Partida Rol por web

La gran ciudad ya esta completa, Naghaurn vera la luz...

Pero no todo sería así, ya que el recuerdo del avatar atacando el antiguo hogar de los Tvus permaneceria por siempre, quedando tambien en su historia...

El concilio también se percató de ello, y se reunio de nuevo...
En los nuevos asentamientos, en Skraag, la roca tejia en sus entrañas caminos que solo Jheldor recorrio antes... Caminos que como una maraña de raices, buscaban su sustento...

En cada ciudadela se llevaron a cabo tareas de reparacion, para comunicarlas todas mediante tuneles, dejando caminos sin salida, y bucles infinitos como precaucion... Cada pareja del concilio guardo un plano con su estructura en su distrito, para que pudieran guiarse en caso de ser necesaria ayuda militar o transporte de informacion...
Con el paso de los años, dichos planos se extraviaron, quedando sus intrincados caminos solo en la memoria colectiva de los Tvus... Nadie sabe muy bien que fue de ellos, pero los sabios auguran que yacen ocultos en algun lugar de Albur...

Tambien, con el paso del tiempo, y una mayor organizacion, fueron tomando nota de todos los conocimientos que poseian sobre otros seres, aprendiendo de ellos y tratando de ampliarlos...
Llego un momento, en el que ya no necesitaban leer sobre alguna criatura, pues su mente llegaba a leer de ellas directamente, como si de un libro abierto se tratara...
Sus ansias de conocimiento siempre prevalecerian ante cualquier otra causa, siendo cautos antes que desconfiados, su vision seria su nuevo arma...

Fin del Turno 14, Segunda Edad

Shenkis seguia apenada por la batalla que habia ocurrido y Eria, su pequeña, habia ayudado a los atacantes a destruir la ciudad de los tvus, pero antes de que pudiera siquiera plantearse por un momento los conceptos del bien y el mal, Ghiskhaft, habia descendido a destruir un avatar, el kraken, la destruccion seguia y parecia que los dioses no querian terminar, algo tenia que hacer para poder paliar un poco todo este desorden, no queria mas guerras, no queria que los sierenidos siguieran atacando o siendo atacados, asi que inspiro profundamente, tanto que atrajo a si misma la esencia de los sirenidos, la acaricio y mecio, busco sus hilos, su textura... habia sitios por donde dar puntadas, habia cosas que se podian cambiar... esperaba hacer lo correcto... creia hacer lo correcto...

Trenzo, corto, hilo y cambio, despues solto la esencia, para que volviera a sus parametros, los sirenidos actuales, no iban a experimentar ningun cambio, pero si sus sucesores, ellos, podrian camuflarse en las aguas, estando quietos, podrian mimetizarse con el entorno, pasando desapercividos hasta de la criatura mas astuta, disparando unas toxinas, podrian cambiar su olor y confundirlo con el de una agrupacion de algas... asi, los sirenidos podrian camuflarse, fuera del agua, era inutil, asi que si atacaban, no les serviria de nada el don de la diosa de la naturaleza, pero para defenderse de posibles amenazas, estarian cubiertos.

No habrá dolencia eterna mientras podamos atacar a la misma muerte
Dicho de la Casa Oscura de los Vandrer

Comienzo del Turno 15, Segunda Edad 

Esto va mejorando. XD

Fabulario interminable, cuento chunguientaycuatro: Ideas e ideas, y una patita que se sale del guión.

La vida de una idea es algo difícil de predecir. En muchos casos muere trágicamente por descartamiento automático, sin que su contenedor se arrepienta en absoluto. En algunos es tan innegablemente genial que se contagia con la comunicación e infecta el mundo entero. O a veces, rechazada por su dueño pero lo suficientemente evolucionada para cuidar de sí misma, se aferra a, por ejemplo, un melocotón crédula, esperando pacientemente a que alguien se la coma y, consiguientemente, descubra que el mundo está regido por un grupo concreto de gnomos del pan jugadores de dumu, que no tienen ni idea de que en lugar de habas azules se están apostando el destino del cosmos.

Su nacimiento es espontáneo, pero tienen que darse ciertas circunstancias que sirvan como catalizador. El abuelo del ejemplo anterior fue una inconfesable obsesión con los gnomos de las cosas comestibles, su compañero de juegos un súbito interés por las fuerzas cósmicas ocultas, su primer profe la intuición de que jugar al dumu es algo importante, su...

-Espeeeera... ¿Me estás diciendo que soy padre? -Interrumpe una patita de la segunda fila llamada Luck, que es la única que sigue despierta. Bueno, y Sid, pero él nunca habla. La patita científica suspira, deseando acabar ya su exposición.

Bueno, incubas las ideas por ti mismo, crece dentro de ti y todo eso... más bien eres mamá... Pero no quiero más interrupciones, que Toc Toc me está utilizando como narrador de un cuento y ahora mismo estamos rompiendo la atmósfera.

-No me puedo creer que sea madre. ¡Si soy muy masculino! Por cierto, ¿en serio que eres narrador?

Sí; ¿No ves que tú necesitas guiones para hablar y yo no? ¡Shhhh! a eso no contestes, que no se debe contestar. Es una pregunta retórica. Todos los narradores lo sabemos.

Hay varias clases de ideas, según sus estrategias de supervivencia. Hay ideas en las que se confía, ideas con las que se fantasea e ideas que se utilizan.

Toc Toc, a decir verdad, es de las segundas: un mero divertimento que cuaja en las mentes no por su verosimilitud o utilidad sino por resultar extraordinariamente entretenido.

De este modo, siendo Á, los dioses y la creación en general incapaces de quitárselo de la cabeza, Toc Toc ha logrado la más inaudita inmortalidad del panteón. Se pasea por las tierras fascinado por todo lo que no puede comprender, y es una relación correspondida...

-Tengo una idea -Dice Luck- si Toc Toc te ha dado el poder de narrar, puedes hacer... -Shhhhh- ...puedes hacer lo que tú quieras... -Blablablá, no te escucho, cállate, cállate...- ...lo que tu quieras con el cuento, ¿No? -...Cállate... espera, ¿Cómo?

-Pero si quieres que me calle... -no, no, ahora no, tranquilo- Vale, pues... ¿Puedes hacer lo que quieras con el cuento, o no? -Luck se cae por un pozo... vale, parece que sí- glublushhh... ¡No hacía falta demostrarlo de esa manera!... bueno, continúo. Tal vez sea por casualidad, pero todos los cuentos escritos por Toc Toc van y suceden de verdad, ya sea en el pasado o en el futuro o cuando sea.

Aligera, venga...

-Ya voy, ya voy. Lo que quiero decir es que tienes el poder de un dios en tu pezuña -Luck sale del pozo- ¿Ves? Sabía que te gustaría -Pero se calla de una vez, hasta que yo lo diga. Que ya casi no me queda cuento, leñe, y tengo mucho que hacer.

En fin, como iba diciendo, Toc Toc iba rodando por ahí cuando se dio cuenta de lo poco que se interesaba por sus pobres patitas, a las que ponía a hacer todo el trabajo mientras él salía a pasear. Y claro, eso había que arreglarlo.

La idea que tuvo entonces Toc Toc no pertenece exactamente a ninguno de los tipos anteriormente nombrados. No era ni útil, ni creíble, ni divertida. Era una idea que, de poder hacerlo, cualquiera descartaría. Y, sin embargo, una idea tan fascinante...

El proceso mental fue más o menos el siguiente: "me gusta bailar entre manzanas resecas", "¡ay que ver!", "la felicidad es un conejo llamado "P" que no para de dar vueltas sobre sí mismo", "Las enfermedades son propensas a contagiarse", "las ideas son enfermedades". Aquella idea no encajaba. Era totalmente diferente a las demás, porque tenía algo de inquietante que el dios no comprendía.

-¿Qué estas haciendo? -pregunta atemorizada Sid; otra patita con posiblidades de perder el habla "inexplicablemente". Pero no sé qué contestar. ¿Qué demonios estoy haciendo?

No lo sé. Una cosa ha llevado a la otra... no he podido...

-¡Pues arréglalo! -Sid es muy temperamental...- Eso es mentira. Apenas me conoces. Lo que pasa es que estoy nervioso. ¡Arréglalo!

¡No sé cómo! ¿Alguna sugerencia? Porque yo también estoy asustado. Y en serio que Sid es muy temperamental, aunque se lo niegue a sí mismo.

-¡Ni siquiera me llamo Sid!

Cunde un silencio incómodo.

-No tenías por qué escribir eso. Lo único que has hecho ha sido que la situación sea todavía más incómoda.

Cunde otro silencio incómodo.

-Supongo que no hay nada que hacer, entonces. Sigue narrando la historia, porque retrasándola no vamos a conseguir nada.

Volvamos entonces a Toc Toc. El pobre tiene una idea en la cabeza, y no se la puede quitar de encima. Podría hacer mucho daño con ella...

Cierra fuertemente los ojos, se tapa las orejotas, contiene la respiración, se encoge las alas, se aplasta las patitas...

-¡Ay!

...pero no consigue dejar de pensar. ¡Es su naturaleza!

Se le ocurre que, aunque esté así mucho tiempo, no puede evitar que otros tengan esa idea por sí mismos. Se le ocurre que, tal vez, muy lejos de ahí...

El primer síntoma detectable es que se les ocurre algo que, de pensar mucho en ello, les resultaría inquietante. Luego vienen las fiebres de fuego rosa, luego los trastornos cromáticos compulsivos, luego los vómitos hilos de lana... y los que están malitos se quedan en sus camas o sucedáneos. Hay enfermos de todas las razas, y es imposible prevenir la propagación de la enfermedad, aunque normalmente es gente imaginativa y con tiempo libre quien acaba sufriéndola.

Bueno, eso, tenía que hablar de la enfermedad. Se suceden algunos otros síntomas absurdos, como una extremidad trasera masoquista o granos inflados del mejor vino de Albur, hasta que el sujeto acaba dando vueltas a la idea que lo originó todo y llegando a la conclusión inevitable, tras una serie de razonamientos: "voy a convertirme en un dzubit".

-¿Qué es un dzubit?

Si se lo preguntaras a Toc Toc, te diría que no está muy seguro todavía, y poco más podrían decirte los enfermos. Ni siquiera la patita científica tiene mucha idea, pero sabe... sabe que no puede ser nada bueno.

Aquellos Dioses que recogieron, o encontraron, las Monedas de Á esparcidas por el Mundo; y aplicaron su poder para darle a cada Raza un atisbo de su propio futuro, sintieron dentro de sí cómo la aprobación del Gran Dios se esparcía. Y supieron entonces que habían hecho bien, y que Á estaba contento con ellos.

8+2+1=11pp

TURNO 15 SEGUNDA EDAD

Durante mas de un siglo el reino de los Nayas, habia vivido en relativa paz. El tiempo transcurria y las estaciones daban paso unas a otras, manteniendo la estabilidad de los ciudades. El oscuro, mantenia su poder y aumentaba las extensiones de su ciudad oscura. Lamar y Larum crecian en riquezas y poblacion todo iba bien hasta que un dia, algo cayo en las manos curiosas de un hombre. Este ser, empezo a experimentar con un Tvu. Sus pruebas pasaron a otras criaturas y su curiosa mente o tal vez su mente demente acabo por practicar sus ritos con otros Nayas.

La guerra se desato en Lamar. Sus vivos habitantes peleaban desesperados contra padres, abuelos, hermanos... el terror se desato en las calles, miles de personas huyeron hacia Larum y cientos de ellas cayeron muertas incapaces de defenderse o de escapar. La caida de la ciudad parecia proxima. El primer reino de los Nayas estaba cercano a desaparecer. Pero entonces los Hombres de sal unidos a el ejercito de Kios, lograron acabar con todos aquellos seres a los que no se les podia llamar ni vivos ni muertos o tal vez las dos cosas juntas.

Quemaron la mayoria de los cadaveres, aunque algunos lograron escapar y muchos, demasiados se sintieron fascinados por aquella obra tan malefica que les habia devastado tan rapida y facilmente y empezaron a soñar con tener ese poder en sus manos.

La purificacion del lugar duro un tiempo, pues algunos de aquellos seres, guiados por el instinto de la supervivencia se escondieron atacando a los inocentes desde la oscuridad. Pero al fin todo termino, la ciudad estaba limpia y sus antiguos habitantes volvieron a sus hogar.

La entrada al reino renacido, conocido como ahora como Lam-laram, fue reverenciado con un marino,jefe de exploradores llamado Grandos, el Santo. Pues su impacable fuerza de voluntad llevo a los hombres a la victoria.

........

Lejos de alli desde lo alto de las montañas de La Balanza, El Oscuro observaba la lajena ciudad y el viento le traia el eco de los gritos de la victoria de aquel hombre al que se disponian de santificar y rió para si, por aquello, ya que como siempre sucedia contarian las cosas como ellos quisieran y olvidarian la verdad.

.........

Pasaron los años, la gente vivia en otra vez en paz y aunque las pesadillas no cesaron del todo los Nayas, mantenian un espiritu optimista. Pero en su interior se engendro una orden secreta, oculta cuyos planes aun no eran maduros, se llamaron asi mismos Ignotiros y reunieron dinero y embaucaron a los mas influyentes para encontrar el origen de aquel ataque, entonces al final dieron con el diario de Planser y se dedicaron a estudiar, a predicar, a convertir, pero ante todo a duplicar la historia de Planser y de como su ensayo crecio para ser la puerta a un nuevo mundo.

Bueno, una linda tirada. 10pp + 2 por tener menos de 5 del turno anterior: 12 

Cierto! Me había olvidado de esos 2pp. Bue, tenemos casi dos días para ver en que gastamos tanta abundancia XD (tengo 15 en total, porque del turno anterior sobró uno) 

 Por alguna razón, el padre de Korag había caído en una especia de letargo. Se habían adormecido las manos del gran dios de la roca, las montañas dejaban de vibrar con su energía, incluso algunos de los Sekar lo sintieron...

Pero los finos engranajes de la maquinaria celeste se movieron ante la quietud del Gran dios de la roca. Y los finos mecanismos que gobiernan hasta los mismísimos dioses, moldearon el flujo de poder que venía desde el gran Á, para que ahora fuera recibido por el dios de los Artesanos, Korag.

Korag lo sintió, se dió cuenta que ya no era parte del letargo de Kraag, se dió cuenta de que ahora era elevado su status, que ahora era un Dios Mayor, y que debía ocupar el lugar de su padre...

Con su cuerpo imbuido de nuevo poder, miró a las insondables profundidades del universo y dijo: "Oh, Gran Señor, agradezco con la más entera de las devociones que confíes en mi para tomar el lugar de mi aletargado padre. Pero te ruego con este nuevo poder que tu me das que entiendas que no quiero su corona, el me ha creado, el es mi origen, y no puedo negar mi esencia, fui creado para no codiciar ese puesto, no soy un Dios Mayor, soy un menor, y así será hasta que la mismísma roca que mi padre gobierna se disuelva."

En una noche estrellada, Jeldhor alzo la vista en busca de Él, su maestro y en su pensamiento nacio una idea y requeria la fuerza de Él para que floreciera en Albur y no solo fuera un deseo interior y aunque el Dios del misterio y la mentira no le contesto, si que le envio aquello que le pedia en silencio.

Había aguardado, a que mi Madre apareciera. Estaba parada en el medio del bosque observando en todas las direcciones. No había señales de ella. Me sentía perdida, como si la vida me abandonada lentamente.

Caminaba entre medio de los arboles verdes y frondosos, dejando la marca de mis pies sobre el pasto abajo mio. Las lagrimas se acumularon en mis ojos y se desbordaron de ellos surcando mis mejillas y dejando un rastro húmedo en ellas.

Había perdido la cuenta de lo que había caminado, estaba agotada, mi cuerpo se agarrotaba y todos mis músculos gritaban y se quejaban de dolor y por aquella caminata. Me senté contra una piedra extraña. Como si la misma latiera, como si poseyera vida... La misma que me estaba abandonando.

Sentía mi cuerpo flojo, mientras se deslizaba por la superficie rugosa de la piedra para caer a su alrededor en posición fetal. El color abandonaba mi cuerpo, el calor era sustituido por frío Sentía como las fuerzas me abandonaban al igual que mi madre. Lentamente mis ojos se cerraron. Mi cuerpo comenzaba a deshacerse, hasta fusionarse con la tierra. Convirtiéndose en pasto. Era mi adiós a la naturaleza y la compañía de Shenkis. No podía resistirlo mas. Era el momento de volver a ser una con la tierra y la vida.