Partida Rol por web

Cinderella Phenomenon

Capítulo 5: Decisiones

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14/08/2021, 05:35
Narradora

Fue una noche bastante complicada. Primero, el estado de Viscount era crítico, mas gracias a las rápidas acciones de Hogward y lo acertado de su diagnóstico, supo exactamente qué debía hacer. Sin embargo, eso no quitaba que fuera un momento complejo. A este lo llevaron a la sala de estar junto a la chimenea para que pudiera calentarse un poco, al menos mientras Hogward sintetizaba el antídoto. Parfait y Delora ayudaron a sacar a Jurien y a Garlan y a curarlos a ellos y a Ezio. Después de eso, empezaron a organizar la taberna, aunque Aed debía volver a la suya propia para hacer lo mismo. Elliot se fue junto a su padre y empezaron a organizar el lugar, claro que dejando la puerta abierta para que les pidieran ayuda más tarde, solo no querían dejar su taberna desprotegida por demasiado tiempo. Claire se mantuvo con Hogward ayudándole a sanar a Viscount, aunque evitando deliberadamente mirar a Alain. Todos los que estaban en condiciones, se dedicaron a organizar la taberna mientras que a los heridos se les dejó a un lado para que pudieran recuperarse adecuadamente. Karma se dedicó a hacer guardia sin quejarse por el cansancio, solo dejando que Jurien y Garlan pudieran descansar. Waltz se quedó a su lado tras verificar que Rin estaba durmiendo. Poco después, Parfait y Delora repararon la pared y Parfait volvió a fortificar las barreras de la taberna hasta verse exhausta. Fue obligada a descansar poco después, por lo cual se retiró a dormir con dificultades para caminar.

Amanecía. Ninguno había logrado dormir más de tres horas, a excepción de Rin, ya que todos habían trabajado por una jornada bastante larga. Annice estaba en la cocina preparando una especie de sopa con diversas especias que Stella podría reconocer gracias a su entrenamiento con Delora. Serviría para vigorizarlos a todos, y por eso fue primero con Hogward y Claire, quienes se quedaron en vela para monitorear al hombre que habían rescatado. Este seguía sudoroso y débil, pero al menos estaba vivo. Sería difícil su recuperación, ya que mostraba claros signos de deshidratación y malnutrición. ¿Qué le había pasado a ese hombre?

Por el momento, Parfait no bajaba. Parecía no estar en condiciones, así como los demás, por lo que Delora y Annice relevaron a Claire y a Hogward para que fueran a descansar. No quisieron presionar a nadie a levantarse, pero ¿quién podría dormir tranquilamente en esa situación? Delora fue pasando por las habitaciones para decirles que debían reunirse en la taberna, mas esta vez trató de no forzarlos, pues se veía preocupada también por el estado de todos.

Notas de juego

Aquí les doy libertad de decir lo que hicieron durante la noche y en qué momentos se reúnen en la taberna.

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14/08/2021, 05:44
Narradora

¿Cuánto tiempo habías pasado en ese lugar? ¿Cuánto había durado tu cautiverio? No podías saberlo con exactitud. Ese lugar era oscuro todo el tiempo. ¿Habías dormido? Te habías encontrado a ti misma abrazando tus piernas un par de ocasiones y tu cabeza cayendo pesadamente sobre estas, mas aquello te sorprendía y te levantabas, por lo que no era difícil pensar que no habías tenido un sueño precisamente reparador. Tus cabellos se pegaban a tu rostro, tus ropas mostraban algo de suciedad por estar en contacto constante con el suelo de la cueva y su humedad. Las arañas eran abundantes y las hormigas también. La oscuridad lo hacía todo más tétrico mientras solo las gotas de agua que caían al suelo resonaban al caer contra las rocas. Algunas de ellas te salpicaban y empezabas a sentir frío.

La falta de sueño, el hambre y la sed hacían que empezaras a sentirte débil. Tus labios estaban resecos y estabas a punto de buscar el lugar donde las gotas caían para poder beber ese agua, si no es que lo habías hecho ya. Tus piernas dolían por la postura que habías mantenido y empezabas a exaltarte por casi cualquier sonido.

La llama de una antorcha cercana a tu celda se encendió encandilándote al instante, generándote un leve temor porque ahora sí estabas enceguecida, mientras que el tobillo que tenías encadenado ardía ligeramente por la fricción entre la cadena y tu piel. ¿Sabrían ya que no estabas? ¿Sabrían ya lo que te había sucedido? ¿Cómo estaba Ezio? ¿Y Jurien y Garlan? ¿Qué había pasado con Phoisa? Tal vez eran preguntas que mientras dormitabas te asaltaban, haciéndote despertarte por tramos cortos.

El sonido de una reja metálica abriéndose sonó y unos zapatos de tacón se acercaban a ti. ¿Sería Varg? ¿O el extraño hombre de cabello verde? ¿Quién era? Sin tener idea de quién, intentaste levantarte, pero no sería tarea fácil, pues tu cuerpo no tenía la energía. Viste a un hombre con una túnica que cubría su rostro dejando una bandeja con lo que parecía una extraña y poco apetecible papilla, además de un pequeño trago de agua. Al parecer, era todo lo que iban a darte de comer y beber. Sin siquiera pararse a verificar que te acercaras a comer, se marchó dejando la bandeja justo debajo de la reja. Podrías acercarte a ella si te esforzabas en avanzar, pero la pregunta era: ¿lo harías?

Notas de juego

Puedes hablar de las impresiones de Fiorella hasta ese momento.

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18/08/2021, 04:11
Réamann Lockheart

Cuando escuchó que Fiorella había sido secuestrada, la mirada de Réamann se enserió con agresividad como nunca antes los demás lo hubiesen visto, pues al peliblanco le incordiaba no solamente lo que pasó con la ojirojiza, sino el motivo que podría haber detrás de todo y del que Ezio sabía pero no comentó por el momento, pues había otros asuntos qué atender. Por eso mismo, en cuanto se logró estabilizar a Viscount, el ex-caballero ayudó a la organización de la taberna cargando cosas, moviéndose de un lado a otro y ayudando principalmente con las cuestiones físicas.

Se le podía ver agotado y sudando, pero daba la sensación de que apenas horas antes se había contenido o que fingió todo este tiempo su maldición porque su ritmo no paraba y no se detenía a reposar; qué diferencia había entre el joven que apenas podía limpiar mesas a uno que corría, subía escaleras y llevaba a sus espaldas objetos pesados. Además, atendió a cada indicación mientras revisaba el estado de Viscount y veía como seguía Stella debido a lo que sucedió con Fiorella, su amiga. Se le podía ver preocupado por el pelinegro, dejándolo descansar mientras rememoraba con rencor a la bruja que ocasionó todo esto. Ella ya había muerto, pero las secuelas seguían ahí... incluso él, pues aunque se había liberado los meses de sufrimiento lo perseguirían por bastante tiempo, evidenciándose con que de vez en cuando se detenía y se llevaba una mano al pecho temiendo que el dolor reapareciera.

Cuando faltaban unas pocas horas para el amanecer, Réamann iba a su cuarto a cambiarse para seguir trabajando cuando fue interceptado por Stella* que le regañó para que se fuera a descansar, pues ni él se había dado cuenta de lo exhausto que se veía. Fue un minuto de diálogo en el que la pelinegra lo convenció y ambos fueron a la habitación del peliblanco. Ahí, él se acostó por petición de su novia y conversaron un poco, pues en realidad ninguno tenía sueño. Sí, se podría decir que descansaron apenas lo suficiente, pues ninguno podía estar tranquilo con todo lo sucedido y la incertidumbre del paradero de Fiorella. Unos abrazos, lágrimas, confesiones y promesas, las paredes siendo testigos de la conversación de esos dos manteniendo la confidencia que requerían a pesar de las circunstancias tan agravantes.

Delora llamó a la puerta y los dos no tardaron mucho en salir. Se les podía ver cansados por no haber dormido, pero eso no eliminaba la preocupación tangible en ambos. Aunque Réamann no ayudó a servir aquella sopa, sí preparó las mesas para que todos pudiesen comer y, cansado y hastiado, sacó el barril de hidromiel de Aed ignorando si alguno le regañaba por beber tan temprano y preparando vasos para cualquiera que quisiera.

Con su bebida en mano, se sentó cerca de Viscount para ver cómo había pasado la noche y dejó espacio por si Stella quería irse a su lado.

-A tu salud, Viscount-y sin más, dio sorbos grandes hasta que se acabó su, posible, primera ronda. Cerró los ojos por unos momentos, exhaló profundo y esperó a que todo comenzara. Los pies hormigueaban para ponerse en acción ya se ayudando en la taberna o ir a buscar a Fiorella.

Notas de juego

Perdonen el retraso, la Directora fue avisada de mi ausencia.

Les dije que no esperaran >:c

*Aprobado con el jugador

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18/08/2021, 06:56
Rin Lotong

Rin durmió bastante, pero no tanto el enganchoso Eses quien se fue saltando por si mismo hasta la palangana de agua más cercana, y tras autovaciarse de alambres, abrojos, boleadoras y alguna trampa más se zambulló tras lograr llenar un par de dedos de agua en aquel objeto. Seguramente fue el mayor esfuerzo que hizo desde que era una mochilita animada, pero le pareció necesario, la sangre de la bruja le había empapado más de lo que le gustaría, y la cerveza o algún otro licor que también le embadurnó al saltar por el suelo le hacían sentir incómodo.

Quedó dormido en remojo, y no dormían tanto por estar tranquilos, si no más bien por el efecto de poder bajar la guardia tras una tensión tan elevada, no pudiendo resistir el agotamiento físico y mental, sus pequeños cuerpos hicieron lo propio a su naturaleza infantil, caer exhaustos.

Al despertar por la mañana, Rin se asustó al no ver a su hermano, pero negó con la cabeza al verle en un agua tan sucia que le habría escondido de no ser porque el asa colgaba de un lado. Al me ya remojado la porquería parecía salir bien, le cambió el agua y añadió algo de jabón, y en una dura media hora de frotar su hermano por fin estaba "reconocible", le secó lo posible y lo tendió sobre la propia palangana para que toreará allí, acomodando lo posible el asa para que durmiera un rato más. En cuanto a ella, se aseó también, aunque daba la sensación de que la sangre no desaparecía, al final agotada dejó de limpiar lo que obviamente no estaba ahí, aunque esa sensación persistía.

Bajó a comer, quizás necesitaba reanudar su vida, pues a su ver aquella bruja estaba muerta por su culpa... Su red, la petición de que sujetara sus manos,... ¿Si hubiera vivido podría haber sido buena de nuevo? Ahora nunca lo sabría...

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18/08/2021, 10:31
Stella Brewster

Había sido una noche de lo más complicada. Faltaban explicaciones, pero no había tiempo. La reconstrucción de la taberna era prioridad, así como atender a los más heridos y a los más cansados. En el proceso, llegó a preguntar a Delora por el estado de su hermano. La alivió mucho saber que estaba bien... dentro de lo que cabía.

Como todos, ella también estaba cansada. Por momentos tuvo que detenerse a sentarse; haber usado su magia en dos ocasiones, si bien no había logrado drenarla por completo, sí que la había agotado lo suficiente como para hacerla sentir que había corrido. Y bueno, toda la situación en general. Pero no estuvo demasiado así. Viendo todo el trabajo que había, se levantaba rápidamente y volvía a ayudar en cualquier cosa, ya fuese limpiando o preparando bebidas y bocadillos simples para todos.

Fue por reflejo, pero un par de veces estuvo a punto de decirle a Réamann que no hiciera esfuerzos por su condición. Pero claro que ahora no era un problema. Verlo trabajar con tanta facilidad... era algo que la desconcertaba. Era casi como ver a un nuevo Réamann.

El secuestro de Fiorella era algo que no salía de la cabeza de Stella. Estaba demasiado preocupada por ella. ¿Para qué la querían? ¿Qué harían con ella? ¿Cómo harían para encontrarla? Stella se sentía muy frustrada. ¿Por qué aunque salían de un problema, otro más aparecía?

Las horas pasaron y el descanso comenzaba a ser necesario. Poco antes del amanecer, Stella habló con Réamann para que descansase. Si bien había recuperado su vitalidad, no debía esforzarse de más. Aún debía recuperar su condición física. Además, todos se estaban yendo a descansar aunque fuese un poco. Y aunque ella dudaba dormir, debía aprovechar descansar un poco también.

Lo que pasó tras las puertas, solo Stella y Réamann lo supieron. Lo cierto es que faltando una hora para que Delora los llamase, Stella cayó completamente dormida, exhausta.

Apenas se levantó, solo se peinó rápidamente y bajó a la cocina. Annice ya estaba mucho antes que ella, así que Stella solo se enfocó en ayudarla en lo que necesitara. Cuando todo estuviese listo, la ayudaría a servir. Tenía mucho sueño, pero no podía permitirse no ayudar.

Le sorprendió ver el barril de hidromiel que Réamann sacaba, pero rápidamente recordó por qué el peliblanco lo hacía, así que no dijo nada. Se sentó a un lado de Réamann en silencio y miró al amigo del peliblanco. En pequeños sorbos, tomó un poco, pero no demasiado. Miró a los allí presentes... y con cierto temor esperó que Delora hablase por fin. ¿Cómo saldrían de esta situación?

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19/08/2021, 01:43
Fiorella Van Hauber
Sólo para el director

Mientras se encontraba sola, sumida en la oscuridad, no podía evitar que su mente divagase en los pensamientos más sombríos. Quería mantenerse firme, pero sabía que no estaba en una situación favorecedora y el frío y la humedad calaban sus huesos, al igual que la preocupación por Ezio. No soportaba estar así, otra vez, necesitando ser rescatada. Tenía demasiado reciente el recuerdo de Dante sacrificándose por ella.

La maldición, creía que cuando se acabase se acabarían todos sus problemas y podría volver a casa pero al parecer solo había destapado aún mas preguntas sin respuesta, ahora sobre su familia. Se pasó la mano por los labios resecos de forma inconsciente dándose cuenta de que necesitaba beber algo pero antes de poder hacer nada, aquel hombre apareció de la nada para darle una bandeja con un poco de comida y bebida. Por un lado, no quería aceptar nada suyo, pero por otro sabía que los próximos días no iban a ser fáciles y no quería convertirse en una presa fácil para aquel hombre de sonrisa demente. 

Por otro lado, si se rendía, ¿No tendrían que rescatarla, no? Nadie tendría que recibir una herida por ella, ni morir por ella. Ese pensamiento cruzó su mente pero.... ¿Y que sabían los demás? Si la estaban usando de cebo, mantendrían oculto que estaba viva o muerta para atraer a los demás, y si llegaban hasta allí no habría servido de nada.

Con lágrimas en los ojos, gateó por el suelo húmedo frío hasta donde estaba la bandeja. Probó primero la papilla y se la comió a la fuerza como buenamente pudo, dejó el vaso de agua para el final para ayudar a pasar los últimos restos, refrescarse y mojarse un poco los labios. Tras eso, gateó de vuelta a una esquina, abrazándose las rodillas mientras intentaba aferrarse a un buen recuerdo, que le ayudase a alejarse de todo eso.

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19/08/2021, 02:39
Hogward Malthael

La noche había sido especialmente larga para Hogward, cuidar del moribundo fue estresante en todo sentido. Sin embargo, lo que mas lo mantenía ansioso era, por alguna razón, la pulsera que siempre llevaba en la mano izquierda. Cualquiera que lo mirara por un par de segundos podría ver que el chico no paraba de darle vistazos en todo momento, como si esperara algo o temiera perderlo de vista. Apenas podía quedarse quieto cuando vigilaba a Viscount, a quien parecía haberle perdido interés luego de haberlo sacado del peligro mortal.

Luego de algunas horas, en el momento que fueron a relevarlo, Hogward parecía haber perdido todo emoción. Sus ojos se veían vacíos, su cuerpo temblaba por momentos y su boca no paraba de moverse mientras rechinaba los dientes con fuerza a medida que se dirigía a su habitación. 

Cuando llegó a su cuarto, Hogward cerró la puerta tras de sí. No se oyó nada por unos momentos, pero, de repente, cualquiera un poco cerca de la habitación pudo escuchar al peliblanco echar un grito de frustración. Aunque fue solo por unos segundos, se pudo también escuchar un estruendo proveniente del cuarto, puede que de algunas cosas lanzadas al suelo con lo que parecía ser rabia. Sin embargo, esto no duro casi nada y así como empezó, de improviso, también acabo, volviendo al silenció que había previsto al escandalo. 

Al día siguiente, Hogawrd bajo a la taberna. El chico parecía no haber dormido nada. Su cara se veía mucho mas pálida de lo usual, tenía unas grandes sombras bajo los ojos y por alguna razón estos últimos parecían tener un tenue color rojizo. SU ropa estaba desarreglada aunque no se veía una mancha de sangre ¿se había cambiado siquiera?. Sobre todo su brazo izquierdo, la ropa se veía totalmente arrugada, aunque en su muñeca aun se encontraba la pulsera que siempre llevaba, solo que, esta vez, estaba rodeada de heridas y rasguños que mancharon tanto la baratija como la manga de la camisa que llevaba.

Cuando vio el barril de hidromiel que Reamman había sacado, no dijo ni una sola palabra. Sin embargo, lo primero que hizo fue agarrar un vaso que había cerca y llenarlo hasta el tope. Sin decir nada, el chico se llevo el vaso a los labios y de un trago se bebió el contenido por completo. Mas que unas gotas se deslizaron por la comisura de su boca, pero a Hogward no pareció importarle algo. Cuando acabo el vaso, el chico sin pausa alguna volvió a llenar el vaso por completo, sin embargo, esta vez se se fue a una mesa alejada y se derrumbo sobre una de las sillas.

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20/08/2021, 06:09
Narradora

La papilla podía decirse que sabía a arcilla, así que fue un esfuerzo difícil comerla sin vomitar. Sin embargo, el hambre era mayor, así que debías comerla sí o sí. ¿Sería más fácil abandonarse? Claro que sí, pero ¿qué pasaría si en verdad iban por ti y ni siquiera podían cargarte? Tal vez Alain podría, pero eso limitaría tu movimiento. Réamann no tendría la fuerza para hacerlo tampoco y Karma no parecía de hacer esas cosas. Sin duda alguna, debías permanecer fuerte. Si era cierto lo que decía el hombre de cabello verde, necesitaban que estuvieras viva.

El taconeo cesó, pero por algún motivo podías sentir que alguien te observaba. Cuando volviste al rincón, la sensación no se iba... hasta que dio un paso al frente. Sus cabellos verdes nuevamente se revelaron, brillando tenuemente a la luz de las antorchas. Era él, sin duda... ¿Cuál era su nombre?

- Veo que tengo el honor de verla despierta, Señorita Van Hauber - sonrió de forma viperina el hombre nuevamente. Era desagradable su expresión incluso. Su tono era disonante y te ocasionaba incomodidad el solo escucharlo.

- Ha llegado el momento de interpretar su papel en el espectáculo. ¿Qué dice si me acompaña por iniciativa propia? Si promete ser buena y comportarse, podría cambiarle su ropa por un lindo vestido. Uno digno de una princesa - se rio divertido por su sugerencia. ¿Qué era lo que tenía ese hombre en mente?

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20/08/2021, 06:38
Delora

Delora parecía preocupada, mas se limitó a esperar, aunque ese día sacó el chocolate e hizo chocolate caliente para todos. Ella siempre decía que el chocolate calmaba los nervios... así que de seguro lo que hablarían no sería un tema fácil. Se detuvo en seco al llegar con Réamann y Hogward, quienes compartían la hidromiel y negó viendo a los dos peliblancos para luego decirle a Hogward con rostro serio - Si rompiste algo, saldrá de tu paga - y puso los vasos de chocolate frente a los dos.

Ezio se acercó a decirle algo y esta asintió. Poco después, cuando vio que todos estaban listos, empezó a hablar - No tenemos tiempo que perder. Si lo que comparte Ezio es cierto, apenas y podremos comer algo antes de salir - que por cierto Annice ya se estaba encargando del desayuno para todos. Viscount, por su parte, seguía inconsciente. Se veía igual de débil, pero al menos parecía estar respirando con  más tranquilidad. ¿Qué era lo que aquel hombre había pasado? Jurien y Garlan estaban descansando también, así que Karma se estaba encargando de cubrir sus guardias.

Ezio se puso de pie un momento - Mi familia siempre custodió un lugar debajo de nuestra casa en el cual reside algo que las brujas seguidoras de la antigua reina quieren. Fue una tarea de las portadoras de los cristales para nosotros y que hemos llevado con orgullo por generaciones. Dante sabía de ello, pero Fiorella no pudo enterarse porque... - suspiró - porque no estaba con nosotros. Solo en cierta edad es posible conocer ese secreto. En los calabozos debajo de la casa yace una bóveda que protege los cristales. Si llegan a ella, se llevarán el Cristal Tenebrarum. Este no tiene portador actualmente, así que no sabemos qué alcances tendrían. Debemos detenerlo o vendrá otra guerra -.

Con eso finalizó su relato, pero después de eso... ¿Quién comería tranquilamente ahora?

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23/08/2021, 04:11
Réamann Lockheart

Cuando terminó de beber su vaso, sonrió con suavidad cómplice a Stella cuando ella se colocó a su lado, notándose aliviado de que ambos habían superado sus maldiciones y, por lo tanto, la posibilidad de tener una vida juntos era factible. Fue un pensamiento fugaz que se desvaneció debido a lo tenso del ambiente, por lo que ni siquiera inició a fantasear para mirar a Delora y tomar su vaso de chocolate asintiendo en agradecimiento. No se veía con intenciones de seguir bebiendo, tal vez fue un mero capricho para aliviar algo que él mismo sentía.

También comenzó a comer, sintiendo cómo sus energías volvían de poco a poco. Solo dio un bocado o dos cuando suspiró y miró al otro peliblanco que se veía la había pasado fatal. No se acercó ni buscó hacer contacto, pero sí Hogward llegaba a verlo notaría que no había recelo o incordia, sino...

-Gracias por salvarlo, Hogward-se levantó e hizo una reverencia en su dirección, reflejando aún mejor su pasado como caballero. No vio caso agregar más, por lo que volvió a sentarse y dar un beso a la cabeza de Stella para retomar su desayuno. 

Fue entonces que inició la conversación. Réamann comía y escuchaba con atención lo que Delora y Ezio decían, especialmente éste último. Poco a poco fue dejando los utensilios en el plato asimilando lo que el joven explicaba y de pronto dejó de tener hambre, dejó todo a un lado y soltó un suspiro pesado que le hizo revolver su estómago por la preocupación que lo invadió. Por eso Phoisa reclutaba, por eso fueron tras Ezio y controlarlo... Por eso...

-Por eso buscan a Stella, ¿verdad? - su mirada se oscureció. Puso una mano en el hombro de su novia como si con eso pudiera protegerla-. ¿Qué posibilidades tenemos? ¿Contamos con más aliados para esto? 

Sus piernas se tensaron. Parecía que de un momento a otro saldría para rescatar a Fiorella. 

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23/08/2021, 04:25
Stella Brewster

Ver a Réamann así de aliviado e incluso sonriendo un poco más la aliviaba también a ella. Acompañó a Réamann con solo un par de tragos de hidromiel y tomó el vaso de chocolate, deteniéndose a olerlo por un momento y dar un par de grandes tragos a la bebida caliente; Delora le estaba pegando el hábito. 

Por su parte, mientras se mantenía expectante, no se animó a comer. El nudo que tenía en el estómago hacía de esa tarea algo imposible en ese momento. Si comía, sentía que terminaría vomitando. Sin embargo, en medio de eso y antes de que Ezio se levantase, Réamann le agradeció a Hogward, y luego le dio un beso en la cabeza. Ese gesto la sorprendió un poco, pero también la hizo sentir calidez. Le regaló una pequeña sonrisa y se recostó por un momento en el peliblanco antes de que el hermano de Fiorella comenzase a hablar.

Al final, hasta las ganas de tomar chocolate se fueron. Sus labios solo pudieron decir una cosa:

¿Una guerra? —¿entonces para eso querían a Fiorella? Más allá de lo del cristal, le preocupaba su amiga y lo que podían hacer con ella. ¿Qué pasaría cuando esta no pudiese darles la información que querían?

Entonces, Réamann dijo aquello que le recordó a Phoisa. Se tensó un poco. ¿Por qué... la buscaban a ella también? Ella no lo comprendía. No creía tener nada importante que los malos necesitasen. ¿O sí?

Sintió la mano de Réamann sobre su hombro, pero aquella sensación rara en su estómago no desapareció. 

Fiorella estará bien, tiene que estarlo. Todos lo estaremos —la pelinegra apretó un poco la taza de chocolate con ambas manos y miró la mesa, diciendo aquello más que nada para reconfortarse a sí misma. ¿Cuándo acabaría todo aquello por fin?

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24/08/2021, 01:04
Fiorella Van Hauber
Sólo para el director

No tenía nada claro que estaba sucediendo pero algo si sabía. Cuando mas tiempo pasaba, mas aumentaba su odio hacia aquella persona. ¿Qué planes tenía? Pensaba que con el fin de la maldición se habrían acabado sus problemas pero estos no habían hecho más que aumentar. Y ahora estaba en juego la vida de Ezio. No quería que le pasase nada, no quería repetir lo que había pasado con Dante, pero... ¿Podría impedirlo?

Le observó, manteniendo una expresión seria y firme en respuesta a esa sonrisa viperina. Quiso lanzarle el plato vacío a la cara pero también pensó que sería mas fácil que la intentasen sacar de una sala con ventanas del propio lugar a hacerlo de una mazmorra oscura. - Está bien. ¿Podrías contarme también cual es mi papel esta noche, para que exactamente necesito un vestido? - Responde mientras se pone en pie, aguantándose el deseo de darle un puñetazo.

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24/08/2021, 02:09
Hogward Malthael

Hogward ni si quiera levantó la mirada cuando Delora le puso el vaso de chocolate frente a él ¿Habría escuchado lo que dijo si quiera? El peliblanco parecía muy sumido en su propio mundo como para oírla. No obstante, cuando Reamman se le acercó, la cabeza del joven se movió un poco para ver que es lo que quería.

-Tsss- bufó Hogward al escuchar las gracias de Reamman para luego apartar la cabeza. Por alguna razón escuchar sus palabras hacían que se sintiera peor. Tenía otras cosas en que pensar además de escuchar el agradecimiento de alguien que había logrado deshacerse de su maldición.

-¡Una más, solo una más!- esas palabras se arremolinaban en su mente una y otra vez mientras se mordisqueaba la uña del pulgar. No parecía que estuviera prestando atención a lo que Ezio y los demás estaban hablando. Sumido en su propios pensamientos, le daba vueltas y vueltas a lo sucedido en la pasada noche -¿Qué fue, qué es lo que fue?- se preguntaba mientras trataba de descubrir algo que para él era un misterio. -Tanto la primera como la segunda vez, hay algo en común, tiene que haber algo más que solo curarlos- Por mas que pensaba y pensaba no podía verlo. Era como si lo tuviera en la punta de la lengua pero por mas que se esforzara no podía ponerlo en palabras. Solo una cosa era segura. Tenia que sanar o curar. 

Fue en ese momento en que oyó a Stella decir:

¿Una guerra? —

Esa palabra entró en su mente como una flecha. Antes no quería salir ni involucrarse, pues temía que lo matarán pero ese miedo ya había sido sobrepasado por mucho por la ansiedad y la desesperación de anoche. Si hay una guerra, hay conflicto, si hay conflicto, hay heridos y si hay heridos, hay gente a la que puede sanar. Puede que no sepa exactamente como pero sanando era como tenía que ser. 

Una pequeña llama de motivación se prendió dentro de el. Algo que no había ardido en mucho tiempo. -No importa como, me voy a deshacer de esta maldita maldición sea como sea. Si algo sale mal solo pasaré al siguiente y al siguiente. Si, si de alguien es la culpa es de esa desgraciada bruja. Yo solo trató de ayudar de paso-

La resolución de Hogward se afianzó. Mientras hubiera heridos podría intentar. Así que tendría que ayudar esta vez....de alguna forma u otra.

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24/08/2021, 06:38
Rin Lotong

Sinceramente no estaba muy convencida de lo que hablaban, cristales, guardianes, guerra... - no podrían simplemente dárselo a su justa heredera? En el pueblo del bosque que visitamos hace un tiempo está una de sus hijas, me gustaría visitarle y llevarle unas galletas y algo de chocolate para que pueda hacerlo ella misma. Asimismo su padre tenía una maldición, puede que haya sanado.

Poco podía aportar, pero incluso si no tenía una relación con ella le gustaría darle el pésame.

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25/08/2021, 06:10
Narradora

Mientras te ponías de pie, el hombre siguió cada uno de tus movimientos, como si tuviera muy claro que no eras de fiar. La ferocidad de tu mirada parecía divertirlo tanto que se relamió los labios - Si fueras sumisa, la caza sería aburrida - y fingió ladrar para luego reír.

- Pues para verse fabulosa, por supuesto. ¿Para qué más podría servir un vestido? - se empezó a reír descontroladamente -. Sinceramente, no pensé que una noche en un calabozo podría volverla tonta, Madame - y luego extendió una mano al frente mientras un círculo mágico aparecía frente a este para luego expandirse al tamaño de tu cuerpo y atravesarte. La luz era muy molesta, así que debiste cerrar los ojos. Al abrirlos nuevamente, te encontraste con un vestido fino, suave y cómodo, además de un sombrero a juego mientras tu larga cabellera caía con delicadeza. El escote era bastante más pronunciado de lo que estabas habituada, eso sí, pero como conjunto se veía bastante bien. ¿Eras libre?

Si por un momento intentaste mover el pie encadenado con libertad, notaste que la cadena seguía allí, además que ahora tenías grilletes en tus manos y cuello. Si moviste demasiado el pie contrario, notaste que estaban encadenados ahora entre sí. Te había cambiado más que solo el atuendo. Por el rabillo del ojo, viste que había una especie de hilo invisible de color verde que iba desde las cadenas de tus manos hasta algún lugar de sus ropas. ¿Era una cadena mágica ahora?

- Madame Van Hauber, tiene usted el honor de cumplir el papel privilegiado de ser una bellísima carnada. Apuesto que ese hombre morirá al verla vestida así - se rió mientras la celda se abría para empezar a caminar y esperar que lo siguieras -. ¡Oh! Lo olvidaba. Si intenta alejarse demasiado, sufrirá una descarga eléctrica - y tocó el hilo verde mientras sonreía para indicarte el paso. ¿A dónde irían?

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25/08/2021, 06:26
Delora

Delora miró a Réamann con una expresión conflictuada para luego mirar a su estudiante y volver con el peliblanco. Asintió - El Cristal Tenebrarum no reaccionaría a los humanos, solo reacciona para las brujas - y luego miró a Stella, quien parecía murmurar más para sí -. Estará bien mientras la necesiten. Si determinan que no la necesitan, lo más seguro es que la matarán - y la mirada de la bruja se enserió mientras Ezio apretaba sus puños presa de la frustración.

 

- Ese extraño hombre se la llevó. Intenté impedirlo, pero ella no parecía preparada para luchar - mencionó con amargura.

 

La pregunta de Rin dejó a Delora confundida para luego parecer comprender algo - Te refieres al primer esposo de Phoisa y a su hija... Magnus y Rowan. Buen hombre, chica lista. Pero por más lista que sea, no es así como funciona - dijo Delora mirando a la pequeña con atención -. El portador del cristal se determina entre los parientes de sangre, y Phoisa nunca fue ni será portadora del cristal. La portadora anterior era la Reina Hildyr, motivo por el cual ella era la líder de todas las brujas y la más poderosa de ellas. Los portadores están conectados a los cristales y por eso son tan fuertes - esperaba haber sido clara con su explicación, aunque parecía un poco molesta.

- La única posible portadora del Cristal Tenebrarum aún no cumple sus dieciocho años - y miró a Stella un momento para volver con los demás -. Hasta que no lo haga, no podrá heredar su rol, además que depende de la fuerza de su espíritu el soportar la carga del cristal - siguió explicando.

Ezio fue quien respondió a la pregunta final - Hubo traidores entre las filas, así que llamar aliados en este momento no es prudente, pues desconocemos quiénes exactamente alertaron sobre todo lo que habíamos planeado. La emboscada fue brutal y muchos locales en el pueblo resultaron dañados, además de haber varios heridos. La orden de Caldira está trabajando tan fuerte como pueden, pero no ha bastado. Solo estaremos nosotros -.

- Así que tomen lo que necesiten porque debemos irnos si queremos una oportunidad de sacar a Fiorella viva de allí -.

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26/08/2021, 06:47
Réamann Lockheart

A Réamann no pareció afectarle que Hogward no reaccionara de la manera esperada ante su agradecimiento, pues cada quien llevaba su propio peso como le convenía... aunque claro, algunos se acomodaban mejor sus cargas para que los hombros no dolieran tanto y otros por no saber cómo arreglar se magullaban hasta doler. El otro peliblanco parecía entrar en el último punto, pero el ex-caballero no conocía las circunstancias de su compañero que lo orillaban a comportarse así y no quiso preguntar más, se notaba que Hogward era receloso de su vida privada y no era quién para meterse. Además, quisiera o no, había situaciones que eran apremiantes y urgentes, por lo que tuvo que hacer a un lado sus pensamientos para centrarse en lo que sería una batalla inmediata.

La idea de Rin de que esa niña fuese la nueva heredera le hizo voltear a verla y recordar a la pequeña rubia y a su padre. No había reparado en ellos desde que Phoisa había muerto y no sabía si aquella noticia les caería bien. Se planteó ir a verlos en la medida de lo posible cuando todo acabara, esperando que no estuvieran involucrados en este meollo. Entonces si el nuevo portador es por parentesco de sangre, estarían viendo a posibles candidatos temporales siempre y cuando fuesen brujas y Stella cumplía con el requerimiento y por su edad. No importaba que ella no pudiese con la carga o a lo mejor la buscaban por otro fin. 

Suspiró al escuchar que no contarían con aliados. Así que solo serían ellos de nuevo... sin un plan otra vez... Pero salvar a Fiorella era más importante, así que esperaba poder lidiar con eso sin bajas... miró a Ezio sin poder evitar recordar a Dante. Desvió su atención a Stella y le dio una palmadita suave en su cabeza para luego levantarse porque iría a su habitación por su espada.

-Tengo algunas bombas de humo, paralizantes y de sueño que me sobraron cuando fuimos por Phoisa. Si alguno también las tiene será mejor que las llevemos y tratar de armar un plan mejor estructurado-comentó mirando rápidamente a los demás. Sus ansias de ir comenzaban a reflejarse poco a poco sin intentar ocultar su inquietud-. No creo que sea prudente que vayamos todos y se queden Parfait, Annice, y Claire solas-las últimas dos nunca les habían acompañado a sus misiones, por ello no creyó que  irían a ésta-. Podrían aprovechar para atacar de nuevo, así que creo que tendremos que determinar quiénes van y quiénes se quedan, siempre y cuando estén todos de acuerdo.

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28/08/2021, 09:39
Alain Blue

No había sido una buena noche. A pesar de que, dada su nueva condición, debería haberse sentido liberado, los cambios que habían empezado a gestarse en él habían impedido que hiciera lo que hubiera hecho semanas atrás: coger la puerta e irse. Mas no podía. Todos estaban heridos, agotados y asustados en mayor o menor medida, hasta el punto de que los éxitos se diluían en la nada. Y estaba Fiorella. Su secuestro. Aquel que había logrado encogerles el estómago a todos mientras sufrían por su porvenir.

Por su parte, el amanecer lo había encontrado agotado, sentado en la cama con el rostro entre las anos pero sin poder dormir, sintiendo que tenía tantas cosas pendientes que simplemente no podía sumergirse en un estado mental de fría calma. Además, deseaba hablar con Claire pero había visto el modo en que la joven lo evitaba. ¿Podía culparla? No. Y, con todo lo que tenían encima, sentía que no debería forzarla a mantener una conversación con él, a pesar de que le preocupaba que de un momento a otro se desvaneciera sin más.

Al final, la voz de Delora lo sacó de su estado de agotamiento, logrando que arrastrara sus pies fuera de la habitación para asistir a una de aquellas reuniones que sólo portaban malas noticias. A excepción de la hidromiel del peliblanco, que parecía ser lo único bueno a lo que aferrarse, aunque fuera a modo de salvavidas, sobre todo tras escuchar las palabras de Ezio que reflejaban algo mucho más obscuro que un mero secuestro.

Se mantuvo callado mientras hablaban de cristales y guerras venideras, de herederas y de brujas y de conexiones que aunque entendía en la teoría, no en la práctica. Lo que tuvo claro era que de nuevo se lanzaban a una misión suicida sin nada que le diera a entender que aquello tenía alguna posibilidad de salir bien. Ninguna en absoluto, en realidad. Pero Fiorella...

- Perdonad si me he perdido algo, pero no comprendo cuál es el papel de Fiorella en esto. ¿Está de algún modo vuestra sangre vinculada a hechizos de protección sobre los cristales?

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28/08/2021, 15:40
Stella Brewster

Ella no entendía aún por qué la buscaría Phoisa... o alguien. Por lo mismo, no entendió la insinuación de Réamann ni las palabras y mirada de su maestra. No sabía si era por el momento o porque simplemente era muy tonta, pero no lo comprendía. Aunque tampoco tenía mucho interés en hacerlo en un momento así. ¿Cuando no necesitasen a Fiorella la matarían? Stella se tensó un poco ante ello, a pesar de que Réamann le dio palmaditas en la cabeza y esta lo miró. 

Es verdad... no les importaría hacer algo así.

La pelinegra recordó aquellas brujas que se encontró en el cementerio donde se hallaba la ortiga que tanto buscaba. Ellas no dudaron ni siquiera un instante en lastimarlos. ¿Por qué personas así dudarían con Fiorella?

Al volver a mirar a su maestra y Ezio, por fin algunas cosas le parecieron claras. Aunque no entendió qué quiso decir su maestra con esa mirada cuando hablo de la única portadora del cristal. ¿O tal vez sí? Una cosa abría más incógnitas: ¿para qué la buscaban a ella también? ¿Tal vez por ser hija de una traidora?

Sea como fuere, irían solos de nuevo. Eso no causó mayor temor en Stella. Confiaba en que traerían de nuevo a su amiga. Pero sería mentir no admitir que tenía un poco de miedo, y que envidiaba la agilidad con la que Réamann podía pensar en cosas. Sin embargo, lo último que el peliblanco dijo hizo que Stella frunciese un poco el ceño. Lo miró muy intensamente; si el peliblanco volteó a mirarla, se toparía con aquella fuerte mirada. Era más como una prueba de lo determinada que estaba de ir también.

Es verdad, ellas necesitarán que alguien se quede. La señora Parfait está muy débil, y ellas están cansadas —se notó muy preocupada al respecto—. ¿Usted también vendrá con nosotras, señora Delora?

Y Alain hizo aquella pregunta que, aunque obvia, no se le había ocurrido hasta ese momento. Miró a Ezio y a su maestra para ver quién contestaba.

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29/08/2021, 03:41
Hogward Malthael

-Es decir, ni bien salimos de una pelea a muerte nos dirigimos de cabeza a una- dijo Hogwrad desde su sitio con algo de acidez en su voz. Al menos ya no se le veía tan decaído y algún tipo de luz se podía ver en sus ojos -Bueno ¿por que no? No tenemos aliados y vamos a enfrentarnos a quienes ya derrotaron a bastante de aqui. Pero ¡eh! tenemos Reamman recién des-maldecido y sonriente ahora ¿Qué podría salir mal?- el peliblanco parecía algo alegre pero por alguna razón no lo parecía del todo -Incluso te veo confiado Reamman con lo poco que contamos y ¡aun quieres dividir nuestras fuerzas? Permíteme disentir, además de que necesitamos toda la ayuda posible por pequeña que sea, si ya han encontrado la taberna, el lugar más seguro será con todos ¿crees?- -También que mientras más gente mejor- pero eso se lo calló. 

-Aunque no discutiré si aún así se quedan. Ahora eres el as del equipo junto con Alain después de todo- Hogward solo era el que recibía los golpes de tanto enemigos como amigos -Por otro lado, ¿Por que no nos cuentas un poco mas sobre el lugar al que vamos? Puede que se nos ocurra algo si conocemos el terreno en el que nos meteremos de cabeza-