Partida Rol por web

-Lo de las tres sombras- le dijo a Benen- según tengo entendido ya habían sido vistas mucho antes de que me resucitaran, así que yo miraría por otro lado puesto que eran solo dos antes de que me resucitaran hace dos días. Sin embargo, en la casa de muñecas habían dejado de ser secuestrada la gente cuando murió Nathaniel pero han retornado ahora... me negarás que ahí sí hay algo que huele a demasiada coincidencia. Aunque también digo que no por eso debamos dejar de buscar a los asesinos... de ellos sí sabemos directamente que sus intenciones son malignas.

Claro que seguía convencida de que esa extraña casa parecía una amenaza. Una persona al día eran atraídas a allí. Dos esta última noche... a Amanda no le terminaba de agradar.

-Por otro lado, ¿qué significa que Seung esté muerto? ¿Que hemos atrapado a sus secuaces o algo más? No creo que tengamos tanta suerte pero creo que significa algo que nuestro odioso anfitrión yazca en el suelo.

Tras la respuesta de Benén, Keelin se mantuvo en silencio, escuchando las opiniones de varios y cómo el hombre trataba de defenderse. Finalmente se frotó la frente y miró a Noor en primer lugar, que se había dirigido a ella y al que había dejado con la palabra en la boca por prestar atención a la discusión. - No te preocupes. - Dijo, aceptando sus disculpas con una pequeña inclinación de cabeza. - Entiendo que igual que yo puedo desconfiar de otros, también otros podrían llegar a desconfiar de mí. Sería hipócrita que no lo entendiese cuando les he dicho a todos en la casita de madera que no confíen en nadie. Aunque a mí siempre me ha traído Alec de vuelta, no esa energía oscura, ni de cualquier otro color. Creo que no nos entendimos con anterioridad, pero que ambos tenemos el mismo objetivo aquí dentro.

Se centró después en Benén y se mordió el labio inferior, mostrándose incómoda con toda la situación que se había provocado en un momento alrededor del hombre. - Ben, sabes que me pareces un buen tío. Te lo dije incluso cuando no confiaba en ti por estar ligado a Sara... Y que siempre te he dicho las cosas como las pienso. Pero joder, ellas tienen razón. Podrías llegar a encerrarnos a todos en esa casita muy fácilmente. Y no sé hasta qué punto eso podría ser peligroso o no, pero desde luego da bastante miedo. Quiero pensar que de verdad has cometido un error y no que ha sido tras echar cuentas premeditadamente, pero no sabemos qué podría pasar si todos menos tú terminamos ahí. ¿Tú lo sabes acaso?

La joven suspiró, haciendo un gesto con las manos. - Sabes perfectamente de quiénes sospecho aquí. Tú no estabas en mi lista ahora que habías vuelto sin Sara. ¿Pero cómo podemos saber que no vas a meter a nadie más allí? Sólo podemos tener tu palabra y ni siquiera sabemos por qué o para qué sirve ese lugar, si es que sirve para algo. 

Keelin se acercó a los sillones, manteniéndose apartada del humo del cigarro, y se dejó caer en uno de ellos antes de negar con la cabeza, en un gesto de frustración. - Yo no sé qué hacer, la verdad. Me gustaría poder confiar en ti, pero también me fié de Michelle al principio y resultó que entonces estaba con ellos. Desde que visité la casita de madera por primera vez me prometí no fiarme ciegamente de nadie. Necesito pensar en todo esto.

Sin decir más se quedó callada, a la espera de que alguien pudiera responder a la pregunta de Amanda sobre Seung. Ella también se preguntaba qué podía significar algo así, si es que significaba algo.

Las discusiones parecían acalorarse cada vez más y la atención de todos se centraba en las respuestas de Benén, aunque una entre todos comenzaba a sentirse mal.

Esther comenzó con una pequeña molestia en su garganta y con dificultades para respirar, aunque sus síntomas fueron empeorando. Perdía el aliento y luchaba desesperada por respirar, mientras perdía el equilibrio y caía de rodillas al suelo.

Comenzó a escupir sangre, mientras sus ojos se teñían de color rojo.

Alec se acercó preocupado pero la mujer parecía empeorar, su piel estaba helada y ella trataba de buscarlo con la mirada pero no podía enfocarlo bien. Su respiración se espaciaba de a poco y así, su cuerpo fue perdiendo vida. Esther muere sujetada por Alec, quien la llama a gritos buscando que reaccione pero es demasiado tarde. Ella había muerto en frente de todos.

A Alec le costaba respirar. Esther no contestaba a sus llamadas de súplica. No se movía. Estaba fría. Tenía en sus brazos el cuerpo sin vida de Esther... Otra vez. Intentó coger aire, pero sentía que no podía. Algo en su pecho le oprimía. En sus ojos se fue formando un sentimiento de desolación que aumentaba por la fata de aire.

Al final pudo respirar, haciendo un ruido que acabó por convertirse en sollozo. Cayó sobre el cuerpo de la mujer rubia y las lágrimas inundaron sus ojos. No... No puede ser... Porqué...?

Los sollozos del joven inundaron la estancia, llenos de pena y desesperación por la pérdida de Esther. Quien ha sido...? Porqué la habéis matado...? No se merecía algo así.

En ningún momento se separó Alec de Esther. Se agarró al cadáver sin vida de ella, como si fuera le fuera la vida en ella y allí se quedó. Llorando.

Mire con pena el cuerpo inerte de Esther,di un gran suspiro y tras sopesar mis palabras exclame -Amanda aclara ya a lo que se refiere Keelin con lo de Medios,y hazlo por aqui,ya es hora de que nos enteremos todos de que va esto-

... No estaba lejos la caida del sol cuando la americana perdia su vida ante todos. Benén se levanta, sacude su chaqueta, apaga su cigarro contra el suelo y mira hacia el cuerpo de la mujer rubia, apretando la mandibula señala con su tembloroso indice el cadaver de esta, y dejando notar la garra que disfrazaba su nerviosa tranquilidad, suelta - Te dije... que no ibas a marearme con mis propias palabras... loba... - acto seguido mira hacia la modelo peliroja una vez mas, la unica que parecia escuchar minimamente lo que Benén decia ...entendere que puedo o directamente sere el objetivo publico, pero pese a quien le pese he cumplido mi parte del trato con creces, el resto sera cosa vuestra... - y ya hablando para todos, continua - Y no, pase lo que pase... no estais condicionados por la casita, el unico peligro seria acabar la obra de Nathaniel al completo. A todo mas, pude/puedo escucharos - Confiesa, escupiendo todo sin que la petarda americana le buscara las cosquillas. Y añade algo mas... - Decidme una cosa, de verdad no estais contentos de que haya descubierto, y de paso... destapado todo esto? -
Al menos sus dotes de detective si habian servido para un bien comun, dijeran lo que dijeran.

Dirige su mirada hacia Alec por ultimo, se acerca y se pone de cuclillas para dedicarle unas palabras sinceras - chico, podras dormir con Keelin o Andy, con Noor incluso... ellos si te protegeran, pero pienses lo que pienses, digan lo que te digan, no traigas a Esther de vuelta, o firmaras tarde o temprano tu propia sentencia de muerte - le dice.

Se incorpora y se cruza de brazos, faltaba poco, siempre faltaba poco para algo...

Keelin ya había abierto la boca en la casa de muñecas, y la niña había aprovechado para que confesara allí, delante de todos. Amanda supuso que ya era hora, aunque no le gustaba que los asesinos supieran lo que podía hacer por las noches.

-Supongo que tengo que decirlo ya- dijo mirando a todos, aunque sus ojos se postraron finalmente en Keelin y Andy, para darse fuerza. Ellos ya sabían lo que podía hacer- como a la mayoría, la primera noche... la muñeca de mi habitación me dio unas píldoras. Con una podía asesinar a alguien que yo creyera era un asesino y con la otra, resucitar a alguien. Usé la primera pastilla para matar a Benén porque desconfiaba de él- miró esta vez al mencionado- y francamente, no me hubiera importado que siguiera muerto.

Hizo una pausa antes de continuar.

-También tenía otra pastilla que podía simular una muerte por un día, la que usé con Alec. Andy  me dijo que no se fiaba del chaval y yo le dije que con esa pastilla podía llevarle a la casa de madera para que confesara si era un asesino o cual era su poder. Fue entonces cuando nos enteramos de que era el que resucitaba gente todos los días. Finalmente hace unos días mi poder volvió a ser recargado, no sé si por alguien o algo, que me devolvió otra pastilla de las que podían matar. Si alguien puede volver a recargar mi poder sería interesante que lo hiciera, pero vamos a lo que vamos. Esta segunda pastilla de muerte la usé contra Efraín. Su silencio la mayoría del tiempo y el no saber qué hacía por las noches me hizo dudar de él.

Amanda suspiró aliviada. Al fin lo había contado todo. Solo esperaba que los asesinos no tomaran represalias contra ella.

Todo había sucedido muy rápido. Keelin, sentada en el sofá, había alzado la mirada a tiempo para ver a Esther caer al suelo entre sonidos de ahogamiento y había abierto los ojos, sorprendida por ver algo así en pleno día y a la vista de todos. 

La joven se levantó del sillón y dio un par de pasos titubeantes hacia Alec, sin saber exactamente qué podría decirle. Cuando Alicia habló, Keelin la miró con rencor. Pero las palabras de Benén llamaron por completo su atención antes de que pudiera decirle nada a la niña. Escuchó al hombre sorprendida y a Amanda después y finalmente su mirada se posó en Benén. - Has sido tú. - Dijo sorprendida, remarcando una evidencia y comprendiendo el guiño que le había dedicado. - La verdad, no puedo decir que lo sienta precisamente. Llevo sospechando de ella desde el segundo día aquí. Dime una cosa, Ben, ¿qué pasaría si la obra de Nathaniel se completase? ¿Qué nos pasaría a los que estamos dentro? - La joven suspiró y volvió a mirar el cadáver de Esther durante un instante. Se le encogía el corazón al ver a Alec así pero volvió a dirigirse a Benén. - Aunque caigas en estas votaciones, para mí con esto has demostrado mucho. Quizá puedas volver después, cuando se te haya pasado el efecto del robo...

Después se dirigió a Amanda tras su confesión. Había confirmado algunas cosas que ella ya pensaba y había aventurado en su última visita a la casa de madera. Echó una breve mirada a Andy antes de hablar a la mujer. - Ya te lo he dicho allí, pero lo siento, no pensé que saliera de la casita. Tan sólo esperaba un sí o un no sin tener que exponerte más... Pero escucha, Amanda, ¿qué es eso de recargar? ¿Alguien podría recargar el poder de Alec y hacer que volvieran dos personas en lugar de una? - Preguntó, echando una nueva mirada al muchacho y dirigiéndose hacia él para agacharse a su lado y tocar suavemente su hombro. - Porque me parece que él sería una estupenda opción si eso es posible.

- Alec... - Susurró, sin estar segura de cuál sería la reacción del chico. - Sé que la apreciabas, pero Ben tiene razón. Y por supuesto que puedes dormir conmigo. Ya sabes cuál es mi prioridad aquí.

No sabía si fiarse del todo de Ben, aunque según Keelin podía hacerlo, aún así, el riesgo de que la casita los poseyera a todos era aún grande.

-Lo de la recarga- le dijo a Keelin- no sé como funciona, aunque no potenció más mis poderes. Solo me devolvió la pastilla que había usado, pero no me dio ninguna extra. Creo que si es alguien el que tiene ese poder- aún no estaba segura del todo- solo puede devolver los poderes gastados... pero no tengo ni idea de qué pasaría si se recargan los poderes de Alec u otra persona... suponiendo que es alguien quien lo hace y no fue cosa de mi muñeca para darme otra oportunidad de atacar a quien creyera culpable.

A raíz de esas palabras miró a todos.

-¿Alguien ha recuperado algún poder gastado o ha sido potenciado de alguna manera?- preguntando era la mejor manera de averiguar si solo le había pasado a ella o realmente había alguien que ayudaba en los poderes de los demás.

Esther había muerto. Abrió los ojos un tanto conmocionado: Todo había pasado demasiado deprisa, y el hecho de que Benen lo dijese en alto le confundió aún mas. Pero decidió no preguntar y confiar por una vez en él.

Tras ello intentó calmarse y escuchar a los demás.

-Si mi otro poder se recargase, podría evitar el uso de otro con poderes en una ocasión, pero no lo ha hecho.. Y en su momento lo gasté con Ian, intentando evitar mas muertes. 

Comentó, bastante calmado ahora. Miró a Benen una vez mas

-Está bien. Creo que has respondido de manera mas que correcta... Pero eso nos deja con otro dilema entre manos. Si tu eres inocente.. ¿Quién de nosotros es culpable? ¿A quién votar?

Un misterio resuelto, decidió Noor cuando Amanda habló al fin.

La muerte de Esther le dejó confuso. Era la primera vez que alguien moría durante el día sin tener en cuenta las votaciones de los vivos y de los muertos. La verdad que lamentó ver a la americana volver a morir y revivir el sufrimiento de Alec. Se acercó al chico, que era el estaba mas desprotegido, ya que Alicia había demostrado que podía valerse por sí sola.

Señor Tinelli, no lo entiendo, dedicó al italiano. ¿Por qué la consideras una amenaza? ¿Sabes algo más? Y no solo eso, ¿quién la había matado? ¿Habría sido el mismo Ben?

Finalmente se quedó mirando a Michelle. Estaba claro que la joven no quería contestar y siempre que Noor le preguntaba, ésta conseguía evadir las preguntas.

Alec seguía llorando cuando Andy le habló. Levantó con esfuerzo su mirada de la mujer rubia y fijó sus ojos rojos de tanto llorar en Benen. Sus palabras sembraron la duda en el rostro del chico, al darse cuenta de que tanto Benen como los demás parecían no entristecerse por la muerte de Esther. Miró a la mujer rubia y asintió, secándose las lágrimas sin mucho éxito y haciendo lo imposible por intentar parar de llorar.

-Es... Está bien. Dijo, como pudo. Pero por favor, que... Que alguien me ayude a llevarla de vuelta a su cuarto.

El joven agradecía no sentirse solo en aquellos momentos. Ben, Keelin, Noor... Todos ellos habían demostrado estar dispuestos a ayudarle en aquel momento. Tal vez no estuviera tan solo como se sentía sin Esther. Pero las palabras de Noor hicieron que Alec levantase su mirada haciia Ben, mirándolo con ojos de súplica. Necesito que me cuentes lo que sabéis sobre ella... Yo... Yo ya no sé lo que pensar.

Volió la mirada al suelo y contuvo las lágrimas.

- Se ve que todos los que habéis estirado la pata habéis formado una chupipandi interesante que se cuenta las cosas y se las suelta a los demás cuando creen oportuno- dijo, evidentemente molesta- Ya estoy un poquito harta de tanto secretismo. Aquí el señor "meto a la gente en la suite de dos en dos para que se mueran juntos" me ha puesto en el punto de mira, poniendo en peligro mi vida frente a los asesinos, porque supuestamente estaba con una gente que me obligaba a hacer cosas y que no tenía agallas para enseñar su rostro, y soy yo la que no merece confianza. Tengo que hablar de todo lo que vi, de nosecuantas sombras, repetir mis respuestas veinte veces, pero nadie puede contarme nada, y al final voy a acabar votando a ciegas y cargando con la muerte de alguien inocente-miró con rabia entonces a Noor-  ¡Ya he dicho todo lo que sé! No te voy a lamer las puñeteras botas por "haberme salvado", maldita sea. ¿Qué demonios quieres de mí? ¿Que te recite el Corán al revés? Pues no me lo sé. Así que déjame en paz, porque no tengo nada más que decirte- le señaló con el dedo- Y si haces algo bueno y entonces no dejas de esperar que te lo agradezcan y que te den algo a cambio entonces no eres tan buena persona, mister buen samaritano. ¡Deja de ponerme en peligro, maldita sea!

Entonces miró a Keelin- Y te agradecería que dejaras de nombrarme de esa manera. Yo ya no estoy en ese asunto, ni quise estar nunca. Ya empieza a cansarme que me lo recuerdes cuando se supone que estábamos de buen rollo. -dijo, afligida. 

Vaya, eso sí que no me lo esperaba, murmuró tras el exabrupto de Michelle.

Hice lo que creí oportuno, con la esperanza de ayudarte y además que tú nos ayudaras. Incluso hubiera preferido que no se supiera que estuve involucrado en tu purificación, pero tuve que revelarlo dado que tú decidiste no darte por aludida. ¿Tres sombras? Si no sabemos cuantas eran al principio o cuantas han ido siendo cada día, ¿crees que nos sirve de algo? Negó con tristeza. ¿Se habría equivocado eligiendo a aquella chica? Pero no te preocupes, no volveré a pedirte nada. Pero si salimos de aquí, no será gracias a ti.

-Claro que no quise darme por aludida. ¿Te crees que era seguro para mí que ellos supieran que ya no iban a tenerme de su parte? ¡No sé cómo no me han matado ya!-dijo, enfadada- ¿Que no será gracias a mí? ¡Por tu culpa ha muerto gente inocente, porque les has vinculado de una manera extraña a quien luego hemos votado! ¿O me lo vas a negar? Estoy harta de que le des lecciones a todo el mundo y no asumas esa parte de tu culpa. Estoy harta de que me mires como si te debiera algo. Yo no te pedí nada, lo hiciste porque quisiste. 

- ¿Quieres saber cuántas eran? Fueron 8 al principio, hasta el día en que murió Keelin. Luego fueron 4, aunque no sé si fue porque murió gente, o porque dejé de poder proteger a quienes no estaban asesinando, sino que tenían otras habilidades "malas". Finalmente eran 3. No sé nada más. No veía quiénes eran. ¿Contento? ¿Tan difícil era volverme a preguntar? ¿Es que no te has planteado que a lo mejor estoy tan jodidamente histérica con lo que está pasando que se me había olvidado contestarte? 

Keelin escuchó a Andy y lo miró, chasqueando los dedos. - ¡Eso es! ¡Con eso encaja todo! - Sin embargo, la discusión entre Noor y Michelle llamó su atención. En un primer momento se sintió molesta por las palabras de Michelle hacia ella. Al fin y al cabo había sido ella quien la había engañado. Sintió ganas de responder, pero recordó que cada vez que discutía con alguien terminaba muerta y cerró la boca escuchando a los dos. 

Sin embargo, había algo que había dicho la joven que le recordó cuando llegó a la casita de madera y nadie le contaba nada y todos parecían hablar a su alrededor como si supieran demasiadas cosas. Con las últimas palabras de Michelle se levantó, apretando el hombro de Alec para animarlo y se acercó a ella para rodearla con sus brazos. - Ya está, Michelle, tranquila. - Dijo cerca de su oído. - No volveré a mencionarte en esos términos, discúlpame. 

Después la miró a los ojos y le colocó un mechón de pelo detrás de la oreja. - Entiendo cómo te sientes, a mí me pasó lo mismo cuando fui a la casita de madera la primera vez. Y ahora al volver otra vez no quería hablar demasiado, porque joder, cada vez que abro la boca me matan por la noche... Pero puedes preguntarme lo que quieras y te responderé lo mejor que pueda. Si hubiera menos gente en la casita rosa te lo contaría todo allí, pero visto lo visto, lo mismo da un sitio que otro. - Añadió, suspirando quedamente. - Ocho... Son una barbaridad. No creí que fueran tantos. - Dijo para sí misma, refiriéndose a las palabras de la joven rubia.

Finalmente echó un vistazo a Noor. - Creo que no deberías presionarla tanto. Es cierto que está en una posición complicada y al fin y al cabo aquí casi nadie lo ha contado todo a las claras. Ni siquiera tú... Por cierto, ¿la Suite está ocupada de nuevo? 

Se volvió hacia Andy entonces, sin soltar todavía a Michelle. - Con eso que has dicho sobre Ian y lo que ha confesado Amanda que ha confirmado algunas cosas que pensaba, creo que comprendo bastante el patrón de las muertes de cada noche salvando algunos detalles. Ya lo conté en la casita de madera antes de que Alec me trajese de vuelta, pero con esto detalles se me han aclarado algunas cosas. ¿Crees que debería explicarlo aquí? Y por cierto, ¿qué está pasando allí? ¿Qué dicen los muertos?

-Sara está defendiendo a Benen argumentando que ella se quitó la vida cuando mataron a Ben y ahora está vivo, y ella no... No se lo que quería decir con eso, imagino que son sentimientos encontrados. Mientras tanto, Wolfgang ha increpado a Esther. Esther se ha defendido diciendo que ahora si cree que él es inocente... Loren sigue hablando de que su plan es que si la traen usará su poder para matar a alguien sin que pueda escapar, y también apoya la teoría de que si Benen tiene acceso a ese lugar, puede tener algo que ver con ello, y es cuanto menos, un tanto sospechoso, ya solo por tener esa capacidad.... Eso es lo que ha ocurrido hasta ahora en el otro lado.

Dejó de hablar esperando que asimilasen lo que estaba diciendo.

-Así que no ha ocurrido nada que nos de mas pistas..

Como ya pasó el día anterior con el tiempo era cada vez más difícil dar con los asesinos, estos fueran quienes fueran se habían buscado sus aliados. Aún así, Amanda intentó responder a Andy y su duda, que ella misma tenía.

-Por un lado temo lo de la casa de muñecas, así como de Ben. Pero estoy dispuesta perdonarlo si es el artífice de la muerte de Esther y siempre y cuando no sea secuestrado nadie más a esa casa rosa. Así que nos queda buscar a los asesinos... la verdad es que no lo tengo muy claro pero por descarte creo que mis principales sospechosas son Alicia y Hikari, hace días que sospecho de ellas y nada ha cambiado demasiado como para que dejen de serlo. Si Michelle está realmente curada esas dos son mis principales sospechosas.

No es que se fiara ciegamente de las cosas que decían algunos, pero esas eran las cosas que ella pensaba. Una vez expuso sus sospechas miró a Keelin.

-Si crees que lo que tienes que decir es importante para atrapar pronto a los asesinos creo que deberías decir lo que piensas- además a la joven le había picado la curiosidad sobre lo que la pelirroja podría decir. Más aún teniendo en cuenta que había utilizado las palabras de la propia Amanda para llegar a esa conclusión- pero si crees que corres un peligro innecesario diciéndolo y no aclara demasiado siempre puedes no decir nada por si acaso. Aunque me temo que después de decir lo que haces por las noches abiertamente ya estás en el punto de mira de los asesinos.

Por fortuna, contaban con el poder de resurrección de Alec, que ya había demostrado confiar en Keelin en más de una ocasión.

Miró a Keelin y asintió.

-Creo que ayudará a aclararlo todo... Estoy seguro de ello. Creo que sea como sea, serás objetivo de los asesinos, así que al menos pon las cosas sobre la mesa.

Comentó, colocándose al lado de Keelin. Después miró a Amanda y sonrió levemente. La verdad es que quería creerla... 

Keelin escuchó a Andy y Amanda y habló en primer lugar hacia él. - Creo que Sara se refiere a que sin ella aquí, Ben no tiene motivos para estar de parte de los asesinos, ya que el vínculo que los unía no estaría funcionando y por lo tanto él sería inocente como antes de enlazarse con ella. Pero el problema con Ben no es que esté de parte de los asesinos sino el tema de la casita rosa.

Después miró a Amanda y valoró sus palabras y las de Andy antes de decir nada. Finalmente asintió con la cabeza. - En realidad, no creo que me vaya a poner más en peligro por contar lo que he podido deducir. Tampoco sé si podrá ser útil o no, pero supongo que no tiene sentido no contarlo. Al fin y al cabo lo expliqué de sobra en la casita de madera y a saber quién podría estar espiando allí. Si me quieren matar, lo harán igual, ya lo han demostrado de sobra. Pero bueno, antes de empezar me gustaría dejar claro que esto sólo son mis teorías analizando las distintas muertes y lo que he oído en la casita de madera y aquí, no son certezas ni quiero que terminen usándose como arma contra nadie, como pasó con la lista de April. Como dije antes, yo pienso que el grupo de los asesinos sólo ha matado una persona cada noche y el resto ha sido gente tratando de tomarse la justicia por su mano, o vete a saber con qué intenciones.

Keelin soltó a Michelle pero estiró la mano para coger una de las de la joven rubia. - La primera noche murieron cuatro personas. Loren murió por un mordisco en el cuello, como el mío. Al ser atacada mató a April de un disparo. Los asesinos debieron matar a Reuel. Y lo que no termino de entender es el incendio de la habitación de Kenneth, pero ha sido la única muerte de ese tipo, así que quizá era alguien que tenía unas cerillas y muy mala leche. - Hizo una pausa, encogiéndose de hombros. - La segunda noche no murió nadie. Por lo que Louis dijo podría ser que Alicia se hubiera pasado a la oscuridad esa noche, quizá los asesinos emplearon la noche en eso. También podría ser que atacaran a alguien que tuviera alguna protección distinta a la que yo puedo dar y no lo haya dicho.

- La tercera noche de nuevo hubo un ataque por mordisco, el mío. Los asesinos atacaron a Wolfgang. Wolfgang al morir le pegó un tiro a Esther. Sólo quedaba en el aire la muerte de Benén, pero ahora ya Amanda ha confirmado que fue ella. Sara se suicidó por amor a Benén y Henri sencillamente se dejó morir. - Suspiró antes de seguir. - La cuarta noche es la que más me desconcertaba. A Alec lo mató Amanda. ¿Me preguntaba por qué los asesinos iban a querer matar a Ian si era uno de los suyos? Pero ahora con lo que ha dicho Andy, creo que inhabilitó a Ian y no pudieron matar a nadie. Queda en el aire quién mató a Ian y eso todavía se me escapa. 

Hizo una pausa antes de continuar. - Veamos... La siguiente noche de nuevo todo parece más claro. A Efraín lo mató Amanda, igual que a Benén. Los asesinos fueron entonces a por Amanda. Y con esto llegamos a la noche de ayer, en la que los asesinos trataron de atacar a Lisseth y no pudieron porque yo la protegí. Y a mí me mató alguien desgarrándome el cuello de nuevo. ¿La misma persona que lo hizo anteriormente y que debió hacerlo con Loren la primera noche? No lo sé, pero en todo caso lo que yo veo es gente que puede matar aparte del grupo de asesinos y que lo hace por su cuenta. No me parece que sea un bando secundario organizado.

- Así que tenemos a alguien sin identificar que mata desgarrando el cuello a la gente. Sólo se me ocurre que podría ser Hikari o Kenneth, pero tampoco es nada seguro. A dos personas con una pistola, Wolfgang y Loren. A Amanda con sus píldoras. Y el grupo de asesinos en sí, el que quería el señor Seung que elimináramos. 

Cuando terminó tomó aire despacio y miró a todos los presentes. - Puede que me equivoque en algo, pero es lo que he podido reunir. Yo hoy no sé aún si votaré a Alicia o a Benén. Sospecho de la primera, pero sobre el segundo, a pesar de que quiero creer en él, pienso que es peligroso mientras tenga el control de la casita rosa. El efecto de ese poder en él no es permanente, pero supongo que la tentación de acabar con la obra de Nathaniel debe ser muy fuerte... Y no sé si deberíamos correr ese riesgo. No lo sé. - Sacudió la cabeza. - No sé qué hacer. Confío en él después de lo que acaba de hacer en el sentido de que no creo que esté de parte de los asesinos. Pero el tema de la casita me hace dudar mucho.