Partida Rol por web

La verdad que la solución es sencilla, decidme más o menos cuanto estáis dispuestos a pagar por una noche por persona y yo imagino que os podré ayudar a encontrar algo lo más agradable posible.

Layla se había quedado en segundo plano escuchando como se desenvolvía Zarus. Se admiraba de la facilidad que tenía el joven en desenvolverse entre la gente. A ella siempre le había costado mucho, provocando, que más de una vez, los extraños la miraran de forma cautelosa.

Dejó que fuera él quien hablara. Ella no disponía de mucho dinero, le había costado muchísimo llegar a reunir el necesario para pagar su pasaje en la caravana. En aquel momento disponía de unas cuantas monedas que poco le iban a durar si no hacía nada...

Zarus, ofrecio una gran sonrisa ante la amabilidad de aquella mujer. -Bueno apenas y cuento con un poco mas de 150 monedas de plata, no conozco mucho sobre precios de hospedaje y alimentos, pero me gustaría que por lo menos que lo que tengo, nos alcance para que ambos podamos durar una semana sin mayores problemas- En esos momentos su estomago vuelve a rugir, ya la adrenalina que sintió hace algunos momentos ante el "Tipejo" amenazante, había desaparecido y nuevamente el hambre se apodero de su cuerpo. -Lo siento- dice apenado, llevandose una mano a su cabeza y la otra a su estomago -Me gustaria primero comer algo, el viaje fue duro y no hemos provado vocado hace ya varias horas-

- Bueno si con esas 150 piezas de plata os queréis mantener los dos durante una semana, eso supone un gasto de unas diez piezas de plata al día. Entonces supongo que el Bote del Lagarto o la Cabra de Mimbre serían las mejores opciones. Eso si, por 10 piezas de oro, Hoskin ofrece habitaciones de lujo en el Cuervo de Plata. Pero me temo que con ese presupuesto no os alcanzará para pasar una semana. 

- ¿Os puedo ayudar en algo más jovencitos?

Zarus mira complacido a su interlocutora, le había brindado información mas que suficiente -Ha sido muy amable señora, mi hermana y yo le estamos profundamente agradecidos- hace una pequeña reverencia para mostrar su gratitud -No le queremos seguir quitando mas su tiempo, que tenga una bonito día- le dice en tono de despedida.

Una vez la señora se a alejado se dirige a Layla -Parece que con esa información tenemos mas que suficiente, cual crees tu que debamos visitar primero?-

Layla asintió con la cabeza, corroborando las palabras de Zarus y con un escueto - Gracias - se despidió de aquella mujer. Una vez se quedaron solos, se volvió hacia su compañero. Le había hecho gracia que dijera que eran hermanos, hasta ese momento ni se había planteado que podían hacerse pasar.

- ¿A dónde? - Le extrañó que le preguntara a ella cual debía ser su próximo movimiento. Pero por un momento se quedó en silencio, pensando en las dos alternativas... - Supongo que a la Cabra de Mimbre. No sé... No conozco ninguno de esos locales, pero el nombre parece más atrayente - . Mientras se dirigían al lugar señalado, Layla iba pensativa. No tenía mucho dinero y no quería ser una carga para Zarus. Durante todos aquellos largos años, cuando no había podido pagarse una posada, más de una vez, había dormido en cualquier rincón o pajar que hubiera encontrado. Nunca había pedido limosna y no estaba acostumbrada a que alguien se ocupara de ella.

- Cuando pueda te devolveré el dinero... - Le dijo de repente, rompiendo el silencio que había entre ambos.

Zarus sigue al ritmo de Layla, cuando esta interrumpe su silencio él se noto un poco incomodo -No te preocupes por esas cosas, además esto va por cuenta de aquel tipejo desagradable- cada cosa que decía le iba preocupando mas, no sabía hasta que punto las cosas que estaba haciendo, le fueran a Layla lo suficientemente desajustadas como para que empezara a dudar de él, quien confiaría en un ladrón o mentiroso. Aunque Zarus no se sentía en extremo ninguna de las dos cosas, tecnicamente lo era -Esperemos que no este muy lejos, muero de hambre jajaja- dice para aliviar su tensión.

Parte sala de bailes, parte taberna, parte posada y parte burdel, la Dríada bailarina es uno de los edificios más notables de Tormentos Cristalinos. Presenta una fachada colorista, que parece fuera de lugar en su ubicación cercana a los barrios bajos. Sus muros están jalonados de columnas de mármol talladas para semejar árboles, y una "imagen silenciosa" permanente de una escandalosa mujer contoneante, de piel pálida y cabello verde, ondula sobre la puerta principal en un escenario en miniatura que representa una cañada forestal.

En su interior, la sala principal está llena de mesas para jugar a las cartas, dados y otros juegos de azar, todos controlados por la casa. Hermosas mujeres vestidas como dríadas  y ninfas anotan los pedidos junto a bellos mancebos  vestidos como sátiros y pixis. Un gran escenario, en el extremo más alejado, muestra un réplica a escala real de la cañada en miniatura que sobre la entrada; las noches en las que la dríada baila sobre ese escenario suelen ser las más concurridas.

Los clientes pueden alquilar habitaciones en el piso superior para pasar la noche pero la mayoría de la clientela lo hace para fines más carnales. Los camareros y camareras no solo ofrecen bebidas en este lugar.

Nada mas entrar me alegro de llevar las monedas que nos ha dado el posadero  de El Lenguado Macerado ya que sin duda alguna mis fondos no serían suficientes para un lugar así. Intentando mostrarme decidido, avanzo junto a mis compañeros hacia la persona que parezca estar a cargo de las habitaciones para alojarnos y pensar en llenar un poco nuestros estómagos.

No dejo de observar a mi alrededor sin perder detalle de lo que ocurre. No me había imaginado nunca un lugar así, pero si hay tanta gente será complicado indagar cualquier cosa.

-Emm...necesitaríamos una habitación para dormir esta noche-digo sin saber muy bien cuál será la respuesta, ya que lo más común debe ser alquilar habitaciones para algo más que dormir...

Aquella noche estaba de bote en bote el local. Al parecer esta noche la Dríada Bailarina bailaba en el escenario mostrando su bello rostro y un cuerpo digno de la diosa de la belleza y la hermosura. La bailarina movía su cuerpo al son de la música hipnotizando a todos los hombres allí presentes.

¿Una habitación para dormir? Bueno, si os queréis quedar a la cena y al espectáculo todo cuesta 2 piezas de oro. Si queréis ya algún otro servicio más eso tendréis que negociarlo vosotros con quien lo queráis.

Grrrrrrrrruaaaauuuuugrrrrrrr, un fuerte ruido muy parecido al rugido de un león, se escucha por todo el lugar. No era dificil seguir de donde provenía el sonido... Dimdel.

- Oh!! Muero de hambre, esa cena tiene que estar en nuestros estómagos... su boca empieza a salivar más de lo normal. - Que les parece, nos quedamos?? En mi familia siempre se comentaba que nunca debemos rechazar la mano que nos ofrece comida... No creo que por que nos cobren haremos ese actotan mal educado... o si??

-Deberíamos quedarnos aquí a cenar si...y también a descansar esta noche. ¿Dará con este dinero para los tres?-digo mientras lanzo la bolsa que nos ha dado el tabernero con la esperanza de que siga que si.

Mas vale que tengamos dinero o si no, ni el trabajo, ni el descanso ni...la cena...

¡Oh sí! Con ese dinero podéis tomar uno de nuestros menús y quedaros al espectáculo. Esta noche actúa la Dríada Bailarina. Por eso está tan concurrida la posada. No creo que tarde mucho en empezar el espectáculo. ¡Id pidiendo y preparaos para el espectáculo, seguro que os gusta! ¡A los tres! Dice mientras os guiña un ojo, os toma las monedas que muestra Mir-Lat y se marcha para serviros el menú de la casa.

Cuando vuelve Oslor le pregunto directamente.

-¿Eres el dueño de este local?digo mientras afianzo el plato de comida a mi lado.

Tal vez este trabajo nos venda demasiado grande...demasiada gente en este lugar...

el cabballero salio de su ensoñacion en la que estaba sumido, y estaba listo de nuevo para la aventura

- Sí, por qué lo preguntas?

-Veras -me acerco a él para susurrarle y que no se entere todo el local de nuestras palabras- hemos venido aquí, porque nos habían dicho que tenías algún tipo de trabajo para...para gente como nosotros.-digo esto mirando a mis compañeros.