Partida Rol por web

- ¿Lobos?- Se sorprendió Lictea a la vez que llevaba las manos al escudo de madera y la cimitarra. Era normal que en el bosque hubiera pero, ¿tantos acechando a un grupo tan numeroso de humanoides? Como buena Lykanthropoi* sabía cómo se comportaban estos animales. Si atacaban irían a por el más débil. - No dejéis que nos rodeen.- Dijo poniendo su espalda hacia la pequeña laguna formada por la bella cascada.- Y tú, florecilla, quédate detrás nuestro.- Advirtió a Lilypurr que parecía asustada y la más frágil. Lico erizó el pelo del lomo al percibir los nervios de su hermana humana. Lictea, pro su parte, dio un paso al frente, apoyando las manos en el suelo húmedo y olfateando el aire. Esperaba a que se mostrara el líder de la manada para tratar de dialogar con él.

Lomenar no había percibido a los lobos, pero al oir a sus compañeros se prepara. Arvak se tensa y eriza su pelo, pero se mantiene al lado de su dueña.

En cuanto a Lomenar, está atenta a intervenir por si falla Lictea y se sitúa al lado de ella, tal y como les ha indicado. Como druida también podría intentar hablar con el lobo alpha, pero parece que Lictea tiene más experiencia en estos temas.

Kranjstar avanzó aumentando la prevención a cada paso que daba. Finalmente, cuando llegan al lago, nota la presencia de aquellas criaturas que les acechaban, al parecer, ya hace un rato. No creo que sean tantos, pero hay que estar prevenidos. He logrado escuchar que al menos 6 de ellos se acercan y son los que intentan rodearnos. dice apuntando con su ballesta cargada y lista para ser disparada contra el primer lobo que se acercara a atacarles.

Al clérigo le iba estupendamente con la diplomacia, pero tratándose de animales con ese poco entendimiento, de nada serviría hablarles. Se ubicó al lado de la chica gato para respaldarle, los lobos debían pasar primero por él si querían llegar a ella.

Lilypurr se intento centrar en las posibles amenazas y entre otras cosas, intento prestar atención al lago, no fuese a pasar que apareciese algo de ahí...

El clerigo se extrañó abiertamente del comportamiento de aquellos animales, no sabía mucho sobre ellos, pero le preocupaba tanta cautela antes de hacer lo que normalmente hace cualquiera que asecha, iniciar un ataque. -Alguna razón para que se lo tomen con tanta calma?- pregunta a las druidas.

La cercanía al agua tampoco le producía muy buena sensación a Kranjstar le preocupaba mas los lagartos que los mismos lobos. dejó de atender a los canes para mirar hacia el agua, no deseaba que alguna cosa que estuviera dentro del lago le tomara por sorpresa. -No creo que sea muy buena idea permanecer cerca de la orilla. Si lo que deseas es entablar una conversación con los lobos, podríamos movernos hacia ellos en lugar de esperar a que nos ataquen.- dice en sugerencia a Lictea.

Lomenar asintió con la cabeza a sus compañeros e iniciaba un ligera separación de la orilla mientras susurraba a Lictea.

- Si quieres te puedo ayudar en la conversación con los lobos.

Sin bajar su arco, Leokas se mantenía paciente sin atreverse a soltar la cuerda del arco si no era por una buena razón. Los lobos que había podido ver eran bastantes y si podían optar a una vía no violenta, no sería él quien estropease la posibilidad de ello. No obstante, mantenía sus sentidos en alerta pues quizás simplemente los animales estaban ocupados en alcanzar sus posiciones para cerrar cualquier vía de escape. 

- A los lobos les gusta rodear a sus presas para acosarlas, por eso quiero que mi culo esté cubierto.- Le dijo a Kranjstar. Después asintió a Lomenar.- Dejadnos adelantarnos a nosotras, pero no bajéis la guardia.- Dicho esto se adelantó seguida de Lico. 

El clérigo no escucha ni ve nada que le altere más de lo que ya esta alterado. Salvo por la tensión que le produce el sentirse como una persa. No sé ustedes, pero si seguimos sin hacer nada, la tendráneta muy cómodo para acabar con nosotros en la noche. Si sumamos tormenta más oscuridad, estoy seguro que el resultado será igual a que la pasaremos muy mal. para Kranjstar lo mejor era avanzar y sino se pensaba en regresar a la ciudad, se debía de buscar un refugio lo antes posible.

Lomenar estaba confusa.

- Lo que está claro es que los lobos no van a tomar la iniciativa, así que tendremos que hacerlo nosotros. - mirando a sus compañeros -  Y estoy de acuerdo en que habrá que buscar refugio para pasar la noche y más si hay tormenta.

Para Lomenar pasar una noche al raso con tormenta era de lo más natural, pero comprendía que sus compañeros estaban acostumbrados a otras comodidades.

Esperó la reacción de Lictea para apoyarla en lo que decidiera hacer.