Partida Rol por web

Intento seguir las apariencias para evitar llamar más la atencion de los humanos pero remato el trabajo de mis amigos.

De momento lo único que hemos recibido al llegar aqui son amenazas y acusaciones falsas pero lo que no pensais vosotros es que primero deberiais preocuparos de que le ha pasado a vuestro principe y segundo que no sabeis de lo que somos capaces de hacer, asi que os convendria menos amenazar y más usar la cabeza.

Y realizo una ampla sonrisa como gesto de desafio.

Mantengo mi semblante serio aunque por dentro esté complacido en suma de haber trabajado en equipo de forma tan improvisada y natural. Supongo que no se esperaban bajo ningún concepto que nos plantásemos de esta forma amparados en sus leyes trucadas y tramposas. De todas formas hay que darles una vía de escape, una negociación a la que agarrarse para evitar que se sientan vencidos y por lo tanto, que nos vean como enemigos. A todos les gustaría contar con el apoyo de tres inteligentes y valiosos vampiros. Carraspeo atrayendo la atención.
-No os culpo, yo hubiera tratado de hacer lo mismo, obtener la ayuda gratis e incondicional de unos vástagos es un gran movimiento, pero todo movimiento requiere una planificación más profunda y meditada que unas simples amenazas, al menos si el rival tiene un mínimo de inteligencia. ¿Queréis que encontremos a Lodin? Muy bien, es un cargo especial en el que probablemente haya implicado un gran poder detrás. Os diré mi precio y obviamente os voy a decir que es innegociable... pero claro, siempre aceptaré una mayor generosidad por vuentra parte.
Empiezo a cortar, con los cubiertos, la carne del plato, poniéndola en trozos pequeños y pensando mis próximas palabras.
-Quiero una zona de caza en propiedad exclusiva, un refugio digno o lo que es lo mismo, caro, moderno y bien situado, una nueva identidad legalizada y la propiedad de tres de las discotecas más influyentes de Chicago y un buen tanto por ciento en acciones de empresas punteras en el Dow Jones, un contacto en la policía, en un hospital, un hacer y una periodista. Obviamente aceptaré un cargo de responsabilidad en nuestra sociedad y tendréis mi apoyo en la toma de decisiones como muestra de mi gratitud. Pensad bien vuestra respuesta y tened en cuenta que este es un desembolso grande, ¿Pero cuánto valoráis la vida del príncipe?
Asiento con la cabeza manteniendo mi semblante serio mirando en dirección a Ballard y Neally.
-Y no os preocupéis lo la mascarada... Cuando acabemos de negociar nos levantaremos indignados y nos marcharemos de aquí, como habrá pasado en innumerables ocasiones.
Me llevó un trozo a la boca, aunque hago como que algo me interesa y vuelvo a poner los brazos en la mesa, con el tenedor en la mano y el trozo de carne pinchado en él.

¿Porqué no nos dejáis marchar de aquí y nosotros no dejamos caer en los oídos adecuados que habéis perdido a vuestro príncipe? Si Mordius se enterase de esto...

Los oídos adecuados ¿Decirme cuales son esos oídos adecuados? ¿Mordius? No me hagas reír, Mordius sigue vivo por que Gary es peor que la muerte, es una tortura en vida, un recuerdo de lo que pudo ser y no es. Creéis que él os va a ayudar, cuando no puede ayudarse a sí mismo. En cierto modo el vampiro con obesidad mórbida tenía razón, la influencia de Mordius era mínima, solo había que ver de que “ciudad” era príncipe.

Si no queríais romper la Mascarada no haber hecho una reunión tan cutre

Vosotros mismos estáis cavando vuestra tumba, el romper la mascarada es un argumento. ¿creéis que el justicar tomara en serio los argumentos de un par de neonatos arrogantes que han armado un numerito dentro de un restaurante?. Ciertamente el lugar de la reunión no había sido elegido al azar.  Cualquier otro hubiera sido mejor, pero un restaurante lleno de mortales coartaba cualquier acto de violencia.

Ballar se rio al oír la ristra se exigencias de Thomas. No sé qué podría hacer un montón de cenizas con tantas cosas. Creo que no has entendió la posición que tienes en esta negociación, sencillamente no tienes nada.

Neally os miro fijamente a cada uno. Ballar tiene razón, ahora no tenéis nada con que negociar y cualquier acto de “indignación publica” empeoraría vuestra situación.

Entiendo vuestra frustración, yo también estaría igual de indignado. Pero al igual que vosotros trataría de sacar provecho de la situación. Yo no os puedo prometer nada, pero os aseguro que Lodin será generoso si conseguís encontrarlo.

Me río, aguantándome las ganas de partirme de risa y cuando me he calmado continúo.
-¿Frustrado? ¿Soy yo el que está dando palos de ciego? ¿El que envía a un Sheriff con más cojones que cerebro a "inmolarse" en busca de un príncipe? No frustrados estáis vosotros, y creedme, se os nota superados por la situación. Somos vuestra mejor baza y vuestro peor enemigo. ¿Quieres saber los oídos adecuados? Perfecto.
Levanto divertido la mano derecha, abierta, a medida que voy enumerando voy bajando los dedos hasta dejar el puño cerrado.
-Mordius, un príncipe. Como todo príncipe rinde cuentas a unos jefes, en este caso los mismos que los vuestros, es lo malo de la cercanía y lo poco que le gusta a los que tienen poder compartirlo, es una pena que Mordius se sienta insultado por Lodin... ¿Verdad Neally? ¿Qué podría hacer un príncipe dolido con tal información? Quizá lo descubramos pronto. -Sonrío bajando el meñique. -Vuestra amiga y no siempre bien valorada Anabelle, una primogénita con aspiraciones guiada hacia aquello que ansía... Vaya, vaya, vaya... Con el ruido que estáis haciendo... Notáis la presión ¿Verdad? -Cae el anular. -¿Qué me decís de un rubio vigoréxico liderando una cuadrilla importante de Brujah anarquistas? Si, creo que os podéis hacer una idea, Braveheart, el retorno del rey... Seguro que habéis visto un montón de bárbaros pasando por encima a enclenques adversarios que sobre estimaban su inteligencia, posición y fuerza. -Cae el índice, dejando el corazón arriba. -Qué me decís del Sabbat, el efecto dominó hará que les llegue la información y al tener la camarilla disgregada y en guerra... -Cae el pulgar quedándose sólo el corazón arriba -... Os iréis a tomar por culo y la ciudad será Sabbat. Estoy seguro de que tenéis planes en casos de crisis pero creedme, en el momento que perdáis la ciudad vuestras cenizas tendrán un alto precio y acudirán asesinos de todas las partes del mundo para cobrar, en sangre de justicar, vuestro precio.
Bajo la mano.
-No voy a perder más el tiempo, contratados, pagad el precio que vale el príncipe u ocuparos vosotros mismos.

James se estaba animando poco a poco y el entrecejo fruncido se iba tornando en unas cejas arqueadas sobre una sonrisilla sarcástica.

Bien, insistís en que sería una putada para nosotros montar un numerito aquí. Supongo que para vosotros también. Esta es la cosa: si no hacéis caso a lo que dice aquí mi amigo Thomas, me acercaré a algún camarero y le pediré que me deje hacer una llamada. Llamaré a Mordius y le contaré todo esto, seguro que Mordius nos defiende ante cualquier justicar y ya sería la palabra de un príncipe contra los súbditos de un príncipe desaparecido. ¿Qué decís?

Después se recostó en el asiento con las manos detrás de la nuca.

La cara de Ballard comenzó a ponerse roja de ira. ¿Cómo era posible que unos simples neonatos pudieran exigirle algo a él? ¿No sabían que era capaz de hacer? La respuesta era: no. Los tres neonatos nunca habían visto a Ballard ni tampoco sabían quién era, ni el poder del que podía disponer para aniquilarles, o no. Su gran papada se movió inquieta, cogiendo aire para gritar una contestación a la altura de la ofensa. Pero el grito no salió.

La delicada mano de Emily se había posado el brazo de Ballard. La mujer del pelo negro era la única que parecía estar disfrutando de la cena había bebido el vino a pequeños sorbos y comido el filete con delicadeza, había sido la única que había probado bocado. ¿Sería un ghoul o una vampiresa que imitaba muy bien las costumbre humanas? La pregunta de la naturaleza de Emily había quedado eclipsada en un segundo plano.

¿Podríamos pedir el postre? Pregunto con clase y educación. Las charlas sobre negocios me quitan el apetito. Ballard parecía tan molesto por la intervención de Emily como por vuestra insolencia, y sus gruesos dedos se cerraban con fuerza sobre el mango del cuchillo.

La introducción de Emily, fue aprovechada hábilmente por Nellay para entrar en la conversación. No sois unos negociadores muy hábiles, empezar directamente con exigencias y sin nada que ofrecer es poco hábil y burdo. Esa técnica solo lleva a elevar el tono de la discusión y acabar en violencia. La reprimenda de Nelly consiguió que Ballard se calmara, aunque parte de la amonestación también se podía aplicar al vampiro con sobrepeso, e incluso a el mismo durante la negociación en el museo de historio donde había actuado de forma seca sin dar opciones a la negociación.

Bien, esta verborrea de justicar, amenazas, ofertas, Mordiu y….  ¿Sabbat?. Nellay pronuncio esta última palabra en un tono irónico, haciendo ver que él no se creía esta opción inverosímil.  No le interesa a nadie.

Propongo un trato que beneficie a ambas partes. Vosotros investigareis la desaparición del príncipe, a cambio él os recompensara con creces. No puedo aseguraros que Lodin os conceda todos los privilegios que pedís, incluso muchos de esos privilegios no son competencia exclusiva del príncipe, sino que corresponden a la primogenitura. Ahora sería estúpido hablar de todos los recovecos legales además de una pérdida de tiempo. ¿Aceptáis?

La opción de Nellay es totalmente correcta, incluso crees que es generosa por las circunstancia. No crees que vuestros argumentos sean lo suficientemente sólidos para seguir presionando, e incluso piensas que si sigues presionando vuestros argumentos se pueden volver en vuestra contra.

La negociación iba bien, Ballard se estaba poniendo nervioso y al final acabaría por ceder. Pero la intervención de Neally había dado la vuelta a la tortilla, había descubierto la técnica de Thomas y había dejado ver alguno de sus puntos débiles, no ibais a poder sacar mucho más de la conversación. Como mucho podrías concretar uno de los puntos del pago, Neally los había dejado muy en el aire seguramente para poder jugar después con ellos.

Uno de los puntos que podríais concretar y que Thomas no se había molestado en proponer era que el príncipe Lodin os aceptara como chiquillos legales también en sus territorios.

Aunque estas haciendo un gran papel como negociador, Neally en su última intervención había dejado ver algún punto débil en tu defensa. Aunque aún no ha utilizado estos puntos débiles para atacarte le ves capaz de ello y sería capaz de hundirte usándolos hábilmente.

Puede que en un bar de carretera hubieras ganado esta discusión, pero Neally era un buen negociador, y no era ningún motorista o político media tela, Neally era un orador nato.

James estaba ya sobrecargado por tanta discusión. Sólo pudo hacer un gesto de sobrecogimiento hacia sus compañeros mientras se encigía de hombros. Prefería no hablar ahora porque no sabía qué decir exactamente.

Suspiro, estamos en un impass y si no avanzamos no conseguiremos nada, así que voy a poner todas las cartas sobre la mesa de una vez por todas para finalizar la discusión.
-Precisamente ahí quería llegar Neally. Hasta ahora sólo habéis pedido y no habéis ofrecido nada, nosotros hemos pedido y ofrecido nuestros servicios a cambio de ello. Pero lo que me sorprende es que no hayáis desentrañado el fondo de mi petición, así que lo haré por vosotros.
Me incorporo y les miro alternativamente al uno y al otro, incluso le dedico un segundo, por fin, a la chica, mostrándole una sonrisa sincera.
-No se cómo lo veis vosotros, pero para llevar a cabo una investigación hace falta recursos, que es lo que os estáis intentando ahorrar desde un principio. Tratáis de hacer nuestro un problema que no lo es de ahí que estemos como estamos pero no es el caso, hay que mirar hacia el futuro que es lo que yo he hecho. El refugio es obvio, nos debéis dar uno a cada uno por separado, el precio de mi vida es caro, igual que la de mis compañeros, un príncipe no se pierde todos los días por eso queremos un refugio en una buena zona, y nos lo daréis porque os conviene contratarnos. Los contactos que os he pedido nos ayudarán en la investigación, os conviene proporcionárnoslos pues de ello depende una gran parte del éxito o fracaso de la misión, las discotecas y las acciones sirven para darnos el dinero necesario para equiparnos, untar morros y otros menesteres, también muy necesarios para este tipo de investigación y la posición en la jerarquía de la camarilla es un extra que os conviene darnos para tener aliados inteligentes y aptos para ayudaros a mantener el orden y asegurar la toma de decisiones. Como todos sabemos, una vez encontremos al príncipe toda gratitud será para aquellos que tomaron la iniciativa de contratarnos, no para los que se ensuciaron. Evitad ganaros enemigos, no compensa, podemos salir todos beneficiados y todos los presentes sabemos que lo que pedimos no es nada que no saqueos en cuanto, ¿dos meses de letargo? Pensarlo bien, si accedeis a esto tendréis la firme promesa de que no descansa remos hasta dar con Lodin, decid que no y no tendréis ninguna garantía de que cumplamos nuestra palabra. A día de hoy puedes enviar un féretro a la otra punta del mundo y salirte "del radar". Esta es la verdadera situación y las únicas opciones. Colaborar o tratar de imponerse... Y no tenéis tiempo de lo segundo.

Mientras mis compañeros hablan sigo el hilo de la conversación pero me pongo a divagar un rato en distintos pensamientos. El principe desaparecido, o el a querido desaparecer o lo han hecho desaparecer, si es el caso de que lo han hecho desaparecer ha tenido que ser alguien poderoso y posiblemente dentro del circulo el príncipe, porque un príncipe es un vampiro poderoso asi que la opción más viable es que fuera alguien cercano y eso quiere decir que estamos en un lío cojonudo. Una vez llegada a esta conclusión decido volver de mis pensamientos y espero a que acabe Thomas.

Luego me dirijo a Neally y Ballard:

Como mi compañero bien ha dicho esto ya no lleva a nada es fácil buscar cabezas de turco, esto solo quiere decir 2 cosas o uno de vosotros es el causante de esta situación de la desaparición del príncipe o no os interesa el hecho de que vuelva porque sino ahora mismo estarías buscando a gente competente para que lo encuentren en vez de como he dicho buscar cabezas de turco, asi que según la situación que tomeis ahora querrá decir que opción es la vuestra pero recordar que si por algún milagro aparece el príncipe no le va a gustar el grado de pasividad que demostreis si elegis usarnos de cabeza de turco.

Y  hago un pequeño gesto a James y a Thomas de mantenernos firmes.

Ballard suelta una carcajada al oír de nuevo a Thomas y Marcus. Enserio pensáis que ibais a investigar dentro de la camarilla, en la estirpe. No me hagáis reis. Acaso creéis que íbamos a permitir que unos recién llegados fueran preguntando de un lado a otro donde esta Lodin. Estaríais muertos antes de empezar. Solo hace falta veros tratando de jugar a politi….

Neally carraspea para frenar el discurso de despropósitos. Ballard tiene razón, solo os queremos para “investigación de campo”. La investigación social la estoy llevando yo en persona. Ademas nadie va a ser la cabeza de turco de nadie, todos estamos en el mismo bando.

Neally había permanecido atentón a las peticiones de Thomas y procedió a acláralas una por una. No necesitáis contactos, como ya he dicho la investigación social la voy a llevar yo en persona. El motivo es práctico, tratar de explicaros como funciona la estirpe de chicago nos llevaría días y ahora no deberíamos de perder el tiempo. La explicación era convincente, aun no comprendíais la red política de Gary y eso que la componían un puñado de vampiros, Chicago una ciudad cien veces mayor tendría una red política mucho mayor y casi inabarcable. Los contactos humanos se os proporcionaran a medida que los necesitéis.

El refugio no es problemas, puedo mantener la reserva del hotel Drake.

A día de hoy puedes enviar un féretro a la otra punta del mundo y salirte "del radar".

Al escuchar esta última frase de Thomas, Neally sonrió pero no hizo ningún comentario, su sonrisa era de satisfacción. Parecía que Neally estaba esperando ese órdago y ya había preparado las cartas para responder a él.

Emily había dejado los cubiertos sobre el plato esperando al postre. Falta el dinero de los sobornos. Pero creo que este ultimo punto lo podría zanjar hasta yo. Comenta ilusionada la mujer de pelo negro, por fin podía participar en la aburrida charla de negocios. Habéis presumido que no sois unos cualquieras, que tenéis recursos, que tenéis contactos, que… la mujer hace un gesto de continuación con la mana. Pero además sois “especiales” podríais utilizar vuestras dotes “especiales” para tratar con los porteros de discotecas y crupierde los casinos. Era una alusión velada a los poderes vampíricos como dominación o presencia. De modo que ese dinero no seria necesario, aun asi Neally os podría pagar después las facturas surgidas durante el viaje.

Neally no parecía muy contento por la intervención de Emily en la conversación. Si, los gastos de tipo representativo se pagaran al final del viaje.

Después de esta “animada” charla creo que es hora de empezar, si no tenéis nada mas que aportar creo que es hora de visitar el piso de Lodin.

Ballard me gustaría que se quedara con Emily y terminaran de disfrutar de la cena.

James se encogió de hombros. No veía que hubiera otra opción e hizo amago de levantarse. De repente se paró,mirando a sus compañeros para ver si tenían algo más que decir. Si no era así,seguiría a Neally sin rechistar demasiado.