Partida Rol por web

Pues mi poblado es bastante extenso la verdad...no conozco mucho de kern pero las montañas y el bosque en las que me crie son...preciosas...las frutas y la carne mas sabrosa que pueda concebir tu imaginacion...las flores con su aroma embriagador...bueno ya sabes los silvanesti somos pocos...mi mente volvio por unos instantes junto a mi padre....mientras pasaba un dedo por el relieve de la cota.

Cierto, sois pocos pero tengo entendido que ahora mantenéis buenas relaciones con los semielfos. Supongo que el tiempo será el encargado de hacer que tu raza vuelva a ser esplendorosa como antaño fue. Vosotros vivís muchos años y por ende estáis acostumbrados a esperar pacientemente. Seguro que si evitamos esta guerra, podremos proteger a nuestros seres queridos y todo irá mejor en el mundo. Estoy convencido de que actuamos por una buena causa y tendremos éxito en nuestra empresa. Los dioses nos miran y nos guían en nuestro camino - dice el gnomo convencido de sus palabras.

Que asi sea sabio gnomo que asi sea...tus palabras me abruman nunca habia conocido nadie de tu raza pero la experiencia es plenamente grata. Bueno espero que falte poco, no estoy acostumbrado a este frio jeje y no creo que lo haga nunca...

Yo no había salido con anterioridad del Monte, así que Glinthalas y tu sois los primeros elfos Silvanesti que he conocido y me alegro de haberlo hecho. Estoy aprendiendo mucho de vuestra raza, hay cosas que se pueden leer en los libros, pero otras experiencias hay que vivirlas si se quiere tener conocimiento sobre ellas - comenta el gnomo - Pero para ser sabio aún me falta mucho amigo mio, aún me falta mucho - dice el gnomo con una sonrisa.

Siguiendo la dirección marcada y corregida por Elessar entre la ventisca el gnomo asiente a las palabras del elfo - Yo tampoco soy de los que les gusta el frío, agarrota las manos y es malo para libros y pergaminos, por suerte llevo mis cajas impermeables y este montón de pieles además de mi bolsa mágica. Espero que estemos cerca ya de ese poblado, necesito calentarme un poco junto a una hoguera. No se como pueden vivir las tribus aquí.

Supongo que como todo sera cuestion de acostumbrarse no? seguro a ellos les parece extraña nuestro clima y costumbres, te voy a hacer una pregunta me resulta una indiscreccion pero...cuantos años tienes?

No es indiscreción alguna Elessar. Tengo 40 años, es decir, acabo de alcanzar la mayoría de edad en computos gnómicos y se me puede considerar ya un gnomo adulto - respondo con una sonrisa mirando a mi compañero - ¿Cuantos tienes tú?. Los elfos vivís mucho.

71 tambien al igual que tu acabo de alcanzar la mayoria de edad...Si con todos sus beneficios y maldiciones vivimos mucho tiempo...

Beneficios y maldiciones, en eso estoy de acuerdo contigo amigo mio. Una lagar vida te da muchas buenas opciones, ver lugares, conocer gente, mucho más tiempo para aprender, sin embargo también te obliga a vivir y a ver cosas que no deseas... saber que vives más tiempo que otras razas es saber que les verás envejecer y morir, pero también tiene su parte buena si lo hacen en paz y han tenido una vida plena - contesta el gnomo a su compañero.

Camináis durante lo que os parecen días. Andar sobre la nieve es duro y hay momentos en los que Elessar tiene que ayudar al gnomo a salir de algún agujero en la nieve. Thais, bufa bastante a menudo, aunque parece ser bastante diestra también por este terreno, parece que el frío no la gusta demasiado, pero se desenvuelve bastante bien.
El viento no cesa y seguís guiándoos, casi casi, por la intuición del explorador, que parece saber hacia donde camina, aunque no tenga la menos idea de cuánto ha de caminar.
Poco a poco el terreo va cambiando, y de una zona de nieve virgen pasáis a una en la que la nieve ha dado paso al hielo, Elessar tiene bastante claro lo que sucede, estáis caminando por encima de alguna clase de lago helado, que según vais caminando se va haciendo más resbaladizo.

¿Un lago de hielo?... esto puede ser peligroso, debemos tener cuidado - dice el gnomo al ver lo resbaladizo que está.

El gnomo tras hacer el amago de resbalar un par de veces, le pilla el truco y se pone a patinar llegando sin problemas a donde el hielo ya no es tan resbaladizo. No así, el elfo parece que lo lleva peor y cae un montón de veces al suelo, aunque por suerte el hielo no se quiebra y a parte de unas magulladuras consigue llegar medio arrastras al otro lado.
Thais, entre deslizarse un poco y dar un salto consigue llegar al otro lado sin esfuerzo.
Ahora mismo, desde donde estáis, os llega el olor a pescado haciéndose, como si lo estuvieran asando, seguramente traído por el viento, pero seguís sin ver a vuestro alrededor..ese maldito viento no cesa.

Ouch, esta travesia va a ser mucho mas dura de lo que pensaba...estas bien splutch?? este suelo es muy resbaladizo debemos tener cuidado con las capas de hielo por suerte no se ha roto...

Yo estoy bien Elessar, aunque parece que tu has conocido al hielo más de cerca - dice el gnomo con una sonrisa cuando por fin están los tres relativamente a salvo.

Splutch arruga la nariz y huele el aire - Sniff, Sniff... ¿eso que huelo es pescado asado? - pregunta el gnomo intentando determinar la dirección de lo que huele - Es posible que estemos cerca del poblado, aunque con esta tormenta no veo nada de nada.

si, parece pescado... sigamos debemos estar cerca...el frio estaba haciendo estragos...no te preocupes estoy bien ha sido un rasguño.

Splutch comienza a caminar de nuevo, intentando seguir el aroma a pescado que trae el viento - Tal vez Thais lo olfatee mejor que nosotros dos - dice el gnomo a su compañero, mientras mira a la pantera, que contra todo pronostico se desenvuelve bien en este clima.

Si tienes razón, dirigiendome a la pantera colocandome de rodillas frente a ella acariciandole la cabeza Thais pequeña ayudame a encontrar el poblado hueles eso verdad? llevanos hasta alli por favor...

Splutch observa atentamente como su compañero elfo Elessar, habla con la pantera, con su compañero animal. Lo trata como a un igual, casi como si fuesen familia por decirlo así. Veamos si le da resultado.

Thais mira al elfo y comienza a andar, no sin antes soltar una especie de estornudo a lo que responde sacudiendo su cuerpo como si estuviera mojada. Camináis tras ella y a unos metros, delante vuestro, veis una especie de muralla hecha de hielo y escucháis una voz, aunque así a primeras no la localizáis debido a la nive que sigue cayendo empujada por el fuerte viento. La voz es grave y rasposa, que es un hombre os queda muy claro, y su acento es extraño, casi subrayando las palabras por la lentitud que las pronuncia, aunque le entendéis perfectamente.

A qué venís, extranjeros?! Son las únicas palabras pronunciadas, aunque no os hace falta pensar mucho para notar que es tanto una pregunta como una amenaza.