Partida Rol por web

El origen de la oscuridad y las Tierras, Bosques y Regiones

Partida Borgvir

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11/01/2018, 12:50
Artli

1 Enero 1700 T.E. La Carroca. 06:23. LLuvioso y plomizo. Sin viento. 6ºC. Luna llena. (Se ve un resplandor ocasional entre las nubes que corren en las alturas)

La noche de Fin de Año era un momento de reunión para la nobleza, para el culto y para dar las buenas nuevas de Araw. Habían sido horas de baile nocturno, de desenfreno posterior, y muchos osos y osas habían copulado como salvajes. Algunos, posteriormente habían "regresado" y ya como humanos habían comido, bebido y copulado como los animales que eran.

Tú, sabiendo, por otros años, como era esta fiesta, porque habías sido invitado varias veces por los cultistas, para que te unieras a ellos, estabas a la expectativa. Comías fuerte, y bebías lo justo. No eras el único invitado, pero si el más formal. Casi todos los años, los "invitados" terminaban siendo, o ... formando parte como acólitos nuevos, o simplemente objetos sexuales volutarios ... (y cultistas posteriormente).

Para ti, eso de pasar a ser uno de la "secta" parecía que te asqueaba. Además de no ir del todo con tu moral y forma de ser, pensabas que era como un filtro. No lo sabías, pero habías pasado el filtro. Y no para ser uno de esos monjes o "rezadores" sino para ser un protector de la naturaleza. Y todos protector beornida necesitaba un compañero. Uno blanco. Un león de las cumbres. Lo sabías, ya que algunos protectores pasaban por allí en esa noche, y habías podido hablar con ellos.

La carroca no dejaba de ser una piedra dentro de un charco. El valle era una poza de unos 120 kilómetros de ancho, que tenía como límite en un lado, al Rio Anduín, donde se unía con el Rio Sirros y hasta donde el valle se torna montañas, hacia el norte. Es una zona con malas tierras cultivables, y solo los hermitaños, el noble que vive en la propia Carroca, que casi siempre le "faltaba un tornillo", y animales, viven por aquí. El resto está o de paso ... o por error. El lugar no deja de ser una zona de paso, ya que un vado está muy cerca de allí, y no es la primera vez que el "Guardián de la Carroca" y su familia sufre por "visitas indeseadas" y tiene que defender el lugar. La verdad es que está a unos 40 kilómetros más al sur que las tierras natales de los beornidas, pero los beijabar tienen este lugar como sagrado, y por eso se protege de la mejor manera posible. Es tan sagrado que pocos son los que allí entran ... y hoy tú vas a ser uno de ellos.

El curso del agua ha subido bastante, y cuando te toca vadear, te mojas hasta la cintura. Lo odias; está muy fría.

Cuando sales, empapados, empiezas a subir la escalinata, que ... con los pies mojados, es un peligro. - Hay que estar muy chalado para vivir aquí.

La cima es coronada por un altar, y allí hay también una entrada al interior de "La Sagrada Carroca". O sea, al interior de aquel "piedro". Los cultistas esperan arriba, con sus rezos y ... "sus cosas". Sigue a una mujer que te ha dado un beso en la frente. Ella es una cultista, pero ... no actúa como las demás. Es una maestra, comedida y ... cabal. Entras. Pasas por una sala que parece haber sido hecha por las garras de unas grandes bestias, por delante de un almacén repleto de comida y por varias salas más, hasta que llegar a una que no deja de ser un pozo. Pero en el centro de la gran sala, en lugar de agua, sale fuego. El humo te escuece en los ojos, y allí hay muchos nobles. Todos en forma humana. La mujer que seguías te espera. Se había adelantado mientras "cotilleabas" y escurrías tus empapadas ropas. Lo hiciste para ser más formal y por el respeto que aquel lugar merecía. Para el resto, simpelmente tardabas.

Te das cuenta que tras ella hay un gran bloque de resina, y dentro, petrificado hay un gran oso. Está perfectamente conservado y te da un escalofrío. El sitio, con la gente, con el humo, con el fuego, con la estatua del oso ... impone. Bajo los pies de ella hay una gran losa. Sabes que las leyendas dicen que es el acceso a una cámara mortuoria, pero ahora mismo es el altar donde ella te espera. Tiene en sus manos un colgante. Lo conoces. Es una simple tira de cuero con una piedra negra. Es el símbolo de "Los Protectores". De los "amigos" de uno de esos majestuosos leones de las montañas. De un león blanco. TE hace un gesto y te lo impone. Estás contento. Es como que has conseguido un objetivo. No te habías dado cuenta, pero los rezos se escuchaban desde allí, y poco a poco había ido incrementando el volumen. El címax ha llegado.

Una grandes manos te agarran y te hacen retroceder por donde has venido. Las voces son de alegría, y los nobles te portan en volandas. No tenías claro lo que sucedería, ya que estos subían hasta el altar de arriba, porque lo veías desde el lugar donde ya la fiesta se apagaba, pero les perdías la pista. Ya no los verías más hasta el años siguiente, ya con su flamante fiera, que se comportaba como un gatito. Aunque algunos de ellos lucían unas cicatrices que un gatito de regazo no tendría...sin morirse. Ahora te pica la curiosidad. El desfile sale de la cueva, y poco a faltado para que te dejen sin narices. Los puñeteros noble son muy grandes. Altos y fornidos, pasa justos por el espacio de entrada, y contigo a cuestas, has rascado con tu cuerpo el techo. Si no es porque has puesto las manos ... tendrías más arañazos que ... no sabes que podría estar así de "lijado". LLegan hasta e altar. Han subido contigo en voladas, y las voces se apagan de inmediato. Cuando esperabas que te bajaran ... notas un vacío en el estómago. Ves alejarse la roca y notas las aguas, que estaban igual de frías que unos minutos antes...pero hay más luz. Te han lanzado desde los 8 metros de altura de esa piedra y te debate en el agua para no ahogarte. Todas tus cosas van contigo ... y el agua tira de ti, para arrastrarte hasta el fondo.

Te viene la imagen de la Suma Sacerdotisa de Araw. La que te ha dado el colgante. No sabes si estás enamorado de ella o si la odias por esta broma.

Notas de juego

Me tienes que dar la edad, pero entre 17 y 27.

El colgante que te ha dado es el que tienes por historial (ver descripción).

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11/01/2018, 17:13
Borgvir

¡Ramera! Podría haber avisado, en mi desesperación maldigo a la sacerdotisa, a quien culpo de aquello, como si no hubiera habido tantos otros. Ahora mismo la odio, y eso que me gustaba, o quizás por eso mismo, porque la deseo tanto. El agua está fría y la sorpresa ha sido un golpe duro. ¡Mierda!

Mientras mascullo maldiciones (o más bien las pienso), me esfuerzo en nadar hacia la costa más cercana. No me esfuerzo en ir directo a la costa (en perpendicular al río) sino que me dejo llevar río abajo por la corriente, moviendome en diagonal hacia el exterior.

Mientras nado, me pregunto si me están mirando desde arriba, pero no intento mirar. La prioridad es salir del agua, después ya pensaré en los cultista y sus ritos.

- Tiradas (1)

Notas de juego

He hecho ya una tirada de nadar (nefasta) pero no se si tenía que hacerla yo preventivamente (para no perder tiempo con interacciones), o esperar a que me la pidieses tu (confirmando que se puede, hay que tirar y que aplica). Por favor, dime que esperas en el futuro.

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12/01/2018, 10:56
Artli

Desde arriba, se reinician los rezos, cantos y bailes. Los puedes escuchar, pero también sabes que hay algunos, sobre todo nobles y la Suma Sacerdotisa de Araw, ya que los notas, como dagas, clavados en tu espalda.

En tu primer paso, pierdes pies, y tomas un angustiosa tracalada de agua que te da hasta ganas de vomitar. Tras intentar ponerte en pie varias veces, y resbalar otras tantas, te das cuenta que lo mejor es que la propia corriente te ayude. Te dejas arrastrar, y cuando llegas a la vera, te agarras a las primeras plantas. De rodillas, como un perro, con las muñecas y rodillas en el agua, así a cuatro patas, te pones a vomitar la mitad del agua que has tragado. Te sientes fatigado, cansando angustiado y mareado. Miras hacia abajo y ves como tus esputos y demás ... alimentos de la fiesta son arrastrados por el agua. El colgante pendula en tu cuello. Sucio y mojado. Como tú.

- Es humillante.

También lo has manchado de la vomitona. y el agua está demasiado fría como para ponerte a dormir allí.

- Tiradas (1)

Notas de juego

jajajaj, si, tenías que hacerla.

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12/01/2018, 13:30
Borgvir

!Maldita sea!, mascullo mientras escurro mis ropas. ¿Que ha pasado?, me pregunto. Me han tirado al río y casi me ahogo. Que vergüenza! Seguro que lo han estado mirando desde La Carroca y riéndose de mí. Miro río arriba a ver si los veo aún mirándome o si reconozco el lugar en el que me encuentro.

Pero primero lo primero, estoy empapado y el agua está helada. Una vez alejado un poco del agua, si no he visto nadie o ningún signo de peligro, me cambio de ropa, buscando en mi mochila la muda más seca que encuentre de ropa (pero me vuelvo a poner el peto). Al cambiarme me quedo mirando el colgante y pienso, Ahora soy uno de ellos. Y intento recordar todo lo que sé sobre los "protectores" y sus "amigos". Entiendo que el colgante por sí mismo no significa nada aún y que debo ganármelo. Me siento honrado a la vez que iracundo, así que no quiero que me vuelvan a pillar por sorpresa y quiero hacerlo bien. Seré un protector. Soy un protector.

Ahora, tengo que encontrar un buen lugar para encender un fuego y descansar un poco, pienso mientras miro a mi alrededor, recogiendo todas mis cosas (y comprobando que ninguna se fue río abajo).

- Tiradas (3)

Notas de juego

Hago tres tiradas que se corresponden a tres acciones: la primera para mirar si veo La Carroca y SK de estoy (percepción), otra para intentar recordar (memoria?) y otra para buscar un buen lugar para descansar y hacer fuego (percepción2?). No estoy seguro si hacen falta o son de otro tipo, pero me adelanto.

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12/01/2018, 14:31
Director

Está todo empapado. Por suerte, las botellitas han mantenido secas las hierbas medicianles que portabas, pero el resto tardará horas en secarse. Es complicado encender fuego tiritando, más aún en un día lluvioso como este, pero tus conocimientos de supervivencia, y con las cuevas, pronto encuentras un lugar donde guarecerte. Es una entrada de una caverna. La verdad es que no la has explorado, pero sabes que por allí no hay más que murciélagos y poco más. Nada que te preocupe.

No te cuesta hacer fuego, y se agradece enseguida. Te despelotas y pones todo a secar como buenamente puedes.

Ahora, ya más tranquilo recuerdas las imágenes. Nadie se reía allí sobre la roca aquella. Aquella maldita roca. Y sabías que el año que viene, en la fecha de nochevieja, tenías que regresar.

- Tiradas (1)

Notas de juego

No has perdido nada, más que un poco de orgullo, que simplemente está un poco "empapado".

 

~LEÓN DE LAS NIEVES
El león de las nieves es un animal escaso, nativo de los valles alpinos de las Ered Mithrin. Es más pequeño que un
león montañés, y su pelaje es blanco durante todo el año, mientras que sus ojos muestran un precioso tono de azul.
Prefiere la caza menor, aunque de vez en cuando ataca a las cabras y los ciervos. Los leones de las nieves se aparean de por vida, y los dos padres crían a un único cachorro. De tanto en tanto, un osado beijabar sube a las Ered Mithrin e intenta ganarse la amistad de un león de las nieves. Quienes lo consiguen tienen un amigo fiel para toda la vida.

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12/01/2018, 20:31
Borgvir

Pero no regresaré solo, primero encontraré un buen compañero para demostrar que soy digno de ellos. Pero no esta noche, me siento cansado, emocionalmente confuso y mis cosas están empapadas. Ahora toca dormir, así que acurruco cerca del fuego. Mantengo mi hacha cerca de mi mano, pero confío no necesitarla, ya que he evaluado el lugar y me he asegurado de que la hoguera no se viera desde fuera. Además, he colocado a mi alrededor mis cosas de manera que me entere si alguien o algo las toca. Tengo mucho que pensar, pero mañana será otro día.

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13/01/2018, 11:53
CRONISTA

2 Enero 1700 T.E. La Carroca. 05:54. Despejado y sin viento. 5ºC. Luna llena que ilumina. Cueva cerca de "La Carroca". Valle medio del Anduín.

El frío te despierta, y las brasas no son más que un mero recuerdo de lo que viste antes de dormirte. Estás sin ropa, y sin tapar ni nada. Tu vista enseguida se centra en tus cosas. Tus cosas están allí, y crees que están todas secas así que te vistes, avivas el fuego y preparas algo para empezar a comer y sacarte el frío de los huesos.

Recuerdas que tras la fiesta, antes de anochecer, todos se dispersan y regresan a sus quehaceres. Tienen animales y tierras que cuidar, los Vigilantes tiene zonas que patrullar y todos luchan para repeler la oscuridad que emana del Gran Bosque Verde, y que muchos, incluidos algunos elfos que viven en su interior empiezan a llamar "Bosque Negro".

Notas de juego

Está todo en su sitio.

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13/01/2018, 13:28
Borgvir

Mientras me como el desayuno, mirando el fuego fijamente, por fín encuentro un momento para pensar en todo lo que pasó ayer. Me miro el colgante, compruebo que ha quedado limpio y medito sobre su significado. Soy un Vigilante de los Beijabar, verbalizo en voz alta. No se muy bien porque estoy sorprendido, pensándolo bien se veía venir dado el interés por mí de los cultistas. Por mí, que no soy demasiado amante de rezos y ritos, sino que me gusta vagar solo entre el bosque y las montañas y me siento cómodo entre los animales salvajes. Tenía que ser un vigilante. Al fin y al cabo, los Beijabar debemos cuidar nuestras tierras y nuestra gente, sobre todo ahora que la oscuridad despierta en el bosque, según se dice. A mi hermano, mayor que yo, le corresponde cuidar las tierras y animales de la granja de mi padre. Yo cuidaré de todos ellos como un Vigilante, patrullando las tierras salvajes. Tiene sentido. Pero sé que un vigilante no va solo y he escuchado las historias. Aunque nadie me lo ha dicho (o al menos no lo recuerdo), sé cual es mi primer deber. Subiré a las cumbres de las Ered Mithrin y encontraré un León de las Nieves.

Me levanto, y me acerco al borde de la cueva. Parece que aunque el día que nace es frío, no llueve. Y eso me alegra al recordar el frío horrible tras salir del río con la ropa mojada. Miró al horizonte y decido por donde moverme en mi camino hacía las montañas. Recojo mis cosas, y me preparo para salir al camino, con las mochilas al hombro. En mi mano llevo el cayado, para que me ayude en el viaje. La hacha la llevo enganchada en el exterior de la mochila. De manera que puedo acceder a ella facilmente si la necesito. Me aseguro de que el fuego esta apagado y me dirigo hacía el exterior. Me paro un segundo antes de caminar, cojo el colgante com mi mano y digo Ya vengo, amigo. Entonces empiezo mi camino hacía las montañas, en búsqueda de un León de las Nieves, voy a un ritmo normal y fijandome, sobre todo, en los rastros de animales, por si encuentro el rastro de un León de las Nieves.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Hago una tirada por que supongo que hace falta, para determinar mi exito en la elección del camino, aunque no se muy bien a que sería si a "seguir rastros" o a mi conocimiento general del bosque, o simplemente se trata de caminar sin problema porque aun estoy lejos de las montañas. (Ahora que no se muy bien para que tiro saco un 98, espero que no me digas que no hacía falta tirada, jejeje)

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14/01/2018, 10:20
CRONISTA

2 Enero 1700 T.E. La Carroca. 06:08. Despejado y sin viento. 5ºC. Luna llena que ilumina. Cueva cerca de "La Carroca". Valle medio del Anduín.

Tras salir un zumbido y chirrido extraño te asusta. Te agachas de sopetó y durante unos segundos una bandada de murciélagos regresa a "casa" tras el merecido alimento. Para ti era un alivio, ya que allí, tan al sur de las tierras de tus parientes, hacía más calor y muchos mosquitos reboloteban por la rivera el Anduin y del otro rio. Te ries de ti mismo. Esos animalitos estaban asustados por el fuego en "casa" pero al apagarlo, no dudaron en irse a dormir. 

Estabas extrañado. - Con el frio que está haciendo, tendrían que estar hibernado. Algo está trastocando la vida de los animales, y su "cosa" llega hasta aquí.

Notas de juego

Digamos que sabes perfectamente que camino tomar, pero te quedan muchos días para llegar.

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14/01/2018, 10:45
Borgvir

¿Por qué no dormís, amigos? Le pregunto a los murciélagos con gesto extrañado. No espero que ellos me contesten, por supuesto, así que trato de averiguarlo por mí mismo. Doy un vistazo alrededor de la cueva, fijándome en de donde venían los murciélagos y buscando una razón para su extraño comportamiento. Sin embargo, no me detengo demasiado en esto, tengo unos días de viaje hacia las montañas y no me quiero detener más de lo necesario. Si no encuentro nada sospechoso en 15 minutos, sigo mi camino tal como lo tenía previsto, caminando hacia las montañas.
 

- Tiradas (1)
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14/01/2018, 10:53
CRONISTA

Los murciélagos ya se habían internado en las profundidades de la cueva, cuando te pusiste en pie. 

Tras unos minutos, te desesperas. Este extraño comportamiento no tiene manera, a tu forma de verse, de explicarse, en este momento y lugar.

- Un misterio para resolver más adelante.

Sorteas "La Carroca" porque no te apetecen chanzas. Además sabes que el noble que la ocupa es un arisco y desagradable beornida. Un tipo grande, que en estos momentos vive solo. Tal vez sus hijos lo abandonaron al quedar viudo y por la creciente inestabilidad desde esa desgracia. Te apena, y sabes que no le quedan muchos años, pero estos serán cada vez peores. Su noble función, de todos los años, se repite sin problemas, ya que se encierra en la sala en la que te impusieron el colgante.

Ahora que lo piensas ... - No recuerdas haberlo visto ... pero con tanta gente ....

 

Con tus pensamientos se ha hecho medio día. Acabas de cruzar el último vado que te queda. Con los pies mojados, las botas al hombro y los pantalones remangados, te dispones a encender otro fuego. Te hace gracia. Vas de hoguera en hoguera, pero en este viaje, aprobechas el sitio que usó tiempo atrás alguien, ya que tiene leña, (un poco mojada), un círculo de piedras y una pequeña profundidad. El discurrir del agua te relaja, y bajo la sombra de un Sauce LLorón empieza a salir el primer humo, que indica que podrás hacer fuego.

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14/01/2018, 11:08
Borgvir

¿Quien habrá dejado estos restos? ¿Y cuando? me pregunto mirando los restos de hoguera, mientras los aprovecho y enciendo mi propia hoguera para prepararme algo de comer y calentarme. Miro entre los restos si veo alguna cosa que me indique que tipo de gente la uso,  y cuanto hace de ello.

Ahora que estoy cerca del río, y la tierra es fertil, aprovecho para no gastar mis reservas y me paro unos minutos a rebuscar entre la vegetación cercana, buscando algunas bayas, plantas y raizes comestibles tanto para comer ahora, como para suplir mis reservas de comida. Con lo que encuentre, me preparo un guiso calentito y, espero, sabroso.
 

- Tiradas (2)
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14/01/2018, 12:07
CRONISTA

Lo poco que encuentras no es comestible, pero por lo menos te ayuda a que haga de yesca para encender el fuego. Es agradable. Ves peces, que podrían valer para una comida nutritiva y agradable. Sabes que son truchas. En la lejanía, unos lobos persiguen un alce. El signo de la vida. Comer o ser comido.

No te moletas en intervenir. Además, para cuando llegues, ya habrán terminado, incluso de comer. La naturaleza es así. Así de cruda. Así de cruel. Y la tienes que respetar y proteger tal y como és. Defenderla de las ingerencias de los intereses, de los poderes y de aquellos que inconscientemente, la dañan.

Calentaste pan e hiciste unas tostadas, pero al posar el pandero en tierra, para comer cómodo, algo duro y puntiagudo de pinchó. Sentaste el culo sobre algo puntiagudo o algo.

Notas de juego

No es la de esta tierra fértil. Por eso ni hay granjas ni nada. La gente, excepto el de la carroca, está lejos de aquí.

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14/01/2018, 12:48
Borgvir

¡Mierda! Me levanto de un salto y miro sobre que me he sentado. ¿No había mirado antes de sentarme? Intento reconocer que es lo que me ha pinchado y compruebo si me ha llegado a herir.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Oh. Pensaba que quizás habría comida. Una duda sobre mi relación con los animales y la comida. El hecho de que no puedo atacar animales que no me han atacado primero y que quiero tanto a los animales. ¿Incluye cazar para comer? Porque no quiero hacer daño a los animales, pero entiendo que comerse unos a otros forma parte del equilibrio natural (siempre y cuando no se abuse ni se sea cruel).  ¿O me veo obligado a ser vegetariano?

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15/01/2018, 10:26
Guardias de Gondor

Son los restos de alguien. Al darte cuenta que es el cráneo de una persona, mal enterrado te alarmas. Empiezas a escarbar y son tres hombres, en posturas extrañas. Piensas que una riada los ha sepultado y dejado aquí. Sus armas y equipo no son más que restos, pero por la forma de sus cascos, tienes claro que eran tropas gondorianas. Soldados ... pero hace años que están aquí. Muchos años.

Entre las cosas descubres una bolsa de cuero fino que al tocarla se desmenuza. Eran monedas, y tanto el cobre como el hierro se han "perdido", pero la plata y el bronce, tras limpiarlas con esmero, podrían valer.

Notas de juego

Cazar para comer, para pieles ... siempre que sea para uso, no para comercio, sin pegas. Pero no te puedes convertir en un cazador que vende las pieles, no puedes ser alguien que vende las presas de su caza ni matar más que para usar (tu, tu familia ... los tuyos).

De todas maneras, si quieres vivir a lo vegano, puedes. Eso no significa que no puedas comer carne, sino que no la matarías tú ... Además, alzarás un rezo por el "hermano animal" que ha dado su cuerpo para el bienestar de otros.

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15/01/2018, 10:41
Borgvir

¿Que haceis aquí, soldados de Gondor? Vuestro hogar está muy lejos, al sur, y me pregunto que os trajo a estas tierras. Y que os trajo la muerte, también.  Mirando los huesos, con cara pensativa, me permito expresar mis dudas en voz alta, aun sabiendo que los restos no pueden, ni quizás quieren, contestarme. Sin embargo, fuera lo que fuera, esto pasó hace años y no creo que deba preocuparme ahora. Parece que aparecen nuevos misterios a cada paso que doy. Quizás antes hubiera visto en ello simples curiosidades, pero ahora soy un vigilante y debo vigilar. Tantas cosas extrañas me recuerdan que hay rumores de la oscuridad naciente en el bosque y que el trabajo de vigilante no será sencillo. Pero aun no soy un vigilante completo, pienso, y me decido por priorizar mi busqueda.

Entierro con cuidado los restos otra vez, no me esmero en cavar muy hondo, justo lo suficiente para que no se vean o salgan a luz a la primera lluvia. En un principio, dejo las monedas con sus dueños y solo me quedo una de las monedas de plata por cada uno de ellos, como prueba y recordatorio de lo que ha pasado y de las almas de los gondorianos. Mi pueblo no utiliza estas monedas, me digo. Y yo soy un vigilante, y la naturaleza proveerá. Sin embargo, vienen tiempos oscuros y nunca se sabe, así que decido separar las monedas que se han salvado. Las cuento y las entierro a parte, en un lugar más escondido detrás de unas rocas. Me fijo mucho en el lugar y memorizo el paisaje, para volver a encontrar las monedas si me hicieran falta, a mí o a mi pueblo. 

Una vez he acabado el entierro, me termino el pan (que había dejado a medias por culpa del susto con el pinchazo). Recojo mis cosas y, tras una breve oración en silencio por las almas de los soldados caídos, sigo mi camino hacía las montañas.
 

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15/01/2018, 11:11
CRONISTA

10 Enero 1700 T.E. 10:30. Despejado y sin viento. 6ºC. Mucha humedad, charcos recurrentes y algunos grandes.  Valle medio del Anduín. (Margen occidental).

Decidiste remontar el rio, como si fuera un camino. En sus veras encontrabas comida de manera frecuente. Si no ranitas, bayas, y si no otros frutos, con los que hubiste de pelear con los gusanos (las castañas ya estaban viejas). Estás ya en el "Vado Viejo". Era la frontera entre la zona sur y las tierras beornidas. Estabas como a un tercio del camino.

El frio aumentaba. Las noches, aunque cada vez más cortas, no eran lo suficientemente cortas ni el sol levataba lo suficiente. Habías pasado más frio otras veces, y estabas bien vestido, pero te asaltó una duda. El norte era más frio, además, llegarías sobre febrero, y el tiempo que necesites allí. O sea, el más frio de toda la temporada. Sólo las moradas enanas puedes servirte de cobijo, y los enanos aman el metal. Ellos podrían ayudarte y sólo a cambio de unas monedas.

El Paso Alto no estaba muy transitado en esta época. Había que estar loco para cruzar por allí. Además, había rumores de unos gigantes, como montañas de altos, moraban por allí y constantemente peleaban entre ellos. - Que locura. No concebías que la piedra pudiera estas viva y actuar por si misma. Entendías su esencia. Su naturaleza; pero no que fuera animada.

Habías ido encontrando por el camino algunas hogueras que los hermanos, que te llevaban uno o dos días de ventaja. Sabías que ellos ya estaban llegando a "casa". Tu estabas en casa permanentemente, ya que ahora, como guardian eras un ser errante. Tu única casa, "La Sagrada Carroca" y solo unos días al año (poco antes y poco después). Las huellas de los hermanos, en su viaje, eran discretas. (fuego, heces, sin dejar desperdicios ...) pero aún así, detectables para ti.

 

Los hombres aquellos te habían entregado su última voluntad. Ayudar a un Vigilante. - Igual se habían integrado tanto en la naturaleza que ya eran parte de ella, por muy muertos que estuvieran. Sabías que existían espíritus, tanto en lo vivo como en lo que fue vivo tiempo atrás. - Y querían ayudar.

Notas de juego

Las monedas te las he puesto como que te las quedas. Ahora verás por qué. (Leer últimos párrafos).

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15/01/2018, 12:02
Borgvir

Había caminado más de una semana hacía el norte, y aun faltaba bastante para llegar al lugar donde podría encontrar un compañero. Miré el camino que desde el vado iba hacía el paso alto y me pregunté por los gigantes que había oído hablar. Me producían tanto miedo como curiosidad, no era natural. Pero mi camino me lleva a otras montañas, más al norte. Buscando un compañero tenía que llegar a las montañas grises, donde hacia mucho más frío aún. Así que ignore el camino que subía a las montañas nubladas y decidí seguir caminando hacía el norte. Pero antes, cruze el vado viejo, para seguir subiendo por la vertiente oriental, entre el río y el bosque.

Notas de juego

Ok. Tiene lógica. Como jugador pensaba que era buena idea tener dinero si iba a viajar entre otras gentes, pero que Borgvir de momento no sabía si lo haría. Pero si voy de camino a tierras con enanos, llevar monedas suena bien.

Veo que he caminado ya bastantes días.

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15/01/2018, 12:31
Legolas Hojaverde

Habías visto pocas señales de los elfos. Se decía que ni si quiera dejaban huellas en la nieve, ni se hundían en esta. - Otro de los mitos y leyendas. Pensabas para ti, ya que estabas escéptico por lo de los gigantes de piedra lanzándose rocas y porrazos. Pero verlos caminar no eran tan inaudito.

Venían tres y tras ellos otros tantos, uno de ellos, el del centro de la cabeza, un poco más adelantado. El resto parecía escoltarle, y todos muy parecidos. Este primero destacaba de una manera especial. Marchaban a muy buen paso, y los viste en la distancia. Al pasarte al lado oriental del Anduín el bosque te quedaba mucho más cerca, y aprovechaste, para recoger vayas en lo que se conocía como el Reino de Los Elfos del Bosque. El Rey, un pirado fanático, se había atrincherado en los salones que formaban su palacio y de allí no salía ... ni aunque ardiera vivo.

Al fijarte en el de cabeza, pensaste que te dirían algo por tomar bayas de los arbustos de su reino, pero, la naturaleza no tenía propiedad. De acuerdo que los terrenos podían tener dueño, pero ... no era para tanto. Además, sabías que ese de cabeza era alguien especial, ya que al ser diferente y destacar era ... por algo.

Estarían como a 300 metros, y al igual que tú los viste, y sabiendo de su buena vista ... ellos a ti también.

El buen trote que le "impulsaba" te daba a entender que los tendrías encima en uno o dos minutos. No venían con arma empuñada, pero, excepto el líder, todos tenían el arco en la mano, aunque ninguno agarraba flecha alguna.

 

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15/01/2018, 13:06
Borgvir

Los elfos tienen una vista privilegiada y no hay duda de que me han visto, así que no tiene sentido esconderse para dejar que sigan su camino. No creo que les gustara verme desaparecer como si tuviera algo que esconder. No quiero pelea y espero que ellos tampoco, así que mejor no ser agresivo. Los espero en el lugar que estoy, y los miro con el gesto serio pero no agresivo y con la cabeza un poco gacha (pero no lo suficiente para que me impida verlos bien). No cogo ningún arma, pues no quiero mostrarme violento, pero compruebo que la llevo colgada mi hacha en la mochila de la manera habitual (de forma que la puedo coger con rapidez en caso de ver que la cosa se complica) y que mi honda cuelga del cinturón (también accesible). Me aseguro que mi postura me facilite cogerlas si necesito defenderme. Quizás debiera saludarles, pero no les digo nada. Espero que sean ello los que hablen o, quizás tenga suerte y sigan su camino como si nada, para poder seguir yo con el mío.