Partida Rol por web

El lamento de los muertos

Caminos

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28/04/2018, 01:27
Violeta

Zach volvió exultante.
- Sr.Z ahí si que te has marcado una buen home run. ¡Uau! - exclamo al ver el Iphone.
Sophie intenta encenderlo y desbloquearlo. Le doy alguna indicación de cómo hacerlo. Espero que no tengamos que cortar el dedo del papa de Zach. El humor negro es aquella vocecita que suele salirme en momentos tensos o desagradables.
Entinces escucho los gritos. Veo la escena petrificada, guardando m el aliento hasta que la mujer cae inerte al suelo. El terror aflora otra vez. Siento que el terror vivido se repite. Sin poder mirar más me giro.

- No Zach... seguimos dentro chico. No sé qué habrá sido ese ruido, pero seguimos dentro. Repetir esa expresión ne hace sentir atrapada. Deseo estar fuera. Tenemos que escapar cuanto antes. Esto puede estallar hoy o con el siguiente autocar. Un solo infectado puede provocar el caos y yo no quiero verme atrapada. Sí, es cierto que la protección de los militares es efectiva, pero lo será tanto cuando esto empiece a estar masificado? No quiero quedarme para comprovarlo.
No quiero ni pensar los horrores que gabrá encerrados en el sótano. Seguro que cualquier peli de terror se queda corta.
A ver si tenemos suerte con el Iphone.

- Tiradas (3)
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29/04/2018, 23:25
One World

La situación es complicada, sabe que está corriendo grandes riesgos y el estar ahora ante un joven oficial con grandes delirios de grandeza no ayuda demasiado. Mucho menos al recordar la chincheta roja que estaba situada sobre el hotel Paradaise. Aunque quizás lo pero de todo, era que gran parte del mapa estaba cubierta por esas mismas chinchetas. Existían pocas zonas verdes, pero varias de color azul, supone que esas últimas son lugares como en el que se encuentra. Campamentos levantados para ayudar a los civiles...

-Yo me encargo de distribuir las tareas según las capacidades de los civiles. ¿A qué se dedicaba?

El oficial alza ligeramente la cabeza para tratar de ocultar que es en realidad, más bajo que el propio Larry. Una forma con la que cree poder otorgar mayor fuerza y poder a su autoridad. Por desgracia no sabe que lo que realmente es la autoridad.

Del final de pasillo, de la zona prohibida, emergen una docena de hombres armados, que siguen los pasos de un hombre con emblemas de general.

Los soldados poco o nada tienen que ver con los muchachos jóvenes que cuidan el campamento. Aquellos hombres parecen forjados en acero, fríos, duros e imponentes. Sus ropajes están cubiertos de polvo e incluso algunos de ellos muestran desgarrones o contusiones propias de aquellos que se han adentrado en medio de un campo de batalla.

Larry tan solo necesita un segundo para descubrir que aquellos hombres portan la muerte en su mirada. Está seguro de que todos ellos han luchado, sangrado y matado por el país que aman. Son fuerzas veteranas, soldados de verdad y no los muchachos jóvenes y nerviosos que protegen el campamento.

Aunque ninguno de ellos impone tanto respeto como el general que avanza en cabeza. Aquel hombre está acostumbrado a liderar y a que su palabra sea ley. No es de esas personas que uno desea hacer enfadar.

Teniente!

El joven soldado se cuadra ante la llegada del general y contiene el aliento. Un poco más y Larry está seguro de que el muchacho se lo hará encima.

-Quiero toda esta zona despejada, lleve a los civiles a sus respectivos cuartos y que permanezcan allí. Tiene quince minutos.

El teniente alza el brazo como si de un resorte se tratase, realiza un saludo marcial y aguarda a que el general pase junto a ellos, en dirección a la sala de la que Larry ha escapado poco antes.

-¡Señor! ¡Sí, Señor! Los trasladaré de inmediato

Notas de juego

El general quiere que os quedéis en los pisos superiores. Los civiles estáis divididos en diversos pisos, las tarjetas que os entregaron lleva un código de color. Cada planta está asociada a un color. Si Larry no hace nada, será trasladado allí. El general está allí mismo por si quiere hablar con él, aunque parece que está con un humor de mil demonios.

Un saludo!

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30/04/2018, 21:55
Lady Violet (Sophie)

La escena que acababan de presenciar le recordó a Sophie lo vivido apenas unas horas antes en el hotel, aquel mismo día.

El mundo se estaba volviendo un lugar cada vez más peligroso, dónde vivir o morir empezaba a ser cuestión de suerte...

- Vámonos de aquí. Zack, Rosalin, Violeta... dijo algo nerviosa. -...Esto ha dejado de ser un juego. Zack, hablaremos con tu padre y le contaremos todo. Es mejor que sepa la verdad.

No quiero poner en riesgo a este niño y menos por contarle una mentira que supuestamente es para su bien. Prefiero contarle la verdad, por dura que sea y que sibreviva un día más.

Sophie se prepara subir de nuevo a la planta que les correspondía.

¿El capitán Whright sabrá algo de lo que sucede aquí abajo? - se pregunto mientras subía por aquella zona tapiada, sin pensar ya en lo asqueroso o peligroso que podía resultar aquello.

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01/05/2018, 23:49
Rosalin

El mero hecho de tener un teléfono en las manos no las ayuda a tranquilizarse. El ver cómo acaban de abatir a una civil de un disparo, sin tan siquiera dudar de ello, las arrastra de nuevo al pasadizo y a volver sobre sus pasos. El ascenso resulta más sencillo que la baja, ya conocen el camino y a diferencia de antes, pueden ver bien donde colocan las manos y los pies.

Para cuando regresan de nuevo a su planta, todas tienen las manos negras y la ropa algo manchada. Pequeñas perlas de sudor las acompañan en la frente, tras el esfuerzo realizado. El silencio las envuelve mientras todas se pierden en sus pensamientos, mientras sacan sus propias conclusiones. Tan solo Zach se muestra nervioso por el silencio, paseando la vista de una a otra, pero sin atreverse a decir nada. Tras abandonar el acceso al pasadizo, regresan al aula que ha sido transformada en su habitación, pero no sin antes asearse un poco en los baños.

-Esto se está poniendo bastante peligroso, chicas. Ese hombre creo que era un alto mando, un general o algo así. Así que creo que manda más que el guaperas  supersoldado. No sé si se hacía el simpático para ocultar lo que pasa ahí atrás o si realmente no está al tanto de lo que ha hecho ese tío. Pero tenemos que hacer algo. En todas las películas en las que hay algún tipo de crisis, los soldados acaban siendo peor que la propia crisis. Creo que tenemos que salir de aquí, quizás si...

Las palabras de Rosalin callan de golpe y alzando una mano pide a sus amigas que guarden silencio. El sonido de botas acercándose por el pasillo se escucha cada vez más cerca, por lo que tras echar una carrera, lanza un vistazo hacia el pasillo.

-Zach, escóndete y no salgas hasta que te avisemos, corre.

Obediente, el muchacho se esconde bajo una de las camas y se queda completamente quieto. Rosalin comienza a hablar mientras toma asiento en una de las camas y pide a sus compañeras con un gesto que la sigan el juego.

-La verdad que con la presencia de los soldados me siento mucho más segura aquí, fue toda una suerte que nos encontrasen y rescatasen. Lo mejor será seguir el protocolo hasta que crean que podemos volver a casa, cuanto mejor hagamos lo que dicen, más fácil lo tendrán en su trabajo...

La cara de Rosalin es todo un poema al darse cuenta de las palabras que salen de sus labios, pero si tiene que hacer aquello para disimular y evitar que las disparen, lo hará sin dudar. Ademas, siempre es mejor que los soldados crean que están con ellos y no contra ellos.

Mientras hablan, dos soldados pasan frente a la puerta, pero uno de ellos tras verlas en el interior, hace un gesto a su compañero y ambos pasan al interior. Lo primero que perciben al verlos mejor, es que no son dos reclutas. Ambos soldados portan las marcas de la experiencia en las pequeñas arrugas que se forman en sus ojos. Si aquello no fuese solo, pese a portar el equipo completo de combate, se mueven con facilidad y con una seguridad arrolladora. Sus botas están cubiertas de barro y sus uniformes muestran manchas y desgarros propios de aquellos que ha entrado en combate.

-Número 29565, un paso al frente.

Rosalin los observa aturdida y lanza una mirada hacia sus compañeras, al percatarse de ello, el soldado señala la tarje que todas ellas llevan y que les fue entregada por doctor que se encontraba tras el escritorio.

Cada tarjeta dispone de un número.

29565...

Un número que está marcado en la tarjeta de Violeta.

-Número 29565, un paso al frente. Debe de acompañarnos de inmediato.

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02/05/2018, 17:39
#Larry Miller
Sólo para el director

Lo de las chinchetas me ha marcado. Mi familia, ¿cuanta logró salir de ahí con vida? Eso no me lo han querido decir, pero si la zona es roja, a mi me parece que no mucha... y siendo así, estoy preocupadísimo. Por una parte, estoy satisfecho conmigo mismo porque he encontrado quizás la información más importante que desconocía, mientras que lo que sucede aquí es algo secundario que sólo me dará una idea generalizada de como está la cosa. Lo importante són ahora mismo las zonas verdes, cuando venga el helicoptero, si mi familia lo desconoce, les diré dónde deben ir... pero no puedo irme del todo dejando atrás a mis seres queridos, aún si están infectados.

¿Qué hacer en ese caso? Volveré al hotel... buscaré a mi hermano, a mis padres, mi abuela, a todos... y a la mujer de mi hermano, que ahora también es mi familia. A todos. Si están vivos, los sacaré de ahí, como sea, y sino... miraré de resguardarlos en algún lugar para cuando encuentren una cura... simplemente, simplemente no puedo dormir tranquilo pensando que nunca hice lo suficiente. Mi pobre hermano, se suponía iba a ser el día más feliz de su vida...

Pero ahora, en el aquí y ahora, tengo que aguantar al oficial mientras me recomienda que hacer, a la espera de mi helicoptero, mientras termino de recabar toda la información.

-Yo me encargo de distribuir las tareas según las capacidades de los civiles. ¿A qué se dedicaba?

-Dirijo una empresa de transporte, soy bueno dirigiendo, un buen líder si lo prefiere. También se me da bien, por supuesto, la contabilidad, los recursos humanos... al fin de cuentas tengo que vigilar a quien contrato. Y, lo crea o no, se me dan bien las medidas de seguridad. Cuando empecé mi imperio, mi padre me dió buenos consejos, y uno de ellos era que supervisara personalmente todo. Al fin de cuentas a veces transportarmos material delicado o de gran valor, así que aprendí mucho de los mejores profesionales a los que contraté aquellos primeros dias. Quizás si necesitan ayuda con la seguridad, puedas hecharles una mano...

Creo que he sido convincente, parece por lo menos algo mareado, aunque todo se interrumpe cuando aparece otro militar de mayor rango en escena y con mucho más porte y aplomo. Los emblemas.. es un general.

De repente lo noto en el ambiente, se ha tensado con su sola presencia, e incluso este pelusilla de soldado está nervioso. Y menudos gritos pega, al decir "teniente" lo ha tenido más enfilado que un pincho moruno.

-Quiero toda esta zona despejada, lleve a los civiles a sus respectivos cuartos y que permanezcan allí. Tiene quince minutos.

El teniente alza el brazo como si de un resorte se tratase, realiza un saludo marcial y aguarda a que el general pase junto a ellos, en dirección a la sala de la que Larry ha escapado poco antes.

-¡Señor! ¡Sí, Señor! Los trasladaré de inmediato

 Me dan ganas de intervenir y hablar con el general, pero no es el momento. Siempre digo que las prisas són malas consejeras. Si intervengo ahora, aunque use mis dones para mitigar su ira, no voy a lograr nada más allá de una colaboración forzada y de calidad baja. Habrán mejores momentos para usarlo en mi beneficio, eso puede esperar.

Mientras me voy con el teniente, le digo, por lo bajito, tratando de seguir mi plan...

-Antes hablé con el doctor Walton, y tengo un permiso especial para salir de aquí. No soy como los demás civiles, en unos instantes vendrá un helicoptero a buscarme. Creo, que no estará contraviniendo al general, si me da libertad para moverme, ayudarles como dije en principio. Pienselo, si luego vienen a buscarme dónde están los demás y se enteran de que ellos aún deben quedarse, mientras yo me voy... eso va a generar un malestar preocupante; algo que podemos ahorrarnos. ¿No cree?

- Tiradas (1)

Notas de juego

¡Muy buenas!

Tiro de empatía a ver si logro conducirlo a mi terreno, mediante sus propias necesidades de ahorrarse más lio del que ya tienen (sobretodo si no quiere contrariar al general, enfadado como está, creyendo que luego si hay trifulca lo van a pagar con él, si digo que le avisé y no quiso hacer caso).

A ver si tengo suerte XD

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02/05/2018, 22:31
Lady Violet (Sophie)

- No creo que el capit... empezó pero se mordió la lengua. No podía poner la mano en el fuego por alguien que apenas había conocido. El capitán Wright parecía un hombre atento, servicial y con unos valores envidiables, pero seguía seindo un total desconocido para Sophie. - No podemos confiar en nadie ahora mismo. Lo mejor es empezar a poner en marcha nuestro plan de huída, hablar con el padre de Zack, contarle lo que hemos visto y...

Entonces se oyeron unos pasos. A la psicóloga se le heló la sangre ¿las abrían visto al bajar? ¿Quizña una cámara de seguridad en un punto ciego?  

Los soldados entraron exigiendo que violeta les acompañara. Todo esto sonaba demasiado mal. Estos soldados no eran de fiar y su labor había pasado a ser de protegerlas a tenerlas como prisioneras. 

- ¡Espere soldado! se interpone ella intentando ser lo más tajante posible frente a dos tipos que le sacaban cabeza y media. - Díganos de que se trata, o al menos déjeme acompañarla.   

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04/05/2018, 20:50
One World

A sabiendas de que tratar con el general puede ser una mala idea en aquellos momentos, Larry decide utilizar su labia con el joven oficial. Sus palabras, portadoras de un fuerte argumento no logran hacer mella en la armadura del oficial. El miedo y respeto que siente hacia el general, simplemente le impiden actuar de cualquier otra forma que no sea cumplir sus deseos.

-Ya ha escuchado las órdenes del general. Será trasladado hasta la planta que le ha sido asignada, el doctor Watson ya no dispone de ningún tipo de autoridad aquí. Si es cierto que un helicóptero viene para recogerlo, el general deberá de autorizarlo. De no hacerlo, será derribado de inmediato. Informaré al general de sus palabras, pero es mejor que vaya olvidándose de moverse libremente por aquí. Se mantendrá en la planta asignada hasta que el general ordene lo contrario.

Los civiles que se encuentran en la planta baja, empiezan a ser separados en grupos y enviados a sus respectivas plantas. Larry será enviado a la última planta, junto con dos personas más. El resto se dividen en las siguientes dos plantas, dejando mujeres y niños en una y hombres en otra.

Uno de los hombres que acompaña a Larry es extremadamente delgado, tanto que prácticamente es un esqueleto andante cubierto con una fina capa de piel blanquecina. Su cabello, rubio, largo y grasiento, se pega a su rostro otorgando a sus ojos oscuros un tamaño mayor de lo que realmente son. El hombre muestra un vendaje en el brazo derecho y se mueve de forma errática. Su mirada vidriosa y los escalofríos que recorren su cuerpo, recuerdan amargamente a Larry su episodio con el toxicómano al cual tuvo que...reducir en los ascensores.

El segundo hombre, es nativo americano de apenas metro setenta, pero de figura fibrosa. Sus cabellos, negros como la noche y extremadamente largos, se encuentran recogidos en una trenza que le alcanza hasta la cintura. El hombre camina sin prestar atención a lo que sucede a su alrededor, aunque cuando uno de los soldados le indica que camine más rápido, se detiene desafiante unos instantes antes de proseguir.

La única buena noticia, es que la última planta está disponible al completo para ellos tres. Por supuesto, en las escaleras permanece en todo momento una pareja de soldados cuya misión es que no salgan de allí. Por lo demás, disponen de libertar para moverse por aquella zona.

El nativo americano no se muestra muy hablador y se retira hacia una de las aulas reconvertida ahora en una habitación con literas, para meditar. Sí, meditar.

El toxicómano, abrazándose a sí mismo, se aleja dando tumbos investigando el lugar, con la esperanza de encontrar algo que le ayude a superar el mono.

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04/05/2018, 22:06
Violeta

Una vez de vuelta a la habitación respiro aliviada. Puede que sea una ratonera pero me siento a gusto. Todo lo a gusto que se puede una sentir en tal situación y quizás igual que el ratón que no espera que en su madriguera lo pueda atrapar el gato pero sé en mi fuero interno que no es un sitio seguro.
Los soldados que entran decididos y reclaman mi presencia confirman mis temores y la grata sensación de seguridad se esfuma en un instante cuando veo que el número que nombran es el que consta en mi targeta.
- Claro soldados, vengo con vosotros pero decidme por favor qué sucede y por que ne requieren. ¿Hay noticias de mi familia? ¿Puedo ayudar en algo? - Sophie, al igual que yo, teme por mi y por el hecho de volver a separarnos. Intento tranquilizarla. Aunque no sé si resulto demasiado convincente. - Sophie, estoy bien. Volveré pronto. ¿Verdad señores? - dirijo esta última pregunta a los dos soldados.

Dudo mucho que me requieran por nuestra reciente, digámosle excursión. Aún y así, no estoy nada tranquila, pues apenas he recuperado el aliento y el ánimo tras la ejecución de esa mujer. Deseo con toda mi alma que tengan noticias de mi familia... y que éstas sean buenas.
Con un leve temblor de piernas y el sudor enfriándose en mi espalda doy un paso al frente dispuesta a seguir los soldados.

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06/05/2018, 21:12
One World

Las marcas de sudor y polvo en el rostro de los soldados, unido a las marcas oscuras bajo sus ojos, indica que llevan largas horas despiertos y no precisamente en un puesto agradable. Aquellos dos veteranos parecen acabar de regresar de un campo de batalla al más puro estilo del Call of Duty.

-Apártese

Uno de los soldados, el más alto y fornido de los dos pronuncia aquella única palabra con toque de autoridad y peligro. Toda la colaboración y ayuda que el capitán les ofrecía poco antes, parece haberse esfumado por completo. Aquellos dos soldados tienen órdenes que cumplir y está claro que no quieren perder el tiempo.

-El sujeto 29565 será trasladado a la tercera planta, lugar donde debería de estar en un principio. Por su propia seguridad y la vuestra, deberá de permanecer allí hasta que lleguen los vehículos de evacuación.

El segundo soldado, cuyo rostro fino y alargado, le otorga una apariencia un tanto desagradable, toma  la palabra explicando qué es lo que desean hacer con Violeta. Aquel hombre parece mucho más razonable que su compañero, pero ante todo es un soldado, por lo que piensa cumplir sus órdenes con total precisión.

-Hasta nuevo aviso, los civiles deberéis de permanecer en la planta que os ha sido asignada. Tan solo durante los horarios de los desayunos, comidas y cenas, se os permitirá el acceso a la planta baja. Ahora necesito que se haga a un lado, nosotros tan solo cumplimos con nuestro deber. No estamos aquí en calidad de enemigos y por mucho que la resulte desagradable, todo lo que hacemos es para su protección.
 

El primer soldado, aquel gigante de nariz gruesa y plana, resopla ante la perdida de tiempo a la que les están sometiendo. Así que vuelve a tomar la palabra una vez más.

-Los infectados irán a la última planta, al menos aquellos que han tenido el virus en sus cuerpos y han logrado librarse de él. Desconocemos aún cómo funciona realmente esa cosa, así que para evitar riesgos innecesarios, todos los supervivientes a un mordisco, serán encerrados en la misma planta. ¡Vamos!

Con un gesto brusco de la mano, indica a Sophie que se aparte y a Violeta que les siga.

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07/05/2018, 01:55
Lady Violet (Sophie)

En el mismo instante en el que menciona el contacto de Violeta con ese misterioso y letal virus, me viene a la mente la conversación que tuvimos apenas unas horas atrás, frente a las salas donde los doctores hacían esos tests y entrevistas.

Mi amiga me había dicho que la recepcionista del hotel, aquella mujer joven y rubia. entonces totalmente ida y con sed de sangre, las misma que atacó a Rob, al que intenté ayudar y no recuerdo si lo logré y a la que casi le abro la cabeza con un palo de golf (regalo de boda para el novio), la había mordido.

¿Porqué a ella no le había infectado? Los efectos, por lo que habían visto en la boda, eran prácticamente inmediatos y ella no sólo evitó su efecto en el momento del ataque, sino que habían pasado muchas horas desde entonces y seguía como si nada.

- De acuerdo. - respondo al gesto brusco y amenazante del soldado más corpulento. - ¿Cuando dice encerrados se refiere a que están en algún tipo de cuarentena? ¿No pueden salir de esa planta ni bajar a la planta baja donde estamos el resto?

- Violeta, procuraré hablar con el capitán a ver si podemos hacer algo, o al menos ponerme en contacto con él para ver si sabe algo de tus hijos. En cuanto tenga noticias, intentaré pedir un permiso para subir e informarte ¿de acuerdo?  - le digo finalmente a mi amiga Violeta, que pese a todo no parece tener ningún miedo por que se la lleven.

- Ten mucho cuidado. - le susurro mientras la abrazo antes de que se la lleven, para luego lanzarle una mirada. Mis ojos no sólo denotan preocupación por el hecho de que va a estar encerrada junto a otros portadores del virus, si no que quiero darle a entender que quizá los más peligrosos sean los propios soldados que la custodiarán.

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07/05/2018, 06:19
Violeta

No tenía yo el cuerpo para rechistarle nada a esos soldados. Tampoco iba a servir de nada. Me hicieron sentir sucia y avergonzada. Una apestada con un virus de consecuencias desconocidas que en cualquier momento merecería una bala en mi cabeza.
Detuve a Sophie tapándole la boca con un dedo para luego darle un abrazo. Un corto abrazo pues sentía la presión de la espera impaciente de los soldados. Me aparté y le di un beso en la mejilla a Rosalin.
- Chicas, me voy al piso de arriba y nos vemos en los mejores momentos del día. Con un buen plato delante - no se me ocurrió nada mejor que decir. Creo que ahora fue mi estómago rugiente el que habló por mi. Tenía hambre, sueño y un abatimiento que hacía que la aceptación fuese mi única respuesta.
Seguí los soldados hacia mi nuevo destino.

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07/05/2018, 11:47
Rosalin

El más robusto de los soldados indica a Violeta que camine delante en dirección hacia las escaleras de acceso a la planta. El segundo soldado, el más pequeño y menos agraciado, se permite unos segundos más con Sophie y Rosalin para aclara la situación.

-Hasta nuevo aviso, todos los civiles deberéis de permanecer en la planta que os ha sido asignada. Tan solo se os permitirá acceder a la planta baja en los horarios de desayunos, comidas y cenas. La situación se ha complicado y para su seguridad, el general ha decidido que es lo mejor. Buenos días.
 

Rosalin permite que el soldado parta junto con su compañero y Violeta, sin importunarlo más. Tan solo cuando se asegura de que ya han salido de la planta, se agacha para indicar a Zach que salga de su escondite.

-Necesito que hagas una cosa, regresa a la planta donde está tu habitación y permanece allí, si necesitamos contactar contigo, dejaremos un mensaje en el pasadizo secreto. No hace falta que vayas allí cada poco tiempo, hazlo cada hora u hora y media. Ahora vamos, corre.

Con el entusiasmo que tanto le caracteriza asiente con una amplia sonrisa, y sale corriendo hasta desaparecer por el pasadizo que une prácticamente todas las plantas. Una vez a solas, Rosalin vuelve a asegurarse de que no hay nadie cerca para poder hablar con tranquilidad con Sophie.

-Los soldados no saben nada del pasadizo, así que podemos movernos entre plantas para ver lo que sucede e incluso llegar hasta Violeta. No sé que es lo que ha pasado, pero creo que la situación es bastante mala, al menos eso parece por el aspecto de los soldados. Debemos pensar qué hacemos, seguramente dentro de poco empezarán a enviar más gente a las plantas. Así que nos resultará más difícil movernos y pasar desapercibidas, además corremos el riesgo de que alguien más descubra el pasadizo y nos joroben el plan de huida...¿Por qué ese es el plan, no? Es decir, vamos a largarnos de aquí ¿No?

La nueva actitud de los soldados no le gustan un pelo a Rosalin. Acaban de transformarse en los crueles nazis que trataban de detener a Indiana Jones y eso no la agrada lo más mínimo. Mucho menos la idea de separarse de Violeta ¿Realmente la mantendrán a salvo en la planta de arriba o harán otro cosa con ella?

-Necesitamos un buen plan para salir de aquí. Un vehículo, provisiones y saber lo que está pasando ahí fuera. No es cuestión de que saltemos de la sartén al fuego. ¿Crees que podrás sonsacar algo de información a tu amigo el capitán América?

 

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07/05/2018, 12:02
One World

El soldado mas robusto indica con un gruñido y un gesto de la mano, que Violeta avance primero hacia las escaleras. Su compañero, el soldado menos agraciado, permanece unos segundos más hablando con Sophie y Rosalin, antes de volverse y acelerar el paso hasta alcanzarla.

Las escaleras son ahora un lugar muy transitado, los soldados están llevando a sus respectivas plantas a cada civil que poco antes, se encontraba en la planta baja. Casi todos son distribuidos en la primera y segunda planta, la última está destinada a unos pocos privilegiados.

Nada más adentrarse en el pasillo de la última planta, la mirada de Violeta se cruza con la de Larry. Ambos se reconocen enseguida, aunque la última vez que se cruzaron, ninguno estaba en su mejor momento y una horda de enloquecidos caníbales les perseguían. Ahora parece que comparten destino y lugar de descanso.

Dando tumbos por el pasillo, un hombre esquelético con el pelo pegajoso y profundas ojeras, se desliza hasta una de las habitaciones, para acostarse sobre una de las camas. La cuarta y última persona de aquella planta, es un nativo americano de largos cabellos negros como las plumas de un cuervo, recogido en una trenza que le alcanza la cintura. No es especialmente alto, pero posee un cuerpo fibroso y atlético. Este último lanza una mirada imposible de calificar a Violeta y se adentra en otra de las habitaciones.

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08/05/2018, 12:49
Lady Violet (Sophie)
Sólo para el director

Sophie ve como se llevan a su amiga Violeta. No puede dejarla a su suerte, pero ahora mismo lo mejor que puede hacer por ella es ponerse en marcha e idear un plan de huida.

- Esa es mi Rosy. - de digo sonriendo, viendo como mi otra amiga ha recuperado su espíritu inquieto y revelde.

Zack se marcha por ahora. - Es nuestro enlace para hablar con su padre.- comentó a mi compañera. - El puede ser nuestra primera y mejor vía de escape. Por que a menos que sepas pilotar un helicoptero del ejercito... - le digo en broma. - ...Ese camión es nuestra mejor baza.

Comienzo a meditar cual debe ser nuestro próximo paso. ¿Quizá hablar con el capitán Wright? Parecía no sólo ser un buen soldado si no también un buen hombre.

¿Averiguar como está la situación fuera de la imporovisada base militar? La única vía por ahora era el telefono móvil y eso implicaba a su propietario, el padre de Zack. Necesitabamos su huella dactilar.

Lo que si estaba claro es que había que escapar de ahí...

- Muy bien. - concluyo tras meditarlo un poco. - Vayamos a hablar con el Capitán América pues.

Rosalin y yo misma nos cambiamos de ropa, para evitar levantar sospechas. Estaba sucia de habernos metido por el pasadizo. Hicimos un paquete y esvondimos los dos conjuntos mugrientos únicamente para nuestras "escapadas".

Comenzamos por nuestra planta y vamos descendiendo para ver si nos topamos con el capitán...

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08/05/2018, 18:20
Rosalin

-¡La chica indi a vueeeeelto!   -Grita llena de entusiasmo tratando de ocultar la oscura mancha que aún pesa sobre su alma. No está segura de lo que se encontrarán fuera de aquel lugar, pero cualquier cosa es mejor que quedarse allí parada y pensar en lo que han vivido. Tal vez, algún día pueda enfrentarse a sus recuerdos, pero por ahora es mejor mantenerse activa y con la mente ocupada.    -Solo veo un problema en tu plan, los soldados han dejado muy claro que no podemos salir de esta planta. Solo nos dejaran bajar a la zona común durante las comidas. Así que o bien tratamos de seducir a los soldaditos que vigilan las escaleras o nos colamos por el pasadizo en plan ninjas para buscar al capitán.

Mientras hablan, gritos lejanos las empujan a investigar lo que sucede, en especial a Rosalin. Al llegar a las escaleras, los gritos son mucho más claros y pueden escuchar con exactitud lo que dicen.

-Me niego a separarme de mi mujer y de mi hija. No tienen derecho a ello, mi hija está demasiado asustada, así que salgan a cumplir con su trabajo, en vez de estar aquí abusando de su poder. ¿Se creen muy duros al estar armados? ¿Es eso? ¿Creen que nos van a intimidar por ir armados? Tengo mis derechos y no pueden...¡Aagghh!

El aullido de dolor precede al sonido de un golpe seco, que se repite una segunda vez con un efecto mayor. Los soldados acaban de perder la paciencia y con un golpe de su arma, acaban de enviar al hombre que les desafiaba al suelo. El llanto de una niña y de una mujer llega también hasta ellas, a la vez que escuchan la voz de la mujer pidiendo que por favor no hagan daño a su marido.

El murmullo de muchas otras voces que se empieza a extender es de pronto silenciado con el disparo de un arma. El sonido, potenciado por el eco que se produce en las escaleras, hace que todos guarden silencio. Acto seguido, una voz masculina ordena que se lleven al hombre a la planta que le corresponde y que las mujeres continúen hasta la suya.

No hay más objeciones.

-¡Dios santos! ¿Se han vuelto locos o qué? Vale, ahora sí que hay que salir de aquí. No creo que nos dejen bajar, podemos preguntar por el capitán, pero no estoy segura de que esos energúmenos que hay en las escaleras nos vayan a ayudar.

El llanto enloquecido de la niña se hace cada vez más audible, parece que madre e hija van directas a la planta en la que se encuentran Sophie y Violeta. Ninguna ha visto nada realmente, ambas se han quedado en el pasillo, sin acceder a la puerta que da a las escaleras. La precaución después de todo, puede ser lo que las salve de meterse en un gran, gran problema.

 

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10/05/2018, 01:42
Lady Violet (Sophie)
Sólo para el director

- Voy a intentar que esos soldados me lleven a ver al capitán. Según me dijo quería que le hiciera un favor y era que prestara mi ayuda psicológica a las personas que fueran llegando. Dijo... - me detengo para recordar con detenimiento la conversación que habíamos mantenido quizá una hora antes. - ...que siendo yo alguien ajena a esta base la gente sería más receptiva conmigo que con aquellos doctores que sólo buscan tenernos controlados como un número más. 

Los pasos de la esposa y la niña se acercaban cada vez más a la sala donde se encontraban...

- Intentaré hacer algo por esta mujer y su hija. Luego procuraré que me den un permiso que me permita hablar con el capitán, con la excusa de que es algo importante relacionado con algo que me ha encomendado realizar. 

Finalmente son visibles para nosotras. Están claramente destrozadas por todo lo que está sucediendo. Especialmente por el reciente suceso, donde el padre y marido de aquellas dos mujeres había sido golpeado y arrastrado en contra de su voluntad a la planta de la cuarentena.

- Acompañadme... todo saldrá bien. - les digo mientras le lanzo una mirada de preocupación a Rosalin. Estábamos en una situación limite y nosotras debíamos ser fuertes. Tanto como para poder sobreponernos y ayudar a esas personas.

Notas de juego

Si son importantes quiero hablar con ellas, si solamente son PNJ sin mucha importancia prefiero que saltemos a la parte en la que intento convencer a los guardias para que me acompañen o al menos me dejen pasar para poder hablar con el capitán Wright insistiendo en que es a petición suya. Y hago énfasis en que necesita de mis habilidades lo antes posible.  

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10/05/2018, 20:34
#Larry Miller

-Ya ha escuchado las órdenes del general. Será trasladado hasta la planta que le ha sido asignada, el doctor Watson ya no dispone de ningún tipo de autoridad aquí. Si es cierto que un helicóptero viene para recogerlo, el general deberá de autorizarlo. De no hacerlo, será derribado de inmediato. Informaré al general de sus palabras, pero es mejor que vaya olvidándose de moverse libremente por aquí. Se mantendrá en la planta asignada hasta que el general ordene lo contrario.

Palidezco por unos instantes, me lo estoy notando. ¿Que van a derribar el helicoptero? ¿El de mi abuela? Me dan ganas de liarme a tortas, de gritar, de pegar fuego al edificio para evitarlo. Sólo me controlo por dos razones, porqué soy un ser racional y buscaré la solución de forma racional, y porqué me ha dicho que informará al General. Quiero pensar que no abrirán fuego tan alegremente cuando el helicoptero ni tan siquiera sabe que de momento se ha revocado el permiso.

Maldita sea... algo debe haber pasado para que Watson pierda la autoridad, la presencia del General debe significar que algo está cambiando en este sitio... quizás el instituto empiece a tener la forma de una puñetera chincheta roja.

En momentos como éste me alegro de mi osadía, de haber logrado mis herramientas. Sospecho que me harán falta.

Mientras nos separan, para que estemos incomunicados, seamos menos numerosos, y por lo tanto menos problemáticos (me pregunto si alguién más habrá caido en eso, suelen ser muy simples), me fijo en mis compañeros de viaje, hasta la última planta.

El primero de los hombres, el esqueletico, me evoca al toxicamo que tuve que asesinar... y por unos instantes, sólo por unos instantes, mi determinación dan paso a la culpabilidad. Aunque me digo mil veces que tuve que hacerlo, una parte de mi se pregunta si no me precipité, si se podría haber salvado con la atención adecuada. ¿Acaso no es mi plan para mi familia? ¿Tan hipócrita soy? Pero recupero mi compostura, al tiempo de mirar al otro que nos acompaña, porqué no puedo permitirme tiempo a la introspección, no ahora almenos.

El nativo americano, orgulloso, de melena larga y desafiante... útil a corto plazo, futuro cadáver. Empezando por su actitud, ¿así espera conseguir algo? Sólo empeorará su situación, y si toca mucho las narices, la de los demás. Yo entiendo lo de ser desafiante, a mi me encantan los desafios, pero hay que saber manejarlos, saber cuando toca mover ficha y cuando fingir tranquilidad... él no parece comprenderlo, no tiene cabeza para esas cosas. Además, el pelo largo... ¿acaso no ha visto como se desenvuelven los infectados? Bueno, quizás tuvo esa suerte, pero de haberlos visto como hice yo, de ser alguién inteligente se habría cortado ese pelo. Si se lo agarran lo matarán... como dije, útil a corto plazo.

Y no lo digo como si me importara una mierda su vida. Pero... tengo la sensación de que tiene algo contra el orgulloso hombre blanco, y no tengo tiempo para tratar de lidiar con su ego, mi familia me necesita. Eso es lo que importa.

Y por lo visto estamos solos, salvo las vigilancias de las escaleras... tengo mi cuerda y mi equipamiento oculto, el problema es que mis "compañeros" me verían y entre el 'toxicomano' y el 'orgulloso', no me puedo fiar de ninguno, tsk...

Tendré que enfrentarlos para que se olviden de mi y... espera, algo sucede.

Esa chica... su nombre... ¿era Violeta? Nos cruzamos las miradas, nos reconocemos. Me alegro de verla. De verdad... una muerte menos en mi conciencia. Lo malo de saber el nombre de una persona es que tu cerebro, quieras o no, en menor o mayor grado ya se implica. No es lo mismo hablar de cientos de muertos que ni sabes como se llaman que de la muerte de un nombre, aunque fuera lejano.

Los nombres, como las palabras, también tienen poder.

Mis "compañeros" se van a sus camas, o mejor dicho las que han elegido para ellos, así que aprovecho esos instantes para saludar a Violeta. A medida que me acerco, le dedico una sonrisa, y aunque mis palabras dicen algo chocante, mis gestos muestran otra cosa...

-Violeta, me alegro de verte. ¿Te vienes conmigo a la cama? -tal cual, si es que en el fondo soy un provocador. Y aunque eso hará que por pudor nadie se quiera asomar a ver lo que hacemos, en caso de que ella acceda, le muestro mis verdaderas intenciones destapando un poco de mi ropa para revelar la cuerda que tengo atada, así como algunas herramientas que asoman, como la navaja multiusos. Luego cabeceo hacia la sala con cama, más alejada de mis "compañeros" y de los guardias de la escalera- te lo pasarás bien, nunca tuve queja, te lo aseguro.

Notas de juego

Perdón Violeta, menudo recibimiento XD

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11/05/2018, 00:17
Capitán Wright

Durante la siguiente hora, Sophie se encarga de cuidar y calmar tanto a la madre, como a la hija. Ambas están aterradas, no solo por el encuentro con los soldados, sino por lo que han vivido en Topeka. Cuando la niña por fin se duerme de puro agotamiento, la madre confiesa que la ciudad está sumida en el caos. El mundo ha enloquecido y cientos de personas han invadido las calles con el único fin, de sembrar la muerte y la destrucción. Las fuerzas policiales fueron superadas hace horas y el ejército no parece tener mejor resultado.

Ellas y su marido han tenido suerte, los soldados, aquellos que no estaban abriendo fuego de forma indiscriminada, las rescataron y trajeron hasta allí. Pero ahora temen por sus vidas, en especial, por la de su pequeña. También teme por las heridas que le han causado a su marido, desea saber si está bien, pero no se atreve a preguntarlo. No quiere que la separen de su hija o que golpeen más a su marido.

Finalmente, ella también cae dormida abrazando a su pequeña.

-El mundo se va a la mierda, esto parece el jodido Apocalipsis.    -Suelta Rosalin con un susurro.    -¿Crees que se tratará de algún tipo de agente químico soltado en el aire o en el agua? Es lo único que se me ocurre para dar sentido a todo lo que está pasando. Eso o que estemos en medio de algún tipo de broma televisiva muy elaborada.

Pero no se trata de ninguna broma, sea lo que sea lo que está pasando, ha afectado a toda Topeka. La infección se extiende con tanta rapidez, que incluso el ejército parece incapaz de contenerlo.

Con aquella oscura revelación, ambas dejan descansar a la madre y a la niña, para acudir en busca de los soldados que custodian las escaleras. Aunque en un principio se niegan a facilitarlas cualquier información o incluso, a comunicarse con el capitán, uno de los soldados acaba accediendo. Su mirada recorre el cuerpo de Sophie, sin preocuparse lo más mínimo en disimular que trata de adivinar cómo son sus curvas bajo aquellas prendas carentes de glamour que en aquellos momentos portan.

El capitán llega al de unos pocos minutos, pasa entre los soldados y se las lleva consigo hasta un discreto rincón de la planta. La furia arde en la mirada del capitán y está claro que la paciencia no es precisamente su mayor virtud en aquel momento.

-Ahora mismo estoy demasiado ocupado. Lamento el encierro, pero son órdenes del general. Pero mientras obedezcáis, estaréis bien   -Sin deseo alguno de perder más tiempo del estrictamente necesario, rebusca en uno de los bolsillos y revisa su libreta.    -Lamento comunicaros que no he logrado dar con nadie situado en Topeka, aunque tus hijos está a salvo, Violeta y muy lejos del peligro. Las líneas de comunicación están colapsadas y la llegada de refugiados es tan sumamente apabullante, que en los campamentos están prescindiendo de los registros informáticos. Así que no perdáis la esperanza, ahora decidme ¿Qué necesitáis?

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13/05/2018, 00:27
Violeta

Me uno a un grupo supongo de apestados imprevisibles como yo a los que echo una ojeada sin demasiado interés. Quiero llegar a mi nueva habitación y echarme a dormir hasta el día siguiente, o el otro. Que asco de todo. Mirando mis zapatillas y las del tipo que me precede para no pisárselas sin querer, llego a la tercera planta. En ésta seguro que habrá más vigilancia y más nos vale. Si algún médico no ha hecho bien el trabajo y algún compañero de planta brota, puede haber una escabechina. 

A medida que vamos entrando se van llenando las habitaciones. Yo ando hasta encontrar alguna vacía, miro atrás para comprobar que no se meta dentro conmigo algún tipo raro y entonces veo al hermano del novio de la boda de Alice, ... Larry.

El humor me cambia de repente. Ya no lo veo todo tan oscuro y fatal. Al menos tendré una compañía agradable y no veteasaberquíén que se meta en mi habitación. Le sonrío, una débil pero sincera sonrisa. Le veo venir hacia mi. Sin el traje ha perdido algo de apariencia, supongo que igual que yo. Ese uniforme de gimnasio de reclusos no le sienta bien a nadie. Pero sigue mostrando buen porte y seguridad en si mismo con sus andares. 

- Hola Larry, lo conseguiste tú también - muestro una media sonrisa, pues decir eso hace pensar en los que no lo han conseguido y yacen devorados o andan en busca de más comida. ¿Se habrán comido a Chet?

-Violeta, me alegro de verte. ¿Te vienes conmigo a la cama? Te lo pasarás bien, nunca tuve queja, te lo aseguro.

 

Vaya con Larry. Al principio me sorprende. Está claro que está de broma, y me gusta. Un poco de buen humor y picardía me ayudará a subir el ánimo. Entonces se sube la camiseta. Más sorpresa por el gesto. Tampoco conozco a Larry pero no entiendo a que viene ahora enseñarme su estómago. ¿Cómo estará? Tiene pinta de estar cuidado el chico. 

Veo con asombro todo el material que lleva escondido debajo de la camiseta. Aún me sorprende más. ¡Vaya pispa está hecho!

Mi sonrisa se está ensanchando. Y mi ánimo también. Bien pensado, tampoco hubiera sido mala opción echarse con él. Tiene actitud, es guapo, listo, valiente y fiel, pues se quedó en la sala infestada de muertos de hambre para advertir a su hermano, y tiene pasta. ¿Qué más se puede pedir?

Me doy cuenta de la historia que me acabo de montar en mi cabeza. Sí, vale, el estrés tiene que salir por algún lado. Pero no, aquí no y así no. Esto sería aceptar un estado de anormalidad del que quiero salir cuanto antes. Y veo que Larry piensa como yo. Ahora deberemos idear un plan. Tiro de él hasta la siguiente habitación, también vacía. Pues es la que debería tener el conducto por el que podríamos bajar hasta la planta baja y comunicarnos con Rosalin, Sophie y el joven Zach.

- Ésta mejor. Hazme caso - le guiño un ojo y cierro la puerta. - Tendremos que ponernos al día y veo que tú tienes unas cuantas que contarme. ¿Te has escapado a la tienda de bricolaje de la esquina entre guardia y guardia de los soldados? Dime qué tienes pensado, verás como yo también podre serte de ayuda. 

El conducto que nos ha enseñado Zach, será con total seguridad el camino para salir de aquí. Pero antes quiero que él me cuente qué ha planeado pues con tanto material seguro que tiene algo bien pensado.

Notas de juego

Chet es el marido de Violeta ... hasta que la muerte los separe ;) 

Si no tiene tal suerte probará con el divorcio que dicen que también surge buen efecto.

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14/05/2018, 23:26
Lady Violet (Sophie)
Sólo para el director

El testimonio de aquella mujer y su pequeña le encogió el corazón en un puño. No podía verlas sufrir y no hacer nada por ellas, así que las atendió todo lo bien que pudo, teniendo en cuenta las circunstancias en la que se encontraban tanto ellas como Sophie, que empezaba a verse sobrepasada por la situación.

Dejando el drama de aquella familia a un lado, pensó en el panorama general. Muchas más personas estarían sufriendo aquella pesadilla, teniendo en cuenta que la pandemia se había extendido por toda la región. En última instancia un pensamiento se cruzó en su mente. 

¿Sería más peligroso estar en un lugar rodeada de militares asesinos o quizá valía la pena correr el riesgo y escapar? 

Con ese pensamiento en la cabeza, decidió hablar con el capitán. En aquel momento era el único en el que podía confiar, o eso creía. Él único con la capacidad de darle información de primera mano de lo que estaba sucediendo. Y quizá el único que tuviera alguna posibilidad de hacer algo en cuestión al asesinato a sangre fría que poco antes habían sido testigos...

Lo que ocurrió desde aquel momento hasta la llegada del capitán paso por la vida de Sophie como un soplo de aire. Las palabras de incredulidad de Rosalin, las miradas indiscretas de los soldados... eran cosas a las que ahora mismo no podía prestar su debida atención.

- Se han llevado a Violeta a la última planta. Dicen que estaba expuesta al virus por una mordedura. Intentaré comunicarle que sus hijos están bien.- carraspeó  - O que al menos no se encuentran una de las zonas de peligro.

Si no había tenido comunicación directa no podía asegurar nada. De todas formas Violeta agradecería que al menos lo hubiera intentado.   

- Tengo que hablar contigo de algo muy grave de lo que hemos sido testigos. - dice mirando que nadie más pueda estar escuchando lo que estaba apunto de decir. - Uno de los mandos de alto rango, un general quizá, disparó a sangre fría y por la espalda a una mujer que estaba escapando.

- No me preguntes como ni porque estábamos allí... sólo puedo decirte lo que vimos. - confiesa algo avergonzada por haber hecho caso omiso a las indicaciones del capitán de no meterse en líos.- Pero esto es algo muy serio.

Finalmente miro al capitán a los ojos en busca de una respuesta...

- ¿Que está pasando aquí capitán Wright? Si fuera es todo un caos y aquí nuestra vida no tiene ningún valor... - imploro una respuesta a la desesperada situación en la que nos encontramos. Esperando que de alguna forma ese buen soldado, ese buen hombre arrojara algo de luz entre las sombras.