Partida Rol por web

Poco a poco los dos aventureros recobraban la conciencia, estos se encontraban de espaldas sobre un piso de cemento y roca; al levantarse doloridos, notaron que milagrosamente se encontraban ambos a salvo y bien, aunque aquel lugar colorido y repleto de vida no era, ni de lejos, el mundo en el que habían vivido toda su vida.

Otra cosa a destacar era la presencia de ¡JODIDOS ESQUELETOS POR TODOS LADOS!. Por suerte para nuestros héroes ninguno parecía prestarles atención, por el contrario, estos estaban bien distraídos en la plaza, mirando el espectáculo que ante ellos se estaba a desarrollar en el escenario. A todas luces parecía ser un concurso de talentos musical.

"Mnnghh..." vaya un sueño tan raro que había tenido... Había soñado que las sombras me guiaban a la casa de un viejo loco que tenía llaves enormes de juguete con las que jugaba a las espaditas... y que en realidad era en secreto un maestro del Kung-Fu... Entonces, su casa era una nave espacial y yo intentaba usarla para intentar encontrar a mi prometido... pero un monstruo gigante nos atacaba y...

"¡AH!" me medio reincorporé del suelo quedando sentada en él. Miré a mi alrededor, ¡esto no era White Island! Encontré a Sensei también tumbado e inconsciente cerca de mi. ¡No había sido ningún sueño! Me arrastré hasta el anciano y le sacudí, intentando despertarlo, primero agitándole y después con dos bofetadas no demasiado brutas. "¡Abuelo! ¡Abuelo despierta! ¡Mira! ¡Ha funcionado! ¡Tu nave espacial funciona! ¡No estamos en White Island, estamos, estamos...!" miré a todos lados intentando darle un nombre a este sitio, o mejor aun, leerlo de alguna pancarta enorme en algún lado. ¡Pero lo que encontré fueron esqueletos parlantes y que se movían! "¡Uaaaaaaaaaaah!" aún en el suelo me escondí detrás de Hrolleif que también estaba en el suelo. "¡Esqueletos! ¡Esqueletos por todas partes, abuelo! ......¡ME ENCANTA!"

No parecían monstruos, estaban ahi todo felices viendo un espectáculo de talentos con un chavalín cantando una música de guitarra muy divertida y alegre. Me dieron escalofríos, pero no de miedo sino de alegría. "¡Mira, abuelo, mira!" exclamé levantándome, y tirando de su mano para levantarle. "¡Tu nave espacial funciona, funciona de verdad! ¡Te dije que las Sombras me lo habían chivado! ¡Mira! ¡Estamos en otro mundo! ¡Y-y hay muchas luces iluminando la noche, es hermoso! ¡Es como un carnaval! ¡¿Será que son así de verdad, o es que están todos disfrazados?! ¡Hay color, luz, alegría por todas partes! ¡Están de fiesta, hay un escenario, con música y guitarras! ¡Vamos a ver más de cerca! ¡Vamos a ver más de cerca!" exclamé tirando del brazo del anciano acercándonos más.

El sueño era tan ligero y tan comodo que no quize despertar, quedándome allí tendido en el suelo. Hasta que una voz me empieza a molestar y yo intento alejarlo con mi manos. Que al parecer, hizo mas que molestarlo, porque una cachetada me da. Pese a no ser tan dolorosa, es lo suficiente como para que abra los ojos--¿¡Que!? ¡Alejate!- Y le agarro los brazos, mirando que en ella esta el anillo de....¿Como se llamaría?....-Espera, este anillo..- Y recuerdo la batalla con aquella criatura-¡TU!....Se me olvido como te llamas...-Y le doy un abrazo, emocionando que al menos no habia muerto....Esa....mujer....La apodare "Carol"-Calla, que haces mucho ruido.

Y alli, que soltandola que intento pararle pero aun me dolia todo mi cuerpo. Notando como caminan un monto de esquelecto, que de tanto me asustas-¡Sera que fallecimos en realidad!?- Y pongo mi mano en mi pecho, buscando sentir el palpitar de mi corazón-O-o-oye. Carol...¿Tienes la cura?...Curarme las heridas- Y empiezo a escuchar el concierto, pero del horror que sentia de haber muerto hace que no le de importancia-¿Sera el mas alla ?

El anciano al despertar me dio un abrazo de alegría. "¡Jajaja!" reí, devolviéndoselo apretando con alegría. "¡Caerulea! ¡Es Caerulea! ¡Yo también me alegro de que estés vivo!" y justo entonces va y me manda a callar justo después de soltarme.

...

............¡Grrr! "¡Cascarrabias!" le señalé, y luego me crucé de brazos inflando los mofletes. Le di tiempo para que mirara a su alrededor, mientras yo alternaba la mirada entre él y el espectáculo que podía oir, al que quería acercarme antes de que acabara. "Es Caerulea..." murmuré. ¿Que le hiciera otra vez aquel mágico hechizo Cura? "¡Pero abuelo, si las heridas te han desaparecido!" me miré las manos, los brazos, me eché un vistazo general. "¡Y las mías! ¡Así que nada de quejarse! ¡Ven, ven, abuelete, que hay una fiesta, que quiero escuchar! ¡No seas pelma!" exclamé tirando de él otra vez para acercarnos más.

La actuación había terminado finalmente, aquel joven esqueleto -y el desaliñado-, habían logrado una enorme cantidad de aplausos y vítores por parte de sus congéneres amantes de la leche, y probablemente de las quesadillas y tortillas. Sea como fuere, estos dos ya habían bajado al "Backstage" mientras que otros esqueletos distintos subían al escenario para actuar.

"¡Yuuhuuu!" aplaudí con muchos ánimos y expectación. ¡Me había encantado la actuación de ese niño esqueleto! ¡Y hasta salió un perrito! ¡Y otro esqueleto espontáneo con la ropa hecha jirones que se puso a bailar y cantar con él! "¿Lo has visto, Sensei? ¿Lo has visto?" sacudí el brazo de Astlyr.

Carol tenia razon, mis heridas había desaparecido por arte de magia. Pero aun estaba yo algo miedoso por estar rodeado de tanto esqueletos, me hacían recordar lo cerca que yo estaba hacia la muerte junto a la memorias de cadáveres en el piso, siendo devorando por gusanos-OH dios, este zona no me gusta de demasiado- Y cuando Carol termina de acercadme al concierto, que yo saco mi libreta, empezando en efecto a escribir con paso apresurado los ultimo sucesos. Evitando asi mirar al cantante, y en especial a los muertos-Si, muy bonita la cancion.-Dijo finalmente terminando y guardando mis cosa.

Entre la multitud no te costó divisar a un enorme ¿Gato Gigante con Cuernos y Alas?. Sea como fuere, ahí se encontraba, expulsando por la nariz un polvo azulado y brillante revelando unas huellas frente a sí, siguiendolas apartando a una parte de la multitud para ello. Esta visión te hizo girarte y mirar a tu alrededor.

Al parecer no solo el gato estaba buscando a alguien, otros esqueletos con aspecto de habitantes de ese mundo también se encontraban buscando a alguien, de hecho estaban preguntando a otros esqueletos acerca del paradero de cierta persona.

El público estaba distraído con la siguiente canción como siquiera para hacer el menor caso a los dos forasteros, de mientras, cuando os encontrábais moviendoos por la plaza, notasteis algo extraño, los anteriores concursantes estaban hablando detrás, en el backstage y no solo eso, pudisteis notar como el joven de la capucha roja, no era un esqueleto, sino un humano con maquillaje.

Toco el hombro de carol al notar presencia rara en el espetaculo-Oye, carol. El cantante no es esqueleto. ¿Sera como nosotros ?- Y volteo, mirando aquella cosa multi-color que parecia vomito de un unicornio, ¡Tanto colores! ¿De donde rayos salio esa cosa?-Eh,eh. Mira eso-Y le señalo al inmenso gato buscante de la multitud-Deberiamos irnos, que aqui estan buscando un no-se-que.

¡Ajá! ¡Hasta al viejales le había gustado! ¡Es que era genial! Parecía le había gustado tanto que se había puesto a escribir la letra o la melodía o algo así en su bloc de notas... ¡Qué chulada! Me giré de vuelta hacia el espectáculo y animada aguardé mientras que empezaban a preparar la siguiente actuación... Entonces, el viejales me llamó de un toque al hombro, me giré y otra vez que me llamó Carol. "¡Caerulea! ¡Ca-e-ru-le-a!" volví a protestar. "¡No soy ningún Christmas Carol!" espera, ¿que el cantante no era esqueleto? Miré hacia donde Sensei señalaba y me quedé boquiabierta. "Pudiera ser... ¿que también es un navegante del mar de los mundos?" inquirí casi más pensando en voz alta que preguntándole a Sensei. Entonces el viejo me señaló otra cosa. ¡Un gato gigante multicolor con alas! Los ojos me hicieron chiribitas. "¡Uaaaaalaaaaaa! ¡Me encaaaaaantaaaaaa!"

¿Irnos? ¿Tan pronto? ¡Pero si la fiesta acababa de empezar! ¿Quizás tenía hambre? ¡Oh, claro! ¡Seguro que quería ir a algún baño! Los ancianos tienen una vejiga muy pequeñita... "¡No, espera, aguántate las ganas de ir al baño! ¡Primero tenemos que hablar con el niño músico!" exclamé. "Si de verdad es un viajero de mundos como nosotros..." le susurré. "Quizá tenga un mapa o algo así..." ¿Y dónde habíamos dejado la nave espacial del viejales? Habíamos aparecido aquí sin más... Ni siquiera teníamos las llaves-espada, ahora que caía...

Antes siquiera de que la nueva canción hubiera llegado a su final; los gritos de espanto y terror por parte de los esqueletos se hizo patente, al parecer;  de la nada, habían aparecido una jauría de perros que estaban atacando a los esqueletos que tranquilamente habían ido a ver el espectáculo, el gentío y el descontrol eran tal con tal de huir que la música se detuvo y los participantes huyeron, al igual que una gran parte del público, incluso el gato gigante con cuernos y alas.

(Caerulea) (Hrolleif)

(Plaza)

(Escenario)

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(Niño) (Esqueleto)

Por otro lado encima del escenario otras criaturas pequeñas y voladoras habían aparecido, bailando y danzando en el aire mientras en los alrededores reinaba el cáos. Aunque para fortuna de los dos forasteros, no parecían estar realmente interesados en atacarles, sino que se centraban en atacar a los esqueletos.

//El tema de batalla (?) JAJAJAJAJAJ//

¿¡Pero qué!? ¡Las sombras estaban celosas! ¡Se pusieron a celebrar su propio espectáculo! ¡Bailando su propia melodía! "¡No podemos dejar a los pobres y adorables esqueletos a merced de los perritos, Sensei!" exclamé sacudiéndo otra vez al anciano. "¡Que se los van a merendar! ¡Les van a sacar el tuétano de los huesos! ¡NO PODEMOS ABANDONAR A LOS ESQUELETOS!" chillé, y después le lancé a los perros. ¡Literalmente! De repente vi otra vez la llave-espada en su mano sin más, ¡y en la mía! ¡Qué armas más útiles, que aparecían y desaparecían! Parecían estar llenas de secretos y usos. Pensé que si había conseguido crear un hechizo para sanar a Sensei... ...¿Quizás podría crear uno para protegerlo? Levanté en el aire la llave espada y exclamé, como pidiéndole al arma: "¡Por favor, protégele!" y me imaginé un montón de escuditos flotando en el aire protegiendo a Sensei... ¡¡Y funcionó!! Bueno, no exactamente, no había escudos pero había aire... ¡Aire protegiéndole!

Entonces eché a correr saltando por encima de los esqueletos y los perritos como si fueran obstáculos de parkour, subiéndome al escenario. Cogí el micro, y... "¡EH, VOSOTROS DOS, LOS MÚSICOS!"  señalé con la mano al esqueleto campechano y al niño disfrazado de rojo. "¡Estas criaturas son débiles a la música!" les aseguré muy, muy convencida de mi absoluta-y-peligrosamente-no-comprobada deducción: "¡Por eso no molestaron durante la actuación! ¡No podían aparecer mientras sonaba porque son débiles a la música! ¡HAY QUE CANTAR Y TOCAR PARA ECHARLAS, Y NECESITO VUESTRA AYUDA! ¡Repetid la canción! ¡Reprise! ¡NO, ESPERAD, IMPROVISEMOS OTRA VERSIÓN! ¡Me lo invento porque yo apenas la he oido una vez! ¡PERO ME HA ENCANTADO! ¡VENGA, VENGA!"

Me giré 60º para mirar directamente hacia las sombras de colorines que tenía flotando detrás y acerqué el micro y mi cara hacia ellas y...

"¡AYAYAYAYAIIIIIIIII!"

...les grité.

Totalmente esto era porque a las Sombras no les gustaba la música, era su debilidad junto a las espadas-llave estas, lo juro. Totalmente esto no era porque me hubiera gustado tanto la canción, el concierto, el lugar, los esqueletos, que quería participar de la fiesta. ¡T-TOTALMENTE! Yo no llevaba siempre unos cascos encima solo porque me daban buen look: ¡me encantaba la música! ¡Y para un poquitititito loca, YO!

-Yo no se, carol. Esos...esos....Estan ya muertos...- Mi rostro era impasible ante lo sucesos actuales, realmente no le tenia mucha importancia por esta gente. Ya que...Uh, ¿Esquelectos ? ¿Mas alla ? ¿Que le podria suceder ahora que fallecieron ? ¿Que juegen atrapa el hueso con ellos ?--¿Que le harian ? Comerle los huesos...¿O jugar con ellos ? No tiene mucho sentido preocuparse si ya estan muerto.

Y ya pensaba alejarme, cuando Carol me sujeta del brazo y me lanza con los perros. De la cual, me sabia un poquito raro que tuviera esa fuerza y no tuviera mucho musculos visibles, ¿Ahora que coño come los jovenes de hoy en dia?¡Oye que te pasa!-Y siento como un peso extra en mi mano, al bajar la mirada veo de nuevo....Esa tonta espada....y inutil...De nuevo batallar....¡Todo porque ella no quiso huir!- Y enojado, que volteandola lo utilizo para golpear a los perros.

Caerulea logra invocar un escudo protector alrededor de Hrolleif Astlyr, además de eso salta al escenario para entonar una canción o algo similar mientras un dolorido Hrolleif cae de bruces en la plaza rodeado de esos perros rabiosos que parecen ignorarle mientras siguen mordisquenado tibias, peronés y fémures de los esqueletos que dejaron sus partes atrás.

Pese a ello, el esqueleto desaliñado y el niño disfrazado no hacen caso a la petición de Caerulea de acompañarla en el escenario, en particular el esqueleto que agarra al chaval y huye con él por las callejuelas coloridas de aquella ciudad de los muertos.

Entonces fue cuando Hrolleif ataca a una de esas criaturas que estaban tan tranquilas mordisqueando un hueso... sorprendiendo a aquella criatura con su primera estocada, aunque sin hacerle especial daño; por otro lado, en el segundo golpe, el perro logra esquivar a Hrolleif.

Pese a que logro darle al hocico a la bestia perruna. Esta no parece inmutarse y en su lugar, mas bien parece ignorarme. Cosa que agradezco, porque me dio la oportunidad de darle otra serio de golpes para asi destruirle....¿Lo que sea que es ?...Para pelear con estas cosas, no tenia muy en claro que eran o porque especificamente son perros.

-¿¡Oye que rayos es esto, carol!?- Y antes que pensara filosofalmente porque estaría practicando el maltrato animal con estos perros, y si esto realmente sentia dolor cuando le daba con fuerza con mi espada. Que noto que una seria de escudo vuela alrededor mio, junto a una brisa fresca que me hacia sentir mas rapido....Y con ganas de orinar.

Aquellas campanas voladoras de color verde se agitaron en el aire esparciendo un polvo verdoso que cayó sobre el Rabid Dog más herido, haciendo que sus heridas sanaran haciendo, por tanto, que el trabajo hecho por Hrolleif fuera completamente inútil. Algo que, sin lugar a dudas, le vendrá mal, pues todos los perros comenzaron a rodearle mostrando los colmillos.

Todos los perros comenzaron a ladrar contra el anciano, no sería nada malo si no fuera porque cada ladrido se convertía en un proyectil físico que impactaba o bien contra la piel del anciano, o bien contra la llave-espada que este portaba, al final de aquel ataque de la jauría de perros, Hrolleif se encontraba herido.

Toda la tontería se me quitó de encima cuando vi cómo las criaturas no eran tan inofensivas como las primeras sombras que encontramos. Los perretes eran fieros y sus dientes afilados, y además disparaban una serie de proyectiles. Recordé entonces aquella terrible batalla contra el gigantón, y lo mal que acabamos aquella vez. Salté de vuelta hacia abajo junto a Hrolleif y los pobres esqueletos. Me puse delante del anciano y me disculpé intentando enmendar mi error: "¡Vale! ¡Vale, lo siento! ¡Mala idea, mala idea! ¡Sa-salgamos de aquí! ¡Tú primero! ¡Vete! ¡Yo les distraigo, y-y te sigo después!"

"¡Viento, protégeme!" exclamé repitiendo el mismo conjuro que la otra vez...