueno, no había nada dentro por lo que había mencionado ayer, no parecía que fuera alguien que cayera a golpes.

Koizuma tenía miedo a lastimar a otros, pero fuera de eso era muy ágil.

Arasaki poseía un quirk extremadamente peligroso.

Lo que le sorprendió fue el verdadero color del quirk de Eby, ya de por si la habilidad de ser básicamente líquido con su cuerpo le había parecido poderosa, pero imitar los poderes de otro con esa facilidad se iba a un nivel absurdo. Aunque...parecía que tarda unos segundos en esa transformación.

Shikare tenía una habilidad congelante sencilla pero útil y fuerte.

Ah...¡todos son geniales a su modo! ¡Definitivamente va a ser duro, tengo que dedicarme a entrenar mucho más que lo usual si no quiero quedar atrás!

Cerró los ojos justo antes de que Dragon se interpusiera entre el hielo y Aizawa así que los abrió en cuanto se dijo que terminaba y ganaban los héroes. Una parte de el estaba contento por sus compañeros, pero otra se preocupaba por el profesor al cual miraba fijamente desde lejos. 

Movió ligeramente las orejas y dirigió su mirada hacia Eby a quien descubrió mirándolo y con ello el gato se puso de pie a toda prisa y se marchó corriendo hacia los vestuarios donde tendría que bañarse. De no ser porque era un gato completamente cualquiera lo podría haber visto rojo como un tomate mientras miraba a la slime.

Por fin en los vestuarios se transformó en humano de nuevo y se decidió a mirarse en el espejo, estaba hecho un desastre... Todo lleno de barro y suciedad, necesitaba una ducha y más tarde un baño por culpa de eso y un escalofrío recorrió su cuerpo solo de pensarlo. " Y encima Eby me habrá... Me habrá visto..." Había visto toda la vida privada de Eraser y eso le incluía a el en situaciones algo vergonzosas tales como el primer encuentro, las horas de baño o el como dormían... 

Con algo de reticencia se metió en una de las duchas tras desnudarse y empezó a frotarse la cola, orejas y cabello para que se fuera el barro lo más rápido posible pero era imposible, aquello necesitaría dedicación para que todo volviera a estar limpio y su paciencia bajo el agua no era mucha así que cuando vio que más o menos estaba limpio salió de la ducha y se secó a toda prisa, yéndose a vestir con el uniforme escolar. -Definitivamente no ha sido una buena mañana... A causa de los incidentes se había olvidado por completo de que habían derrotado ellos también al otro profesor. 

Temía que no pudiese parar a tiempo mi habilidad, pero por suerte el profesor llegó justo a tiempo para determe antes de congelar verdaderamente al profesor y mis compañeros, haciendo en cuenta que pude hacerlo si continuaba.

-Uff... -suspiré aliviada mientras me colocaba mis guantes para cubrirme las manos, luego observe como todos celebraban la victoria, sin poder evitar mostrar una sincera sonrisa. -. Es cierto, Eby-chan. Aunque la verdad agradezco que Black Dragon-sensei me haya detenido -respondí a mi alegre compañera con una suave risa nerviosa pensando en lo que pudo haber pasado si me dejaba llevar. -. ¡Muy bien hecho, chicos!

-Ah... Uff... -soltó un amplio suspiro cuando vio que Saori detuvo su hielo gracias a la intervención del profesor, volviendo a sonreír enormemente con la victoria en sus manos. -. ¡Bien hecho, equipo!

Tachinaba hizo un par de estiramientos antes de reunirse con su equipo fuera del campo.

-¡Muy bien hecho, Takeshi! La verdad es que no se como podríamos haber contenido al profesor sin ti -le comentó al chico de la armadura alzando el pulgar a manera de aprobación.

Aizawa se sacudió el barro de la ropa y se acomodo las vendas alrededor del cuello, ocultando sus gafas bajo de estas.

-Equipo C: Entren al campo...

El profesor asintió a la idea de Sora de hacer un techo para evitar más lluvia, pero para entonces Eru ya había abandonado la escena...

Luego de que el profesor se los indicase, Ryusei, Ciel, Chika y Ao entraron al campo de entrenamiento. Aunque los primeros tres parecían actuar como de costumbre, se podía ver cierta incomodidad y preocupación rodeando a Ao.

-¿A que nos enfrentaremos? -preguntó Ciel observando los alrededores, esperándose cualquier cosa que pudiese venir a por ellos.

-¡Seguro será fácil! -aseguraba Chika.

Entonces, un fuerte sonido empezó a venir del cielo, como un enorme motor de avión y sus turbinas. Las nubes empezaron a abrirse un poco sobre el campo, dejando pasar pequeños rayos de sol entre la lluvia antes de que una luz celeste cayese desde más arriba de las nubes hasta el lugar. A los pocos segundos, una figura empezó a caer desde el agujero hecho en las nubes, bajando a gran velocidad con unos propulsores en su espalda; aquello que había causado el ruido de antes se fue volando por encima de las nubes, pudiendo ser seguido brevemente por las luces que emitía desde el otro lado, iluminando el cielo de una manera fantástica hasta perderse a lo lejos.

Aquella figura dio un par de giros antes de aterrizar, haciendo temblar levemente la tierra al impactar, esperando unos segundos antes de recomponerse y mirar al frente. El polvo empezó a dispersarse, y todos pudieron observar el brillo rojo en los ojos de aquel ser, el cual saludaba a todos con la mano.

-¡Es un robot de Ex Machina! -soltó Chika con los ojos brillantes como estrellas. -. ¡Un pro-héroe del top!

-¿Él es Ex Machina? -se preguntó Ciel.

-¡No, tonto! ¡Es uno de sus robots! ¡NADIE ha visto a Ex Machina!

-Ehh... Chicos... Deberíamos empezar... -intentó decir Ryusei por lo bajo.

-¡Adelante!

Todo el grupo se lanzó a la vez por aquel delgado robot. Ciel iba muy adelante de su grupo gracias a su alta velocidad, a diferencia de Ryusei y Aoi que tenían que correr normalmente hasta el robot; Chika, por otro lado, en vez de avanzar retrocedía, como si planease algo.

El primero en actuar fue, como era de esperar, el vampiro: se posiciono detrás del robot y se dispuso a patear su cabeza con toda la fuerza que pudiese permitirse. Lo que no esperaba era que el robot voltease su torso y abriese una pequeña placa en su pecho, liberando desde su interior una intensa luz segadora que hizo que Ciel cayese al suelo, soltando su sombrilla para cubrirse el rostro mientras rodaba por el suelo.

-¡QUEMAAAA!

Al estar suficientemente cerca, en Ryusei se encendió esa llama en su frente, justo antes de empezar a emitir unas fuertes llamas de las palmas de sus manos, con las que se proponía a tocar al robot mientras estaba distraido. Al igual que con Ciel, Ex Machina solo tuvo que girar su torso para prestar atención al chico y abrir su mano hacia él: cuando lo tuvo justo al frente, de su mano empezó a lanzar un agente extintor de incendios a presión, con la suficiente fuerza para tirar al estudiante hacia atrás y dejarlo cubierto de espuma blanca.

Entonces, Ao se quedó parado, viendo. No tardó en llamas la atención de la maquina.

-N-No puedo usar mi singularidad estando mojado... -obviamente, a Ao el clima no le favorecía.

-¡Allá voy! -con un previó aviso, Chika estiró sus brazos descomunalmente hacia atrás para luego arrojarlos directo hacia el robot, agarrándolo de los hombros. -. ¡TOMAAAA! -y tras dar un pequeño salto, se lanzó de cabeza a por su objetivo, con la intención de darle un cabezaso directo.

Aprovechando el momento de distracción, Ao se puso detrás del robot y le abrazó con fuerza para atrapar sus brazos, asegurando que no pudiese defenderse del ataque.

Obviamente, el mayor golpe se lo llevó la chica, que terminó en el suelo a causa del terrible cabezaso que se dio contra el metal. Luego Ex Machine no tuvo nada más que hacer que echar la cabeza hacia atrás para propinar el mismo golpe con la cabeza a quién le tenía retenido, el cual por desgracia no tenía cuerpo de goma como para pensar que el dolor se le pasaría en un rato.

-¡Fin de la prueba! ¡Ex Machine gana! -anunció Eraser.

El silencio era estremecedor en la zona de espectadores. Fue una derrota aplastante.

Eru regresó justo a tiempo para observar como el equipo C, conformado por Ryusei, Ciel, Chika y Ao, había sido derrotado en solo unos 15 minutos que le tomo ir y venir, a manos de un robot de apariencia sencilla.

-¿Q-Que rayos fue eso? -preguntó Ciel, tirado en el piso mientras se quitaba las manos de la cara; se le podían ver algunas marcas leves de quemadura curándose por si solas.

-Energía Solar almacenada en cantidades pequeñas... Tiene pocos usos, pero suele ser muy eficaz para varias situaciones...

-Viendo que el equipo C no ha podido contra Ex Machina, el equipo D lo enfrentará -anunció Aizawa.

Ese anunció no fue para nada alentador para el equipo al que le tocaba el 4° combate, quienes se vieron entre si pensando si era peor la paliza que les darían, o la paliza que les daría Eraser por rendirse y no participar.

Luego de otros 15 minutos, Akainu, Hisa e Hideki se vieron tirados en el suelo alrededor del robot, derrotados brutalmente. Dai, por otra parte, ni siquiera se molestó en intentar atacar al robot: al ver que su equipo fue derrotado, simplemente abandonó el área de entrenamiento.

-Con eso concluye el entrenamiento de hoy... Vayan a cambiarse, luego continúen con sus clases... -declaró Aizawa permitiéndoles retirarse.

Ex Machine, quién se vio victorioso en ambos combates, hizo una reverencia formal a todos antes de disponerse a retirarse a pie; tal vez aquella cosa que lo trajo no era capaz de recogerlo en ese lugar.

Todos los vitores a nuestro equipo me sentaron genial, estaba euforica de emoción. - No se asustan por mi poder. ¡ES GENIAL! - Di un leve saltó y puse un pulgar arriba dirigiendome a Sora - Solo tenía en mente ganar. Es lo menos que podía hacer. - Sin duda la Eby del día siguiente iba a lamentar todo el día de hoy. - Y te dije que podías Saori-chan. Eres genial con tu poder, y conseguimos atraparle. Somos los mejores heroes. - Sonreí muy abiertamente antes de que los profesores nos mandaran con los demás, aunque cuando Sora dijo de hacer un techo, yo me quedé fuera de este para seguir sintiendo la lluvia caer en mi cuerpo.

Los combates se sucedieron siendo ambos un tanto malos para los compañeros. Intentaba animarlos pero no se podía hacer nada al final acabieron perdiendo ambos equipos - N-no os preocupeis chicos, lo habeis hecho muy bien, la proxima vez ganareis sin pestañear ya lo vereis - Dije al final a ambos equipos. Cuando llegó Eru le miré saludandole con una mezcla de preocupación porque se hubiera ido y amabilidad

Al fin cuando el profesor Aizawa dijo de ir al vestuario a cambiarnos, miré hacia Takeshi y fui hacia el mientras el resto iba yendo a los vestuarios - ¿Te parece bien si hablamos ahora? A fin de cuenta no tenemos que cambiarnos ninguno de los dos

El chico se sumó de forma vana y poco interesada a la celebración del equipo 2, casi manteniéndose distante, aún qué mantenia esa distancia, no era mucha para que no notaran qué estaba mal.

Durante la actuación de los otros equipos, Takeshi se encerró en su mente, y cuando eso ocurria, sus ojos brillantes cómo faros se apagaban totalmente, meditando sobre la pelea, y viendo sus puntos débiles, tratando de auto conocerse, de ver la mejor manera en qué este "Don/Maldición trabaje para el de la mejor manera posible, para así poder salvar a su hermana.

Sin darme cuenta, Eby estaba ahí preguntando si podíamos hablar, no sabía que fue de los demás, ni cuándo pasó.

¿¡Cuanto tiempo me quedé pensando!?.

-Claro, vamos a dónde quieras-

Solo espero qué no preguntes por Tamaki

Pensó mientras respondia a la slime.

Agarre a Takeshi y me lo llevé un poco alejado a los demás mientras que el resto iba a los vestuarios

Una vez apartados de todos los demás respiré hondo y miré a Takeshi a los ojos - Eres al segundo al que se lo voy a decir, y los profesores ya lo saben... Es muy probable que Aizawa-sensei trate de quitarme la idea de la cabeza... Y más probable aún que aunque quiera seguir haciendo lo que tenga en mente, mañana esté encogida y con miedo a lo que he hecho hoy... Pero eso no quita lo que de verdad siento y quiero hacer. - Cerré los ojos y puse una expresión decidida.

-Has visto mi autentico poder... Soy una Slime, con el poder de mimetizar el ADN que toco. Por eso me transformé en Aizawa-sensei y pude imitar su poder, aunque parezca espectacular solo lo hago a una escala más pequeña, solo que con la condición mia de Slime y la del profesor de los ojos, pude elevarla un nivel superior, ya que no tengo la necesidad implicita de cerrar los ojos - agité la cabeza rápidamente - Me estoy desviando, perdón... Mi poder me permite mimetizar a la persona de la cual obtengo su ADN al 100%, recuerdos inclusive, para poder hacer dicha personalidad real

Miré a Takeshi por si ya sabía por donde iban los tiros y bajé la cabeza mientras la lluvia seguía cayendo - No te lo diría si no estuviera lloviendo, pues tanta humedad me hace dar lo mejor de mi y no me retraigo, pero quiero que sepas que, aunque deje de llover, puedes contar con mi ayuda. Quiero ayudar a salvar a tu hermana. Se supone que somos heroes ¿No? Pues no pienso dejar que nadie sufra, ya sea un compañero, o alguien relacionado con dichos compañeros... Y también. - Me alejé un paso y me incliné ante Takeshi

-Siento haberme metido en un recuerdo tan doloroso que puede ser para ti y que el propio Aizawa-sensei dijo que no se divulgara. - Me quedé en esa posición hasta que Takeshi reaccionara, pues sin duda aquel tema podía ser duro para el... Pero Sora tenía razón, no podía dejarme vencer por mis miedos. Tengo que ser una heroina para todos, sin achantarme, sea con o sin lluvia.

Despues de ser llevado por Eby, y escuchar su erratica explicación sobre sus poderes y el funcionamiento de estos en base a la lluvia y a la humedad, el comprendió qué es una habilidad muy útil, poder mimetizar los poderes de los demás es algo asombroso, y al chico le resultó muy interesante.

Pero el segundo punto qué trato con ella le dejó un mal sabor de boca, por su puesto, si tuviera una, la amargura de recordar la noche fatídica en la qué Tamaki fue apartada de su lado le genera molestias casi incontrolables, pero aún así se las arregló para esconder sus emociones de molestia y mal humor bajo una capa de metal cómo ropa y cuerpo.

-Yo... Am, agradezco tu preocupación Eby-san, y es bueno poder contar con tigo, qué lo sepas me ayuda mucho, no te preocupes te mantendré al tanto de todo lo qué sea relevante-

Habló tranquilo y jovial ante la slime, pero en su corazón estaba ardiendo en rabia, su mente pasaba de la tristeza a la furia y viceversa.

Este asunto solo nos incumbe a Takumi y a mi,pero antes de poder hacer algo, debo conocer los límites de mi poder, y todas sus ventajas.

-Bien, si no hay otro tema qué charlar, me retiro Eby-san-

Finalizó con amabilidad, girando el armatoste en dirección al aula, pensando de momento en la siguiente clase.

Parecía que Takeshi estaba de acuerdo con que estuviera de su parte, y eso me alegraba, sin embargo había un par de cosas que no había dicho... así como también sentía que Takeshi me ocultaba algo, aunque no le daba importancia a ello. Tendría sus razones para hacerlo.

Fue cuando dijo que se retiraba cuando sentía que debía pararle... No por mi, ni tampoco por el, sino por Tamaki. Justo cuando se dió la vuelta grité - No, aún queda algo - Y cuando se diera la vuelta me lanzaría contra el a abrazarlo, para que no viera mi cara... aunque dudaba si funcionaba con el. Tenía la cara temblorosa y medio llorosa, quizás se notaba un poco en la voz. - Tamaki te necesita, como su hermano, para cuando la salvemos. Se como tiene que estar sintiendose ahora... y creeme, lo único que querra cuando la salvemos será a un ser querido que la apoye y la proteja...

Era extraño decir aquello, sin saber nada de por lo que estaba pasando Tamaki, o sin conocerla siquiera... Pero había una razón concreta por lo que lo sabía, y sino se lo decía mis palabras quedarían sin fuerza. - Y lo sé porque... - La fuerza que tenia en el abrazo se debilitó y mi cabeza iba cada vez más abajo a pesar de la lluvia - Porque yo también he pasado por eso... Yo también fui secuestrada una vez. Por eso quiero ayudaros también, porque no quiero que nadie más sufra lo que yo. - Suponía un esfuerzo bastante grande, reducido gracias a la lluvia, pero era una parte muy importante y personal de mi y que lo compartía ahora con un compañero.

Estando en forma humana volvió con el uniforme de gimnasia que tenía de repuesto, se notaba que se había lavado pero aún le quedaban restos de barro por cabello orejas y cola ya que se había dado prisa y muchos entenderían el por qué. Se cobijó rápido bajo el techo que había creado Sora a tiempo para ver como le daban una paliza al grupo C y en un cuarto de hora otra paliza igual al grupo D, no tenía realmente la mirada puesta con atención a la pelea si no que parecía más perdido en sus pensamientos, tanto que ni vio a Eby sonreír hacia el. Lo único que le sacó de su pensar fue la voz de Aizawa anunciando el fin de clase para que fueran a cambiarse y luego al resto de clase cosa que acató sin decir una sola palabra a nadie, volviendo al vestuario y vistiéndose sin más para ir al aula, pronto sería la hora del almuerzo también... " No la puedo mirar a la cara... ¿Por qué de todos tenía que transformarse en el?..." Los colores se le subieron a las mejillas mientras pensaba en como se conocieron ambos, tan deplorable... De cualquier modo no podía saltarse las clases así que tendría que pasar el mal trago igual, habría que hacer un esfuerzo.

Sus palabras cortan su alma, igual qué un cuchillo cortando mantequilla, haciéndole querer llorar, jamás pensó qué ella fue secuestrada, la abrazó, a pesar de su enorme cuerpo metálico, tuvo cuidado en cada movimiento, no podia dejarla de lado en esta misión.

-Contaré contigo de aquí en adelante, y tendrás mi apoyo siempre, salvaremos a mi hermana, y nadie más será secuestrado-

Su conciencia ahpra estaba centrada, ahora solo tenia qué entrenar, y fortalecerse.

Sus palabras me llenaron gratamente, había notado algo de sus palabras que esperaba que fuera bueno. Asentí aún abrazada a el - Si, nadie más. - Sonreí al apartarme un poco de el intentando mirarle a la cara, aunque la altura daba una pequeña diferencia de a quien le sería más facil. - Siento haberme puesto un poco sentimental, pero no he podido evitarlo. - Negué con la cabeza siendo que intentaba de decirme a mi misma que bastaba de lamentarse - Bueno. ¿Vamos con los demás?

-Si, vamos-

Dijo finalmente Takeshi, meditando aun cómo deberia continuar su proceso de auto superación, mientas caminqba junto a Eby, evalúa sus opciones para ser mas fuerte, pero aún así, no obtiene una respuesta.

El resto de prácticas de combate resultaron no ir tan bien como las primeras. Aquel robot de combate había contrarrestado a los estudiantes de una forma que a Takumi le pareció, incluso, injusta. Su nivel estaba demasiado por encima, no se había contenido lo más mínimo. Quizá porque era un robot…

Aún taciturno, Takumi se retiró del campo cuando el profesor Aizawa les dio permiso. Se dirigió junto a los demás chicos a los vestuarios, donde se quitó la ropa de deporte y se puso de nuevo el uniforme de la UA.

Con las manos en los bolsillos y la cabeza gacha, Takumi se dirigió al aula donde debían tener la próxima clase. No dejaba de darle vueltas a lo que tenía que hacer después de clase. Aún estaba algo inseguro.

-Vamos, ¡salgan o quedarán cubiertos de arena además de empapados! Ánimo todos, tenemos que caer unas cuantas veces aquí con los profesores para no caer más adelante con villanos, ¿no?

Sora esperó hasta que el último de sus compañeros saliera para deshacer su refugio temporal, con aire un tanto agotado. No le parecía que los profesores hubieran sido precisamente suaves, pero tampoco se dejaron ganar. Después de todo, un profesional probablemente podría patearlos con facilidad a todos juntos y en equipo, y bueno...el último había hecho algo similar con los últimos dos equipos.

Saber moderarse es una cualidad bastante importante, pensó mientras se retiraba también.

-Ufff...demasiadas obras por ahora. -se estiró en sitio y sacudió un poco mas mangas mojada de forma inútil- Necesito una ducha caliente. Hmm, hmmm, hmmm ♪

-¡GRACIAS AL CIELO QUE NO NOS ENFRENTAMOS A ESA COSA! -no es que Aizawa fuese un rival fácil, pero la manera tan fulminante en la que el robot acabó con ambos equipos... No hubiera podido concentrarme contra la maquina; además, de haberlo podido hacer, seguramente tendría una manera de repeler mi poder tal como hizo con el resto...

Después de las últimas palabras de Aizawa, suspiré aliviada y observe como el resto empezaba a retirarse. Yo procedería a hacer lo mismo: después de todo, necesitaba cambiarme el uniforme mojado; menos mal que la U.A. se encargaba de la limpieza de los trajes, o los padres de muchos arrancarían cabezas a sus hijos al verlos llegar luego de un entrenamiento.