Partida Rol por web

Crónicas de Á: Tomo 0 - El Amanecer -

Tercera Edad

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01/11/2010, 02:00
Director

Comienzo del Turno 27 

Notas de juego

Por favor, como siempre, revisen que no se me halla escapado nada del resumen.

Este turno termina el Miércoles a la medianoche (aprox).

El Turno 28 puede ser el último si un solo Dios lo pide en este turno.

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01/11/2010, 12:01
Yoonel, el Nacido Muerto
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 2d6(+2)
Motivo: Puntos de poder
Resultado: 8(+2)=10

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01/11/2010, 18:56
Director

Notas de juego

Ay que me da algo!! Mapa actualizado gracias al relevamiento de eventos y coordenadas realizadas por Potty... fíjense si falta algo, por favor.

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01/11/2010, 19:03
Knhoss
Sólo para el director

Bueh, vos te preocupabas por lo que iba a hacer este turno... con la cant de puntos que saqué tengo tanto para hacer que no se por donde empezar!!! XDDDD

- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: Poder
Resultados: 1, 3

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01/11/2010, 19:45
Aildor
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: Poder
Resultado: 4

Notas de juego

Poder 1 (reserva) + 2 (<5 en turno anterior) + 4 = 7

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01/11/2010, 19:47
Elocc`iso
Sólo para el director

9+3+2= 14. Buf! voy a empezar a hacer cosillas, que no quiero que me quede nada de nada de poder xD.

- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: poweeeeeeeeer!!!
Resultados: 6, 3

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02/11/2010, 13:13
Ghiskhaft

Las ruinas de Thervoru aun se alzaban imponentes, a pesar del tiempo
transcurrido desde aquel ataque, a causa de esa gigantesca ola que se
llevo su magnificencia de antaño, provocada por el Kraken, bestia temible
que desperto los sentimientos de venganza en un dios...

A las puertas de la ciudad, Tyskelia Bilryn dio el alto a los suyos...
Oph-Luluub continuo su avance, junto al resto de Gorgonas, deslizandose
entre las grietas de la roca a su interior...

Alli, Sirenidos y crustaceos antropomorfos habitaban el cenagal que
quedaba tras sus murallas, y las Gorgonas entre ellos no llamaron la
atencion...

Una vez treparon hasta la cumbre del edificio mas alto, empezaron a
cantar, atrayendo a sus pies a todo ser que por los alrededores habia...

Los Sekaar avanzaban con paso firme, hundiendo sus pies en el barro, no
obstante, su sigilo era envidiable...
Como muros con vida, cortaron con su cuerpo las calles, para evitar la
huida de los Sirenidos...

Tyskelia aguardaba el momento preciso... Avanzando por las calles, los
Tvus se aproximaban al lugar donde se estaban reuniendo esas
criaturas...

Desde una esquina, observo la situacion...

-Ahora!! Grito, y todos los Tvus se lanzaron al ataque, sorprendiendo a
Sirenidos y crustaceos por igual...
La ventaja del ataque les permitio lanzar ataques letales a sus enemigos,
pero algo le hizo detenerse, antes de degollar a una de esas criaturas...

-Estan... Huyendo??

Miro alrededor, y efectivamente, aquellas bestias rebosantes de violencia
trataban de salvar sus vidas...

El sirenido herido que estaba en sus manos gimio de dolor, lo que hizo a
la lider de los Tvus volver sus pensamientos a la batalla...

-Nos robasteis nuestro hogar y ahora huis denotando semejante
cobardia??

Despues lo solto, cayendo este pesadamente al suelo, acurrucandose,
tembloroso, contra una pared... El filo de la espada en su cuello apenas le
permitia tragar saliva...

-No... No... Nosotros no hemos robado nada...

En su mente yacia la idea de que fue un dios quien irrito a Pyaray, y que
este no hizo si no lo correcto...

-Criaturas aladas ofendieron a los mios, ofendieron a Pyaray...

Tyskelia envaino su arma, dudando, pues podia ser una estratagema...

-Nuestros mas antiguos textos relatan que se os seria otorgado un bien
valioso, la informacion, mas vosotros repudiasteis dicha ofrenda...

El resto de seres alli presentes estaban detenidos, observando la
discusion...

Al darse cuenta de ello, alzo la voz:

-Si quereis vivir, marchaos, dejad que Thervoru reluzca como antaño, si
no, mi espada dara cuenta de vuestra alma...

Al cabo de poco tiempo, tan solo quedaron Tvus y Sekaar en la ciudad,
pero los sirenidos no se alejaron, permanecieron merodeando sus
alrededores, junto con las Gorgonas, durante las labores de
recostruccion...

Criaturas de los oceanos eran continuamente apresadas, siempre decian lo
mismo...

Es mi hogar... No tengo a donde ir...

Tyskelia comprendio que habian hecho lo mismo que condenaban, habian
echado a unas criaturas inocentes de su hogar...

Fue entonces cuando en Thervoru se aunaron esfuerzos, y los Sirenidos
habitaron los hogares inundados, mientras que los Tvus hicieron florecer
de nuevo la ciudad, llegando un poco mas alto en el cielo con sus nuevos
edificios...

Solo los mortales podemos obrar milagros...

Penso...

Thervoru vuelve a brillar sobre Albur...

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02/11/2010, 21:18
Knhoss

Frío. Silencio. La muerte se siente en la piel.

Pocos quedamos en pie. Pocos de los miles que llegamos a este lugar maldito que nos ha quitado todo lo que teníamos. Pocos volveremos a casa hoy.

Mi espada está rota. Mis manos y mi cuerpo, cubiertos de la sangre de mis amigos, de mis hermanos. Lo hemos conseguido, aunque la victoria nos ha salido muy cara.

No sé cuanto tiempo hemos estado combatiendo. Mi cuerpo siente que ha sido una eternidad. Es lo malo de pelear con seres que no tienen voluntad, que carecen de emoción. Nada los detiene. Ni la sed, ni el cansancio han hecho mella en los ejércitos del dios dragón. Solo nuestra determinación y la superioridad numérica ha inclinado la batalla a nuestro favor. Pero a un coste muy alto.

Muchas vidas se perdieron hoy. Vidas de tvus, vandrer, har-ail, vurmak, sekaar, kohiri... seres nobles y valientes han dado su vida por una paz duradera en Albur. El precio ha valido la pena.

He visto la noche teñirse de rojo. He sentido un frío helado en los huesos al recordar los tiempos del velo. He vivido la desintegración del palacio de huesos. He llorado la muerte de todos aquellos que sucumbieron junto a él. Hemos acabado con el mal, pero éste casi acaba con nosotros.

Ya llega Vandrerfan portando a los supervivientes. ¡Volemos! Debemos apurarnos los que quedamos si queremos regresar.

Es tiempo de dejar la muerte atrás. Es hora de volver.

Notas de juego

Nota: De los 15 ejércitos tvus que fueron a la llanura, sólo vuelven 4

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02/11/2010, 21:28
Ghiskhaft

Los Sekaar blandian sus miembros como poderosas armas,
lanzaban gigantescos cascotes como proyectiles, rodando sobre los
esqueletos, aplastandolos...

El tiempo parecio detenerse...
Una violenta explosion sacudio la Llanura de las Almas...

Alrededor todo era oscuridad y destruccion...
Ruido, golpes, gritos... Poco a poco se apagaron...

La onda expansiva arrastro consigo a las livianas criaturas de hueso, y
pedazos de la ya maltrecha por la batalla edificacion...

Las criaturas de roca, firmes al suelo del que nacieron, soportaron el
vendaval...

Por las aberturas que quedaban entre los desperfectos, se veia el campo
de batalla, lo que instantes atras era alfombra de cadaveres, ahora era
paramo desierto y desolador... En el cielo, Vandrerfan recibia a los
supervivientes, mientras seguia su camino hacia la luz, fuera de aquel
lugar de tinieblas, por un futuro de paz en Albur...

Como flecos, lenguas de piedra alcanzaban la isla flotante, desde los cuerpos de los Sekaar, para huir de aquel lugar...

No mirarian atras, no pisarian jamas ese suelo de nuevo, pero no olvidarian nunca lo que alli sucedio, al igual que todos los que regresaban a casa...

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03/11/2010, 03:00
Luciel
Sólo para el director

Previously in The cronicles of A ....


-Oh, mi pequeño hombrercito... mi pequeño Nadir Has sembrado confusión entre los tuyos
buscas tu recompensa?

-Sí, bella y letal Silfis. Quiero lo que se me prometió
-
Todo eso y más te daré, hombrecito. 

Grandes nubes y masas ocultaron las estrellas y la luna ,El sol, a través de la gruesa cortina que cubría Albur, tiñó al mundo de violencia y temor. Los hermanos se convirtieron en enemigos. Los padres renegaron de los hijos. Los hijos mataron a los padres. 

http://www.johnmariani.com/archive/2007/070819/Pit...
Todos esperaron al amanecer.
El amanecer nunca llegó.


Mientras el velo se purificaba,una gran convulsion tenia lugar en el cielo. Poco a poco una enorme figura empezaba a parecer como una gran sonrisa empezó a emerger,un rostro una calavera y más tarde un cuerpo entero.

-Mi nombre es Luciel y vengo amigos mios a velar por vosotros.

Los elementales empezaron a alzar su vista hcia el cielo y enroscada sobre si misma vieron la sombra ,entonces grandes anillos surgieron de ella enroscándose una grancola alrededor de la zona inversa y una gran cabeza llego hasta la ciudad.

yo vuestro buen amigo Luciel os tomare como gran razaaazz

Entonces Luciel se enrosco alrededor de sus tierras y incubando algo en su interior surgió de su aliento una nueva esperanza para los suyos.
las 4 ciudades que en torno a la capital Y del interior de las 5 surgieron grandes ejércitos,

Los elementales largo tiempo abandonados y solos, encontraron en los tvus una agradable compañía. Comenzaron a confiar en ello investigaban, comían y dormían con ellos en convivencia.
Sabían que en realidad no eran tan diferentes unos de los otros y tenían mucho que aprender unos de otros

allí eligio una gran montaña que moldeo y golpeo dándole forma insuflo tierra,fuego ,agua,aire pero no era suficiente y lo ultimo con su mismo aliento le dio el 5to elemento VIDA.
Asi a medio camino entre Albur y el inmaterium un nuevo velo ,el de los sueños dentro este mundo habría otro .
Al cual solo podrían entrar los durmientes tenía la misma forma que Albur, pero sin habitantes solo los soñadores y los seguidores que Luciel elegiría entrarían allí.

Albur buscó en su ciudad a su orden de eleemntales .

Estoy harto se acabó, no me quedare de brazos cruzados os recogí, os di una mejor vida y ahora me lo pagareis.
Os daré un destino por fin una misión. Seréis mis sombras ,mis espias y desde dentro derrotareis a mis enemigos.
Y asi la orden del caos fue creada.

Luciel se puso a su lado - P-p-pa-padre - Un collar rodeaba el cuello de Á, y sus muñecas, y sus brazos y cintura, sus hombros y codos, y de cada uno de los collares se extendían unas cadenas infinitas, de un azul vivo, lleno de ribetes blancos que se movían como espuma de mar, las cadenas desaparecían en las aguas de Albur, y el gran Á miró a Luciel con su pena más sincera.

Lo siento... Luciel.

La mente de los elementales se volvió más débil, más vulnerable.... algo se acercaba.

El fuego aullaba, el viento ululaba, la tierra crujía y el agua se retorcía, dolor, miedo, ansiedad, era una pesadilla, una auténtica pesadilla imparable, tal vez los elementales no tenían corazón, pero sí alma, y ahora estaba siendo desgarrada la civilización entera, como un enorme rastrillo que pasa por la tierra apilando su etereïdad.
[IMG][/IMG]

¿Por que? - repitio, casi suplicante, sollozando ante su destino. - No os atacamos - grito con desesperanza - ¡No os atacamos! - repitio intentando hacerse oir.
- Nadie trata de esconderse a las fuerzas de El Señor de los Asesinos - ,Elocc´iso volvio a su reino y con un grito que estremecio Albur le hablo a Luciel.
- ¡NADIE SE ESCAPA DEL DIOS DE LA SANGRE!

Tu ser del caos, bestia primigenia que disfruta con el dolor, a ti en primer lugar antes que el resto te digo que en un futuro, cuando los dioses no posean la tierra, padecerás el mismo destino que buscas para los mortales, tu poderosa espada, no será más que un cuento antiguo surgido de la época de leyendas custodiado y perdido para la humanidad.
Oh si pues sufrirás por ser olvidado en el mismo caos que tu provocaste

(ignorar el dibujo de la derecha con la mascara,el buenoe s el de la izquierda)

A ti te nombro Elocc`iso,a ti me dirijo.
A partir de hoy todos y cada uno de ellos recibirán el veneno de Luciel ,la marca de la serpiente.
Y su piel caerá a tiras como la lepra, sus rostros llagosos contendrán miles de pústulas que nacerán desde allí al resto de su cuerpo.
Y entre estertores y gritos de dolor sufrirán un castigo que ningún entrenamiento, mente, ni cura podrá aplacar .
Y solo la enfermedad podrá esparcirse entre tus seguidores, pero estarán condenados a ser parias y renegados pues el resto del mundo jamás conocerán ese detalle y los rechazaran y los evitaran ,y a veces incluso acabaran con ellos por temor a ser contagiados.
Más aun pues la marca llevara consigo un aura de desconfianza y mentira que hará que nadie confíe en ellos jamás.

ahora te toca a ti ,oh si a ti Gran A padre de todos los Dioses Pues tu eres el peor de todos ellos ,te sientas sobre Albur como un titiritero esperando que seamos los actores y marionetas que den vida a tu función.
Pero no lo somos, yo jamás lo seré y por ello y por lo que hoy me hiciste por última vez yo reniego de ti A.
Y te digo que todo aquello que tu crees yo lo destruir y todo aquello que destruyas lo hare renacer de nuevo pues yo soy hoy tu nemesis.

Y te juro por el vacio primigenio que no descansare hasta que un dia mi trono este por encima del tuyo y solo seas un viejo recuerdo

-Enséñamela,¡¡¡Enséñame su maldito rostro mortal ,quiero verla a ella ahora,enseñame a la muerte!!!!
-Por fin después de tanto tiempo la encuentro.

-Si, la batalla termino, pero creéis que habéis ganado ,que alguien gano aquí ?? -¿Quién se puede alegrar ante la caída de su padre, él único que nunca conocí ,el único que nunca me traiciono…

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03/11/2010, 10:45
Jeldhor, el errante

 eyendas de los Vandrer. Las Lagrimas de Vandrerfán

Reannon Falaris, Eutharkos y señor de la tormenta descendió a lomos de Vingiloth su fiel montura Asthur sobre las hordas de esqueletos, los cascos de Vingiloth reventaban los cráneos de los esqueletos formando nubes de polvo blanco de hueso con pequeños relampagos como diminutas tormentas a su paso, el brazo de Reannon le dolia mientras descargaba una y otra vez el peso de su espada sobre sus enemigos.

El y los Jinetes de la Tormenta defendían la entrada al Templo de Yoonel mientras el grueso de las fuerzas lideradas por el anciano Enrico Remon atacaban el corazón del mal, aunque le hubiera gustado dirigir el ataque la misión de defender las puertas era tan importante como la otra

Mientras pensaba esto escucho el grito de su hermano Innaz que pasaba cerca con su carro de guerra, levanto su mano para saludarlo con voz potente, tenían motivos para estar satisfechos ya que la batalla iba bien, los esqueletos eran guerreros torpes que caían como la hierba de verano y menos numerosos de lo que esperaban, al parecer no se habían recuperado aun de su fallido ataque a la ciudad flotante

Abrió la boca pero un sonido atronador ahogo sus palabras, de repente todo a su alrededor se lleno con el polvo blanco de la llanura y una potente onda de choque lo tiro al suelo junto con Vingiloth, minutos después fue capaz de levantarse aunque el polvo aun dificultaba la visión de la llanura llenando sus ojos y pulmones. Vingiloth estaba muerto y tuvo que quitárselo de encima. Conforme el polvo se fue posando la imagen se hizo aun peor, de los esqueletos no quedaba nada, el polvo de sus huesos se había unido a la llanura que defendieron, pero por doquier se estendían los cuerpos de los Vandrer y sus aliados muertos por la explosión, los Hastur también habían muerto por la terrible oleada de muerte y los carros de guerra de los Vandrer descansaban inmóviles lastrados por los cuerpos muertos de sus pasajeros y bestias.

Sintiendo un terrible dolor en su corazón Reannon reunió carro tras carro cortando las riendas que los unían a los Hastur, monto en uno de ellos, junto al cadaver de su hermano e hizo que flotaran suavemente de vuelta a la ciudad, donde al menos algunos de los guerreros caidos en la batalla recibirían el funeral que merecían.

Con lagrimas en los ojos contemplo como el Templo maldito se derrumbaba sobre si mismo, última victima de la batalla de la llanura de las Almas

Cuando sus aliados volvieron a la ciudad, por sus propios medios o con los carros de transporte de los Vandrer, contemplaron el racimo de carros vacios que lentamente seguía a la ciudad errante y creyeron que la misma ciudad lloraba a los caidos de ese dia

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03/11/2010, 15:51
Aildor

Fuego, sangre y destrucción. Un torbellino de violencia sacudía el asediado templo de las almas. Miles de grifos llenaban el cielo, obstruyendo el paso de la luz del sol. Se alzaban como una nube negra de tormenta, y caían sobre el enemigo con la fuerza de la justicia.

Las runas de divino castigo ardían sin parar, los esqueletos no hacían más que arder ante la fuerza de los hijos de Aildor.

Efres se vio confundido en medio del campo de batalla. Pertenecía a la Orden de los Caballeros Blancos, los defensores de la justa raza. Su espada no estaba bañada en sangre, pero había matado por segunda vez a muchos muertos. Los Har-Ail batallaban con ferocidad, sin dar tregua al enemigo. Sus armas llameantes centelleaban en el aire, dejando detrás de sí estelas ardientes. Cercenaban miembros esqueléticos al compás de una extraña danza que sonaba en todas sus cabezas. Sus corazones latían como uno solo, ahí radicaba su fuerza. La unión hacía la fuerza.

El caballero se mostró sorprendido cuando un enemigo le atacó por detrás. Pero en ese momento la runa de protección que llevaba consigo se activó y proyectó a sus espaldas una pantalla de luz. Del esqueleto sólo quedaron cenizas, que se esparcieron por el blanquecino polvo del desierto, que poco a poco se teñía de carmesí. Comprendió que no podía detenerse, que no podía vacilar. Esa era la batalla definitiva, la batalla por la justicia de Albur. Seguiría hacia adelante y daría castigo a los injustos. Alzó su arma y rugió feroz, se lanzó contra el enemigo mientras su blanca capa ondeaba en el aire.

Salem se encontraba en la retaguardia, dirigiendo el combate. Había desplegado a los Paladines de la Llama al frente, y había sido una buena idea. Los esqueletos no habían esperado el renovado poder de la justa raza. Desde que atacaron Ovidia se confiaron, ahora debían pagar por sus injusticias ante el fuego purificador. Los Jinetes de la Esperanza se lanzaban en picado contra la ciudad enemiga, penetrando en ella y abatiendo sus defensas. Pronto todo acabaría.

Pero algo salió mal, el ejército Har-Ail comenzó a retroceder cuando los esqueletos los embistieron con una fuerza desmedida. Por alguna extraña razón habían recuperado las fuerzas cuando más mermados parecían. No iban a dejarse ganar tan fácilmente. Sus cuerpos de hueso ya no podían sentir, ni sufrir. Sólo quedaba odio en ellos, y no necesitaban nada más para luchar. Salem comenzó a ponerse nervioso, y dejó de escuchar los susurros de su padre.

Mirlat se encontraba en la vanguardia. Había acudido al combate junto a los Paladines de la Llama. Los ejecutores con sus ígneas guadañas al rojo vivo habían destruido la mayor parte de las fuerzas enemigas. Ellos solos ya constituían una gran parte de la fuerza ofensiva de la justa raza. Pero su pasión por la batalla no fue suficiente. Mirlat y sus leónidos comenzaron a retroceder, éste notaba como algo perturbaba a su padre.

Una gran explosión llenó la llanura, que como una tormenta feroz se llevó por delante a los esqueletos, convirtiéndolos en polvo. Pero no salieron dañados los Har-Ail, las runas de su padre los protegieron levantando una brillante cúpula plateada.

Cuando cesó el vendaval la llanura se sumió en un sepulcral silencio. Allí donde habían estado sus enemigos ya no quedaba nada. Todos y cada uno de los Har-Ail que habían sobrevivido lo sabían en el fondo de su corazón. Se había acabado, por fin. La balanza volvía a encontrarse en equilibrio.

Subieron en sus grifos y ascendieron volando a Vandefrán. No gritaron de alegría, no vitorearon a sus magníficos héroes, ni siquiera se cantaron canciones acerca de tan gloriosa gesta.

No había felicidad entre las filas de los Har-Ail. Se habían enfrentado a la mismísima muerte, habían ajusticiado a los esqueletos, se habían enfrentado a un dios.

Pero no es tarea de los mortales desafiar a los dioses. Restablecer el equilibrio había sido duro. Habían ido a la guerra. Muchos honorables hermanos habían dado su vida por aquello en lo que creían.

Lo único que hicieron los Har-Ail fue guardar silencio en nombre de los caídos.

 

“Nuestras leyendas no hablan de una gloriosa victoria, si no de aquellos que se enfrentaron a la muerte por la justicia de Albur.”

Efres Da-Ghari, Caballero Blanco de Alharei

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03/11/2010, 18:24
Ghiskhaft

Algo extraño pasaba...

Habra Tvus en Vandrerfan camino de la guerra??

Por lo visto no, el era el unico, pero el resto de seres que estaban en la
isla - Vandrer, Vurmak, Kohiris, Har-Ail - no parecian centrar su
atencion en el...

Era perfecto...

Cuando la ciudad flotante irrumpio en la llanura, Luhdei se desplomo,
las fuerzas de sus dioses estaban enfrentadas, y su cuerpo, por muy
poderoso que fuera, era el de un mortal...

Mientras los ejercitos atacaban la llanura, Luhdei fue llevado a un
camastro, para que guardara reposo, a pesar de que sus debiles palabras
insistian en que debia bajar a la llanura...

Desde su lugar de reposo, sentia como a medida que la batalla tomaba
intensidad, su dolor aumentaba en la misma medida, cuando de pronto,
una terrible explosion sacudio la superficie bajo Vandrerfan...

La agonia que sufria empezaba a remitir, su juicio volvia a ser suyo, las
fuerzas regresaban a su cuerpo...

Entonces como una exhalacion, abandono aquel cuarto, recuperando el
vigor a medida que alcanzaba el limite de la ciudad, lanzandose al vacio...

Apenas quedaban esqueletos, las tropas supervivientes ascendian, pero a
Luhdei le llamaba algo...

A escasos metros del suelo, desplego sus alas, frenando en seco su
caida... Una gran explosion habia tenido lugar en el palacio de Yoonel...

Que puede haber causado semejante destruccion...?

Pensaba, mientras pasaba por el arco que antes era el porton de aquel
palacio,observando a su alrededor... No habia nada...

En lo mas profundo del mismo, acerto a distinguir lo que parecia sangre
fresca en el suelo, luminosa... Extrañamente, salvo aquel circulo, todo el
suelo era gris, lleno de polvo, oscuro y sin brillo...

Al ir acercandose, alrededor del circulo, pudo ver una especie de
estatuas, orientadas hacia su interior... Vurmak, Har-Ail, Vandrer,
Kohiri, Tvus, Sekaar... Repelian el avance de la sangre...

Al principio dudo, pero al ver que permanecian inmoviles, se aproximo...

En el suelo, la sangre aun palpitante dibujaba formas, y a medida que
Luhdei se acercaba, se veia mas claro lo que queria decir...

La imagen de Yoonel bañaba el suelo, un zumbido inundaba los timpanos
del Tvu, como eco resonaban palabras en su cabeza...

Sin dudarlo, entro al circulo sanguineo... El liquido caliente se elevo,
cubriendo el cuerpo de Luhdei, que se llevo las manos a la cabeza...
Otra vez sentia aquel dolor, y entre gritos y bruscos aspavientos, un aura
rojiza exploto en su cuerpo, barriendo el polvo asentado tras la batalla...

-Que es... Esto...?

Camino lentamente, aun algo dolorido, hasta la salida de la sala,
sangrando abundantemente, pues tras de si un reguero marcaba su
camino, pero a pesar de ello, no se encontraba mal, sentia su cuerpo
pesado, el dolor se desvanecia...

Respiro, apoyado en una columna, mirando el suelo, y entonces la sangre
dejo de caer...

Con energias renovadas, salio de la estancia, horrorizado al ver como
muchas de las criaturas que libraron la batalla, se incorporaban, tanto de
un bando como de otro, miembros amputados se retorcian, cabezas
cortadas gesticulaban...

Van a matarme...
Pensaba...

Y todos se dirigian hacia Luhdei...

Casi sin tiempo para reaccionar, los restos de un Sekaar se lanzaron
sobre el, quien, con tan solo cubrirse, hizo que la roca al impactarle se
pulverizara, tembloroso, miro hacia el frente, donde un Har-Ail, aun
envuelto en el poder de sus runas, se disponia a ensartarle...

La espada atraveso a Luhdei, que penso que era el fin, que no deberia
haber ido alli, que nada bueno pasaria...

No habia sangre, no habia dolor... Con su brazo trato de apartar al
Har-Ail de su camino, pero en vez de eso, lo partio en dos...
Su brazo, cubierto del polvo que lo rodeaba, tenia un tono marfil...

Sin darle mayor importancia, continuo su avance, corriendo tan rapido
como podia, pues si levantaba el vuelo, muchas alas irian tras de el...

Demasiado tarde...
No paso mucho tiempo hasta que se vio rodeado, su
unica escapatoria era volar, mas rapido que el resto...
Yoonel habia muerto, y tampoco sabia con exactitud si podria permanecer
alli, pues era terreno vedado para los vivos...

Extendio sus alas, y en su primer movimiento para alzar el vuelo, genero
un vendaval que tumbo a toda criatura que lo rodeaba...
Alejose rapidamente de alli, y detras suya, otras criaturas voladoras le
perseguian...

Sus alas parecian saber que su vida dependia de ellas, y poco a poco, les
empezo a dejar atras, aunque no desistian en su persecucion...

Luhdei miraba hacia atras, mientras batia sus alas con fuerza, pero sus
perseguidores seguian ahi...

Podriais dejarme en paz, no...?

Al volver a mirar a su retaguardia, un poco mas adelante, vio que esas criaturas estaban
descendiendo...

Me han leido el pensamiento??

Al frenar su marcha, y fijarse con detenmiento, vio que no descendian,
estaban cayendo a plomo sobre la llanura, como cadaveres que eran...

Despues, siguio el rastro de Vandrerfan, aun visible a traves del camino
abierto en ese oscuro cielo para salir de la llanura...

Sintio de nuevo que ardia, y en un pestañeo, adelanto a la ciudad flotante, quedando fuera de la llanura...

Despues se desmayo... Al despertar, no recordaba lo sucedido, solo estaba furioso, debia cobrar su venganza...

Notas de juego

La Sangre de Yoonel:

Avido de sangre y destruccion, la sangre del dios dragon busca un cuerpo que tomar, sustituyendo la del mismo.

A causa de esto, el individuo ostentara el poder de Yoonel, tanto su fuerza, como su rapidez, y sus conocimientos...

Omnipresente, omnipotente, omnisciente.

El unico rasgo que distingue al portador de la sangre, son unos ojos azul palido, como los del dios de la muerte en vida...

Su presencia es capaz de levantar a los que ya no estan vivos, obedeciendo sus ordenes como antaño hacian con Yoonel...

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03/11/2010, 20:03
Aildor

Todos los presentes permanecían en silencio mientras miraban con atención al hermano que se había levantado para hablar. Sabían que a través de él se manifestaba la voluntad de su padre.

- Hermanos que estáis aquí congregados… Tras un largo viaje por fin hemos regresado a nuestro hogar. Tras una gran batalla en la que hemos perdido a muchos de los nuestros hemos devuelto el equilibrio a la balanza que rige Albur. Nuestro padre está satisfecho, y cree que ya va siendo hora de dejarnos actuar por nuestra propia cuenta.

Se comenzaron a escuchar algunos murmullos. ¿Qué significaba eso? ¿A qué se refería Salem? El Gran Orador esperó pacientemente a que los susurros cesaran, pronto todos los oradores y demás invitados estuvieron de nuevo atentos a él.

- Durante cientos de años nuestro padre ha guiado nuestros pasos, ha velado por nosotros desde los cielos, ha vigilado que nuestro camino siguiese recto. Incluso nos bendijo con aquello a lo que algunos llaman… magia.

Volvieron a murmurar los Har-Ail. Muchos habían conocido la magia de los otros, pero la suya propia había sido siempre un tanto especial. Sólo servía para combatir, para aplicar justicia en nombre de Á. Era pues un método de combate, al contrario que las otras razas, las cuales le daban un uso distinto.

- Nuestro padre Aildor ha decidido que ya es hora de dejar en nuestras propias manos nuestro destino. Tras tanto esfuerzo por su parte por hacer prevalecer la justicia en Albur, ha llegado a la conclusión de que su trabajo está terminado. Por eso os propongo que, ahora más que nunca, viajemos por el mundo y repartamos la palabra de Aildor. Devolvámosle todo lo que ha hecho por nosotros manteniendo la paz y el equilibrio en Albur. Se avecina una era de cambios, una era de progreso. Así como nosotros estamos dispuestos a aprender las otras razas también lo están. Divulguemos pues la palabra de la justicia, y aprendamos de las maneras de vivir de las otras razas. Compartamos nuestra visión del mundo con todo aquel que esté dispuesto a conocerla.

Salem hizo una pausa, sonriente. Algo muy grande estaba por empezar.

- Nuestro padre está por irse, pero todos sabéis que siempre tendrá un lugar, arraigado en nuestros corazones. Nos dará calor durante el día, y alumbrará nuestras noches desde las estrellas. Los cambios llegarán, y deberemos estar preparados. Pero no olvidaremos nunca nuestro pasado, nuestras raíces. La historia de los Har-Ail se grabará en piedra durante generaciones, hagamos que nuestros hijos recuerden siempre el verdadero significado de la justicia.

Nada más callar el Gran Orador todos los presentes aplaudieron entusiasmados. El elegido de Aildor tenía razón. Iban a llegar grandes cambios, y era ahora su misión adaptarse y progresar.

 

Así fue como los Har-Ail comenzaron a grabar en las mismísimas paredes de Alharei el Cuento de los hijos de la Justicia, un grabado rúnico que recuerda a aquellos más jóvenes la historia de la justa raza.

Pero no se detuvieron los Har-Ail. Se dispersaron por el mundo y pusieron en práctica su legendaria oratoria. Se ganaron muchos aliados, y repartieron por el mundo la palabra de la justicia.

Había pasado mucho tiempo desde sus orígenes. Pero su historia verdadera comenzaba ahora.

Notas de juego

1pp Comandar Avatar (Salem): Intento Avance "Brillantes Oradores, Diplomacia +1"

2pp Comandar Ciudad (Alharei): Intento Avance "Cuento de los hijos de la Justicia, Vida +1"

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04/11/2010, 15:24
Elocc`iso

Elocc volvio a sentarse en su trono, viendo la devastacion causada por sus hermanos en la llanura de las almas. Muerte y destruccion, era lo unico que le quedaba a Albur y sonrio por su nuevo ser, ya que de ello se alimentaria. Pensando eso su mente se alejo de Albur y se quedo como una figura de porcelana de un azul claro sentada con una orgullosa sonrisa en el rostro y una mirada perdida en la lejania.

La Tvus volvio a la ciudad, su ayuda al ataque a Thervou no habia sido muy sonora y eso le alivio, asi no tendria que dar explicaciones. Cuando se sento a la izquierda del trono de Elocc lo contemplo y vio que no estaba entre ellos, que su mente y con el, parte de su cuerpo se habian alejado y no quiso interrumpirle. Una sabia decision, pues nadie sabe como puede responder un dios, cuando se siente ofendido.

El Vidente seguia deambulando por el desierto, guiado por sus visiones, su nuevo papel seria en esta ocasion algo distinto, no tendria que parlamentar con raza alguna, no tendria que ocultarse para encontrar a una posible victima. Eran tiempos de cambios y los notaba en la tierra. Sus pasos eran volver al hogar, a ganarse su merecido descanso.


Solmena, soño con su antiguo pueblo y vio las maravillas de la civilizacion en la que vivia tiempo atras y penso en la ruinosa ciudad la cual habitaba, asi pues comenzo a dar ordenes a los habitantes, llegaba la hora de hacer una ciudad mas grande, mas capaz, igual a sus hermanas, digna de la voluntad del Dios Asesino. Era la hora de que la ciudad del secreto ocupara un lugar en Albur, como algo mas que un sitio donde unos cuantos habitaban y asi comenzo la construccion de la ciudad en la isla de Ambas.

El primer elegido de Elocc, continuaba deambulando buscando su regreso, ya habia alcanzado la ciudad de Ruszical y embarcado al otro continente cuando su piel comenzo a mostrar cambios. Le salian llagas sobre la piel y le dolian los huesos, atormentado, viajo siempre en el camarote oculto a los demas.
El capitan del barco, comenzo a preocuparse y se acerco para saber si sucedia algo. El Vidente fue muy convincente cuando oculto tras varias mantas le informo al capitan que podria estar enfermo y no queria exponer a la tripulacion. El capitan se mostro de acuerdo y nadie mas le molesto, pero tampoco le dio permiso para salir.
Cuando llegaron al puerto, tuvo que esperar a que todos los demas desembarcaran y despues lo pudo hacer el. La gente al verlo por las calles, asustados se escondian y le rehuian, era un apestoso, portaba una rara enfermedad nunca antes vista y temian ser contagiados. Poco sabian que era la maldicion de Luciel que comenzaba a manifestarse. Nadie quiso darle cobijo, ni tampoco venderle alimento, no hubo quien mostrara compasion, ni quien manifestara piedad. Ni los santuarios de Jeldhor, donde se puede descansar del mal, le sirvieron de alivio al atormentado vidente. Entonces fue cuando tuvo la vision, y confio en ella, pues ya poco le quedaba por perder. Castigado con una larga vida, rechazado por su pueblo cuando fue siervo del Oscuro, testigo de la caida del imperio Naya, cuando llego la muerte de manos de Yoonel, superviviente y custodio del fantasma del olvido y la hija del odio, guia del pueblo errante que lo abandono, siervo del dios del asesinato y ahora mutilado por ello. Su vida no habia sido sino otra cosa que una caida tras otra, una espiral hacia el abismo. Aun asi, confiaba en su Dios, pues en eso se basaba la Fe.

Solmena y los demas, no se libraron del veneno de Luciel, y aunque unos cuantos huyeron para ir recuperandose, la mayoria lo que cobro fue un nuevo odio hacia el nuevo dios. Un odio que no seria olvidado.
La ciudad tuvo que ser interrumpida, los viajes de los informadores cesaron, cada nuevo ser que decidia unirse motivado por las leyendas y los rumores, caia corrupto y se veia obligado a esconderse del mundo. Eran parias entre los parias. Eran la escoria del mundo, seres peores que los esqueletos o los sirenidos. Eran perseguidos y considerados debiles. Los cazaban por diversion, para evitar el contagio, para erradicarlos de la sociedad y no les quedo mas remedio que huir, siempre huyendo, hasta encontrar su ciudad, en la olvidada isla de Ambas. Alli llegaban como lo nuevo que eran, seres corruptos, mutilados, apestados y encontraban mas como ellos, mas gente con la que compartir su existencia y asi fue como la nueva sociedad de Asesinos se establecio. Oculta a los ojos de Albur, acechantes y mas maliciosos que nunca.

Elocc´iso observo la agonia de su pueblo de manos del nuevo dios y pudo sentir la sonrisa de orgullo de Luciel al creer que eso le dolia - que equivocado estas - penso Elocc - mi pueblo aprende de todos los horrores que les cae, parece que aun es muy joven para comprenderlo - y volvio con los suyos.

Solmena sintio una gran esperanza cuando lo vio mostrarse, habia pasado mas de un año y la pena y la autocompasion se habian vuelto parte de ellos.
- Maestro, sananos - le rogo entre sus lagrimosos ojos, incapaz de llorar por tantas lagrimas ya derramadas - llevo tiempo rogando tu asistencia ¿por que no nos socorristes antes? - le dijo poco antes de tirarse a sus pies.
- Hija - dijo su voz, con una autoridad y una serenidad sorprendentes - levanta - le ordeno - tu aun eres joven y no comprendes bien vuestro sino, pero aprenderas, ahora levantate y reune a todos, pues en breve les hablare a todos ellos - y la estatua volvio a ser una estatua.

El vidente estaba tratando de dormir entre dos arboles del bosque, por fortuna, aquella maldicion no le habia afectado a sus habilidades y aun era capaz de trepar si se concentraba e ignoraba el dolor. Desgraciadamente, su mente no estaba preparada para soportar una fuerte lluvia invernal y no lograba conciliar el sueño.
- Hijo - le dijo una voz familiar.
- Ma...ma...maestro - le respondio el, tiritando de frio.
- Te estan esperando - le señalo.
- Lo se... - respondio le respondio el - pero no tengo fuerzas para llegar,el dolor me supera, la piel se me cae, por que nos han vuelto a castigar?
- Es obra de un Dios y por capricho de otro Dios, nuestra arrogancia la pagan nuestros pueblos.
- No comprendo - le espeto el.
- En la Tal´Kokand, tienes cuantas respuestas necesites, pero no estoy aqui para eso. Te encargo el cuidado de los mios, que ahora seran los tuyos, me marcho para no volver, nuestras acciones os pesan demasiado. Hijo, tu seras lider y jefe absoluto del Culto. Guialo y protegelo y recuerda, toda adversidad no es sino otra manera de fortalecerse. - y tan repentino como habia venido, se marcho.

En la plaza de la ciudad, donde se entrenaban los novicios del culto, se reunio todo el culto. Solmena desde un balcon observaba a todos y anuncio la llegada de Elocc´iso, que se manifesto al decir su nombre, como si estuviera ensayado.
- ¡Hijos!- les dijo levantando la voz - ¡Vuestro sino ha sido sellado por un dios, culpa de otro dios, y eso debe de terminar. Por ello me alejo de Albur, me despido de vosotros, levantaos y sobrevivir, pues ya lo hiciesteis en el pasado y capaces sereis de hacerlo en el presente!
 El servicio de esta ciudad estara en manos de Solmena, mi elegida y pronto llegara vuestro lider, y sus ordenes seran las mias. Llamarme para pedir consejo siempre que lo necesiteis, pero mis pecados han caido sobre vosotros... ¡Serviros de ellos, ser fuertes, luchar y demostrar que no hay mal que no pueda superarse! y recordar, el descanso eterno siempre estara en manos de Á. - Todos los presentes rompieron a gritar emocionados y  Él, dios del misterio y el secreto. Señor de la intriga y Maestro de la mentira. Elocc´iso,Dios de la sangre, Señor Verdadero y Soberano del Asesinato. Se desvanecio y ya no fue visto mas en los años venideros. Tampoco residio en el templo de Á, pues su hogar estaba en la luna carmesi.

............

Pero la maldicon de Luciel no termino alli, Elocc´iso habia sembrado su semilla en distintas naciones, y pronto las secuelas comenzaron a multiplicarse. El caos sucedio en distintas ciudades y nadie sabia el por que. Los Tvus, los mas ancianos y versados, no consiguieron hallar respuesta, pues las marcas afectaban a ancianos, hombres, mujeres y niños por igual. Todo aquel que le rindiera culto a Élocc ´iso o a Él sufririan las consecuencias del veneno de Luciel.
Pronto manadas de kohiri, incluyendo a toda la Tal´Kokand cayo horrorizada y atormentada por la causa, los Hai-Ail, que eran pocos, quedaron en menos, pues la desconfianza cayo sobre su pueblo, no se fiaban unos de otros, pues muchos de ellos estaban contagiados. Muchos de los Tvus, perdieron su facultad de volar, sus alas carecian de plumas. Los elementales perdieron su gracia y las aguas quedaban contaminadas, las tierras marchitas, el aire apestaba y el fuego era debil, incapaz de calentar ni un cazo de agua.

Todos rogaban a sus dioses, a todos ellos y por ello ninguno logro encontrar la paz, por que en Albur no habia un dios sanador. Asi pues no supieron a quien adorar y castigados por la maldicion nadie supo jamas que se trataba, asi pues nacio un nuevo ser, sin forma, sin poder, pero que atemorizaba a los demas y pronto las voces lo arrastraron por todo el mundo y la gente comenzo a temer a Sokhed, el portador de enfermedades. Un falso profeta.

Notas de juego

La despedida de Él (Elocc´iso) y la llegada de las plagas a Albur xD. " si creo mas ordenes, mas se extiende la plaga... " xDD.

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04/11/2010, 16:57
Jeldhor, el errante
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Tirada: 2d6
Motivo: poder
Resultados: 5, 1

Notas de juego

2 + 7= 9pp menos mal que tengo poco por hacer

borra el anterior por favor, que ha sido un fallo

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04/11/2010, 17:03
Luciel
Sólo para el director

En algún momento durante los hechos narrados en la explosion del palacio de las almas.

La niebla se arremolinaba en sus pies era como una extraña sombra o capa que lo seguía por donde iba.
El velo de los sueños era un lugar ciertamente hermoso y lúgubre a su manera.

Luciel abrió sus brazos y entonces el el resto apareció.

Una luz verde tiño la noche que cubría el cielo ,la luz de un alma.

-Oh mi querido Nadir tan puro ,tan especial y ahora tiznado con la marca de la locura ,la muerte y la desesperación.

¿Que te han hecho?

-Y tu

Y con un gesto trajo hacia el a una segunda figura en escena.

-Silfis ,nigromante ,te esondi demasiado tiempo aquí apartada del resto e dioses para algo .
Sabes en cierta manera te estoy agradecida de lo que hicistes por mi al ayudar en el velo
-de repente unas palabras con un tinte mezclado de comico y tenebroso acompañaron la frase.

Así que te daré todo lo que se te prometió ,todo eso y mas te daré.

Y la mortal no pudo mas que abrir sus ojos de par en par tras recordar cuando fue la ultima vez que escucho aquellas palabras.

El dios chasqueo un dedo y múltiples elementales aparecieron en el aire


De los fuegos de la creación,de los océanos del tiempo,de las tempestades del cielo,,de la tierra de nadie,de las profundidades del averno ,del los resplandores del mañana .

Elementales hijos del fuego,el agua,la tierra el viento ,la muerte y la vida.

Hoy seréis uno.

Y los seres que una vez se habían llamado elementales rodaron dando vueltas hast crear un tornado y absorbidos por el ojo de un huracán dieron a luz a un nuevo ser .

He aquí a los elegidos la nueva raza que habitara Albur mi raza .

La unión perfecta de los elementos de la creacion. Y vosotros hijos míos seréis mis primogénitos.

Y del cuerpo de la nigromante arranco su alma y la deposito en uno d ellos 2 elegidos y en el otro metio el alma del torturado Naya.

Mi alpha y mi beta seréis la primera y el ultimo.

Recorreréis el mundo de Albur ,sanareis a los enfermos ,ayudareis a los caidos y os ganareis sus corazones ,pero con ellos os llevareis sus almas .

Pues sellaran pactos, pues la única forma de salvarse sera adorando al Nuevo dios aquel que traerá un nuevo amanecer el que esta por venir ,EL DIOS UNICO.
Y solo habrá sitio para el único en sus corazones ,y ni siquiera se daran cuenta de lo que hacen y sus almas vendrán aquí a mi y me darán fuerzas pues lo que nadie jamas sabrá que Luciel es el Dios unico.

Y mas y mas almas llegaran a mi traiciona do el camino a la llanura que A creo ,pues como ya dije desare todo aquello que tu hagas y cuando tenga el poder suficiente cuando las almas mortales insuflen en mi la energía necesaria ,cuando allá acogido bajo mi ala a todo el pueblo de albur y acabado con la fe en los antiguos dioses. Cuando convine el poder de la fe y el espíritu.

Entonces el Único llegara y un nuevo imperio regirá Albur un Nemesis digno de a como se profetizo.

Esa es vuestra misión ,tras la ida d ellos dioses de este mundo debéis socavar la confianza en estos de todos los pueblos ,debéis darles una nueva esperanza ,el único llegara y traerá un nuevo amanecer.

Partir hijos míos sois el caos en la tierra .

Tiempo despues el Dios unico se encontraba sentado en el trono d ella umbra contemplando como nuevas almas venian a el y forjaban a su alrededor una oscura armadura y en su mano la mas aterradora arma que se viera jamas.

Necesito mas poder.

Señor nuevas almas viene pero no han sido conseguidas por los elegidos son extrañas ,nadie las haboia visto antes son...

Si son las almas de los seguidores de Eloc o creias que mi veneno era soloe so,entre en su sangre en su espiritu en las profundidades de su ser o si cuando mueran en la batalla ,en la enfermedad ,o en cualquiera de sus formas sus almas vendran a mi y aumentaran mi poder expande mas tu influencia cuanto quieras dios mentiroso pues cunato mas lo hagas mas poderoso me hare
Y una risa oscura y antigua golpeo contra los muros de la realidad

aquí 2 historias mas Me amparo en que devolvi los nayas a A como quedamos para decir que los demas dioses no se enteraron de esto

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04/11/2010, 17:25
Jeldhor, el errante

Leyendas de los Vandrer - Epilogo

La gran ciudad flotante avanzo de Norte a Sur recorriendo nuevas tierras, aunque los Vandrer aun se recuperaban de sus perdidas tras la dura guerra, no dejaron pasar la ocasión de recolectar nuevos bienes y riquezas con los que comerciar compensando un poco por los tesoros de Yoonel que esperaban conseguir en el ataque y que fueron bien pocos.

Cuando la ciudad llego de nuevo al sur de Skraag su rumbo se desvio hacia el este poco a poco y pronto volvio a su ruta de siempre. Los hombres dijeron que era lo mejor, los oraculos dijeron que ese era su Camino y los juiciosos se alegraron de no volver a acercarse a la llanura de almas.

Sintiendo su ciudad segura tras tanto tiempo bajo la amenaza de la guerra los Vandrer se dedicaron en cuerpo y alma al comercio. La guerra les sirvio para afianzar los lazos con las otras razas de Albur lo que les permitio comerciar con mayor facilidad. A lo largo de la ruta de Vandrerfán surgieron poblaciones pequeñas y grandes, dedicadas a comerciar con los Vandrer cada vez que los sobrevolaban, formandose asi el Circulo Dorado, la ruta que todo comerciante importante de Albur aprendio a conocer y visitar

Mas muchos Vandrer aprendieron tambien a viajar por el mundo, en Hastur los mas afortunados y por sus propios medios la mayoria, en busca de riquezas, aventuras y oportunidades

 

El Libro del Vagabundo - una nueva era

Los kohiri se reunieron de nuevo, esta vez dirigidos por El Señor del Camino

-necesitamos un lugar que llamar nuestro, un lugar que sea de todas las tribus, un hogar en que podamos ser encontrados por nuestros aliados, necesitamos una ciudad-

Los jefes reunidos lo escucharon y se alzaron voces en contra de esta idea -¿una ciudad? ¿un lugar donde vivir en un solo sitio? ¿detenernos en El Camino?¿ver cada dia el mismo paisaje? eso no puede ser, los Kohiri nacimos para viajar, solo el agotamiento proximo al final nos puede detener en Tal-Kokand, y solo un momento antes de abandonar este Camino para ir al siguiente-

El Señor del Camino alzo las manos para acallar las voces -es cierto, necesitamos una ciudad, la ciudad de los Kohiri, pero no el hogar de los Kohiri, el hogar de los Kohiri es Albur y seguirá siéndolo. La ciudad sera nuestro patrimonio, un lugar de reunión y de descanso, un lugar donde buscarnos y donde encontrarnos, a nosotros y a nuestros amigos. Las tribus seguiran recorriendo El Camino, y cuando su camino los lleve a reunirnos sera en la ciudad, y cuando nos lleve a otro sitio nos iremos. Sera Tal-Takim, la Ciudad de la Reunión-

Asi los Kohiri fueron guiados por el Señor del Camino hasta las orillas del Lago de las Estrellas, a la sombra de Skraag y crearon la ciudad de Tal-Takim alrededor de uno de los santuarios de Jheldor. En su centro se creo un templo a los dioses y un gran centro de comercio. a su alrededor se dispuso una gran explanada en la que las tribus Kohiri podian plantar sus tiendas y permanecer un tiempo antes de irse. Desde su fundación siempre hubieron tribus alojadas en cada momento, auqnue siempre distintas tribus, con distintos vecinos, distintos caminos

 

La Agenda Vurmak - Capitulo segundo - Asentamiento

Durante siglos desde su creación los Vurmak fueron la mas libre y despreocupada de las razas, se extendieron por todo el mundo con el ansia de conocimiento de los Tvus y la inconstancia de la brisa. Bufones intranscendentes para las demas razas. Aprendieron a vivir en Vandrerfán, unos pocos en las sombrias ciudades de los Tvus en Skraag y mas en la recuperada Thervoru.

Fue en Thervoru donde los Vurmak preguntaron a sus Oraculos -¿no hay un lugar que sea nuestro? todo el mundo tiene su hogar, incluso los Kohiri para los que todo el mundo es su hogar, mientras nosotros somos vagabundos sin hogar donde quiera que vayamos-

Los Oraculos buscaron en la oscuridad de El Camino durante dias y finalmente encontraron la respuesta -Hay un hogar para los Vurmak, creado por un Dios que ni siquiera sabia que un dia existirian, o tal vez si. Se ha mantenido virgen durante milenios esperandonos y ha llegado la hora de ocuparlo-

Asi los Vurmak se reunieron por centenares, por miles y emprendieron una gran migración hacia el este, similar a la migración de los Tvus hacia el oeste que los creo. Siguieron las instrucciones de los Oraculos hasta su tierra prometida, las islas gemelas creadas por Arezos milenos atras, olvidadas por los dioses e ignoradas por los mortales. Las islas volantes parecian ajenas a Albur aunque ricas en vida y recursos.

Asi los Vurmak construyeron su ciudad en las nubes, combinando los conocimientos y magias de todas las demas razas, retazos incompletos recogidos en todo lugar, y construyeron Tag-Kalaja, el castillo en las nubes

Para su creación fue elegido al Oraculo Therrmath, un anciano tocado por la locura y la iluminación que hilo en los muros de la ciudad hechizos de todas las razas y credos, entretejidos en un patron tan confuso que nunca jamas pudo ser comprendido enteramente por nadie aunque siempre causo maravilla que una obra tan extraña, confusa y mal construida pudiera mantenerse en pie y infundir majestad y respeto

El anciano Oraculo Therrmath y el resto de oraculos de la orden llegaron a la conclusión de que los Vurmak no eran adecuados para la guerra y lo mejor seria evitarla siempre, para esto los Vurmak se comprometieron a aprender de las demas razas, ya que eso es lo fundamental para llevarse bien con los demas. Y de paso esto les daba una buena razón para inmiscuirse inagotáblemente en los asuntos de los demas

Y aunque ese fue a partir de entonces su hogar no dejaron de viajar inquietos e inconstantes por todo Albur, habitando en cualquier sitio en que les dejasen estar

Notas de juego

Vandrerfán vuelve a su ruta original por la gracia de Á

comandar avatar 1pp - El Señor del Camino- craer ciudad Tal-Takim en 56,17

comandar raza 3pp - Vurmak - crear ciudad  Tag-Kalaja en 74,16

la historia de los Vurmak ocurre antes o al mismo tiempo que la fundación de Tal-Takim

comandar orden 2pp - los Oraculos del camino - crear avatar temporal Oraculo Therrmath

Comandar avatar 1pp - evento de ciudad - Tejido de magia - los muros de Tag-Kalaja parecen sostenerse unicamente por la magia mas que por la calidad de la obra, causando maravilla y respeto en los que la visitan. +1diplomacia de los Vurmak en la ciudad

Comandar avatar 1pp - intento avance de raza Vurmak - amigos de todos +1 diplomacia

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04/11/2010, 18:24
Elocc`iso

Fue casualidad que un grupo de Vumarks, sobrevolando las tierras norteñas, cuando la lava de un volcan les llamo la atencion, curiosos como eran descendieron un poco para saber que extraño suceso ocurria y entonces comprobaron como la lava era engullida por la piedra lentamente. Aguardaron con paciencia hasta que toda llama fue extinguida y entonces se acercaron.
Alli estaba la entrada a un lugar extraño y magico, era un lugar que ningun otro mortal habia pisado antes y no se sabia desde cuando se encontraba alli.
Los Vumarks, se acercaron lo mas posible a la entrada, pero desde el suelo apenas podian observar los grabados en las rocas que tenian a su alrededor. asi que alzaron el vuelo y llegaron a la parte mas alta de la entrada, en ella reconocieron los grabados de otras razas, como los Tvus o los Vander, tambien estaban los esqueletos y los elementales, poco a poco vieron que estaban todas las razas y como si la intuicion les hablara desde algun rincon, todos comprendieron que estaban en un lugar sagrado, un lugar que pertenecia a todas las razas de Albur y arrastrados por la curiosidad se adentraron en sus entrañas deseosos de conocer que mas secretos les guardaba aquel maravilloso lugar.

Notas de juego

Evento - El Coliseum de los Dioses - 9pp. situado en x:34 y:8 (salvo que a la mayoria le parezca mal xD)

Yo doy pie, cada uno que añada su porcion al relato para hacerlo de todos.