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El Liceo: Escuela de Superhéroes

Interludio de Iván y Moussa: El Plan

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06/09/2016, 10:04
Sextus

Y en ese momento, en medio de aquel caos la puerta de la habitación se abrió. Se escuchó una voz profunda, intimidante y conocida.

- ¿QUÉ ESTÁ PASANDO AQUÍ?

Sextus entró en su habitación. Iba vestido con su atuendo habitual, una especie de armadura que recordaba a los romanos de antaño. En su cinturón brillaba una lucecita roja, a la par con la del panel junto a la caja fuerte.

Cuando vio a los estudiantes todos pudieron concluir al instante que estaba jodidamente cabreado. Su ceño se frunció tanto como jamás habían visto – cabe decir que jamás lo habían visto alterado.

Durante un momento parecía que el profesor iba a decirles algo del estilo:

“Estoy muy decepcionado con vosotros. Os vais todos al despacho del director.”

Pero no lo hizo.

¡Sacó sus garras! ¡Flexionó las piernas!

Como si fuese a saltar sobre sus presas.

- Tiradas (5)

Notas de juego

No bromeo. Comienza el combate.

Orden de Iniciativas:
- César
- Sextus
- Fantasma
- Moussa
- Iván

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06/09/2016, 10:09
César

- Tío - dijo César, intentando arreglar la situación de buenas maneras -. No queríamos cabrearte tanto, sólo era una broma de nada. 

Sus palabras no tenían mucha fuerza...

- Además, no puedes atacarnos así como así. ¡Eres nuestro jodido profesor!

Notas de juego

Turno 1

- César intenta hablar con Sextus.

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06/09/2016, 10:11
Sextus

Sextus ignoró completamente a César. Moussa e Iván pudieron verlo en su rostro, no parecía un ser inteligente. Sólo un animal. 

De un gran salto se lanzó contra el senegalés. Lo embistió con fuerza y lo estampó contra la pared.

Aquello había dolido...

Sextus gruñó con fuerza, acercando su hocico al rostro de Moussa. El senegalés pudo ver los afilados dientes del profesor bien de cerca.

- Tiradas (2)

Notas de juego

- Sextus se lanza contra Moussa en un brutal ataque, le causa 1 Herida.

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06/09/2016, 10:17
Fantasma

Fantasma seguía forcejeando, desnudo, con la caja fuerte. Estaba completamente en fase, con el brazo metido dentro de la caja. No podía escapar.

Notas de juego

- Fantasma forcejea con la caja fuerte, no puede escapar.

Turno de Moussa.

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06/09/2016, 17:37
Moussa Dakar

-¡Ya estoy aquí! Siento el retraso pero he traído unos helados de choco...¡Ey! ¿Por qué estás en pelotas? ¡Joder! me voy cinco minutos y la que preparáis, dejarme a mí...

Pero Moussa no tuvo tiempo a reaccionar, pues un enfurecido rey león entró en la habitación con cara de muy pocos amigos. El senegalés estaba apunto de decir algo, cuando sintió como el enorme león cargaba contra él con todas sus fuerzas. El golpe fue tan brutal que lo lanzó contra la pared y le hizo perder el aliento. En su recorrido por el aire, había dejado caer la bolsa de basura, así como los deliciosos helados de chocolate que traía con él.

-¡Aggghhh! ¡Eso...eso duele jodido maniaco! ¡Iván, ciega a este jodido gato de mierda!

Moussa lanzó la orden a Iván con la esperanza de que este la cumpliese y en especial, que el león cayese bajo el poder de su compañero y quedase, al menos momentáneamente, cegado. Sabía que hacerle frente no era buena idea, aquella cosa peluda era más fuerte y más rápido que ellos, lo único que necesitaba era ganar algo de tiempo. Estaba seguro de poder sacar a sus compañeros de allí con vida, aunque claro, otra cosa sería después salir él mismo de allí con vida.

Tras retrasar su acción, Moussa usó el martillo de Thor para engullir a sus compañeros en diversos portales de teleportación y trasladarlos hasta el pasillo, a unos cuantos metros de distancia de la habitación. Por el momento prefería no alejarles demasiado, por si las cosas se le complicaban demasiado y requería de su ayuda para salir vivo de todo aquello.

Iván y César podrían ser teleportados sin problema. Aunque la cosa podía ser diferente con fantasma. No estaba seguro de poder liberarlo de la pared, pero si lo lograba, estarían todos a salvo. Bueno, todos menos él mismo. Así que dependía de Iván y su poder para cegar al león como medida para salir de una pieza de aquel jaleo.

-¿De quién diablos fue la brillante idea de venir aquí? ¡Ultima vez que os hago caso!

 

Notas de juego

Pues lo dicho, retraso la acción para que actúe primero Iván. Después trataré de teleportarles a todos. Con las dotes y extras que tengo, creo que podría sacar a fantasma de ahí. aunque eso ya que lo confirme el master jeje

Un saludo!

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07/09/2016, 18:10
Iván Auriol

César asintió a lo que sugería Iván, y bueno, fantasma no estaba en condiciones de pensar claramente. Intentó concentrar su poder al máximo en la puerta, aunque con un poder tan caótico la precisión no era precisamente lo suyo. No le preocupaba mucho afectar a Fantasma, el pobre estaba tan inmaterial que se había quedado desnudo, pero no estaba de más tener precaución.

Su poder no fue suficiente para lograr nada más que desconchar la pared, sin conseguir siquiera arañar la caja. Había causado grandes destrozos en la sala, pero no estaba ni cerca de su objetivo. Aquello era malo.

Pero no tan malo como lo que pasó después. Moussa apareció con la bolsa de basura y unos helados, pero antes de que pudieran decirle nada Sextus irrumpio en la sala, enojado era decir poco. Iván se fijó en un detalle (eso que ocurre cuando el tiempo se ralentiza al ver llegar tu muerte…), y es que en su cinturón se veía un círculo rojo semejante al del cubo que había lanzado antes por ahí.

Y entonces en vez de echarles la bronca y sacar a Fantasma del atolladero, saltó como un animal depredador cualquiera contra Moussa.

- ¡Moussa!

Iván no pudo ver si le había hecho daño realmente, esperaba que no, pero Moussa le gritó una orden y ni siquiera se paró a pensar en lo que hacer. Simplemente acató.

Concentró sus poderes de forma algo distinta a lo habitual, intentando crear muchos puntos luminosos de poco poder, tantos como pudiese, y ordenarles dar vueltas alrededor de la cabeza del profe. Era otra cosa que no había hecho nunca, pero supo instintivamente que su magia era lo bastante elástica como para permitir ese cambio, y no tuvo tiempo material de preocuparse de lo que le costaría conseguir ese efecto.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Ciega-leones neinzausen (modificando mi ataque principal)

Affliction (dazed, stunned) – Will defense

Coste = (Base(1) + Concentration(1) + Progressive (2) + Limited (-1))= 3 x 4 Rangos = 12 coste

Coste = (Base(1) + Concentration(1) + Homing 1 (1) + Limited (-1)) x 4 Rangos + Accurate+4 (2) + Reach2 (2) = 12

 

Es la segunda vez que improviso un ataque. Depende de ti si ya me había recuperado de la primera o estoy mas fatigado todavía ^^
 

Edit: He cambiado el ataque. Ya no es progresivo, pero sigue teniendo de duración "concentración". Le he puesto homing 1, que hace que si falla una vez lo reintenta automaticamente en mi siguiente turno mientras pueda hacer free actions, y le he puesto 2 rangos de accurate (que me da un +4 a mi tirada de ataque, el maximo que puedo ponerle) y le he puesto Reach 2 que incrementa el alcance 5 pies por cada rango.... Por eso de no tener que estar "in your face", aunque el ataque siga contando como melee.

Y ahora si, tiro el dado.

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07/09/2016, 23:01
Narrador

Las luces de Iván volaron hacia Sextus y comenzaron a arremolinarse entorno a su cabeza. El ataque de Vent buscaba aturdir al león, darle tiempo a sus compañeros. 

Sextus rugió con fuerza y agitó el aire con una de sus zarpas, disipando el ataque de Iván. Las luces se dispersaron, pero no desaparecieron del todo. Estaban listas para lanzarse de nuevo contra Sextus cuando Iván las pudiese comandar de nuevo.

Aunque Moussa había tratado de ganar tiempo la situación no había mejorado en lo más mínimo. 

Ahora dependía de él.

Notas de juego

- Moussa retrasa su turno.
- Iván usa Esfuerzo Extra para tratar de cegar a Sextus con su poder, sin embargo su ataque falla. Iván pasa a estar Fatigado (independientemente del truquito de antes). Tienes otro intento en el próximo turno.

- Turno de Moussa

Si vas a intentar teletransportar a Fantasma debes hacer una tirada con el rango de tu poder.

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08/09/2016, 23:33
Moussa Dakar

Iván poseía un gran don para manipular la magia y lograr toda clase de efectos mágicos. Con más tiempo y un mayor dominio de sus poderes, seguramente podría hacerse cargo él solito de enemigos como el león Aslan. Pero por desgracia ese día aún estaba un poco lejos y pese a que seguramente Moussa habría caído presa del conjuro cegador, no fue el caso del león.

-Mierda de gato...

Aquello les dejaba en una mala posición, bueno, especialmente a Moussa. Si los sacaba a todos de allí, estaba seguro de que el león le haría trizas. Su primer ataque había logrado dejado sin aliento y casi aturdido. Si en los posteriores ataques empezaba a usar las garras, no estaba muy seguro de poder resistir ni un solo impacto. Aunque por otro lado, sino lograba sacar de allí a sus compañeros, serían ellos los que podrían llegar a sufrir tan aciago destino.

"¡Mierda, mierda, mierdaaaaaaaaa! No pensaba que el saco de pulgas se pondría en plan Godzilla. Podría tratar de teleportarlo a la piscina, pero es demasiado rápido y seguramente esquivaría el portal. ¡Mierda! No queda otra, tengo que sacar a todos de aquí..."

Tomando una gran bocanada de aire, el senegalés se dispuso a utilizar su poder. Según la serie de Stargate, existía un planeta protegido por algo llamado "El martillo de thor" Lo que hacía ese "martillo" era teletransportar a los malos hasta una especie de prisión. Debido a ello, Moussa bautizó la forma ofensiva de su poder de aquella forma, pues gracias a ello, era capaz de teletransportar a otros a donde él quisiera. La mala noticia era que si usaba algo así, él mismo no podía teletransportarse. Pero en un breve momento de lucidez, comprendió que en esencia, su poder consistía en abrir portales. El usar su don de una forma defensiva, de viaje o de ataque dependía exclusivamente de su propia comprensión de sus poderes. Por lo que haciendo un tremendo esfuerzo, trató de llevar sus poderes a un nuevo nivel.

Considerándose así mismo un objetivo al que afectar con el martillo de thor, Moussa trató de teletransportarse junto al resto de sus compañeros al piso superior. Si lograba llevarse a todos con él, estarían a salvo. En caso contrario, estarían lo suficientemente cerca como para volver y ayudar a fantasma. Solo esperaba que eso funcionase y dejar atrás a un muy cabreado rey león.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Muy buenas!

Uso esfuerzo extra para poder teleportarnos todos. El poder sería lo descrito en la zona de creación de fichas. A ver si hay suerte y salimos de una pieza de allí

Sabía que Moussa podía ser muy irritable, pero no pensaba que tanto. Vaya cabreo tiene el león XD

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09/09/2016, 12:17
Narrador

Cuando Moussa activó su Martillo de Thor para sacar a sus amigos de aquel lugar no sabía que le iba a costar tanto.

Meter a César, Iván y a sí mismo en un portal para mandarlos a otro sitio no fue problema. Ni siquiera le costó dejar fuera al león.

Pero Fantasma…

Teletransportar a alguien inmaterial ya era una tarea ardua, aunque aquello no fuese problema para los portales de Moussa.

Sin embargo Fantasma no estaba solo en fase. El sello molecular de la caja fuerte de Sextus lo tenía atrapado. Su estructura molecular estaba íntimamente entrelazada con la aleación especial de la caja. Un error en el teletransporte sería fatal para el muchacho.

Y aun así lo consiguió.

De forma instintiva – porque no tenía otra manera de enfrentarse a aquello – Moussa recogió cada uno de los átomos de Fantasma, los separó de la caja y los transportó en el espacio.

Tras el momento de ingravidez, aparecieron en el piso superior, justo encima de la habitación de Sextus.

Se encontraron de pronto en otra habitación de distribución similar a la de Sextus. Aunque esta estaba desprovista de toda decoración. Era una habitación vacía, desocupada.

Fantasma yacía en el suelo, sólido de nuevo. Se aferraba al brazo que momentos antes estaba atrapado en la caja. Parecía algo traspuesto. Tenía la mirada perdida y temblaba.

Salvar a su compañero le había pasado factura a Atajo, que ahora sentía un increíble cansancio.

- Deberíamos salir de aquí, seguro que esa bestia nos puede encontrar en cuestión de segundos – dijo César, muy serio.

Escucharon un rugido proveniente de abajo. Era Sextus. 

Notas de juego

Moussa, no solo estás Fatigado por el Esfuerzo Extra sino que quedas Exhausto tras liberar a Fantasma.

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09/09/2016, 23:47
Moussa Dakar

El esfuerzo por tratar de teleportar a todos fue bastante considerable. Pero liberar a Fantasma de la pared fue algo realmente titánico. Sintió que aquello era una lucha desigual, casi como echar un pulso con Crater, pues cuanto mayor poder reunía para tratar de llevarse consigo a Fantasma, mayor era la resistencia que ofrecía la pared.

Pero si en algo destacaba Moussa, era por ser tremendamente terco cuando la situación lo requería y aquella, era sin duda una de esas situaciones. Por lo que exprimiendo hasta la última gota de su poder, Moussa se concentró como nunca antes había hecho para tratar de llevarse consigo a Fantasma.

La explicación lógica de lo que sucedió, sería que había logrado dominar su poder hasta tal punto, que había logrado separar los átomos de fantasma de la pared. Aunque si alguien le preguntaba diría que lo había logrado gracias a sus "huevos"

Cuando todos reaparecieron en la habitación superior, Moussa lanzó una rápida mirada a los presentes. En especial se fijó en que fantasma estuviese entero y se alegró de ver que tenía su brazo y no un muñón sangriento. Ante lo cual, soltó un profundo suspiro de alivio y se dejó caer sobre la cama.

-Ufff lo logramos...

Allí tumbado, sintió el sabor metálico de su propia sangre y fue entonces cuando comprendió, que el esfuerzo al que se había sometido le había hecho sangrar de la nariz y a su vez, le había puesto un tremendo dolor de cabeza. Tal y como sucedió en su primera batalla, lo único que ahora le apetecía era echarse a dormir y descansar. Pero las palabras de César llegaron hasta él y pese a sentir que sonaban lejanas, se obligó a incorporarse en la cama lo suficiente, como para extender una mano y abrir un portal.

-Cruzar el portal, intentaré llevaros hasta la biblioteca. Allí seguro que no nos buscará jamás nadie. Además con suerte, las palomas interceptarán al profe y lo freirán a rayazos.

La energía azulada del portal era inestable, no estaba seguro de poder mantener demasiado tiempo el portal abierto. Pero era mejor alejarse de allí cuanto antes.
 

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12/09/2016, 20:00
Iván Auriol

Todo el esfuerzo que Iván puso en su ataque cegador fue descartado de un manotazo. Las esferas de energía permanecieron, concentrándose para atacar de nuevo en unos momentos, pero no sería antes de que Sextus llegase a Moussa. Iván había fallado en su tarea de protegerle.

Y de golpe el escenario cambió. Si no fuera porque había notado el efecto del poder de Moussa, diría que habían retrocedido en el tiempo y el profe ya no estaba allí y las cosas no estaban destrozadas. Pero no era la misma habitación, esta parecía… desocupada. No había efectos personales.

Su mirada fue hacia Fantasma, y se alegró de que estuviese entero, aunque desnudo y en shock.

- Aparta Moussa - Iván voló hacia la cama y arrancó una de las sabanas de debajo del culo de Moussa, casi echándole al suelo, y la usó para cubrir la desnudez de Fantasma. Entonces dejó de volar (una de esas raras ocasiones en las que el catalán tocaba el suelo), para levantar a Fantasma pasando el brazo de su amigo por sus hombros y cogiéndole por un costado – Vamos, tocadme os haré invisibles cuando lleguemos.

Y empezó a andar hacia el inestable portal, no muy preocupado porque fuese inestable, sino más bien por su vida, o la de Fantasma.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Tiro ademas por el segundo intento de mi anterior ataque, a ver si lo ciego desde Narnia :)

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13/09/2016, 17:19
Narrador

César ayudó a Iván a cargar con Fantasma, que todavía seguía en estado de shock.

Todos juntos cruzaron el portal de Moussa, que los llevó hasta uno de los rincones más solitarios de la biblioteca.

Estaban amparados por dos enormes estanterías que llegaban hasta el techo, en un callejón sin salida dentro de lo que podría considerarse “un laberinto de libros” por aquellos que no frecuentaban el lugar. A pesar de que la escuela contaba con numerosos sistemas de la más avanzada tecnología, seguía guardando un montón de información en papel.

Los títulos de los pesados libros de texto y enciclopedias que los rodeaban no sonaban muy interesantes, por desgracia.

Tras cerrarse el portal todo quedó en silencio. Al menos no había nadie en su mismo pasillo con la mandíbula desencajada por la repentina aparición de los cuatro adolescentes.

- ¿Qué hacemos ahora? – preguntó César en un apropiado tono de biblioteca, ya algo más relajado -. ¿Esperamos y ya está? Deberíamos avisar a alguien. Un profesor se ha vuelto loco y nos ha atacado. Y quizá deberíamos llevar a este a la enfermería.

César señaló a Fantasma, estaba temblando.

Notas de juego

El resultado del ataque de Iván, por desgracia, no podéis saberlo.

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15/09/2016, 00:16
Iván Auriol

Cuando pasaron el portal inmediatamente dejaron de oír los bramidos de Sextus y de alguna forma el silencio fue como un bálsamo para tranquilizar a Iván. Solo habían sido unos segundos desde que Fantasma metiera la “pata” hasta el fondo, hasta que por fin habían escapado del profesor homicida.

Claramente había algo allí que alteraba mucho al profesor. No se había preocupado mucho por Fantasma, sino que se había lanzado de cabeza a por Moussa, así que no podía ser lo que hubiera en la caja fuerte. A pesar de que la caja fuerte podía defenderse de un tío que se hace inmaterial, y eso ya es decir mucho. No, había saltado a por el que más lejos estaba de la caja. ¿A lo mejor lo que no quería era que viesen que tenía familia? Porque aquella foto con un león joven, o era hijo o pariente suyo, o era él de joven. ¿No?

De todas formas, no tenía mucho sentido para Iván aquel arrebato de violencia. No sin saber qué leñes había allí para provocar tal reacción. A lo mejor simplemente era un psicópata y perdió los nervios al verles en su cuarto.

- Si… - respondió a César – Esa cosa le ha podido agarrar incluso siendo intangible, no hay manera de saber cómo. Será mejor que le miren. Eso y ahora mismo prefiero que me castigue Bosch a tener otro encuentro con Sextus. Sentencia de por vida o la muerte, ¿verdad? Voy a ver si hay alguien, sino salimos de aquí invisibles.

Dejó a Fantasma a cargo de su amigo y flotó hacia el borde de las estanterías, sacando la cabeza por arriba donde probablemente nadie estaría mirando.

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15/09/2016, 19:23
Moussa Dakar

¿Por qué diablos acababa tan agotado tras usar sus poderes cuando realmente le hacían falta? Moussa pensaba que después de su aventura contra Megamind ahora sería capaz de aguantar mucho más en combate. Pero sacar de allí a Fantasma había sido toda una experiencia. ¿Sería debido a que el muchacho era intangible? Hasta aquel momento no se había parado a pensar si podía teleportar a alguien intangible o no, había actuado por instinto y había funcionado. ¡Desde luego sus poderes eran los mejores! o al menos lo serían si tras usarlos, no sintiese que acabase de correr una maratón.

-¿Y si avisamos a las jodidas palomas? Seguro que si creas una llama aquí, saltarán un huevo de alarmas y aparecerá alguna de esas cosas. Después, solo tenemos que informar de lo que ha pasado. Debemos actuar ya, antes de que el león se calme y empiece a aparentar que no ha pasado nada y que todo es imaginación nuestra.

Tambaleándose, Moussa se acercó hasta fantasma y tomándole de los hombros lo agitó para ver si lograba que reaccionarse.

-Ya tenemos suficiente con que los tele-patatas se hayan quedado dormidos. Será mejor que te espabiles ¡Eh! ¡Despierta!

Agitándolo con mayor ímpetu, el senegalés esperaba despertarlo. En caso de que no fuese así, alzó una mano abierta dispuesto a soltarle un sopapo a ver si así reaccionaba. Le empezaba a preocupar que al teleportarlo algo hubiese salido mal ¿Y si se había dejado atrás una pequeña parte de su cerebro o algo así? Aquella idea le acojonaba un poco, así que esperaba que Fantasma reaccionarse pronto.

Mientras sucedía todo aquello, esperaría a que regresase Iván por si traía alguna buena noticia o algún buen plan. Después de todo, fue culpa de Moussa que se metiesen en aquel lío y se le habían quitado las ganas de  hacer más planes. Desde ahora, dejaría que fuesen otros los que pensasen y él se dedicaría a bueno, a meterse en líos como siempre, pero en solitario.

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15/09/2016, 22:13
Narrador

Iván ascendió en el aire, flotando lentamente hasta asomarse por encima de las estanterías.

No vio a mucha gente. Había menos de una decena de alumnos repartidos en las mesas de la biblioteca. Quedarse en la biblioteca por las tardes no era la actividad favorita de la mayoría de alumnos del Liceo.

El chico hada no conocía a ninguno de los estudiantes, aunque algunos le sonaban de vista. Una muchacha, en concreto, le llamó la atención. Estudiaba con detenimiento lo que parecía un enorme y viejo tomo. El libro contrastaba bastante con el resto de lecturas que se podían encontrar en la biblioteca.

Ni siquiera había ningún bibliotecario a la vista. La mayoría de los alumnos que buscaban algo concreto simplemente preguntaban a… ¡una paloma!

Había una paloma a la vista, cerca de la entrada. Estaba colocando un libro en su sitio con su rayo tractor.

Por su parte, Moussa zarandeó a Fantasma con la intención de devolverle el sentido. No hubo mucha suerte, por lo que el senegalés le soltó un sopapo.

- ¡Eh, tío! – gritó César, alarmado por la drástica medida de Moussa.

Pero su enojo duró poco, porque Fantasma pareció volver en sí. Miró a sus compañeros, parecía asustado.

- E…a… Mm…i… - le costaba articular las palabras.

Se miró el brazo derecho, el que había metido en la caja fuerte. Todos pudieron ver el alivio en su rostro.

Fantasma se frotó la cabeza y esbozó una tímida sonrisa de agradecimiento.

- Gr…gra-gracias – consiguió decir, mientras miraba a Moussa a los ojos.

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16/09/2016, 02:43
Iván Auriol

La biblioteca estaba tranquila. El escándalo que había montado Sextus no había llegado todavía allí, lo que era un alivio. Aquel pensamiento le hizo imaginar al león albino entrar a la biblioteca como un elefante en una cacharrería y destrozarlo todo persiguiéndoles, poniendo en peligro al resto, y sintió una punzada de culpa. No podía dejar que eso pasáse.

Oyó un golpetazo tras él, y miró al suelo. ¿Moussa acababa de abofetear a Fantasma? César se sorprendió, igual que Iván, pero aquello hizo que Fantasma reaccionase.

- Menos mal – pensó Iván – Aunque sigue siendo mejor que le vea un experto…

Todo aquello se les había salido de las manos. Solo querían tocarle las pelotas al hiperdimensionado gato borde que se metía con ellos en clase, no pelear con él, ni que nadie se hiciese daño. Tenían que ponerle remedio antes de que en su furia Sextus hiciese algo que no tuviese remedio.

- Ahora vuelvo.

Susurró Iván desde las alturas, antes de desaparecer literalmente sobre las estanterías, cubierto con su manto de camuflaje. Ni siquiera sabía por qué se había hecho invisible, no valía la pena llegados a esta situación, pero el hábito le pudo. Flotó tan rápido como le permitía su hechizo hasta llegar a donde estaba la paloma, y solo bajó el camuflaje cuando estuvo frente a ella, sorprendiendo a alguno de esos alumnos que no acababa de conocer del todo. Le dio un par de golpecitos con los nudillos a la paloma, para reclamar su atención.

- Eh… Perona. ¿Podrías decirle al señor Bosch que venga a la Biblioteca? Es urgente. – Iván empezó a ascender, pero recordó algo en el último instante – Ah y, supongo que E.S.T.H.E.R. está escuchando… si viene ella también está bien. Cualquiera sirve.

Con esto volvió a activar el camuflaje, y flotó de vuelta al escondite de sus compañeros, de nuevo levantando la invisibilidad solo cuando estaba justo frente a ellos.

- He avisado al señor Bosch. Y bueno E.S.T.H.E.R. se habrá enterado también. – admitió a sus compañeros, con una media sonrisa de resignación – Les he dicho que estaba en la biblioteca, pero he ido y he vuelto invisible, así que no saben exactamente dónde. Podéis usar el tiempo que tarden para iros con uno de los portales de Moussa antes de que vengan, si queréis. Aunque me gustaría que Fantasma se quedase… Tendría que verte un médico, – le dijo directamente a él – para asegurarnos de que estás bien además que tu ropa tirada en el suelo de su habitación es bastante incriminatoria. Vosotros os podéis ir. - miró a los otros dos - No hace falta que nos la carguemos todos, y yo fui el que atacó al profesor. Les diré que Fantasma y yo entramos siendo invisibles y os cubriremos. Aunque, ¿Estás bien después de que te saltase encima, Moussa?

Si. Esa era la mejor solución. Los profesores pararían al loco de Sextus y comprobarían que Fantasma estuviese bien. Se la iba a cargar, tanto en la escuela como en casa, pero al menos esto haría que no empeorasen las cosas. Si, era lo mejor… ¿Verdad? Entonces se acordó de una cosa:

- Al final le dejamos las bolsas apestosas en el cuarto. - le sonrió a Moussa - ¿Victoria?

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18/09/2016, 19:12
Narrador

“¡Bip bip!”

La paloma pitó al ver aparecer a Iván, como si se hubiese sorprendido. Algunos estudiantes también parecieron sorprenderse, pero no le prestaron mucha atención. En aquella escuela no era infrecuente que la gente apareciese de la nada en algún sitio.

“Bip bop”

El dron se revolvió en el aire, arriba y abajo, tras escuchar la petición del muchacho, como si de alguna forma estuviese asintiendo.

Cuando Iván volvió a activar su camuflaje, la paloma pitó de nuevo y se quedó allí donde estaba, mirando en la dirección hacia la que se había ido el chico hada. Por supuesto, no podía verlo en ningún espectro visible en el que pudiese buscar.

En el escondite entre las estanterías, César chasqueó la lengua cuando Iván expuso su “plan”.

- No me parece bien, tío. Nos apuntamos a esto sabiendo que nos podían castigar – frunció el ceño -. Yo no me voy.

Notas de juego

Esperamos a ver si Moussa decide irse o quedarse.

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19/09/2016, 01:47
Moussa Dakar

Al ver que Fantasma por fin reaccionaba, Moussa se dejó caer de culo y respiró aliviado. Estaba claro que a su compañero, aún se le tenía que pasar el susto que tenía encima, pero por lo demás parecía estar bien. Apenas llevaba dos días en la escuela y casi les habían matado un montón de veces. Si la cosa seguía así, no vivirían mucho más.

-Ufff me has dado un buen susto. Aunque no tienes que agradecerme nada, siempre que necesites que te abofeteen, puedes contar conmigo.    -Indicó tratando de quitarle hierro al asunto y a su vez, tratando de aportar un poco de humor a toda aquella situación.

Tomando grandes bocanadas de aire, Moussa trataba de recuperarse del agotamiento que le dominaba. Cada vez que llevaba sus poderes al límite terminaba siempre agotado. De hecho estaba tan cansado, que apenas le dolía el golpetazo que el león le había propinado al embestirlo nada más verlo. Claro que una vez se le pasase el agotamiento, estaba seguro que sus costillas iban a mostrarle un feo moratón, todo gracias al profe de ética.

Tal y como se encontraba, no se percató de que Iván se había alejado hasta que volvió indicando que había llamado a Bosch. Una vez Iván expuso su idea, Moussa frunció el ceño, tomó el primero libro que tenía a mano y se lo lanzó a la cabeza...sin mucho éxito. Pues el libro se abrió a un par de metros de Iván y cayendo de forma inofensiva al suelo.

-¡No flipes! Yo no me largo. Además, Bosch sabe que estoy metido en el ajo. Además, vale que quizás nos colamos en su cuarto. Pero actúo como un psicópata asesino en serie y eso no es muy de superhéroe. Yo creo que hemos descubierto a un villano camuflado, quizás esta vez hasta nos paguen. Aunque conociendo a buitreman, seguro que sigue igual de tacaño que ayer. Chisssttt.

La pequeña victoria de la que le habló Iván, le hizo recapitular y tras un rápido vistazo a sus compañeros, el senegalés estalló en risas. Moussa sabía que no ere el mejor momento para semejante acto, pero fue algo muy superior a sus fuerzas.

-El jodido león se quedó con la basura, pero también con los helados que conseguí para todos. ¿Aunque sabéis lo mejor de todo? Fantasma le dejó sus calzoncillos usados en el cuarto.

Era aquella tontería lo que tanta gracia le había hecho, tal vez por su estado de puro agotamiento o tal vez sencillamente, la mente de Moussa era terriblemente simple e infantil.

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20/09/2016, 10:24
Narrador

Finalmente Moussa decidió quedarse con sus compañeros. César asintió solemnemente, dejando entrever su aprobación. Eran un equipo, para lo bueno y para lo malo.

Mientras los adolescentes se recreaban en la pequeña victoria contra Sextus, un pitido entre las estanterías los sorprendió.

Se asomó por el pasillo donde se encontraban un pequeño dron blanco, una paloma. Esta pitó alegremente al encontrarlos y avanzó hasta ellos.

El dron fue seguido por una figura conocida, el subdirector.

Su rostro no revelaba nada, era una perfecta máscara de seriedad y serenidad. Sin embargo, su mirada se detuvo unos segundos en Fantasma. El muchacho todavía parecía algo traspuesto, y llevaba una sábana como único abrigo.

Bosch se les acercó en silencio. Sus pasos no hacían sonido alguno.

- Vamos a mi despacho – dijo secamente.

El subdirector no aceptó un no por respuesta. Una sola de sus miradas les dejó dos cosas muy claras a los estudiantes. “No me llevéis la contraria” y “Este no es sitio para hablar”.

Bosch inició entonces la marcha hacia su despacho. No quedaba muy lejos de la biblioteca, realmente. A las puertas de la biblioteca esperaban dos palomas, listas para escoltarlos. El variopinto grupo, formado por profesor, alumnos y drones, arrancó varias miradas de estudiantes curiosos mientras se dirigían a su destino.

Tras el corto trayecto, Bosch les abrió la puerta de su despacho y les indicó que entrasen. Seguramente no les sorprendería pero dentro del despacho, sentado junto a su escritorio, se encontraba otro Bosch. Quizá el original.

Cuando los cuatro estudiantes hubieron entrado, el Bosch del exterior cerró la puerta con suavidad.

El despacho de Bosch no era un lugar desconocido para la mayoría de los estudiantes. Los que se ganaban las “charlas educativas” del profesor lo habían visto bien, varias veces…

Era un lugar más bien adusto. No había mucho que ver. Unos archivadores, una estantería con algunos libros, las sillas donde cada día se sentaban los estudiantes que recibían las reprimendas de Bosch…

Lo único que destacaba era la katana maldita. El arma reposaba al fondo del despacho en su vaina, sobre un soporte con caracteres japoneses grabados. Despedía cierta aura inquietante.

- Tomad asiento – indicó el Bosch del escritorio.

Dejó sobre el escritorio la tablet que, hasta ese momento, había estado observando con detenimiento.

Bosch entrelazó los dedos y los dejó reposar sobre el escritorio.

- ¿Y bien? – les inquirió, manteniendo su tono severo.

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22/09/2016, 00:21
Iván Auriol

El bello de todo el cuerpo de Iván se erizó cuando oyó la voz de Bosch a su espalda. De nuevo había aparecido de la nada y sin avisar, como el ninja que era. No estaba tan preparado como esperaba para asumir la responsabilidad de sus actos como se había hecho creer a sí mismo y a sus amigos con el bravado que acababa de soltarles. Por suerte, ninguno de ellos había decidido abandonar el barco, porque sabía que los iba a necesitar.

Ayudó a Fantasma a levantarse, de forma que no perdiese la sábana por el camino, y avanzó a su lado mientras seguía al profe. No había nada en su expresión o su estado de ánimo que indicase que se sentía intimidado por la situación. Pero solo hacía falta conocerle un poquito para darse cuenta de que por primera vez desde que llegara al Liceo, estaba andando. ANDANDO. Como las personas normales. Prueba suficiente de su estado de ánimo.

Iván se sentía tentado de lanzar su capa de invisibilidad sobre Fantasma, para ahorrarle el paseo de la vergüenza, pero no se atrevió, no quería que el Señor Bosch se pensase que estaban escapando o algo así. Aunque, ¿Por qué iba a escapar si le había llamado él?

Al final llegaron al despacho del profe, donde estaba el auténtico señor Bosch. O bueno. El que Iván creía que era el auténtico. Por todo lo que sabía, el auténtico podía estar esquiando en los Alpes o tumbado en la cama comiendo panchitos y viendo la tele mientras alguien le hacía le pedicura.

Iván se sentó al borde de la silla, tenso, en cuanto el profe les indicó que lo hicieran.

Iván paseó la mirada entre sus compañeros cuando se les dio la palabra, esperando a ver si alguno quería empezar. Pero enseguida se dio cuenta que había sido él quien había llamado al señor Bosch. Debía ser el quien diese el primer paso entonces.

- ¿Recuerda lo que nos oyó hablar antes en la cafetería? Cuando nos pilló, quizá deberíamos haber dejado el plan, pero tomamos una decisión en caliente y fuimos a ver qué podíamos lograr en la habitación del profesor Sextus. Estábamos explorando la habitación para ver que podíamos hacer que no fuese una completa putada, perdón. – se disculpó por la palabrota – cuando encontramos una caja fuerte. Pensamos que abrirla y ver lo que había en ella podía ser interesante, así que Fantasma metió el brazo dentro para ver si podía desbloquearla. Una alarma saltó y la caja fuerte apresó a Fantasma. El profesor Sextus llegó y pensé que, aunque estaría enfadado ayudaría a Fantasma. Pero le ignoró a pesar de que estaba en peligro, y se lanzó de cabeza contra Moussa, atacándole como loco. Intenté distraerle con mis luces y Moussa nos sacó de allí, incluido Fantasma. Y bueno luego le llamé.

Cuando acabó de hablar se dejó caer contra el respaldo de la silla, por fin relajado. Ya lo había dicho. Solo quedaba el castigo.